Diciembre, una época repleta de festividades como la Navidad o la celebración de un nuevo año contagia la emoción y felicidad en las personas. Sin embargo, en los institutos académicos se presenta un ambiente totalmente contrario, los exámenes finales son un período de terror para cualquier estudiante y en el caso del Instituto de Ciudad Férrica no era diferente.

La ansiedad se refleja especialmente en los estudiantes de último año, ya que solo faltaban 2 semanas para finalizar su estadía en el establecimiento y decidir qué sería de sus vidas a partir de sus calificaciones, y claro, el baile de Graduación.

Por suerte, Ruby se desligó de todo lo relacionado a los exámenes. Recorría aburrido los pasillos luego de retirarse de la última clase, logró eximirse de Ciencias y solo debía cumplir con su asistencia el resto del día, desde mañana no necesitaba presentarse en el instituto ya que solo era dedicado a alumnos que necesitaran una evaluación especial para salvar su año.

El ambiente en los pasillos era tenso ya que la mayoría de los cursos se encontraba rindiendo evaluaciones. Sin darse cuenta se detuvo fuera del curso de Sapphire a mirar por las ventanas, Sapphire no se encontraba mientras un porcentaje de su clase prestaba atención a la cátedra de matemáticas. Una pequeña sonrisa se esbozó en su rostro sin darse cuenta al recordar la gran batalla.

Milagrosamente Sapphire logró eximirse de aquella asignatura obteniendo el mínimo para aprobar. Junto con Labores domésticas, fueron muchas horas de práctica para mejorar que incluían un gran sufrimiento para su mejor amiga, muchas veces se resignaba y con mucha paciencia hizo todo lo posible para que siguiera luchando. No le sorprendía que a través de los años de estudio el área científica era un gran interés en Sapphire considerando que su padre se dedicaba a la ciencia, pero la matemática también era fundamental en las investigaciones y Sapphire no le gustaba admitirlo. Ruby retomó su caminata mientras divagaba en sus pensamientos.

"Esa salvaje... de seguro debe estar con sus amigas en el gimnasio o comiendo en la cafetería. Ya verá cuando sus medidas aum-"

— Sapphire, me alegra que vinieras.

Detuvo sus pasos justo en una esquina del pasillo que daba hacia unas esclaeras y aguantó la respiración. Con sigilo, asomó un poco su rostro para ver a Sapphire hablando con un chico que reconocía como compañero de su clase, pero nunca interactuó con él. Era castaño y de mirada amable pero no muy sociable con el resto. Por alguna razón que él no admitía, decidió oír la conversación

— Disculpa, ¿eres de nuestro año, pero de la otra clase?

— ¡S-si! Espero no te haya molestado que te llamara. — los latidos de su corazón se aceleraron al escuchar una risa nerviosa de su amiga.

— ¡Nooo! ¡Para nada! Me sorprendió en realidad así que, ¿por qué me dejaste una nota bajo mi mesa?

"¡Ja! Esa chica salvaje no puede limpiar el compartimiento de su mesa sin mi ayuda, tuvo suerte que hace unos días sacamos una fruta podrida" pensó burlesco el azabache.

— La verdad Sapphire, es que quería preguntarte algo importante.

— ¡¿Eeh?! ¡E-espera si es ayuda con exámenes la verdad es que soy muy mala apenas logré salvarme de los exámenes! — logró oírla bastante nerviosa y hablando rápido. El chico río suavemente.

— Jeje tranquila, también aprobé todo.

— Uff que alivio, ¿entonces qué es?

— Pues... en dos semanas será el baile de graduación y sabes que es un evento importante, ¿cierto?

— S- sí, todos hablan de eso pero no les presto atención, ¿por qué?

— El baile es muy importante porque vas acompañado de una pareja... entonces me preguntaba si quisieras ser mi pareja del baile de graduación.

