¡Hola, nuevo One-shot, de esta shipp!

Últimamente me ha dado por escribir sobre ellos del timeskip, cuando no se ven 😅 pero bueno, se vale soñar con lo que va a pasar.

🌊Capítulo sobre la shipp EreMin.
🌊 Se basa en los últimos capítulos y trama general del manga (⚠ alerta de spoilers)
🌊 Historia narrada en 1era. persona por Eren. 
🌊 Se toca el tema de muerte, destrucción.
🌊 Contenido yaoi no explícito.
🌊 Créditos respectivos al autor de la trama bra, Hajimr Isayama, por sus personajes.
🌊 Créditos respectivos a los autores de las imágenes utilizadas

************************************

Sonríes divertido, alejando la bruma de neblina fría rodeándonos entre juegos infantiles.

Estiras los brazos anunciando el final del invierno, reclamas el inicio de primavera.

Tus orbes azules hacen un hermoso contraste con la nitidez del cielo claro, tan azul como el supuesto lago gigante de ese libro que siempre cargas contigo, esa maravilla que ansías mirar con júbilo perseverante.

La margarita baila con el viento como lo haces tu al correr entre el pasto mojado de rocío, mientras tus cabellos se impulsan por el viento como los rayos de sol viviente, dando un calor confortante.

Tu sonrisa se amplía al mirar la inocencia de un ser alado, tan pequeño que se posa en tu dedo con sus pequeñas patitas, revelándote su hermoso contraste de colores rojos y negros, abre sus alas volando por el cielo mientras la sigues con la mirada, con esas orbes llenas de curiosidad, como todo un soñador.

—¡Mariposa! —expresas con emoción tras tirarte en el pasto y descubrir lo que es aquél pequeño ser que catalogas como «insecto», le otorgas su nombre —¿no es interesante Eren? —tus ojos brillan con una intensidad que logra cegarme de toda expresión, sonrío por inercia al ver tus mejillas teñidas de un rojo que adorna tu rostro con sencillez y ternura —

—Lo es —las palabras son cortas, se esfuman ante la parsimonia de verte sonreír con inocencia, descubrir un mundo que podemos explorar por completo, somos niños queriendo saber la verdad de las cosas, sonríes, iluminas mi sendero con una facilidad que asustaría a cualquiera, eres un sol, la luz —

Ni el sol en su esplendor opacaría la luz que emite tu presencia, ni el brillo de tu sonrisa al descubrir algo nuevo y verlo curioso, investigar sobre ello.

Ni la crueldad del mundo sería capaz de arrebatarte ese sueño anhelante de un mundo desconocido e intrigante, lleno de enigmas y misterios por descubrir y descifrar datos verdaderos, pisar tierras que parecen tan lejanas, y a la vez, inexistentes.

Ni el invierno más frío o la primavera más calurosa, quebrará tus sueños de infante, ni te impedirán correr tu propio sendero de acuerdo a tus ideales de vida, pensamientos genuinos y bien formulados, estrategias certeras.

Lo sé, todo eso lo se con solo mirarte, ¿sabes qué es lo que deseo ahora Armin?

