Una Familia para Navidad (Namjin)

Especial de Fin de Año 2020

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Narrador Omnipresente

Seokjin se asomó con cuidado para no ser visto y con atención escuchó lo que el hombre tenía para decir. Él no era un acosador, el sólo era un cocinero que amaba mirar desde la seguridad de su cocina al chico que le gustaba.

La puerta de la cocina estaba entreabierta así que él pudo ver con facilidad al hombre que estaba sentado en una de las mesas del restaurante. El hombre, que vestía su típico traje de oficina, estaba mirando el menú y hablando con el mesero.

De repente pareció notar la mirada de Seokjin y miró en su dirección para luego sonreír. El pelinegro abrió los ojos como un par de huevos fritos y cerró la puerta de la cocina mientras se dejaba caer al piso.

_ Joder, me ha visto. Estoy frito.- susurró.

_ Jefe, ¿Qué diablos está haciendo ahora?- preguntó Jungkook mirándole raro.

Seokjin le ignoró y abrió la puerta con cuidado para así ver de nuevo Kim Namjoon el cual era su amor platónico. Pero la verdad fue que Seokjin no pudo abrir la puerta si no que esta terminó en su rostro.

Jin soltó un quejido.

_ Bueno, eso le pasa por stalker.- dijo Taehyung.- Aquí tengo su orden, es mejor que te pongas a trabajar.- añadió.

_ Si no fueras mi mejor amigo juro que te despediría.- gruñó para luego levantarse e irse a lavar las manos para así comenzar a cocinar.

El miró el papel y suspiró mientras buscaba todo lo necesario.

_ Sabes, ese hombre es raro. Viene todos los días de la semana pero cuando llega el sábado se desaparece hasta el lunes de la siguiente semana.- Taehyung se recostó de la pared.- Sin mencionar que siempre lleva una porción extra a casa. ¿Será que su esposa trabaja hasta tarde y odiar cocinar?

_ Taehyung, deja en paz al jefe.- gruñó Jungkook.

_ Métete en tus asuntos, Jeon.- le miró con odio.

Jin rodó los ojos al ver como ambos chicos se miraban de mala manera. Ellos se odiaban, solían discutir todos los días del mundo. Jin creyó que se debía a que ambos eran diferentes entre sí, pero con el tiempo se dio cuenta que ese odio era diferente. Ellos simplemente amaban pelear entre sí, como si fuera un condenado deporte que podían disfrutar felices.

_ Del odio al amor hay sólo un paso.- comentó Hobi quien llego para escuchar el asunto.

_ Cállate, Hobi. Yo no podría amar a este imbécil.- concluyó Taehyung.

Jungkook río levemente y se mordió el labio inferior mientras miraba al pelicastaño.

_ Eso no dijiste a.- Jungkook no pudo terminar la frase porque Taehyung le había aventado su delantal.

Seokjin río y siguió cocinando. Se supone que él como dueño debería poner orden en su cocina para que todos estuvieran en silencio, pero si lo hacía el comenzaría a pensar en lo que dijo Taehyung. Él incluso tenía razón en algunas de las cosas que dijo.

Kim Namjoon era un empleado de una empresa cercana. Desde hace alrededor de 1 año el comenzó a frecuentar el restaurante de Seokjin el cual al verle por primera vez quedó enamorado del hombre, y es que su sonrisa era como un gancho que hacía a Jin querer acercarse a él.

Seokjin, como un chico enamorado que era, solía darle como regalo algún postre que siempre eran galletas, pudines, tartaletas y macarrones. Jin creyó que era algo bueno, y cuando Hobi le dijo que había estado feliz al ver el regalo, Seokjin se dijo a si mismo que siempre haría lo posible para hacerle feliz.

Algo tonto considerando que Namjoon no sabe quién es Jin, ellos nunca se han visto.

_ Lista la orden.- dijo una vez terminado.

Él fue al refrigerador y tomó dos porciones de torta fría.