Aquellas palabras lo congelaron, a lo largo de todo el camino escolar nunca se le había acercado alguien a Sapphire con intenciones similares, no niega que ella es dulce, alegre, divertida, valiente, atlética, hermosa... Se golpeó internamente, volviendo al tema nunca se le asomaron pretendientes por lo que siempre permaneció tranquilo al futuro, ¿qué debía hacer?

"Bu-bueno... no culparía si quiere ir con ese sujeto o no, aunque... tal... tal vez otros la inviten en estos días ".

— ¿Eh? ¿En serio es tan importante eso?

— Si, es muy importante porque b-bueno... existe el rumor de que las parejas que bailen al final de la velada su futuro será exitoso.

— D-de verdad? Eso significa... ¡AH! ¡D-d-disculpa! ¡Ya tengo planes para ese día! ¡En serio nunca había escuchado eso, pero no puedo aceptar tu propuesta! ¡No puede ser!

— ¿Es-estás bien?

— ¡No! ¡Di-digo sí! Es solo que me empezó a doler la cabeza y ¡debo irme! — Ruby oyó pasos apresurados en las escaleras que se detuvieron de golpe. — ¡De todos modos gracias por considerarme y lo siento mucho!

Ruby permaneció estático mientras escuchaba a su compañera a lo lejos correr por los pasillos hasta regresar el silencio. Lentamente, se agachó hasta sentarse en el suelo y ocultar su rostro entre sus rodillas.

"Tiene planes, eso quiere decir que ya va con alguien...tal vez actué muy tarde".

Para su buena suerte, el resto del día no se encontró con Sapphire y no podía evitar sentirse decaído y derrotado, al atardecer decidió caminar a su hogar en compañía de sus pokémon. Tomó algunas fotografías de Coco y Mimi pero no lograba alegrarse del todo. Por costumbre, llegó a la base secreta a esperar a Sapphire puesto que participaba de un taller deportivo y siempre salía una hora más tarde que él. Agotado, se lanzó a uno de los peluches gigantes de la base y observó un punto fijo del techo reflexionando sobre su vida.

No se dio cuenta que tomó una siesta hasta que los gritos de cierta castaña en la base lo despertaron.

— ¡Ruby! ¡Ganamos! ¡Y anoté el punto decisivo!

Aún ocupaba el uniforme deportivo compuesto por una sudadera blanca la cual ajustó a su cuerpo con una coleta y unas calzas cortas, su cabello estaba amarrado y sudaba. Posiblemente apenas terminó su taller corrió a la base a dar la noticia. Ruby bostezó y bufó mientras se enderezaba.

"Esta niña boba..."

— ¿Y ni siquiera te cambias? ¿Ni te bañas? — Sapphire infló sus mejillas y se cruzó de brazos.

— No quiero oír tus regaños de mamá, hoy ganamos representando a la escuela así que solo acepto elogios.

— Ok... — el coordinador desvió la mirada para no caer ante la ternura de su amiga — Felicidades por ganar. Sapphire en cambio infló las mejillas.

— ¡Hmp! Ni siquiera te esfuerzas.

Solo bastó verla una fracción de segundo para ser derrotado.

— Agh! ¡Está bien! Ven aquí — Ruby estiró sus brazos invitándola a un abrazo, a lo que no dudó y se lanzó sobre él a la vez que el azabache soltó un quejido, decidió ignorar el dolor y la abrazó aliviando lentamente su día gris. Sapphire giró hasta quedar a su lado, ambos en el peluche gigante abrazados.

— ¿Y bueno... qué haremos para el baile de graduación?

— ¿Cómo? — observó extrañado a su amiga, Sapphire le dedicó una mirada como si no entendiera lo más obvio del mundo.

— No me digas que no tienes nada en mente Ruby.

— Espera no entiendo, ¿hacer qué cosa en el baile?

— Ir juntos, ¿no es obvio?

— ¡¿Eh?! — Ruby se enderezó de golpe y miró sonrojado a la chica, ella de igual forma tenía sus mejillas coloradas — ¡¿J-ju-juntos?! ¡Pero si tenías planes y por eso rechazaste a ese tipo!

