La temperatura comenzó a subir, sentía como me desvanecía, quizás debía haber conseguido ayuda desde hace tiempo.

Meses antes

Me encontraba concentrada haciendo la actividad para la siguiente clase para los niños. Origami como me había enseñado Kubo, quien acaba de llegar a mi departamento en la U. Tan alegre como siempre, hace una semana me había dicho que se iría de viaje al extranjero, quizás estaba ahí para no extrañarme tanto o quizás sabia que me iba a dejar sola y yo necesitaba de su compañía.

-entonces Inglaterra he... no será lo mismo sin vos- era verdad Kubo había sido mi amigo más cercano desde que entre a esta universidad, hacíamos trabajos juntos, compartíamos salón de clases, solo faltaba que fuéramos compañeros de piso.

-pero vuelvo en un año- lo decía como si un año pasara en tres días.

Lo bueno es que, si él tenía sorpresas, yo también tenia algunas cosas bajo la manga.

-yo también me iré lejos un tiempo- pude ver la cara de sorprendido, esa cara no tenía precio - ¿no te conté? Voy a mudarme de los dormitorios- y ahí comenzó el interrogatorio.

Presente

Kubo es como mi hermano mayor, ambos fuimos hijos únicos, nos conocimos desde pequeños y cuando le conté que conseguí un departamento bastante barato, saltaron sus alarmas. Esta embrujado, creo que alguien murió por esa zona, a de ser un lugar de mala muerte. Si muy sobre protector conmigo, pero quizás debo haberle mas caso. Kubo tenía razón y si era de mala muerte, creía que podía arreglarlo por mi cuenta, pero el invierno llego y el tiempo no me alcanzo. Llegaba a mi departamento un día de mucha nieve solo llevaba un saco y la temperatura seguía subiendo, pronto sentí como mis piernas comenzaron a congelarse y de un rato a otro ya sentía la nieve sobre todo mi cuerpo. El departamento pronto, si estaría embrujado con mi espíritu, ya me lo imagino el fantasma de una chica china... ¿me volveré un yokai?, ¿tengo un asunto pendiente? Cierto que Kubo me debe dinero. No, no es para nada gracioso.

Al despertar me encontré en una cama y la mirada amenazante de una chica, ni bien logre recuperar la razón pegue un grito y me aleje lo más rápido de ella. Y pronto comencé a analizarla mejor pelo negro, rizado y negro, y una camiseta negra que decía muerte...

genial mi verdugo es una chica aterradora. Verla ahí intentando formular una palabra, hizo que todo mi miedo desapareciera. Solo era una chica la cual me salvo y quiere darme algo de comer.

Probar su comida era como ir a un restaurante de 5 estrellas era lo mejor que he probado, quizás porque las ultimas semanas me he estado alimentando de pura comida rápida y sopas de microondas.

-¡¡esta increíble!! ¡¡es demasiado bueno!! ¿¡eh?! ¡¿es casero?! ¡¿en serio?!- estaba demasiado agradecida, incluso se molestó en darme palillos para comer era un sueño hecho realidad. Hasta que me di cuenta que comía demasiado rápido, además ¿Dónde carajos estoy? Y ¿Quién es esta chica?, cuanto tiempo estuve inconsciente. Si, no mal recuerdo estaba punto de perder el conocimiento... quizás me desplome en mi cuarto... aquí esta calentito... espera ¿fue en la calle?... ¿o en la puerta?... no, no logro recordar. Comencé a ver mi plato intentando recordad, pronto un ruido hizo que volviera en sí, era la chica me daba una seña para que le de mi plato y me ponga mas comida. Con algo de miedo le entregué mi plato y me lo volvió a entregar lleno de comida, le agradecí, pero no perdía el miedo. Solo es una chica... algo aterradora, por un momento decidí prestar atención a su hogar. Una guitarra y varios discos de diferentes bandas de rock. Su departamento estaba dedicado al Rock pesado. No es un espíritu de la muerte, sino un fan del rock, pronto note una carta con su dirección, vivimos en el mismo edificio ¿203?, yo vivo en el 202, ¡ahora entiendo! Esta chica en mi vecina.

