Advertencia: Lemon explícito (+18)

En la noche de Halloween el grupo de amigos habían ido a una fiesta de disfraces proporcionada por la empresa Haddock en Berk, la cual Hiccup es el heredero al jefe, calro cuando Estoico se retire..

-¡La mejor fiesta de disfraces del mundo, jefazo!- exclamó Brutacio pasando un brazo alrededor de los hombros de Hiccup quien solo rió asintiendo.

-No puedo debatir eson esta ves mi papá se lució.-contestó Hiccup, y era cierto, Estoico se había lucido con todo, la decoración estaba que daba miedo, la comida había sido excelente, el ponche y las bebidas alcohólicas también, aunque realmente ninguno de ellos se aprovechó lo suficiente de ellas como para tener que ser sacado a rastras de la fiesta, pero todo lo bueno tiene un final… A menos que Hiccup interviniera.

El chico castaño había ofrecido seguir la fiesta en su gran mansión, pero más tranquila, ya que solo estarían ahora los 7.

-¡FUE ESPECTACULAR!- gritó  emocionado el gemelo mientras habría parte del techo de la limusina de Hiccup y salía por ella gritando junto a su hermana y Patán, cosas  como "¡La mejor fiesta del mundo!" o "¡La empresa Haddock es increíble!"

-Una caída desde la limusina podría causarles graves fracturas. ¡No hagan eso, chicos!- le dijo Patapez con el ceño fruncido.

-¡Harán que nos arresten!- protestó Heather haciendo que volvieran a sentarse con ayuda de su novio.

-Ella tiene razón cabezas de carnero.- intervino Astrid tomando a Brutilda por una pierna y jalándola haciendo que esta cayera sentada en su lugar.

-¡AGH, ASTRID! No te tomes tan enserio lo de tu disfraz.- reclamó la gemela cruzándose de brazos como si estuviera enfadada, pero en su tono de voz sonaba la burla en su comentario. Astrid simplemente rodó sus ojos y se cruzó de brazos recargándose en el asiento donde estaba sentada dejando que el Haddock le pasara un brazo por los hombros para atraerla hacía él.

La rubia tenía unos pantalones de cuero rojo súper ajustados que a los lados estaban cubiertos de encaje negro, dejando en esa parte expuesta la piel de sus piernas y en la parte posterior de este una cola de diabla que sobresalía, un top negro strapless con líneas rojas que le llegaba hasta la cintura, dejando ver parte de su buen abdomen, unos tacones de color rojo charol, que Heather logró que usara, y unos pequeños cuernos rojos. Dando en total a una sexy diablesa.

-Bueno, papá asegura que ya está planeando la del próximo año y que, por supuesto, están invitados a la fiesta de Navidad y la de Año Nuevo.- informó el castaño con una sonrisa causando la euforia en los gemelos quiénes volvieron a salir a gritar cosas por el techo de la limusina mientras Heather y Patapez intentaban calmarlos y Patán reía a carcajadas.

Hiccup veía divertido la escena mientras que la Hofferson se acurrucaba más en su abrazo.

-¿Tienes frío?- preguntó Hiccup acercando a Astrid más hacia él, la rubia había olvidado su chaqueta negra en la mansión de su novio donde todos se reunieron para de ahí irse a la fiesta.

-Un poco.- fue lo que respondió- Debí traer mi chaqueta.- refunfuñó.

-No te preocupes, te mantendré caliente mientras.- le dijo Hiccup, la rubia sonrío y comenzó a mover su mano hacía los pectorales de él acariciándolos, el castaño estaba disfrazado de Zeus, el Dios griego del rayo y líder de los Dioses del Olimpo, tenía puestas unas sandalias griegas que le llegaban hasta el muslo, la espada del Olimpo colgaba de su cinturón dorado que sujetaba una túnica que lo cubría hasta medio muslo y en la parte superior estaba asimétrica, dejando al descubierto parte del pectoral de Hiccup donde Astrid ahora tenía su mano.

-Creo que empecé a calentarme.- dijo juguetonamente la ojiazul al oído del castaño, quién simplemente tragó saliva mientras su mano se deslizaba más hacia abajo hasta llegar a la cintura de su chica, donde no había más tela que la cubriera.

-¡Llegamos!- dijo Tacio, haciendo que ambos novios recuperaran la compostura. Todos bajaron de la limusina y admiraron la decoración del lugar.

La mansión de Hiccup estaba repleta de telarañas en las esquinas de las puertas, lapidas adornando el jardín y calabazas con caras graciosas, terroríficas.

-Wow, Hiccup, ¿cuánto tiempo tardaste en arreglar este lugar así?- Patapez mientras caminaba por el sendero hacía la puerta de la mansión.

-Un par de días, pero mis padres fueron de gran ayuda.- respondió mientras entraban- Y ellos no van a estar, porque se fueron con Bocón a seguir su propia fiesta, al igual que nosotros.- después de decir eso, cierto trío celebró.

