La noche había llegado, no pasaba nada interesante, solo una pareja buscando que película ver.

- ¿Te parece está? - Sugirió el moreno a su novio.

- ¿Qué te parece una de comedia? - El intentó de convencer a James de ver otro tipo de película era en vano.

- Tú elegiste la última vez, baby. Ahora me toca a mi - Sus palabras fueron acompañadas con una risa- pero tranquilo, tiene algo de comedia. - Dicho esto puso la película para comenzar a verla.

El brasileño se sentó en el sofá dándole una señal a su pareja para que lo acompañe, este se sentó a su lado apoyando su cabeza en el hombro del mayor. Una manta los cubría mientras comían palomitas.
La película parecía ir bien, bueno casi, hubiera empezado bien si no hubiera muerto por un accidente automovilismo la madre de la protagonista.

Pasaron los minutos, Aiden pudo controlar su miedo pero hubo un momento que le causó incomodidad la escena de la película. Y era ver como los protagonistas comenzaban a desnudarse para tener sexo. No era solo eso, si no que la película había influido en el, pues hubo una escena donde un personaje recibicio un comentario transfobico.

"¿Que tal si te quitas la ropa y vemos que tienes entre las piernas? ¿Eh? Jajaja"

Esa frase fue germinó con rapidez en su cabeza. Aiden comenzaba a incomodarse y eso James lo noto.

- Aiden, está todo bien? - El tono de voz reflejaba su preocupación, pero el mencionado no quería demostrar o decir el motivo de su comportamiento.

- ¿eh? ¡si! No te preocupes, amor. Yo- ... me iré a duchar, otro día sigamos viendo la película- Con eso el canadiense se levantó y casi corriendo salió del lugar. El mayor se quedó confundido y preocupado, pero quizás debería darle su espacio, por ahora.

...

- ¿Porqué me comporte así? Que idiota fui... era una película, Aiden - Susurraba para si mismo el chico de ojos turquesa.

Mientras el agua iba cayendo como diluvio por su cuerpo, los pensamientos comenzaron a surgir y para mal.
Mientras pasaba la esponja por su cuerpo se quedaba mirando cada facción de el, por que sus caderas eran tan anchas o sus brazos tan pequeños y débiles, y su rostro.. varias personas le habían dicho que para ser hombre tenía la cara muy fina y poco vello, no quería que lo mal interpreten, se sentía cómodo con lo que era, pero aveces los comentarios de las personas lo hacían sentir menos hombre de lo que era...

Sus manos hicieron contacto con su pecho, tocando sus cicatrices, una marca que aun no se borra, tampoco se siente muy seguro al respecto con dejarlas ver, no quería que la gente lo mirase raro.
Pero después estaba otra inquietud, bajo más su mano hasta la zona de la pelvis, no, no había un pene, si no una vagina.

Aiden ha considerado realizarse la faloplastia en algún momento, pero rápidamente la idea se fue al saber que tendrían que quitarle grandes cantidades de su piel para eso, no podría con más cicatrices. Amaba su pecho plano y no tenía tanto problema si conservada su aparato reproductor tal y como está, después de todo el se sentía cómodo así.
Pero no podía evitar que en su cabeza haga eco esa frase de la película..

"¿Que tal si te quitas la ropa y vemos que tienes entre las piernas? ¿Eh? Jajaja"

Derrotado se hecho en el suelo del baño, mientras em agua seguía cayendo, algunas lágrimas fueron acompañadas con eso. Y si James no se sentía cómodo con su cuerpo?
Es decir, no lo podía obligar, esta en su derecho tomar su decisión pero no quita el hecho que duele esa sensación. Su cuerpo podría considerarse algo... extraño... para muchos y no sabía si su pareja también se lo tome así.

Nunca había dejado que el lo vea desnudo. Las ganas de llegar al segundo paso a su relación siempre las tuvo que contener por miedo a la reacción de James.

"Quién querría acostarse con alguien con el cuerpo así" Pensó Aiden para si mismo, aferrándose a sus piernas. Duro un buen rato así, hasta que tomo valentía, tenía que hablar con James y explicarle el motivo de su reacción.

Llevaban meses de relación y quizás sea el momento de preguntarle si se sentía cómodo con su cuerpo, aunque eso le aterra.
Cerro el grifo del agua, tomo una toalla y secando cada parte de su cuerpo se puso su ropa para dormir y salió del baño.