-y... te gusta el rock pesado ¿no? Cuantos discos... tengo un amigo al que también le gusta el rock, seguro que se llevarían bien-

-n... no...- comenzó de nuevo -no es rock pesado, es rock alternativo en español-

Solo es una chica normal... pero muy aterradora. Aún seguía nevando, una de las tormentas más fuertes que he visto, pensándolo bien soy una idiota, si ella no me hubiera rescatado yo sería... la victima de un departamento maldito. Que difícil ¿Qué hago? Mi departamento ha de ser el polo norte y no tengo muchas cobijas en mi casa. Comenzó a preparar algo de te y el silencio comenzó a ser abrumador para mí, pero ella parecía tan tranquila.

-uh... esteeeee... eres mi vecina ¿no? - solo asintió con su cabeza y siguió esperando el te -sii... me pregunto qué paso. No recuerdo nada... me mude aquí sin siquiera tener gas... y antes de darme cuenta... bueno... tú me rescataste ¿no? - ella intentaba decirme algo, pero solo parecía estar frustrada y su expresión tranquila volvió a ser la misma aterradora -creo que no nos presentamos, me llamo Yi Wong y tu- comenzó a hablar, pero parecía como un susurro casi no escuchaba nada -ey, apenas te entiendo- sin miedo me acerque para escuchar mejor su voz, pero ni bien me acerque se alejó de mí.

-Vale...tina-

-¿Valentina?- lo volvió a repetir de la misma manera y ahí comprendí -es un placer conocerte Valentina- le entregue una tierna sonrisa -en fin, me tengo que ir- ni bien me levante escuche la voz de Valentina.

-espera...- y de una manera muy rápida me logro envolver en todo tipo de ropa caliente, para después empujarme fuera del departamento, decidido esta es la experiencia mas rara que tengo al encontrarme con alguien. La puerta se volvió a abrir y vi a Valentina con un pastel de queso.

Por primera vez conocí a mi vecina, la misma chica que sale a las 7 am y a las 6 pm comienza a tocar el violín y tuve miedo. Es la primera vez que alguien se me acerca de esa manera. Me alegro... de que no le haya pasado nada. Estaba muy preocupada porque pensé que se podía morir, y que tal si tiene secuelas... debería visitarla en la mañana. Los platos que ella uso a comer los dejo mas que limpios, pronto recordé la expresión que uso cuando probo mi comida, de manera inconsciente di una sonrisa. "vale...tina" no puedo creer que no sea capaz de pronunciar mi propio nombre...

- ¿Por qué soy así...? -

Dios el pastel de Valentina esta buenísimo, de que estará hecha es como comer una nube, ¡¡que rico!!, también la hará a mano. Ahora que lo pienso bien... que clase de persona será, se viste todo de negro, con una mirada asesina... como en los posters que tiene pegados en la pared, aunque por un instante... ¡despierta Yi! Agh. A la mañana siguiente mi timbre sonó, algo cansada decidí ver quien era y volví a ver esa mira asesina.

-ve...vecina- En una nevada tan intensa como para cubrir la ciudad entera...

-te traje el- tomo aire intentado procesar lo que me iba a decir -desayuno- por primera vez me di cuenta de algo - ¿quieres... comer? - que el color negro queda muy bien con el blanco, en una persona. Así empezó nuestro primer invierno juntas. Es hermosa.

La alarma de mi habitación sonó, era momento de levantarme, pero ahora tengo un propósito mejor. Tener a alguien a quien cocinarle... verla recién levantada, es motivo suficiente para estar contenta.

Para comenzar a cocínale, puse una canción de Ska-p.

-veo que te encanta el rock pesad--... digo alternativo- Yi intentaba procesar la letra de la canción.

-mi padre solía poner rock cuando cocinaba... supongo que agarre esa costumbre-

-tu padre parece ser alguien muy fan- pronto saque una foto de nosotros en un concierto.