_ A veces me pregunto porque eres tan bueno nivel masoquista.- dijo Taehyung para luego suspirar.

Ese era otro detalle.

Namjoon siempre pedía dos raciones de todo, como si le llevara comida a algún familiar... O a su esposa. Jin no quería parecer egoísta o cruel, así que solía darle al nombre dos raciones de algún postre que estuviera recién hecho.

_ Creo que el masoquista es otro.- comentó Jungkook.

Taehyung lo fulminó con la mirada y tomó el pedido en sus manos para llevarlo a la mesa donde estaba esperando el peliclaro. Seokjin inmediatamente se asomó por la puerta y se deleitó al ver la sonrisa del hombre.

Eso le daba mil años de vida.

El pelinegro regresó a la cocina y comenzó a cocinar. El hacía eso cuando estaba feliz.

_ Viene para acá.- dijo Hobi.

Seokjin no entendió.

_ Jefe, viene para acá.- miró a Jin.- ¡El hombre de los pedidos dobles viene hacia acá con Taehyung!

Jin se quedó en shock. Él no sabía qué hacer.

Fue entonces que tanto Taehyung como Namjoon entraron al área de cocina. Jin no sabía qué hacer, sólo estaba allí congelado como una paleta. Namjoon miró a todos y les saludó amablemente.

_ He pedido conocer al chef. Quiero agradecerle personalmente.- sonrió.

Seokjin miró a Jungkook en busca de ayuda y el hombre luego de suspirar asintió levemente.

_ Soy yo, es gusto conocerte. Soy Jeon Jungkook.

_ Vaya, eres joven y talentoso. Tu comida es deliciosa.- sonrió.- Yo soy Kim Namjoon, un gusto.

Jungkook y el hombre comenzaron a hablar mientras que Seokjin intentaba volverse invisible. El creyó notar que la mirada de Namjoon se desviaba hacia donde estaba él, pero eso era imposible. Él debía de estar mirando otra, no a Seokjin.

Namjoon se despidió de todos y agradeció por la comida. Luego salió por la puerta no sin antes mirar a Seokjin el cual tenía mirada en el piso. Él era muy tímido y torpe cuando estaba nervioso; él era malo para socializar.

_ Gracias, Kook...- susurró Jin.

_De verdad eres un caso perdido, has botado al carajo la oportunidad de conocerle.- comentó.

_ Taehyung déjalo en paz, él tiene sus razones.- dijo Jungkook.

Jin no dijo nada y sólo salió de la cocina hacia la parte trasera del restaurant. El pateó un depósito de basura. Taehyung tenía razón, él había desperdiciado su única oportunidad. Ahora el hombre piensa que el cocinero agradable es Kook, no Jin.

_ Es mejor así, al final la cago.- susurró para sí mismo.

El entró de nuevo al restaurant, él debía seguir trabajando.

(...)

El fin de semana llegó y Seokjin se tomó el día libre. Jungkook ya tenía la suficiente experiencia para estar a cargo de la cocina, y Taehyung ya era un experto en cuanto a la gerencia del restaurant. Seokjin no debía preocuparse por ellos, ambos, aunque pelearan mucho, solían trabajar bien juntos.

Seokjin se sentó en el parque y abrió las cajas de comida que había preparado. Él había probado unas nuevas recetas que pensaba utilizar para el menú de navidad. Aún era noviembre pero Seokjin quería probar tanto como le fuese posible para así crear un buen menú.

Él tomó un bocado pollo con especias y le agradó el toque acido del jugo de la naranja junto al sabor de la pimientas y del tomillo.

_ Puede ser una buena opción.- dijo mientras anotaba sus observaciones en un cuaderno.

_ Eso se ve delicioso...

Seokjin miró hacia un lado y allí vio a un niño de aproximadamente 6 años. Él tenía una pelota entre sus manos, clara muestra de que había estado jugando en el parque. El niño al ver que Jin le estaba mirando se sonrojó.

