¡Hola, vamos por el día 5 de este reto!

Agradezco a todos sus lecturas, votos y comentarios, espero estén disfrutando de este día también 💛💙

🌊 Capítulo sobre la shipp EreMin
🌊 ⚠️ NO hay mención de spoilers del manga.
🌊 Historia basada en un AU de vida real.
🌊 Historia narrada en 3ra persona.
🌊 Historia con contenido yaoi no explicito.
🌊 Créditos respectivos al artista dela imagen utilizada, así como al creador de los personajes, Hajime Isayama.

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Palabra: Cuento de Hadas

Hace alusión a un mundo lleno de fantasía creando en los sueños de Armin, donde el es una criatura fantástica (ángel creador) que da el nombre a criaturas nuevas, como al "titán" que le pone el nombre de su amigo.

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Abrir un libro, es entrar en otro mundo.

Leer es entender una nueva historia, magnífica y maravillosa.

Armin era así, un niño que vivía pegado a sus libros, de pasta gruesa y hojas amarillas, esos libros antiguos eran sus favoritos.

La literatura, con el paso del tiempo, fue actualizándose junto a la modernidad de la vida, pero para el pequeño Armin, las cosas medievales, fantásticas y antiguas, eran sus favoritas.

Un día podía leer todo sobre las primeras culturas, entendería su ideología y los importantes avances que hicieron, otro día, soñaría con estar vestido como caballero y luchar en las guerras.

Pero sus lecturas favoritas, eran aquellas de fantasía, de mundos imaginarios donde existían bestias, seres alados, magia de por medio y cosas irreales.

—Ojalá existieran —

Sus ojos se paseaban entre las líneas de cada párrafo, releía al no comprender algo e imaginaba todo en su cabeza, debía guardarlo, para asegurarse de soñarlo por la noche.

Armin tenía ese don, la habilidad de soñar con lo que él quisiera y, muchas veces, continuar el sueño del día anterior.

¿Acaso era un ser fantástico para tener dicha habilidad?

Podría ser, después de todo, Armin lo controlaba todo.

En cuanto sus ojos se cerraban, el sentía que volaba por los altos cielos, las gigantescas alas de un ángel aparecían tras su espalda y lo ayudaban a volar sobre el lago.

Sus manos eran mágicas, creaban vida de cosas sencillas cómo el toque de tierra o esparciendo agua, y su voz era una melodía de llamado para todo especie cercana.

Podría ser coronado como el rey, el más pequeño de edad por cierto, pero era uno aventurero, que usaba sus gigantescas alas para recorrer su mundo entre magia y seres fascinantes.

Oscuridad y luz, magia o hechizos, seres voladores y otros de forma extraña, todo estaba en equilibrio en su mundo, cada día agregaba una especie nueva según lo que recordaba haber leído.

Y para su sorpresa, hoy encontró a su nueva criatura, viéndola desde lo alto del cielo dió un fuerte revoloteo, su sombra se reflejó en el suelo llamando la atención de dicha criatura gigante.

Bajó el vuelo acercándose a ella, alta y gigante criatura con estructura muy precisa a la humanoide, fuera de los rasgos de la boca y los gruñidos que emitía.

—¿Qué eres tú? —

La criatura extendió su mano para que Armin se sentara sobre ella, mirando directamente a los ojos de la gigante bestia que emitía gruñidos, sin agresividad ni deseos de muerte, solo que era así, tenía nula posibilidad de comunicarse.

—Entiendo, debería darte una forma humana —Armin lo pensó, realizar dicho trato y cambio de forma sería sencillo, el problema era que no se le venía a la mente que forma debería tomar de ejemplo —

Su aura majestuosa, como si llevará un velo lleno de luz y paz, digno de un Dios ángel creador del mundo, tanta belleza dejó profundamente enamorada a la bestia, amando a su creador e implorando por una forma de poderse comunicar con el.

—¡Lo tengo! Lo considero especial, así que, por favor, has uso digno de su nombre —pidió, su voz arrullante fue la profanacion del próximo trato —

Armin retomó el vuelo, volando sobre los ojos verdes de la bestia, curiosamente con la misma belleza de ese jade que conocía, y emitiendo la luz de sus manos, el gigante cuerpo se iluminó soltando vapor para hacer emerger a una persona de su interior.