Gracias a que comencé a cocinarle a Yi comencé a experimentar con diversos platos asiáticos, es divertido verla sorprenderse cuando le preparo un plato tradicional chino. Una vez que le pase su desayuno ella me comento que ya llevaba un año que vive en el departamento. ¡¡enserio que un año pasa tan rápido!!, y seguimos charlando, bueno mas bien ella, a mí me gusta escucharla.

-a veces me pregunto si no te habré estado molestando durante todo este tiempo... ¿no soy un estorbo? - Yi un estorbo para mi nunca, es una amiga muy buena y cuando negué ella me mostro su tierna sonrisa.

Yi es una estudiante universitaria que vive en el departamento de al lado. La encontré congelada en el pasillo del edificio el invierno pasado, la estuve cuidando. Desde entonces, desayunamos y cenamos juntas todos los días.

-oye, Vale, puedes venir un segundo- siempre con ella es un misterio, pronto sentí como su mano acomodaba mi cabello -tu cabello es muy lindo- no sabia como reaccionar y pronto ella cambio

para tingarme la frente -te van a salir arrugas si seguís poniendo esas caras- ella... porque es así. Era momento de irnos, me conto que iba a ver a un amigo y yo me dirigía a mi trabajo, pero antes de marcharme ella me pidió pescado para la cena de hoy.

Ya a pasado un año, y por fin volveré a ver a Kubo. Esperándolo en la parada de buses y a pesar de que no lo he visto mas que en llamadas, sigue siendo el mismo tuerto de siempre. Comenzamos a ponernos al corriente, el me contaba sobre su viaje mientras me daba algunos regalos, hasta que comenzó a interrogarme sobre mi nueva vivienda y como logre sobrevivir sin él.

-por favor Yi, ¿me estas diciendo que en todo este año no encontraste a alguien que valga la pena? - no le respondí, pero el ya intuyo que escondía algo - ¡sí, tienes a alguien!, ¡yaaaa no me dejes así! -sí que es molesto, y también difícil de esconderle las cosas.

-tengo a alguien que me prepara la cena... y el desayuno- Kubo parecía que escuchara la primicia de una noticia. Vi su expresión de que esta procesando algo hasta que soltó la bomba.

- ¿te cásate...? -

-¡¡claro que no...!!- a veces se pasa -mi vecina de al lado me prepara la cena y el desayuno todos los días... y para tu información ¡soy yo la que paga los gastos! - yo casada con mi vecina, solo somos buenas amigas. Primero empezó en el porque no le conté nada sobre mi vecina, luego desde cuando esta pasando eso, todo salió a la luz y pronto Kubo me hizo caer en cuenta algo. A pesar de que ya tenemos un año conociéndonos, nunca me he negado a sus peticiones. Valentina me prepara la comida, y me resulta económico seguir así. Además, ella no es mala persona. -puede que no me creas, pero lo único que hacemos es comer juntas- fue lo ultimo que dije antes de que un silencio apareció.

-Yi... cuando dices vecina, estamos hablando de una chica ¿no? - lo regrese a ver -y todavía no le dijiste que eres lesbiana-

Me quede pensando un rato -no me lo preguntado y tampoco necesito decírselo, si te preocupa, ella es bastante tolerante-

-yo creo que es normal decir tu sexualidad cuando conoces personas- él siempre ha sido muy liberar en ese asunto.

-escucha, yo no puedo decirlo así de fácil como vos-

-Yi, tu sabes muy bien que no me refiero a eso. Tu vecina puede ser tolerante y todo, pero, aun así, si lo sigues escondiendo después ninguna de las dos se sentir cómoda- esas palabras no me dejaran dormir. No creo que llegue a mayores... espero.