El menor encontró al brasileño en su habitación, parecía estar buscando su ropa para dormir. Aiden inhalo aire y suspiro, tenía que hacerlo.

- James.

Llamo el menor, captando la atención del nombrado, volteando a verlo.

- Si, baby? ¿Estás bien? - La preocupación seguía ahí. Al recibir un no como respuesta, este tomo las manos de su novio y sugirió que se sienten en la cama - ¿Quieres decirme que paso?

Un silencio inundó la habitación por varios segundos, el influincer iba a decir algo más pero el menor decidió hablar.

- De hecho, tengo que hacerte una pregunta.

- Por supuesto.

...

- ¿Te sientes cómodo con mi cuerpo? - no lo miro a los ojos, la vergüenza no le permitía, pero sintió como la mano de su novio lo tomaba del mentón haciendo que lo mire.

- Amor, por qué preguntas esos? - los ojos de James mostraban angustia. Aiden dudo nuevamente por unos segundos.

- Es decir.. mírame, es raro... no quiero que te sientas incomdo al respecto o ... asqueado al tocarme - El brasileño iba a interrumpir pero Brooks continuo - No quiero que al momento de verme desnudo sientas que estas frente a un fenómeno, con cicatrices en su cuerpo... te amo y eso me hace tener miedo, miedo de que un día despiertes y ya no me mires igual, miedo-

- Aiden detente.

Interrumpió el mayor, no podía soportar esa escena. Aiden se rompió, las palabras eran soltadas con lágrimas en los ojos y la voz quebrada, el moreno limpio las mejillas de su novio con su camiseta para luego abrir sus brazos dándole lugar al menor ahí, sollozos aún eran soltados por el chico de piel pálida.

James espero unos minutos a que el contrario se tranquilice, este decidió apartarlo un poco para depositar un beso en su frente y hacer que lo mire.

- Aiden, escucha. Me gustaría poder hacer que dejes de pensar en eso, porque nunca, pero escucha bien esto nunca podría darme asco o pensar que tu cuerpo se ve como un "femomeno", entendiste? - solo recibía la mirada de los ojos cristalinos de su novio como respuesta - Eres lo primero y lo último que siempre pasa por mi cabeza en las mañanas y noches, si supieras cuentas veces me quedé apreciando tu imagen al dormir o tus fotos no estarías diciendo esto.

- Pero-

- Pero que? Corazón, eres lo más hermoso que tengo y tuve en mi vida, no quiero jamás volverte a escuchar decir esto, entiendes?

Sentenció el moreno tomando de las mejillas al canadiense, este solo podía lagrimear por las palabras dichas por su pareja.

- Me cuesta trabajo creerte... y aunque fuese cierto, que tal su un día te das cuenta que no es así? No te puedo obligar, ya lo sé pero- Una vez más fue interrumpido el menor.

- Eso no va pasar, de a cuerdo? Mírame a los ojos y créeme cuando te digo que planeo estar a tu lado en todo momento. No me importa lo que ocultes bajo tu ropa, me importas tú Aiden.

Esa declaración lo haría llorar, claro, ya lo hacía. Pero quizás un poco más que antes.
Sus lágrimas las comenzó a limpiar con las mangas de su camiseta.

- Si en algo te ayuda, tenía intenciones de llegar más lejos contigo cuando te conocí en el campamento - reveló.

- ¿Cómo a que tipo te refieres? - Sabía la respuesta, pero quería ver hasta donde llegaba esto.

- Yo creo que tu entendies, meu amor~

El menor se burlo, diciendo un no como respuesta.

- Hablando en serio.. nunca tuviste la oportunidad de tocar o.. mirar alguna parte de mi piel expuesto, asique... te gustaría? ‐ Preguntó.

- Eso ya depende de ti, cariño. ¿Tú quieres? - Aiden le sonrió a su novio con ternura y asintió.

- Sí, si quiero.

Con su permiso, James tomo de la camiseta de Aiden para poder ir quitandosela y dejar expuesto su dorso, admirando la piel pálida de su novio y las cicatrices qué poseía. El cuerpo del menor fue colocado sobre el regazo del mayor.