_ ¿Quieres probar?- preguntó Jin mientras le ofrecía un poco en un plato

_ Yo no debería...- dijo incomodo.- ¿Eso es torta negra? ¿De las que se comen en navidad?

El niño se sentó junto a Jin observando de cerca. Seokjin río para luego asentir con la cabeza; él puso en el plato un poco de todo para que el niño comiera. No es que fuera un niño de la calle, el realmente no lo parecía. Pero esa mirada inocente en sus ojos cautivó a Jin el cual adoraba a los niños.

_ ¡Esto es delicioso!.- dijo sonriendo.- Mucho mejor que la comida congelada que venden en el mercado.

_ Uh, no.-Jin arrugó la cara.- Nada como la comida fresca hecha en casa.- el niño asintió mientras comía.

_ Esta delicioso ¿Es usted cocinero?- preguntó.- Oh, mis modales.- se limpió la boca.- Soy Kim Joonwon, es un gusto conocerle.

_ Kim Seokjin, el gusto es mío.- el niño sonrió.

De repente se escucharon unos gritos a lo lejos, parecía que alguien estaba llamando a otra persona. Esa voz incluso le resultó familiar a Seokjin.

_ Oh, es mi padre.- el niño se levantó.- ¡Estoy aquí!

_ ¿Qué haces aquí sentado comiendo, Joonwoon?- preguntó.- Oh, señor. Lo lamento, mi hijo es un caso perdido... Ah, es usted. Le vi antes.

Seokjin se quedó congelado de nuevo.

_ Él es Kim Seokjin, papá. ¡Cocina increíble!- dijo el niño.

_ ¿Me recuerdas? Soy Kim Namjoon. Recientemente nos vimos...

Jin trató de abrir la boca pero la cerró de nuevo, el sólo asintió.

_ Perdona si mi hijo te ha incomodado.

_ N-No pasa nada, es un buen chico.- dijo Seokjin en tono bajo.- Le he invitado a comer.

El niño asintió con su cabeza repetidas veces y le mostró el plato a su padre. Jin río al ver que había migajas de comida en boca. El pelinegro tomó un pañuelo y extendió la mano para así limpiarle.

Namjoon se sorprendió por el acto, y sonrió.

_ Gracias señor Jin.- dijo el niño.- Prueba, papá. Está rico.- aseguró mirando a su padre.

El corazón de Jin se aceleró al pensar en que Namjoon podría reconocer el gusto de su comida, y con ello sabría que el cocinero de su restaurant favorito en realidad es Seokjin y no Jungkook. Sin embargo, luego de pensarlo bien se dijo a si mismo que era imposible. La gente usualmente es muy despistada en ese sentido y Namjoon parecía ser ese tipo de persona.

Namjoon probó un bocado y parecía degustarlo detenidamente.

_ Exquisito.- dijo sonriendo.- Es evidente que Jungkook ha sido un buen maestro.

_ Ah, si...- contestó Jin.

El río amargamente por dentro. Si tan sólo Namjoon supiera la verdad...

_ ¿Está bien que nos quedemos con usted?- preguntó el niño mirando a Seokjin.- ¿Papá está bien si nos quedamos con el señor Jin?

Namjoon acarició la cabeza de su hijo y miró a Seokjin.

_ Sólo si el señor Seokjin acepta.

El pelinegro sintió sus mejillas calientes y miró hacia otro lado.

_ E-Estaría bien, me gusta tener compañía.

_ ¡Yei!- el niño levantó sus manos feliz para luego seguir comiendo.

Namjoon y Jin rieron por ello y comenzaron a hablar de sus vidas. Nada profundo, sólo hablaron cosas sin importancia. Después de todo, ellos a penas se habían visto. Luego de un rato el niño se acostó en las piernas de su padre el cual comenzó a acariciar su cabeza.

_ Es un niño muy alegre.- comentó Seokjin.- Me agrada.

Namjoon sonrió y siguió mirando a su hijo. Seokjin sacó su cuaderno y comenzó a anotar sus respectivas observaciones en cuanto a la comida que había preparado. Namjoon miró el cuaderno.