Nos estábamos preparando para la navidad, en la pastelería en la que trabajo. Tengo una suerte de trabajar con un amigo, pero al mismo tiempo el es mi jefe. Leo me mencionaba que pasteles debíamos preparar para la llegada de todos los clientes, no tenia ningún problema, es fácil para mi preparar todos esos dulces. Pronto llego una niña, por encargo de su madre quería un pastel, pero cuando ella me vio comenzó a llorar, que pena, igual no seria la primera vez que me pasaba.
Leo comenzó a consolar a la pobre niña, si algún día logra conseguir novia, va hacer la chica más afortunada del mundo.

Continúe con mis asuntos, si me imagino la expresión del cliente comiéndoselo... será la misma de Yi. La voz de Leo me saco de mis pensamientos, menciono que, si quería salir, para revivir los viejos tiempos, pero Yi, ella me pidió algo especial para cenar era la primera vez que me pide algo. ¿Qué hago...? ah, en estos momentos, puedo usar el WhatsApp al final me obligo a registrarme. Debo avisarle a Yi y después tomo una decisión. Es momento de hablar. Me paralice no podía formular una palabra, Leo ya conocía mi condición, pero aun así es frustrante saber que no puedo hablar con un amigo de años. "debo avisarle a una amiga" vamos dilo. Leo me pidió que me calmara. Tenia que ser hoy... que importuno que eres San Juan, justo cuando ella me esta esperando. Por favor Valentina habla.

Creo que al final supo que estaba ocupada. Que preparare para la cena de hoy, puedo ver por el internet alguna receta tradicional china o le preparo algo tradicional mexicano, ella puede soportar el picante bastante bien.

Pronto la puerta de Yi se abrió abruptamente la vi a ella y un chico. Un año, llevo cocinando para ella un año, y parece que recién la estoy conociendo. El chico se presentó como Kubo y el hermano de otra madre de Yi, me agradeció por cuidarla.

Kubo puede ser un idiota, pero nuestra conversación de la mañana comenzó a resonar en mi cabeza, verla ahí parada como si se arrepintiera de algo.

No quiero caerle mal a Valentina.

No se como llegue a esto, pero mis pensamientos impulsivos, lo lograron. Me encontraba en la capital con Valentina, acompañándola a un concierto de Rock latino y español. La ciudad es bastante abrumadora comparada a donde vivimos las dos. Cuando me indicó donde era la entrada del concierto vi a un montón de personas vestidas de negro y yo la única con colores claros, se nota que estaba preparada para este evento,

pero todo esto tiene una explicación, hace unos días atrás.

Kubo se encontraba platicando con Valentina, preguntando sobre sus discos y bandas. Kubo siempre a tenido un don para llegar rápido a la gente, verlos hablar, era como ver a dos amigos de años.

-oye no toques sus cosas sin permiso- le intentaba regañar, pero solo me ignoraba.

-genial tu también escuchas la vela puerca, ¿tu álbum favorito es de bichos y flores? - Valentina asintió, muy emocionada -siii, la mía igual- los dos conversaban como si no hubiera nadie mas en la habitación. Yo llevo conociendo mas tiempo a Vale, esperen porque me siento furiosa. -piensas ir a un concierto, ¿creo que en unas semanas habrá uno? - que acaso la quiere acompañar.

- ¡yo también...! Yo también pensaba ir a ese concierto de rock. -

Yo y mi gran bocotá, ni siquiera soy tan fan del rock. Yo toco el violín y no muchos usan el violín para la sinfonía del rock. Una vez que llegamos a la fila, nos dividieron en dos, mujeres y hombres, nunca antes he estado en estos conciertos, Valentina me iba guiando hasta que una oficial nos detuvo. Ella comenzó a tocar a Valentina y de pronto pidió que se quite la camiseta. Mis ojos quedaron atónitos a su piel, a pesar de que estaba haciendo frio ella no temblaba, parecía tan tranquila y serena. Pronto su mirada se cruzo con la mía, me aparte rápidamente, no quería que pensara mal de mí.

-ahora usted, quítese la blusa- ¡¡que!!