— ¿Qué? ¿Y cómo sabes eso? — Ruby sudó nervioso, se supone que él no la escuchó en secreto.

— Em...lo escuché por el tipo en mi clase.

Bueno, no estaba equivocado, resulta que el chico llegó apenado a su clase y todos se enteraron del rechazo de su confesión, "curiosamente" escuchó todo.

— Entiendo... pues supuse que los planes eran contigo y decidí rechazarlo — respondió Sapphire desviando la mirada.

— Pe-pero ni siquiera lo habíamos hablado... No es algo que se decide a la ligera...

— ¡¿Y eso qué?! ¡Si es tan importante entonces te pregunto ahora! ¡¿Quieres ir conmigo al baile de graduación?! — Lo último lo preguntó más como grito ya que estaba muy sonrojada y evitando el contacto visual con él. Ruby quedó boquiabierto y sonrojado, por lo que Sapphire continuó — A menos que no estés interesado y puedo hablar con ese chico... ¿Cómo se llamaba?

— Se llama Haru... —Ruby suspiró — y nunca dije que no estaba interesado.

— ¿Entonces es un sí? — preguntó la castaña con un brillo en sus ojos, a lo que Ruby asintió.

— Supongo...

Sapphire volvió a abrazar al coordinador por la emoción.

— ¡Siiii! ¡Gracias! En todo caso no sé bailar y no tengo vestido así que necesitaba tu ayuda

— ¡¿Qué?! ¡¿No sabes bailar?! — exclamó preocupado, el sonrojo de Sapphire aumentó

— ¡Claro que no! O sea algo de rock and roll pero dudo que eso funcione...

— ¿Bailas rock and roll?

— ¡Claro que sí! Ese día de año nu-...nu

— ¿Año nu? ¿Año nuevo? — Rápidamente Ruby trató de buscar en sus memorias pero nada aparecía en su mente.

— Nonono año nununu... ¡nuevo! ¡Agh! Torpe! — Sapphire se palmeó la cara ante su descuido, Ruby seguía sin entender.

— ¿En qué fiesta de año nuevo bailaste rock and roll? Celebramos en el Gimnasio de Green-senpai, fuimos a la cascada meteoro con nuestros padres, asistimos a la mansión de Platinum y el año pasado participamos en el festival escolar para recaudar fondos y no recuerdo verte bailar.

— ...Agh, de acuerdo hagamos un trato.

— ¿Trato? Sigo sin entender.

Sapphire se levantó y comenzó a buscar en su mochila hasta encontrar su pokegear, una vez encontró el documento que buscaba se lo ofreció al azabache.

— Mira, te ayudaré a recordar. No te preocupes por el baile intentaré resolverlo, pero necesito un vestido. Recuerdo que me tomaste medidas así que si me ayudas con el vestido te demostraré que sé bailar. ¿Aceptas?

— Eeh... ¿Supongo? Un vestido más no es reto para mí, además tengo bocetos de vestidos en mi casa — recibió el pokegear de Sapphire, en la pantalla estaba por reproducirse un video, rápidamente Sapphire tomó sus pertenencias que lo tomaron por sorpresa — ¿A dónde vas?

— Blue- senpai me dijo una vez que esto te ayudaría a recordar, pero nunca lo quise intentar — comentó apenada y comenzó a irse de la base— me da mucha vergüenza estar presente mientras lo ves, después me devuelves el pokegear.

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Esa noche Ruby no podía dormir, la duda lo mataba, pero no se atrevía a reproducir el video. Luego de dar muchas vueltas en su cama se atrevió a darle un vistazo al dichoso video. En aquellas imágenes con música fuerte y chillidos de Blue-senpai descubrió que él había actuado atrevido con Sapphire y bailó muy cerca de ella, incluso el video terminó cuando besó a Sapphire y el movimiento de la cámara se volvió muy inestable juntos con gritos de emoción de Blue.