—Tu nombre de bestia será  «titán» —expresó nombrando a la nueva criatura descubierta,  envuelta en vapor —y tu nombre para comunicarte, a través de mi, es «Eren» —

Al nombrarlo, el vapor lanzó una fumarola que dió paso a la reencarnación de su amigo cercano, con ese rostro infantil marcado con franjas de un transformación de pacto, los mismos irises verdes brillaron al verlo, alejándose de la unión de pieles con la bestia.

—¡Armin! —la voz de su amigo era idéntica, corrió a su encuentro abrazándolo —

Posiblemente, Armin trajo a sus sueños a su amigo de infancia.

—Eren ¿te duele? —cuestionó al notar las marcas debajo de sus ojos y el vapor rodeándolo —

—Solo hace calor —expresó, soltando una risa que contagió al menor —

Recorrieron el mundo como si fueran camino a la escuela, fuera de las hadas volando, las sirenas cantando, y los pegasos relinchando, el mundo era completamente suyo, claro, el gigante monstruo acompañaba al ángel creador.

Se divirtieron saltando, alzando el vuelo, con ayuda de Armin, por los cielos, o paseando en los bosques mágicos montados en la transformación mediada de Eren en ese gigante titán.

Las horas se volvieron eternas para Armin por primera vez, pero la oscuridad de su mundo significaba el despertar del otro.

Por ahora, debía partir nuevamente.

—Debo irme, despertaré pronto mientras mi mundo descansa —

Sobre las altas colinas, Eren lo miraba de soslayo, entendiendo que debía dejarlo partir aunque lo extrañaría por esas horas.

—Te veo mañana, Eren titán —

Armin alzó el vuelo, sus alas revoloteaban con suavidad y su sonrisa emitía una entrañable paz reconfortante, Eren sonrió alzando su mano como despedida.

La gigante bestia comenzó su transformación, envolviendo al humano en cuerpo de tejidos y músculos gigantes, dándole esa forma humanoide nuevamente, Armin debía mantener el control de su mundo evitando los cambios de metamorfosis, por eso, Eren debía de trasformarse.

Su vuelo cruzó tras las nubes, y con un último suspiro, sus alas se abrieron tan repentinamente que el brillante haz de luz cegó por completo su campo.

Entonces, Armin despertó.

Con el libro de fantasía abierto a su lado, justo donde se hacía mención de la extraña criatura encontrada en huesos de eso que él llamó como titán.

—Relmente existió —sonrió, porque si lo vió en su sueño, es que era real —

Y con la emoción recorriéndole el pecho, llegó a ese punto de encuentro donde Armin se encontraba con su mejor amigo, Eren, quien lucía más emocionado que otros días.

—¡Eren! –saludó y recibió de imprevisto un abrazo del castaño emocionado —

—¡Armin, no lo podrás creer, soñé contigo, tenías alas y y estábamos en un mundo extraño pero fantástico! —Eren movía los brazos con total emoción como si fuera un profeta —

Armin sonrió, realmente lo había llevado a su mundo sin querer.

—¿En serio? ¡Eren, y si te cuento que lo de los "titanes" es cierto! —sus ojos brillaron y la emoción rebozó con la expresión incrédula y sorprendida de su amigo —

—¡Tienes que estar bromeando, júramelo! — expresó ingenuo —

Caminaron rumbo a la escuela, mientras su plática del mundo de fantasía era irreal y al mismo tiempo más que palpable, Armin daba ideas y Eren las creía como fidedignas totalmente.

Después de todo, el pequeño Armin era el Dios de sus sueños, aquel que le permitía a Eren verlo tras quitarle su transformación titánica.

O tal vez, y solo imagínalo, tanto ellos como sus poderes, solo eran efecto de un cuento de hadas que te estoy narrando.

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¡Termino este escrito con el día 5, espero que les haya gustado!

Me encantó imaginarme este mundo utópico de alguna manera que no involucrara lo típico de hadas o sirenas 💛💙

Este escrito va para ti: aymiki-chan Creo que se me pegaron algunas de tus maneras de finalizar lo fics al decir lo último ☺️❤️ espero te haya gustado.

Nos vemos mañana. 💙💛