Protegerte, cuidar tu sonrisa y no dejar que nada ni nadie, pisoteé tus sueños.

~~~~~~

Qué pensarás ahora de mi Armin, quisiera saber lo que piensas en esa cabeza ingeniosa, descubrir tus mayores secretos y revelar tus intenciones, quiero saberlo.

Puedo mirar el miedo, miedo a la persona que tienes frente a ti, yo, la persona que consideraste como un hermano, el término de mejores amigos quedó corto y no fue más que una falsedad ante los otros, éramos hermanos, dos hombres que compartieron experiencias desgarradores que nos hicieron madurar a la fuerza, pero ¿sabes?, tal vez yo nunca lo hice, seguí actuando, hasta el día de hoy, a mi manera y de forma impaciente e ignorante.

Puedo mirar el odio en tu mirada, el recelo en tus ojos azules que tanto adoro, la tormenta desatándose en la calma del mar de tus ojos, una tormenta acompañada de relámpagos y fuertes rugidos plasmados en el crujir de tus dientes y la ferocidad de tus palabras, la furia desatándose en tu interior como nunca antes había visto.

No sabes cuanto me arrepiento de dejarme llevar por el egoísmo y la altanería de mi mismo, el ego intocable de un demonio con poderes asesinos, no sabes cuanto me odio por haber lastimado tu piel de esa manera, ese cuerpo tan delicado lleno de conocimiento, amor y comprensión que siempre supiste otorgarme, incluso en los peores momentos, no sabes cuanto odio haber roto tu sonrisa y convertirla en una fina línea surcando tu rostro, que sólo sabía doblarse al contrario, con una muestra de crujir los dientes y expirar palabras dolientes, te entiendo, yo lo provoqué.

Comprendo tu frustración por no poder hacer nada, ni por ti ni por el resto, lamento haberte encerrado y dejarte sin armas para defenderte, espero entiendas que lo hice por protegerte, proteger esa sonrisa que yo borré, proteger esos brillantes ojos azules igual al mar que tanto soñaste ver, lamento haberte roto la ilusión de tu mayor sueño con mis simples palabras desgarrantes, opacar tu mirada en la desgracia y muerte ante guerras sin sentido.

¿Qué piensas ahora de mi Armin?

~~~~

Tardamos tiempo en volvernos a encontrar, admito estar feliz de que fueras tu quien me interceptara aquella ocasión, donde el fuego nos envolvía con enormes llamas ardientes, quemándolo todo a pasos de los enormes colosos, bajo el cruel retumbar del suelo rompiéndose a pedazos junto a sueños y futuro de aquellos que odiaban nuestra presencia.

—Armin... —

Juré que vendrías a mi por venganza, mi comportamiento anterior a la crueldad y frialdad de tus palabras como un maldito ser manipulado, no estabas tan equivocado, pero sabes que odio perder, que mi ego es tan grande como el cariño que te tengo, la esperanza en mi ser de verte nuevamente.

Esperé tus palabras, pero no hubo ninguna, admito que me sorprendió verte ante mi, cruzando la barrera de colosales marchando a mi voz, volando entre el fuego sin temor a quemarte, desarmado sin intención de pelear.

Y aún con el ruido a nuestro alrededor, noté por fin, entre la oscuridad de la noche, y la luz viniendo del fuego, que estabas herido, que las marcas ardiendo en tu rostro, bajo los párpados, líneas ondulantes en rojo vivo expulsando vapor caliente, con tu cuerpo debilitado ante una posible pelea que desconocía, te desplomaste ante mis ojos, sin expresar quejido alguno, con el vapor cubriéndote como niebla.

—¡Armin! —el miedo absorbió mi cuerpo haciéndome mover fuera de voluntad —

"¿Puedes imaginar el miedo que recorrió mi cuerpo después de mucho tiempo Armin?"

"¿Puedes escuchar el rápido latir de mi corazón desenfrenado de verte herido, preso del dolor, ante la odiosa nube de vapor que expedías?"

La desesperación abrumó mis sentidos al tenerte entre mis brazos, jadeabas con la piel ardiendo, el rojo vivo en tus marcas tratando de regenerarse inútilmente, las ropas rasgadas en heridas de combate, tus labios apretados ante el dolor de las entrañas abiertas de heridas mortales.

—¡Mierda, por favor, regenérate, rapido! —la neblina de vapor comenzaba a abrazarnos en un ambiente que no era el que tanto anhelaba —

Tus ojos se abrieron mirándome fijamente, ya no existía ese brillo de inocencia y pureza, se había esfumado igual a las esperanzas de un futuro conciliador de aventuras, descubriendo los paisajes de tu libro, quizás había sido yo el que había arruinado tus sueños, pues conocer el mar era uno de muchos, que incluso también arruiné.

