BUENO GENTE, ESTE VA A SER UN FIVE-SHOT, PORQUE? PUES PORQUE ES DEMASIDADO LARGO PARA SER UN ONE-SHOT Y MUY CORTO PARASER UNA HISTORIA INDIVIDUAL, DE IGUAL MANERA ESPERO QUE LES GUSTE, SEDIVIDIRÁ EN CINCO PARTES (ah perdón soy retrasado, duh xd) BUENO, SIN MAS QUE DECIR, COMENZAMOS! 

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Era un día parecido a cualquier otro en las tierras del reino, la guardia del león hacia su ronda rutinaria, los animales estaban tranquilos y no había ningún problema a la vista, el recorrido era el mismo; frontera con las lejanías, sur norte y oeste de las praderas, todo tan monótono que parecía aburrido en algunas ocasiones, sin embargo ellos lo hacían porque se habían comprometido con el deber de ayudar a los habitantes; si tan solo hubieran sabido que ese día todo iba a cambiar...

-Ah, otro día tranquilo y pacifico en las praderas- mencionó Bunga con aburrimiento y cansancio. Todos lo miraban con pesar.

-si, debo reconocerlo- concordó Ono apoyado en la espalda de Beshtie.

-Parece que todo sobre Scar y los demás forasteros desapareció por completo- añadió el más fuerte de todos mientras tomaba un descanso en el lago de la guarida.

-Es verdad que estos días han estado demasiado tranquilos pero no podemos bajar la guardia- dijo Kion –sea cual sea la razón por la que los desterrados no atacan debemos estar preparados para cualquier cosa- todos lo miraban cansados.

-Es verdad pero, ¿que se puede hacer cuando no hay indicios de ellos ni en su propio terreno?- habló Fuli recordando los informes de Jasiri.

-Bueno, es verdad, tal vez podemos permitirnos un poco de...- comenzó Kion interrumpiéndose al oír un ruido –¿Escucharon eso?- preguntó, los demás asintieron.

-debemos ver que es lo que pasa allá afuera- dijo Fuli preparándose para correr al lado de su líder y amigo.

-vamos!- dijo Kion empezando a correr hacía fuera, seguido por sus compañeros.

La guardia salió a ver cual era el problema y se sorprendieron al ver a todos los forasteros reunidos frente a la roca del rey, el soberano Simba estaba en la cima con expresión seria y la reina Nala llevaba tras de si a la escolta de leonas, siempre preparadas para luchar; preocupados se dirigieron al lugar del rey.

-¡¿Papá que pasa?!- preguntó Kion alarmado, pues no esperaban esto. Su mirada estaba expectante de los invasores, pensando en como vencerlos.

-Los forasteros nos invaden y debemos terminar con esto ahora- respondió muy serio el joven rey, aunque en su mirada había determinación también se encontraba una angustia inimaginable.

-Podemos hacerlo, si peleamos juntos y nos mantenemos unidos lo lograremos- sentenció Kion con una voz clara –¡¿listos todos?!-

-y que esperamos? Hay que actuar cuanto antes, vamos ya!- gritó Bunga emocionado y confiado mientras bajaba sin preocuparse por ver hacia donde iba

-odio decirlo pero está vez tiene razón, hay que empezar a movernos cuanto antes- comentó Fuli con cierta molestia, no le gustaba admitir cuando Bunga tenía razón.

-¡bien, vamos!- dijo Kion bajando con toda la guardia y sus padres que lideraban la manada de leonas, ambos lideres padre e hijo se encontraban nerviosos pero listos para cualquier cosa.

-¡Zira! ¡¿porque están aquí?! ¡Saben que tienen prohibido entrar al reino!- gritó Simba muy enojado y mientras tanto las leonas y la guardia se ponían en posición de defensa, Kion tuvo un presentimiento; nada bueno se distinguía en sus ojos y el rogaba a los reyes para que lo que pensaba no se volviera realidad.

-este no es tu reino si no de Scar- dijo la leona de pelaje obscuro con una cara de odio inquebrantable -¡y todos ustedes fueron quienes lo asesinaron!- dijo ella con un rencor que se le notaba a flor de piel.

-mamá no tenemos que hacer esto- dijo un pequeño león color café y ojos verdes preocupado pues sabía de sobra las intenciones de su madre.

-no quieres pelear, ¿eh? Pues vete con ellos entonces- y diciendo esto Zira lo tomó y lo lanzó hacia el rey. Simba se impactó ante esto, ahí se dio cuenta del error que cometió, fue demasiado tarde cuando se dio cuenta de eso.

-¡Kovu!- dijo la princesa e hija mayor de Simba, visiblemente preocupada por el maltrato que recibía el cachorro de león, corrió hacia el y lo levantó con cuidado Zazu se acercó a ellos.

-¡Beshtie! ¡Llévate a Kovu y a Kiara a un lugar seguro!- gritó Kion preocupado por su hermana y amigo.

-a la orden!- y diciendo esto puso sobre su lomo a Kovu quien estaba malherido por el golpe de Zira, posteriormente se llevó a la princesa quien tras unos segundos de forcejeo comprendió que quedándose no ayudaría en nada y accedió a irse –¡volveré en cuanto pueda!- y diciendo esto se fue, poco tiempo pasó para que estuviera de regreso con ellos.

-¿no piensas irte verdad?- Le preguntó Kion a Zira quien por tomar respuesta empezó a avanzar gritando ''¡ataquen!''

-¡Hasta El Fin De Las Praderas...!- gritó Kion avanzando hacia los invasores preparándose para pelear.

-¡Guardia del León Defensa!- completaron los demás miembros siguiendo a su líder, mientras que la manada de leonas seguía los movimientos del rey y la reina.

El enfrentamiento fue feroz, las perdidas estuvieron presentes y pese a sus esfuerzos la ultima defensa que les quedaba al reino cayó, la guardia había sido derrotada, todos se encontraban tan débiles que todos pensaron que habían perecido; la reina había muerto, el rey se encontraba acorralado en la orilla del cañón en el cual había visto morir a su padre, el por desgracia no tenía otro lugar al que ir y resbaló sosteniéndose únicamente por sus patas delanteras del borde aunque sabía que no serviría de nada...

-¡Kion!- gritó el rey con todas sus fuerzas, el pequeño león de melena roja volteó hacia donde estaba su padre con una sensación indescriptible de dolor en el rostro –sobrevive hijo- y al haber dicho esto Zira soltó sus patas haciendo que callera de igual manera que su padre años atrás.

-¡PAPÁ!- gritó Kion destrozado, las lagrimas empezaron a salir sin control de sus ojos su rostro mostraba un dolor mas fuerte que el físico. Los demás se le acercaron y trataron de matarlo, pero la furia de Kion le valió por unos minutos para abrirse camino.

Pese a la gran perdida que acababa de presenciar supo que su padre no habría querido verlo morir ahí y ahora solo pensaba en salir del lugar, aunque sabia que las vías de escape estaban bloqueadas. Cojeando, se dirigió hacia la salida que daba al desierto, las leonas del clan de Zira se interpusierón sonriendo con malicia pues sabian que no tenia salida, el aun con las lagrimas en el rostro sabiendo que había perdido todo, su familia, sus amigos, incluso su hogar, se plantó de frente a quienes le bloqueaban el paso, cerró los ojos y dejo fluir el rugido pensando que seria la ultima vez que lo usaría, este ultimo esfuerzo le costó casi toda su energía, sin embargo surtió el efecto deseado; las leonas se apartarón a la fuerza y el pudo escapar llegando con muchos esfuerzos al hogar de Timon y Pumba quienes lo encontrarón e inmediatamente se preocuparon.

-¡muchacho! ¡¿Que pasó?!- preguntó Timon viendo el lastimero aspecto de Kion.

-Zira atacó... mi padre... la guardia...- la voz estaba entrecortada no resistiría mucho mas–todos están... muertos- y diciendo esto se desmayó perdiendo el conocimiento...

ESA ES LA PRIMERA PARTE CHICOS, QUE LES HA PARECIDO? ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y SI ES ASÍ NO OLVIDEN DEJAR SU HERMOSA ESTRELLITA Y COMENTAR QUE LES PARECIÓ, SIN MUCHO MAS QUE DECIR ME DESPIDO, UN ABRAZO, UN SALUDO Y NOS VEMOS PRONTO, CHAUCHAU!