- Sigues viéndote muy atractivo- libero el moreno, las mejillas del canadiense

Las mejillas de Aiden se sonrojaron por sus palabras, acercándose a los labios de su pareja uniéndose junto a él en un tierno beso.
Sus manos exploraban cada parte de sus cuerpos, tocando y acariciando, mientras sus lenguas peleaban por quien tendría el control.

James beso la mejilla de su novio para luego ir bajando hasta llegar a la clavícula de su novio.

El menor jadeo al sentir un ligero pellizco en esa parte, las caricias de su novio lo mantenían distraído de lo que su cuerpo sentía.

- Para estar más cómodos ¿qué te parece sacarnos lo que nos queda de ropa? - Sugirió el Brasileño.

Al tener un si como respuesta la pareja de despojo de sus últimas prendas, quedando solo con sus boxers puestos. Ambos admirando el cuerpo de su contrario, la atracción qué sentían al uno al otro era mutua y el deseo también.

Los besos continuaron, el moreno aprovecho para tomar el cuerpo de su novio y ponerlo encima suyo mientras el se recostaba en la cama.

Aiden decidió ir bajando hasta encontrarse con un bulto en la ropa interior de su pareja. Escucho un jadeo por parte del mayor al tocarlo.

No era la primera vez que notaba como se formaba un bulto en esta parte de su novio, pero.. está vez se veía más grande.

- ¿Te encuentras bien?

Su voz lo saco de sus pensamientos.

- ¿Eh? ¡Ay, si! ¡Descuida! Solo me distraje..

Aunque a James le parecía tierno la reacción de su novio, no quería forzarlo a hacer algo que aún no se sintiera preparado.

- Si no te sientes cómodo podemos parar, cariño.

- Estoy bien, en serio. Solo.. ¿me dejas continuar? - Preguntó, el moreno lo miro unos segundos para luego asentir y dejar a su novio que siguiera.

Aiden suspiro y lentamente fue quitando la ropa interior de su pareja hasta dejar su entrepierna expuesta.

Una risa nerviosa dejó salir, temeroso acercó su mano a la intimidad del latino, comenzando a masturbarlo.

- Así esta bien? - Preguntó.

- Ah~ ... si, solo ve un poco más rápido~.

Sus movimientos se aceleraron, pero quería intentar otra cosa, aunque no estaba seguro de hacerlo.
Lentamente acercó su rostro al miembro del mayor, lo observó por unos segundos y dudoso se lo llevo a la boca. Trato de introducirlo completo en su boca, pero considerando el tamaño y su inexperiencia no lo dejaban, intento hacer un vaivén con su cabeza, los movimientos eran lentos.

Con su lengua lamia de vez en cuando. Intento acelerar el movimiento mientras trataba de llegar más profundo pero solo provocaba arcadas por su parte.

James levantó la cabeza, observando el rostro de su novio. Incómodo decidió aparartarlo.

- Aiden.. espera... para.

El nombrado se detuvo, sacando de su boca la intimidad del brasileño.

- ¿Estás bien?

- ¿Eh? Yo, si.. lo estoy... perdón, no te gustó? - Preguntó apenado, el moreno acaricio su mejilla.

- No es eso, amor. Solo vi tu rostro y decidí apartarte, no quiero que te sientas incomodo al hacerlo - Dicho esto depósito un beso en la frente del menor. - Iremos despacio, no hay prisa~

- Tienes razón.. pero.. puedo seguir compalciendote con mi mano?

- Claro, cariño. Si tu quieres, si.

Al momento en que James accedió volvió a colocarse en la posición que estaba con Aiden a un lado suyo, los movimientos con su mano iban aumentando.

- Ah~ dios.. Aiden~

Los jadeos del moreno hacían que el menor se excitara, comenzando a sentir húmeda aquella parte de abajo. Sintió como su novio lo atraía a él para darle un beso, algo desesperado y salvaje, Aiden pudo sentir como la mano del mayor acariciaba su trasero.

Pasaron unos minutos más hasta que James llegó al orgasmo, soltando un jadeo acompañado. Aiden se acercó para poder lamer el semen qué quedo por el miembro de su pareja.

- Me toca~

El canadiense abrió los ojos de golpe al escuchar esas palabras.

- Acuéstate, baby~ - susurro el mayor en su oreja, mientras lo posicionaba. Se coloco enfrente sus piernas mientras iba sacandole su última prenda.