—Armin —

Sonreíste a mi llamado, débilmente, como si estirar tus labios doliera, quemara internamente, la sangre estorbaba para admirar tu piel magullada y herida, dolía con solo mirar, esperé paciente tus palabras pero no hubo hablar que saliera de tus labios, como si la mudez se hubiera apropiado de tu suave canturreo en la garganta partida, tu cuello sangraba mientras el vapor trataba, inútilmente, de curarlo, sanarlo, reparar tu voz de ángel perdida por culpa de la guerra.

Y pese al desastre y destrucción de todo a su paso, alejaste tu mirar con inocencia, recordándome al pequeño niño que parecía bailar entre la hierba descubriendo, por primera vez, naturaleza fuera de las hojas desgatadas del libro de pasta roja, abriste la boca con emoción y, por un leve momento, el brillo de tus orbes regresó.

El pequeño ser alado revoloteaba aturdido, buscando donde posarse ante el ajetreo de su alrededor, de alas rojas con leves manchas negras, sonreíste con una fisura que demostró dolor en solo intentarlo, y por mucho que trataste de alzar tu mano, la herida te lo impidió, la tristeza te embargó al punto de hacerte derramar lágrimas que, tal vez, habías retenido por mucho tiempo.

—Mariposa... —dije mientras estiraba mi mano en tu lugar, dejando que el ser alado se posara en mis dedos creyendo ser una rama —

La miraste como aquella vez que viste por primera vez una, igual a esta, con los mismos colores, colores del infierno, amor negro y oscuro ante la pasión, un enigma de pintura que denotaba belleza ante el desastre, era tan hermoso que te hacía llorar, pues la inocencia ya no existía, al igual que tu vida extinguiéndose entre la espesa niebla de vapor, mis deseos de proteger habían fracasado ante todo.

—No pude Armin, lo siento... —

Era doloroso creer que mi deseo de protegerte había fracasado cuando me había dejado llevar por memorias e impulsos egoístas, extremistas, impropios de mi, del Eren que conocías, que había divagado en la profundidad de un mar sin salida, sin dejar que tomaras mi mano cuando me ahogaba en silencio, te alejé y esta era la consecuencia, mi castigo, tu vida extinguiéndose de a poco.

Pese a ello sonreíste, tu mirar mostraba el cansancio de una lucha, pero también el descanso merecido a una batalla sin fin, comprendí entonces que ya no querías pelear, que querías evitar discusiones, que te arriesgaste a llegar hasta mi porque ya no querías ver más muerte ante tus ojos, querías que fuera yo quien te cargara en un descanso para curar tus heridas tan lento como se pudiera.

—Lo entiendo Armin —

Finalmente comprendí tu deseo, no morirías porque yo te había dejado la llave a la comprensión, al diálogo que tanto querías, conocer mis intenciones no te importaban, sino ver si era capaz de matarte estando frente a mi, y me alegró saber que confiaras en mi, al punto de dejar caer tu cuerpo cansado y herido, con tu sangre manchando mis manos, sobre mi cuerpo, permitiendo entonces que cargara contigo entre el paso del fuego y temblores de una destrucción masiva necesaria para la paz, nuestra paz.

Con el pequeño ser alado volando a nuestro lado, mientras el camino se abría a la luz del mayor genocidio, con el vapor cubriéndote lentamente mientras las heridas se cerraban y descansabas en mi letargo de un perdón necesario para los dos, éramos hermanos, también amigos, y frente a los demás, demostré que, por nada del mundo, le haría daño a los que deseaba proteger con el alma.

Ahí, frente al mayor escenario de descenlace de una guerra, cargándote entre mis brazos, miré al ser alado revoloteando en el comienzo de una nueva libertad ansiada.

Con la promesa de seguir tus sueños, ante el revoloteo de esa mariposa.

************************************

¿Que les ha parecido? Espero haya sido fácil de leer y entender el contexto de la misma y la relación de Eren y Armin en esta ocasión.

Espero sus opiniones, comentarios y lo que gusten, ideas para una próxima historia también.

Gracias por leer, nos vemos 💛💙