En vez de morir de vergüenza, un repentino cansancio lo invadió y cayó rendido en sus sueños.

*-*-*-*-*-*

"Frente a sus narices, las siluetas de un hombre y una mujer tomaron sus manos y comenzaron a bailar con velocidad, dando giros y brincos por doquier, no lograba escuchar alguna canción que le permitiera averiguar el baile.

La silueta femenina comenzó a aclararse y ante sus ojos apareció Sapphire con una sonrisa radiante dedicada al bailarín que la acompañaba, su camiseta era suelta y roja. Por alguna razón Sapphire se colocó detrás de la otra silueta mientras esté se agachaba levemente flexionando sus rodillas. Aquella silueta comenzó a aclararse, pero Sapphire se interpuso en su visión saltando sobre la persona, pero al alejarse logró apreciar un cabello azabache y ojos dorados. Su compañero pokedex Holder Gold felicitaba a Sapphire quien rebosaba de felicidad.

Su visión se volvió difuminada y comenzó a escuchar voces que le provocaron un dolor de cabeza muy fuerte:

— ... ¿Acaso te gusta?

— Eso no importa... Ruby

— ¡Perdóname!

— No... no necesito tu opinión...

— ...Porque tengo miedo... ella solo me sigue insistiendo... ¡No me siento capaz!

— ... No podía apreciar tu belleza y disfrutar a tu lado...

— ¿Qué sientes por mí?"

.

— Golduck, si algún día ve ese video quiero que recuerde lo de esta noche.

— Que tierno~

— ¡Blue!

— Sssh, lo vas a despertar~

*-*-*-*-*-*

Era sábado a mediodía en la región, fuera de su horario rutinario Ruby despertó repentinamente agarrando las sábanas con fuerza y con rastro de lágrimas en su rostro. Su respiración era agitada y miraba un punto indeterminado de su habitación procesando su sueño y los recuerdos que volvieron a su memoria.

Una mezcla de vergüenza, arrepentimiento, miedo, ansiedad, pero sobre todo vergüenza lo carcomía por dentro. Sentía su rostro arder e inconscientemente las lágrimas comenzaron a caer.

Nunca se lo había cuestionado, pero a partir de esa celebración Ruby se había vuelto más intrépido sin siquiera notarlo. Recuerdos desde ese día lo empezaron a invadir, desde sueños húmedos con su compañera, demostrar sus celos e incluso besarla en una ocasión, aún se avergonzaba de lo último al considerar que sucedió hace un par de años y suprimió desde entonces la necesidad de besarla sin parar.

El último año había sido una montaña rusa de emociones. Irónicamente Sapphire también estuvo en una situación similar a él al confesarse y no recordar al día siguiente producto de su resfriado. Claro que eso se lo llevaría a la tumba. Pero él frenesí de emociones sucedió hace 1 semana:

Milagrosamente, Ruby y Sapphire se libraron de aquella maldición de la máquina de peluches, adicionalmente, una frase le regresó la esperanza, Sapphire aún sentía algo por él y debía actuar rápido.

A la mañana siguiente, Ruby decidió armarse de valor y preguntarle a su compañera sobre su confesión. Al llegar a la base secreta la encontró con una sonrisa de oreja a oreja

— ¡Hola Ruby! ¡Ya estoy lista para nuestra sesión de estudio!

— H-hola... sa... sabes respecto a lo de ayer yo quería que sup-

— ¡N-ne-n-necesito tu ayuda con este problema!, me han dicho que muy posiblemente salga uno similar.

— ¿De verdad?

— ¡Sí! Por favor ayúdame no logró entenderlo.

No importó lo mucho que tratara, ese día Sapphire evadió el tema cada vez que buscaba conversar acerca de lo ocurrido ayer. Al segundo día trató nuevamente obteniendo el mismo resultado. Por desgracia la prioridad de aquella semana eran los exámenes y lentamente el tema se dio por olvidado volviendo a la normalidad a excepción de Sapphire, quién se había vuelto más alegre y cariñosa por alguna razón. Decidió entonces esperar la oportunidad.