Un estado de nervios lo consumió por completo.

- ¿Estás listo?

- Si, solo.. estoy algo nervioso, je - trato de reírse para aligerar el ambiente, las manos de su novio acariciaban sus piernas.

- Solo si estas seguro lo haremos, cariño.

Lo estaba, tener a alguien como James que se preocupaba por como se sintiera a cada momento lo hacía sentir seguro en todo momento, no lo iba arruinar. De todas formas, era algo que siempre deseo.

- Lo estoy.

Aiden le regalo una sonrisa tierna a su novio, abriendo sus piernas para el, dándole libre acceso a su intimidad, esa parte de el que lo hacía dudar por como seria visto ante él.

James se acercó, colocándose en el medio de sus piernas. Sonriendole hablo.

- Eres hermoso, baby. Y lo digo en serio, esto no hará que yo te vea o deje de querer, nada hará que cambie mi perspectiva hacia ti.

El corazón de Aiden latía con velocidad, sentía su cara arder. Las palabras del latino estaban llenas de verdad y no lo dudaba ni un poco, se sentía seguro y amado, algo que siempre deseo encontrar y por fin lo hizo.

Dejo salir un suspiro al sentir el contacto de los dedos de su novio con su clitoris. Se había masturbado un par de veces pero no era nada comparado a lo que el moreno le estaba haciendo sentir en esos momentos.

- ¿Cómo te sientas?

- Se siente... bien~ - Jadeo ante la pregunta, el estímulo no lo dejaba concretar las palabras.

- Puedo hacer que se sienta mejor~

Aiden no escucho lo dicho por su contrario, tenía la mente nublada y los ojos cerrados ante esa sensación que lo hacía experimentar su novio. Pero rápidamente los abrió de golpe al sentir algo húmedo recorrer su vagina hasta llegar a su clitoris.

Su vista estaba puesta en James quien se encontraba con su cabeza hundida entre sus piernas.

Hecho su cabeza hacia atrás al sentir el jugueteo de la lengua del mayor con su clitoris. Su cuerpo se removia ante esas sensaciones, la lengua de James lo estaba enloqueciendo. No había palabras para describir lo que estaba sintiendo.

De una cosa si estaba seguro, y eso era que no quería que parase.

El mayor se acercó a la entrada virgen del menor, introduciendo su lengua para empezar a lamer.

- ¡Ah!~ Jaames~ - una de las manos de Aiden fueron hacia el cabello crespo del latino empujándolo un poco para que se adentre más - No pares~

Y no lo hizo, tuvieron que pasar algunos minutos para que el menor consiga llegar al clímax. James se dio su tiempo para saborear los fluidos de su pareja.

- No sabes mal, cariño~ - una mirada juguetona acompañaba esa voz coqueta.

- Ay, cállate - El de mirada cyan miro hacia otro lado avergonzado.

Se sobresalto al sentir un dedo introducirse lentamente dentro de él. Nuevamente un jadeo dejo salir.

- Avísame si quieres que pare - Aiden asintió, tratando de calmarse. Era incómodo la sensación pero a la vez un poco placentera.
Soltó un quejido al sentir un segundo dedo.

- ¿Duele?

- Un poco... pero esta bien

James decidió acercarse al rostro de su novio y besarlo para distraerlo del dolor, pareció funcionar pues había comenzado a mover sus dedos y parecía no incomodar al menor.

- ¡Ah! James~

El mencionado disfrutaba ver el rostro de su novio perdido en el placer. Continuó un poco más hasta que el canadiense le indicó que estaba listo. Saco sus dedos del interior de este y posiciono su cuerpo entre sus piernas.

- Ahora solo relájate, si sientes que te duele paramos, esta bien cariño? - Las palabras de James una vez lo hacían sentir amado, una vez que movió la cabeza dando como respuesta un sí trato de calmarse.

Respiro hondo sintiendo como el pene de James era introducido en su vagina, sus manos apretaron las sábanas de la cama con fuerzas mientras sus ojos hacían presión al mantenerlos cerrados.

Claramente esto no era igual que sentir los dedos del moreno en su interior. Sentía como su entrada apretaba contra el miembro del mayor mientras se introducia despacio.

Leves suspiros y jadeos iban saliendo de su boca al sentir como su novio comenzaba a embestirlo, los movimientos comenzaron siendo lentos pero iba pasando el tiempo y el ritmo aumentaba.