Todos se reunieron en la sala donde comenzaron a beber sodas, algunas cervezas, comieron bocaditos y se divirtieron entre ellos como sólo ellos saben hacerlo, Brutacio en algún punto de la velada comenzó a contar historias de terror causando diferentes reacciones, la de Patapez y Patán era la de un gatito asustado, la de Heather y Brutilda era de total interés, aunque en momentos soltaba pequeños grititos de miedo y se abrazaban entre sí, Astrid simplemente escuchaba las historias y no mostraba ninguna expresión de miedo, aunque Hiccup podía sentir algunos pequeños sobresaltos que ella daba cuando alguna parte la asustaba, por su parte el castaño estaba no estaba tan interesado en las historias, pero admitía que algunas de ellas daban miedo. Todos estaban sentados en el piso de la sala hasta que Heather habló.

-Oigan, es algo tarde, ¿qué tal si ya vamos a dormir?- preguntó en un bostezo.

-Apoyo eso.- dijo Patán levantándose del piso, al igual que Patapez- Ya es hora de dormir.-

-Así es.- coincidió el más robusto viendo el reloj que marcaba las 3:00 a.m.

Cierto castaño se dirigió a su cuarto lurgo de ir al baño, al entrar no encendió la luz, ya que la luna estaba llena esa noche e iluminaba parte del lugar, comenzó a quitarse las sandalias espartanas que traía puestas agradecido de no tener que usarlas más, en ese momento algo fugaz captó su atención, un movimiento en su cama, la luz de la luna no iluminaba ese lado así que no podía ver nada. "Un fantasma" pensó de forma fugaz, pero ese pensamiento se disipó de inmediato, eso era ilógico, ¿cierto?

-¿Dulce o truco?- escuchó que una voz le preguntaba mientras de las sombras salía Astrid aún con su disfraz de diablesa aunque sin los tacones.

-Ast, casi me matas de un susto.- dijo Hiccup soltando una respiración que no sabía que contenía.

-No seas llorón.- le reclamó su novia acercándose y rodeando sus brazos alrededor de su cuello- Así que, ¿dulce o truco?- preguntó de nuevo.

Hiccup sintió el aliento cálido y algo impregnado de alcohol de su novia chocando contra sus labios, sin pensarlo dos veces el ojiverde juntó sus labios con los de Astrid en un pasional beso, atrayéndola hacía el, posando sus manos alrededor de su pequeña cintura y dejando que sus lenguas se retorcieran en una incansable danza por el poder. La rubia se separó del beso y jaló a Hiccup para quedar acosados en la cama, él sobre ella. Hiccup comenzó a besar a Astrid de nuevo en los labios con lujuria dejando escapar jadeos entre las pequeñas separaciones que se daban para poder recuperar el aliento.

Astrid respiraba de forma pesada haciendo que su pecho subiera y bajara de forma notable, cosa que se podía por el pequeño top que tenía puesto como si fuera a reventar en cualquier momento, Hiccup sacudió la cabeza y dejó los pechos de ella para después, primero se concentró en el cuello de su amada, besándolo con delicadeza y bajando poco a poco, encantado de escuchar los jadeos que la rubia soltaba a causa de esto. El castaño besó un punto sensible de la chica haciendo que esta contuviera el aliento en sorpresa y lo liberara en forma de gemido, paso a paso, Hiccup bajó más y más hasta llegar a la clavícula y los hombros, cubriéndolos de besos y bajando hasta el escote del top negro con rojo de su diablesa.

Pero en vez de ir por los pechos de Astrid, el casraño siguió el camino hacia abajo donde la piel estaba, de nuevo al descubierto, con cariño comenzó de nuevo la técnica de regar de besos el estómago de ella sintiendo como cada uno de ellos provocaba un pequeño tirón en los nervios de la Hofferson.

Astrid tomó a Hiccup por los hombros y lo tumbĺ en la cama dejándose a ella misma encima, con pasión, comenzó a besarlo en los labios mientras que sus manos viajaban por todo el cabello de Hiccup para bajar y servirse tocando los pectorales de su novio. Con poca delicadeza la rubia comenzó a quitar la única parte de la túnica que cubría el pecho de él dejándolo con su torso descubierto para después ella quitarse de encima el apretado top dejando a la vista sus senos ante Hiccup, el castaño seguía recostado en la cama observando a su novia parcialmente desnuda y parcialmente iluminada por la luz de la luna.

-Que hermosa diablesa.- dijo Haddock con un timbre algo excitado en la voz.

-La diablesa se portó mal y quiere su castigo.- habló Astrid acercándose al chico y mordiéndole la oreja mientras presionaba sus senos desnudos contra el pecho de Hiccup causando que su miembro comenzara a ponerse rígido.