Así fue como llegaba a hoy, con buenos resultados en los exámenes de ambos y ya no era obligación asistir para los alumnos de último año. Por lo que, gracias a la ayuda de aquel sueño, tomaría una decisión en su vida que cambiaría su futuro. No sin antes decidir un diseño de vestido para su modelo.

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— ¡Finalmente! Ya era hora querida Sapph de ese empujoncito que dejamos tus amados senpais~

— Es que no estaba segura Blue-senpai, ¿qué garantizaba que iba a funcionar después de años?

Esa misma mañana, Sapphire se encontraba en su habitación hablando por teléfono con su carismática compañera pokédex holder Blue explicando lo sucedido ayer.

— Fue un pokémon de Greeny, confío en él y su equipo.

— Porque es tu prometido, ¿cierto?

Blue comenzó a hablar nerviosa, aún le costaba ocultar vergüenza respecto a su futuro matrimonio con Green.

— T-tal vez... y también porque, aunque no lo demuestre te aprecia mucho, era lo mínimo que podía hacer.

— En serio... se complementan tanto blue-senpai — comentó Sapphire ilusionada, aumentando el nerviosismo en la mayor.

— Cl-claro! ¡Hohoho!~ Siempre se lo remarcó incluso el otro día me ay-

— ¿Y si no sale bien? ¿Será que arceus me castiga porque nunca actué? ¿Porque fui una cobarde? — interrumpió a su amiga, las inseguridades la estaban dominando. Al otro lado de la llamada, Blue esbozó una cálida sonrisa.

— Sapphire... confía en ti misma, confía en lo que sientes y lo mucho que te has esforzado por conquistarlo, tu misma me has dicho que algunas acciones de Ruby demuestran que aún le gustas, puede que le diera amnesia o tal vez no, pero ten por seguro que siendo tu misma desarrollaste algún sentimiento en él.

Una felicidad la invadió, cuando Blue dejaba de lado su actitud burlesca podía ser una gran amiga que se preocupaba de ella y de su felicidad.

— No hubiese sido posible sin tu ayuda Blue-senpai, nunca había entregado tanto de mí a alguien y tengo miedo de fracasar. ¡Ni siquiera puedo dar la cara por lo que le dije la semana pasada!

— Y me alivia en cierta manera que preferiste evadirlo, ¡o tendría que buscar alcohol de nuevo!

Sapphire suspiró. — No será necesario, voy a enfrentarme a todo esto el día de la graduación.

— ¡¿En serio?! Finalmente, nuestra valiente amiga se enfrenta a su mayor miedo ¡el amor!

— ¡N-no es para tanto! Pero ya debo irme hoy tengo celebración del club por nuestra victoria de ayer.

— Tranquila, les notificaré a las chicas que no pudieron contestar.

— En todo caso Blue senpai, ¿qué hace despierta a esta hora? Se supone que están de vacaciones en Teselia y allá son como 5 horas menos que en Hoenn.

— Claramente siempre atiendo mis llamadas, más si es por una am-

La voz de Blue es interrumpida cuando Sapphire escucha una puerta cerrarse y se oye la voz de otra persona.

— ¿Por qué siempre los dejas en cualquier parte?, debería guardarlos en mi velador para no levantarme, mira que despertarme temprano para un mañ-

— Hola, cariño, ¿le mandas un saludo a Sapphire?

— .... ¡Ya cuelga eso!

— Ay~ ¿qué hay de malo?, como si no supiera lo que es el s- — la llamada finaliza de golpe, a lo que Sapphire se tapa la cara con la almohada de su cama avergonzada.

— ¡Ellos ya son una pareja no debería sorprenderme! ¡Concéntrate! — Sapphire se palmeó la cara un par de veces, agarró su banano y se marchó de su casa con dirección a su celebración del club deportivo.