- ¡Agh!~ James~ - Gimió el menor con las voz débil, sus piernas le temblaban. Solo podía abrirlas más para dar espacio al cuerpo del latino que se encontraba dando estocadas repetidas veces.

James se inclino hacia adelante, solo un poco pero lo suficiente para poder besar el abdomen de su pareja. Aiden arqueo la espalda al sentir una estocada profunda, su contrario tomó de su cuerpo cambiándolo de posición. Ahora se encontraba en el regazo del mayor, sus pequeños brazos rodearon el cuerpo del moreno mientras gemía en su odio.

- Ahora trata de moverte~

El canadiense se aparto y observó el rostro de su pareja quien lo miraba coqueto, este llevo sus manos a sus caderas sosteniendolo, ayudándolo a marcar un ritmo. Sin duda, en esa posición sentía como su pene se adentraba más profundo.

Comenzó a moverse en círculos. Los jadeos de James no se hicieron esperar.

- Joder~ Aiden~ - rápidamente el moreno atrajo al menor en un beso mientras una de sus manos fue a su nuca, acariciando sus cabellos.

El cuerpo de Aiden se iba moviendo, esta vez aumentando la velocidad. Su mente estaba nublada ante esas sensaciones de placer, temblaba con cada embestida, quería sentirlo más adentro, James lo estaba enloqueciendo.

Finalmente la pareja se detuvo cuando llegaron al extasis de la situación. Aiden pudo sentir un calor comenzar a llenarlo.
El moreno salió con cuidado de su interior, cargando con el peso de su novio recostado en su pecho.

Despacio recostó al menor a su lado, ambos chicos se mantenían unidos en un abrazo mientras descansaban. Sus respiraciones iban bajando de intensidad.

- Si quedo embarazado ¿qué nombre le pondremos al bebé? - Preguntó el de ojos turquesa relajado. Su contrario se sobresalto. - Es broma, tengo niveles demasiados elevados de testosterona para eso - se burlo el canadiense al notar el sobresalto de su pareja.

James acaricio su espalda mientras soltaba una ligera risa por el sentido del humor del menor.

- James- Llamó.

- Si, cariño?

Aiden levantó la vista para poder mirar a los ojos al brasileño. Su mirada le trasmitia paz y sobretodo seguridad, una vez más su corazón comenzó a latir con velocidad.

- Gracias por hacerme sentir seguro. Te amo demasiado.

James no se hizo esperar, las palabras de su novio tocaron su corazón. ¿Este chico podía ser más lindo? Nuevamente se acercó a su frente, depositando un beso para luego bajar a sus labios y sentir el sabor dulce de sus labios.

- Siempre estaré para hacerte sentir bien mi sushine~ ahora vamos, antes de dormir es mejor limpiarnos, te parece mi vida?

Aiden asintió, trato de levantarse pero un fuerte dolor en su intimidad lo detuvo. James volteo y se acercó para poder ayudarlo a levantarse y dirigirse al baño.

Una vez limpios, la pareja se encontraba debajo de las sábanas abrazados.

- Lo disfrutaste? - Preguntó el moreno al oído del chico que tenían en brazos.

- Cada segundo.

- Podemos repetirlo las veces que quieras~

Y ahí estaba otra vez la voz pícara de su novio. Tenía razón, podían hacerlo las veces que quisieran, esta solo era la primera de muchas más, sabe que todavía no ha experimentado todo lo que le gustaría hacer, pero por ahora irían despacio.

James se acercó a su nuca depositando un tierno beso.

- Descansa, cariño. Te amo - Y sus ojos se cerraron.

- También te amo, Jamie. Gracias..

Finalmente podían descansar después de una larga noche. Aiden no podía sentirse más afortunado de tener un novio como James, la vida le había sonreído a ambos chicos.

Nota: Mi primer pedido y vaya, la historia fue más larga de lo que pensé. Realmente no se si el resto de los capítulos sean igual de extensos o no, pero espero que los disfruten tanto como yo escribiendolos.

Debo mencionar que para esta historia me inspire en un fanfic en ao3, asique créditos al autor.

Voten y comenten 🫶🫶

Quizás en el transcurso de la semana vaya a ver otro capítulo. Los amo 💌

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