Después de sentirme brutalmente acosada Valentina, me explico que, la policía siempre esta revisando porque los rockeros puedes llegar a ser un poco extremistas. La música, las personas todo era muy envolvente, sentía como mis oídos explotarían. Vi como Valentina se puso cerca de la barra de alcohol apartada del escenario, mientras que yo intentaba soportar el ruido, ella parecía tan tranquila, esta es su zona de confort. Ahora que me doy cuenta ¿Por qué habrá elegido este lugar tan apartado? Vinimos desde muy lejos deberíamos tener una mejor ubicación. Tome su mano intentando llevarla más adelante, cuando de pronto sentí como alguien me empujaba, muchas personas empujándose entre sí, no sé ni como logre sobrevivir. Aun así, la pasamos increíble. Un montón de personas se aglomeran en un espacio tan chiquito, para disfrutar de algo con toda su alma. Una vez la amiga de Kubo me conto, que el rock latino es mas llevado hacia la protesta, a demostrar problemas que son comunes para los países latinos. Regresé a ver a Valentina, ella es mexicana y la vi cantando disfrutando del concierto. Seguro que siempre viene a los conciertos así. Siempre... sola...

Al final de todo fuimos a un bar a descansar si que fue un día muy largo.

-¿te divertiste?- decía ella con preocupación.

-ah. No me malinterpretes la pase muy bien, además gracias a ti descubrí que el violín puede usarse para el rock. Me gusto mucho como lo usaba el mago de oz- Valentina volvió a respirar y tomar un buen trago de cerveza, para ser tan chiquita tomaba como nunca -y ¿Qué te hizo interesarte por el rock?- me miro de manera curiosa -es que me sorprende que alguien tan tranquila como tu escuche rock alternativo. Además, Kubo solo lo escucha porque sus amigos tienen una banda y lo metieron asique no cuenta mucho-

-mi... mi padre escuchaba mucho de pequeña, me decía que el rock español era una manera de decirle a las personas que no siempre lo cotidiano es bueno...escuchar música me hace sentir que al fin alguien me comprende, que alguien me escucha- su expresión se volvió melancólica -el rock tiene letras y opiniones que no siempre son adecuadas, hace que las personas puedan expresarse, que yo sienta que me puedo expresar- Valentina, la chica aterradora, solo era una chica incomprendida, alguien que desea expresar tantas cosas, pero no puede -ahora... lo escucho porque... me gusta... solo quiero hablar con los demás...-

Las horas pasaron y aquella chica tan tímida, tomaba cerveza como si fuera agua. Tuve que sacarla arrastras, no se ni donde esta el hotel, pero al final llegamos que ¡¡viva el Google maps!!. Es la primera vez que veía reír a Valentina es tan bonita. Me prepare para dormir, tome una ducha y al salir, solo estaba Valentina en la única cama, la señorita de recepción nos dijo que no había cupos de dos camas. Me senté en el sofá, "solo quiero hablar con los demás" me cuesta creer que escuche música por una razón tan deprimente. Pronto recordé como cada vez que intentaba hablar conmigo le costaba. No cabe duda... de que la pasó pésimo. Es solo una chica tan tranquila.

-Yi- vi una sonrisa cuando dijo mi nombre y las palabras de Kubo comenzaron a resonar en mi cabeza.

Nunca mas volveré a tomar ya que todo me da vueltas. Intenté buscar a Yi, pero no la encontré, quizás fue a dar un paseo. Me bañe y me vestí la espere por una hora, hasta que ya era el check out y no llegaba. Hasta que pronto me llego un mensaje de Yi.

YI

Buenos días

Me surgió algo urgente voy yendo para la casa.

Estabas durmiendo muy tranquila por eso no te desperté

Deje la plata para la cuenta en el escritorio.

Podría haberme dado en la casa... fue la primera vez que salimos juntas y la pasamos muy bien.

Yi

Gracias, por haberme cocinado siempre

No te voy a pedir comida por un tiempo.

No, no nonononono fue mi único pensamiento.

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Si les gustó le continuo si no pues ahí murió, pero del manga que me bace es muy bueno 👌