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Los días pasaron, Ruby permaneció concentrado en la confección del vestido mientras Sapphire le daba su espacio. Cuando ya faltaba una semana decidieron reunirse en la base secreta, Sapphire salió del pequeño cuarto de la base ocupando una prueba del vestido, consistía en un vestido blanco, largo con escote cuadrado y mangas sueltas.

— ¿Va así?

— Mmh no me convence.

Sapphire permanecía avergonzada, no se atrevía a preguntar respecto al video o su plan no resultaría. Ruby le pasó otro vestido que ahora era más cómodo: un vestido azul, corto un poco más arriba de sus rodillas, holgado en el velo y con mangas largas que le picaban los brazos. Salió nuevamente y Ruby la miró detenidamente.

— Te noto incómoda.

— Son las mangas. — se apuntó los brazos y se rascó un poco — Tal vez es la tela que me molesta mucho, pero, el resto del vestido me gusta.

El azabache se le acercó y empezó a revisar las mangas del vestido.

— Tienes razón, tal vez no fue la tela correcta porque te está irritando la piel. Mejor la retiro y veré otra idea, ya puedes cambiarte.

— Ok, ya vuelvo.

Sapphire se encaminó hacia el cuarto a quitarse el vestido, al volver, se dio cuenta que Ruby sacó todas sus herramientas y estaba sentado en un cojín de la base y en su mano tenía su pokegear. Sus nervios aumentaron, Ruby sacaría el tema.

— ¿V-viste el video?

— Si, averigüé con nuestros senpais y confesaron todo, me sorprende que mi padre nunca me regañó por el tema.

— T-tal vez entendió que no fue tu culpa... — se excusó nerviosa. La verdad es que al día siguiente de año nuevo Sapphire en solitario visitó el gimnasio de Norman y le suplicó que no mencionara nada al respecto ni regañara a Ruby. Luego de batallar con los Slaking del líder de gimnasio obtuvo lo que quería.

— De todos modos, te devuelvo tu pokegear Blue-senpai no dejaba de llamar pero no quise espiar. El vestido estará listo el Miércoles así que nos reunimos aquí para la últ-

— ¡E-espera! — Sapphire interrumpió al azabache, continuó con nerviosismo — La verdad es que hoy voy a viajar a Johto... Y vuelvo el jueves.

Ruby realizó un rápido análisis de la situación, era domingo y Sapphire volvería un día después de lo acordado, tendría más tiempo para embellecer el vestido, pero arriesgaba si el jueves aparecían nuevas correcciones y no tendría mucho tiempo para arreglarlo.

— ¿Qué harás en Johto?

— Es un secreto~ ¡Gracias por el vestido y suerte!

Sapphire agarró sus pertenencias, silbó lo suficientemente fuerte para llamar la atención de Pilo, su Tropius. Una vez el pokémon apareció fuera de su base secreta subió a su lomo y partió hacia Johto.

"¿Johto? Que yo sepa no hay nada nuevo allá, nuestros senpais están bien entonces..."

Y ahí procesó la información. Recordó su trato en el que confeccionaba el vestido de Sapphire y ella se encargaría de aprender a bailar, también entendió que en ese momento no le dio importancia porque no estaba en sus recuerdos ese baile con Gold, a Ruby le empezó a hervir la sangre-

"Ese Gold es hombre muerto" sentenció dirigiéndose a su zona de telas para el avance del vestido de Sapphire.

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💠Publicado: 05/01/2023

Buenas gente, feliz añito para todos y finalmente pasé al limpio mi borrador de este último oneshot, nuevamente dividí esto en dos partes no podía seguir editando sin agradecer a todos los que esperaron noticias de esto. No puedo creer que ya estoy por terminar esta serie de oneshots y que a lo largo del camino surgieron nuevas ideas para futuros oneshots. No puedo determinar si seguiré con más historias aquí pero me esforzaré en finalizar lo que debía hace año. Gracias y que sea un buen año para todos c: