‼️Steve x Tony‼️

Kinktober Day 3 ~ Hate Sex

- Te odio, te odio, te odio, te odio, te odio.

- Tony, por las que me lo repitas, no voy a cambiar de opinión.

- ¡Te odio!

- ¡Ya deja de comportarte como un niño pequeño! ¡Soy el líder de este grupo, no quiero el malo para vosotros! ¿No lo entiendes?

Tony gritó de frustración y salió de la sala de reuniones. Steve sólo pudo suspirar nervioso y se volvió a sentar en la silla. Los vengadores se habían reunido para hablar de los diferentes proyectos que tendrían a lo largo de los días y querían hablar sobre ellos. Pero bueno, cuando Steve comentó que (por decisión de SHIELD) ninguno de los nuevos proyectos de Tony estaban incluidos pues realmente se puso muy nervioso.

Aunque no era la primera vez que Tony reflejaba su endemoniado odio hacia el Capitán América. En casi todas las reuniones acababan tan mal y tan enfadados. A veces Steve pensaba incluso que lo hacía a propósito. Pero es que Steve tampoco entendía muy bien porque ese odio tan desmesurado hacia su persona. A ver... solo defendió al que fue el asesino de sus padres. Pero era por un bien mayor, Bucky no era malo, solo quiere ser él mismo.

Cuando Tony salió, la reunión ya tenía un ambiente demasiado tenso como para seguir con ella. Además, Stark tenía que estar presente. Quiera o no, era parte del grupo. Pero era la única fucking persona del complejo que le seguía teniendo rencor al "Team Capitán América". Aún así, Steve lo entiende y respeta sus decisiones. Lo que no aguanta son los insultos, la falta de respeto y la insoportable excitación que siente cuando ve el rostro enfadado de Tony. 

Es que el casto y puro Capitán América (aunque de casto y puro no tiene nada) no puede llegar a comprender como la simple presencia del aura oscura y enfadada de Tony le calienta tanto. Chillarse entre ellos y terminando peleados realmente le afecta a tal nivel que después debe desfogarse a solas en su habitación. Y por mal que se sienta, no podía evitar pensar en un Tony enfadado cuando se masturbaba. Aunque realmente, no era "tan grave", ya que Steve comprendía el odio de Ironman hacia su persona, no le caía mal. De hecho, su personalidad tan irascible y antipática le atraía. Por ende, le encantaba pasar tiempo con él y enfadarle, obviamente para después tener algo de material mental con el que tocarse en la noche. Pero Tony tampoco le caía tan mal.

Pero el Capitán se sentía realmente mal después. ¿Cómo puede tener tales pensamientos hacia una persona a la que había hecho tanto daño? Después no sabía ni como mirarle a la cara Tony y solo se avergonzaba. Pero su mente es tan dispar que realmente no le importaba en muchas ocasiones y volvía a repetirlo. Era un círculo vicioso que no podía evitar.

Al terminar las peleas, Stark se encerraba en el laboratorio con Bruce o en su taller reparando lo que sea. Para él, era la única solución para intentar mantenerse sereno y no caer en la locura. Pero más de una vez se han escuchado los gritos del pobre hombre, gritando de la impotencia y la desesperación. La desesperación que le daba Steve era suprema.

Y es que aunque no lo parezca, poco a poco la ira de Tony hacia su Capitán se iba transformando en una especie de placer extraño que al final acababa en más frustración porque no sabía que hacer con él. PERO, le daba igual, todo lo que rodea a Steve le da igual. Le daba igual lo que hiciera, le daba igual que entrenase hasta quedar todo sudado, le daba igual que saliera de la ducha medio mojado y que su camiseta medio-transparente sus pezones y sus abdominales. Obviamente también le daba igual cuando a veces lo pillaba cambiándose y podía ver ese bien formado trasero. También le daba igual su pelo rubio, su sonrisa, sus ojos, su risa, su forma de hablar, sus manos, su voz... obviamente le daba igual. Pero lo que no le daba igual es que poco a poco le comenzó a atraer ese estúpido anciano llamado Steve Rogers. ESO SI QUE LO ODIABA. O sea, Tony no odiaba a Steve. Odiaba lo que él le había generado. Le había generado un sentimiento de atracción que no soportaba. Y eso para Tony, era insoportable.

Pero... todo tiene un pero. Los dos son unos pésimos actores. PÉSIMOS. Además, son muy impulsivos. Así que... obviamente no se guardaron para la imaginación del otro lo que pasaba por su cabeza. Así, nos encontramos ahora mismo. Un pobre Tony Stark siendo brutalmente embestido por Steve en la mesa de su taller. Realmente decidieron hacer esto cada vez que se pelearan. Tony realmente no podía guardar ese rencor dentro de un cuerpo tan pequeño, en palabras de Steve: "algún día se iba a inmolar". Los dos se hacían un favor mutuo que al final era para su propio beneficio.

Tony arañaba con fuerza la espalda del otro mientras gemía arqueando la espalda por los impactos del rubio. Steve en cambio, mantenía las piernas de su compañero en los hombros, teniéndose de frente. Juntaron sus bocas en un intenso beso mientras que el activo no paraba de moverse.

Steve gruñó al notar las uñas del moreno hincándose en su piel.

- Oye, para de hacer eso. Me vas a dejar marcas.

- ¿Y qué? ¿Acaso no quieres que la otra te las vea?

El rubio se rio mientras cambiaba la posición. Obligó a Tony rodear su cadera con sus piernas, dejándolo a la orilla de la mesa y sujetó por completo sus nalgas abriendo más su camino. Tony tuvo que rodear el cuello del otro para sujetarse y no caer de bruces al suelo.

- Creo que si tuviera una relación con otra persona, precisamente TU serías "la otra".

Esas palabras dolieron a Tony mucho más que la estocada que Steve le dio a continuación. Un gemido agudo salió de su garganta cuando notó que el rubio había aflojado el agarre en su manos y lo dejó caer un poco haciendo que todo su falo se adentrase en él. Como odiaba ese dolor en el pecho cuando Steve hacía esos comentarios, pero el pobre es masoquista al parecer. 

El capitán se rio de la reacción de Tony el cual lo mató con la mirada. Volvió a sujetarlo con fuerza y volvió con el vaivén principal. Hundió su boca en el cuello del filántropo, primero como algo inofensivo, pero sin quererlo comenzó a succionar más de la cuenta dejando una marca en su piel.

- ¡OYE! ¿¡Tú si puedes pero yo no!?- gritó Tony muy ofendido.

Ante las risas del capitán, le pegó un golpe una gran cachetada en el moflete del rubio. La cual automáticamente fue devuelta, con el triple de fuerza, pero en la nalga. Tony ahogó un grito en su garganta al notarlo. Tony, avergonzado, se escondió en el cuello de Steve con lágrimas en los ojos por el impacto que notó.

- No me vuelvas a pegar Stark. No estás en posición de hacerlo en realidad.

Realmente, a Tony Stark le caía muy mal Steve Rogers ahora mismo. Pero con ello, su erección se hacía más intensa. Necesitaba exterminar a Rogers con todas sus fuerzas.

- Hoy estás más odioso de lo normal.

A todo esto, el rubio no bajó su intensidad. Separó al inventor de su cuerpo y lo volvió a tumbar en la mesa, apoyó sus manos los costados de Tony y siguió follándolo.

- Tu me haces sacar ese odio, estúpido.- respondió el moreno algo cohibido todavía. No quería hablar mucho porque sentía que en cualquier momento se iba a poner a llorar y no quería eso.

- ¿Te he hecho mucho daño? 

La nula respuesta por parte de Tony ya fue una respuesta suficiente para Steve. Enseguida se acercó al cuello de su amante y lo besó, haciendo un caminito hasta su mejilla. Allí le dio un suave piquito en la comisura de los labios.

- Perdóname.

Como lo odiaba, sentía una impotencia total ante el comportamiento del rubio. ¿Por qué mierdas era tan dulce con él si Tony se portaba tan mal con él? Lo cogió de su cara y le plantó un intenso beso que fue totalmente correspondido por Steve. Su lenguas se rozaban intensamente y no se sabía con exactitud quien llevaba las riendas ahora mismo de la situación. Pero Tony se alejó de él dejando a Steve con ganas de más.

- Déjate de tonterías y ñoñerías, sigue follándome y termina de una vez.- sentenció Tony.

A lo que Steve rio y sus acciones fueron las únicas necesarias. Llevó su boca a uno de los pezones del más bajo y comenzó a succionarlo mientras volvía a embestirlo con brutalidad. La sala se volvió a llenar de los gemidos de Tony. Esta vez sus uñas se hincaron en el pelo rubio del capitán. Y su otra mano apretaba con fuerza su bíceps.

Steve, a pesar de las advertencias de su compañero, decidió seguir provocándolo. Volvió a dejar marcas en la piel del moreno. Esta vez en su pecho, donde realmente disfrutó de morderlo y besarlo tanto.

Con las fuertes embestidas, Tony no podía estar más en la gloria. Realmente no aguantaba las lágrimas y tampoco las quiso ocultar. 

Volvieron a juntar sus labios una vez más cuando Tony por fin se corrió en su abdomen, manchando también parcialmente a Steve. Permitió al otro seguir moviéndose en su interior hasta que por fin llegara al orgasmo. En ese momento, por fin salió de su interior.

Sus piernas temblaban, aunque fueron masajeadas por el rubio suavemente. Este le ayudó a incorporarse y a arreglarse. En unos minutos, los dos estaban sentados en el sofá del taller. Tony volvía a estar encima de Steve, devorando su boca.

- Acabamos de terminar Tony... dame un poco de tranquilidad. 

- No me ha sido suficiente.

Steve se rio. Volvió sus manos al trasero del moreno que apretó sin pudor.

- ¿Tanto me odias hoy?- preguntó Steve mientras notaba como el otro lamía su cuello.

- Mi intensidad de odio es la misma siempre.

- Acéptalo, no quieres que me vaya y tu única forma de retenerme es con sexo. ¿Me equivoco?

Efectivamente, dio en el clavo. Tony chasqueó la lengua y mordió su cuello sacando un grito al rubio. El moreno rio pícaro.

- Te odio.

- Yo también te odio Steve.   

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top