_ ¿Tu recetario o algo así?

_ Si, suelo anotar todo lo que es relevante. Justo ahora estoy buscando opciones para hacer un menú de navidad. Quiero que mi restaurante sea de los mejores.

_ ¿Tu restaurante?

Seokjin me mordió la lengua.

_ Lo siento como mío, por eso lo dije.

Namjoon asintió con la cabeza, el no lucía muy confiado. Luego miró su reloj y suspiró.

_ Es tarde, creo que debemos irnos.- dijo mientras tomaba a su hijo en brazos.- No vivo lejos de aquí, vayamos a mi casa a dejar a Joon y luego te acompaño a casa.

Seokjin recogió sus cosas y se puso de pie.

_ No es necesario, puedo irme solo.

_ Insisto en acompañarte, es peligroso ir solo por la noche.

Seokjin se lo pensó un poco, después de todo no le conocía perfectamente pero hubo algo en el hombre que le hizo sentir seguro respecto a seguir. Al final lo hizo. Asintió con la cabeza y siguió al peliclaro.

Ellos caminaron un par de calles y llegaron al departamento del hombre. Ellos entraron y Seokjin esperó en la sala mientras que Namjoon acostaba a su hijo. Jin aprovechó de mirar los pequeños detalles femeninos que suele tener una casa cuando hay una mujer.

No había nada realmente significativo.

Namjoon salió luego de unos minutos y se dispusieron a ir a casa de Seokjin. El pelinegro lo pensó durante algunos minutos y al final se llenó de valor para preguntar algo que le inquietaba.

_ ¿Tu esposa trabaja mucho?

Namjoon pareció encogerse un poco.

_ Ella ya no existe.- contestó.- Sólo somos Joon y yo. Por eso suelo ir al restaurante a comprar comida para Joon y para mí, yo soy un pésimo cocinero y comer comida del supermercado no es bueno.

Seokjin sintió que su corazón salió de su pecho. ¡Namjoon estaba soltero! Eso fue sorprendente.

_ ¿Qué le sucedió a ella?

_ Ella simplemente de desvaneció un día.

Jin notó que Namjoon no quería hablar de eso así que no hizo más preguntas. Luego de caminar alrededor de 20 minutos llegaron al departamento de Seokjin. Ambos de despidieron y cuando Jin creyó que era todo Namjoon regresó.

_ Puede sonar raro pero... ¿Podrías darme tu número?

Jin inmediatamente se lo dio. Namjoon sonrió una última vez y se fue, sólo para luego enviar un mensaje diciendo que la comida había estado deliciosa. Jin sintió que subió al cielo y volvió a bajar. Hoy había sido el mejor día de su vida.

(...)

Habían pasado semanas desde aquel día y tanto Namjoon como Seokjin se enviaban mensajes y se veían todos los días que Namjoon iba al restaurante. Ellos se habían vuelto amigos. Taehyung, Hobi y Jungkook no podía creer como habían terminado las cosas entre ellos.

_ Pero el sigue sin saber que eras tú el que siempre le enviaban postres y esas cosas.- dijo Taehyung.

_ El sigue creyendo que fue Jungkook.- Hobi río.

_ Igual ya no importa, no es necesario que se entere. Las cosas van bien entre ellos.- dijo Jungkook.

Alguien llegó a la cocina, era el chico nuevo.

_ J-Jefe, le buscan.- dijo Jimin.

Seokjin salió y pudo ver a Joon el cual estaba con su padre. El niño corrió con los brazos abiertos hasta donde estaba Jin, el pelinegro correspondió su abrazo con gusto. Jin le hizo girar por el aire hasta hacerle reír.

_ Le dije a mi papá que quería verte.- dijo el niño.

_ El insistió hasta que dije que si.- comentó Namjoon.

Su teléfono sonó y fue a contestar mientras que dejaba a su hijo con Jin.

_ Jin, quiero pedirte un favor. Por eso he venido.- el niño sacó de su mochila un trozo de papel.