Con firmeza, Hiccup puso a Astrid sobre la cama y comenzó a succionar sus pezones haciendo que la chica comenzará a gemir de forma incontrolada, después de eso el ojiverde se desnudó completamente dejando ver su enorme virilidad frente a ella, la ojiazul se incó y metió su miembro a su boca para empezar a masturbarlo haciéndolo gemir de placer, las acciones se prolongaron hasta que Haddock no pudo más y se vino en su boca. Hiccup esperó a que Astris terminara de tragar sus líquidos y la movió hacia la cama donde le bajó los pantalones de cuero y las bragas de encaje negro, dejando ver la intimidad de la chica.

-De espaldas.- ordenó Hiccup y Astrid obedeció poniéndose en 4, dándole la espalda a su novio, el castaño se acercó y tomó los glúteos de Astrid acariciándolos un poco para luego besarlos lentamente abriéndose camino hasta su intimidad. Astrid comenzó gemir al sentir la lengua de su amado ahí abajo, su espalda estaba curveada y por su cara empezaban a correr gotas de sudor, el ejercicio duró por algunos minutos hasta que la rubia finalmente gritó contra las sábanas de la cama y cerrando sus puños en estas al sentir el orgasmo.

La rubia estaba respirando fuerte, recuperándose de lo que había sentido, en ese momento Hiccup comenzó a frotar su miembro nuevamente erecto en su entrada.

-Cuando estés lista.- le susurró Hiccup lo más cerca a su oído, en ese momento Astrid asintió dándole permiso para entrar.

Con delicadeza, pero firmeza, Hiccup entró en Astrid haciendo que ella arqueara su espalda ralzando más su trasero y pegando más sus pechos a la cama. Poco a poco la velocidad en las embestidas aumentó, Hiccup empujaba su pelvis hacía en frente chocando con las nalgas de Astrid y adentrándose lo más posible en ella.

-Rápido. ¡OH, HICCUP, MÁS RÁP-PIDO!- pedía la rubia sintiendo entrar y salir la virilidad del castaño con impaciencia.

-Es-Estás muy estrecha.- gruñó Hiccup sudando gotas gruesas mientras se metía más y más en ella, tocando la mayor cantidad de puntos sensibles posibles. Ambos gemían pasionalmente el nombre de su amante. Finalmente, Hiccup dió una estocada liberando su eyaculación junto con un orgasmo placentero, al igual que Astrid. Ambos  soltaron un gemido sumamente sonoro para después tumbarse ambos en la cama, Hiccup abrazando a Astrid y acariciando su cabello con sus dedos mientras que ella simplemente hacía círculos sobre el pecho de él con su dedo índice.

-¿Y eso fue un dulce o un truco?- preguntó Hiccup mirando a Astrid que tenía aun las mejillas sonrojadas por su acto pasional.

-Depende de cómo lo veas, para mí fue un gran castigo, así que prometo portarme mal más seguido.- contestó ella besando los labios de él- Deberíamos dormir, estuvimos haciéndolo por un buen rato y ya es tarde.-

-Buenas noches, Mi Lady.- dijo Hiccup besando su frente.

-Buenas noches, Babe.- contestó Astrid acurrucándose con él y queando ambos profundamente dormidos.

-¡Te digo que es verdad!- gritó Patán en el desayuno.

-Tal vez las historias de terror te hicieron ponerte nervioso y lo imaginaste.- explicó Heather.

-¿Imaginar qué?- preguntaron Hiccup y Astrid llegando al comedor donde estaban desayunando vestidos con sus pijamas aún.

-Patán cree que la mansión está embrujada.- respondió Brutacio con simpleza.

-¡Escuché un lamento o gemido a mitad de la madrugada! Fue terrorífico.- dijo el pelinegro en defensa propia.

-¿Ustedes escucharon algo anoche?-preguntó Patapez a los novios.

-Nop, nada.- respondió Astrid seguida por una negación con la cabeza por parte de Hiccup, sabiendo que era mejor dejar pensar a Patán y los demás que era un fantasma y no ellos a mitad de la noche teniendo un encuentro pasional.

Hola hola, genteeeee!

¡Y llegamos al One-Shot número 15 y último de esta colaboración con HiccstridGirlForever! Pero no se preocupen que aún faltan la segunda parte de Dioses y Famosa, que sln las que me pidieron. 😉

Además, sé que falta mucho para Halloween, pero simplemente se me ocurrió esto, no tiene nada que ver con la festividad.

También quería pedirles que le den apoyo y amor a mi historia "FIGHT SONG", ya que la he inscrito en el concurso realizado por WhereAreU-Rose. 🙏♥️ Esta historia es corta, se actualiza todos los lunes y jueves y tiene un excelente mensaje que todos debemos tener tatuado en la mente.

Y eso es todo, sólo esperen las segundas partes que saldrán el sábado y el siguiente miércoles, así que después de eso, conmigo será hasta la próxima.

A_Hiccstrid