Jin tomó el papel y leyó lo que estaba escrito. Era una invitación hecha por el niño para invitarlo a cenar en navidad. Jin se conmovió aquel gesto, pero lastimosamente él debía rechazar la invitación.

_ Trabajaré hasta tarde esa noche, Joon. No creo que pueda ir, lo siento...

El niño se entristeció un poco.

_ Le dije que estarías ocupado pero él quería invitarte de todos modos.- Namjoon tomó al niño en brazos.- No te sientas culpable, estaremos bien.

Jin asintió levemente con la cabeza.

Ellos hablaron un poco mientras Joon comía helado. El niño pareció mejorar de animo pese a que Jin rechazó la invitación. Luego de aquello ellos partieron a su departamento mientras que Jin se quedó limpiando.

El día siguiente sería navidad.

(....)

Seokjin terminó su jornada y se recostó de la silla. Él estaba solo en el restaurante, todos se habían ido a casa. El aprovechó de cerrar todo y partió a su casa. Vio la hora y aún era temprano. Él tomó una ducha y una vez vestido se dedicó a lavar su uniforme.

La pequeña invitación de Joon cayó al suelo y Jin volvió a leerla. El notó que había algo escrito atrás, él no había notado eso. El corazón de Jin se estrujó al leer esas líneas.

"El año pasado pedí una familia para navidad y creo que por eso mi papá y yo te conocimos. Siento que eres parte de mi familia ahora señor Jin, por eso quiero invitarlo a cenar con nosotros como parte de nuestra familia. Mi papá ya te considera parte de la familia también, él sonríe mucho cuando sabe de ti. Él me dijo que le gustabas"

El escrito tenía algunos errores y apenas era entendible, pero fue suficiente para que Seokjin se vistiera y saliera camino a la casa del hombre. El salió tan rápido como pudo para tomar un taxi; su corazón latía rápido y fuerte. Era como estar nervioso y emocionado a la vez.

Él nunca le vio lo interesante a la navidad y solía pasar esas fechas solo en su departamento o trabajando en su restaurante. El nunca sintió la necesidad de formar una familia tampoco, el en realidad nunca se sintió de esa manera antes.

Pero ahora era diferente.

_ J-Jin, creí que no vendrías.- dijo Namjoon sorprendido.

_ ¿Es cierto que te gusto?- preguntó.

Namjoon abrió sus ojos con sorpresa y Jin pudo ver un leve sonrojo.

_ Yo... Si... Me gustas. Más que tu comida, me enamoré de ti como persona cuando hablamos por primera vez en el parque.

_ ¿Mi comida? ¿Acaso tu...?

_ Siempre supe que eras tú el que me enviaba postres en mis pedidos. Yo solía verte mirando desde la puerta de la cocina.

Ahora era Seokjin quien parecía un tomate.

_ Y cuando probé tu comida en el parque supe de inmediato que habías sido tú todo el tiempo.

Namjoon se acercó y le abrazó. Jin suspiró con gusto y correspondió el abrazo. Un pequeño cuerpo también se unió al abrazo y era Joon. El pelinegro tomó en sus brazos al niño el cual tomó a ambos del cuello como si fuese un abrazo grupal.

_ Ves papá, te dije que Jin vendría.

_ ¿Cómo lo supiste?- preguntó Jin con curiosidad.

El niño río.

_ Porque pedí una familia para navidad y santa lo hizo realidad.

Tanto Namjoon como Jin se miraron y sonrieron ampliamente.

Ellos cenaron juntos esa noche, como una familia. Esa había sido la primera navidad en la que Jin se sintió feliz y a gusto, el incluso pidió un deseo esa noche. Deseó estar con ellos durante mucho tiempo como una familia.

Fin.

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Estuvo corto pero bonito. No sé, me gustó mucho esta historia. Amo cuando en las historias hay niños, eso le da como un toque de realismo que me gusta :3 

¡Espero que a ustedes también les haya gustado!

Gracias por leer ♥

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