Se alerta a los lectores y a las lectoras de esta novela que este capítulo contiene alto contenido sexual, diversas palabras obscenas y explícitas.

Se advierte, no solamente que hay sexo entre dos hombres, sino que también la presencia de juguetes sexuales así como de elementos de bondage y/o otras técnicas parecidas. En este también hay mención y/o relaciones sexuales sin preservativo. Por favor, en la vida real PROTEJEROS siempre.

Leer bajo responsabilidad propia.

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Dylmas

Dedicado a 💜
Espero que te guste, cielo:c

-Vamos, Thomas- dice Ki- ¿cuánto tiempo llevar sin echar un polvo?

Thomas resopla por enésima vez en la tarde.

-No sé, Ki...

-Pues yo sí sé, así que retiro la pregunta. ¿Cuándo vas a superar a tu ex? Ese chico se fue, Tom. Es imposible que follase tan bien como para que te quieras privar del sexo de por vida.

Thomas rueda los ojos. Lo hacía bastante bien, sí... Pero ese no es el problema

-Ki, tengo gustos... peculiares- responde Thomas tratando de entrever que no va a tocar el tema.

-De acuerdo- dice Ki lentamente- pero no por eso no va a haber nadie más que tenga los mismos. Busca en Internet- salta de repente el asiático.

-¿En Internet?- pregunta Thomas sorprendido, pero atento.

-Sí- asiente Ki- estoy seguro de que algo habrá. Una web o algo así.

Thomas niega con la cabeza.

-Estoy seguro de que como mucho habrá algo de información.

A Ki le suena el móvil y resopla.

-Tengo que ir a buscar a Kaya. Mañana hablamos- abraza a Thomas.

-La gente normal busca novio a sus amigo y tú me buscas a un amante- ríe Thomas cuando Ki ya está poniéndose el abrigo.

-¡Eh, hermano! Me preocupo por eso- señala su entrepierna- que debe de estar muerto. Además, ¿te dejarías buscar novio?

-Yo no tengo nada muerto, Ki. Lo que pasa es que viéndote no se activa- Thomas ríe a carcajadas- no, no dejaría que me buscases novio.

-Pues ya está- se ríe Ki ya en la puerta de la casa de Thomas- además. Te va más al sexo que a un tonto un caramelo. El novio sería mucho más difícil.

Abre la puerta y se va dejando a Thomas con una sonrisa.

Se queda con la mirada perdida pensando hasta que va hasta la cama y pone su portátil en sus piernas. Lo enciende y se mete a buscar en Internet.

Pero, como él pensaba, no hay nada más que pura información de la Wikipedia.

Thomas resopla porque realmente sí está algo frustrado sexualmente, pero no encuentra a nadie que quiera hacer lo mismo que él. El solo hecho de dejarlo caer espanta a cualquiera.

Al rubio se le enciende una bombilla en la cabeza y teclea en en el buscador: chats sexuales.

Encuentras bastante más páginas de las que se imaginaba, va entrando en algunas y dejando otras abierta para probar en más pero nada le llega.

Hasta que le llega un mensaje a uno de estas páginas.

O'Brxxxn

¿Te interesa? Podemos llegar a un acuerdo.

Thomas se ríen con el nombre y decide responder.

Sangst.

Habla y decido.

O'Brxxxn

Me llega.

El caso es que tu foto de perfil me ha puesto cachondo y como por Internet todo es tan frío y tan solitario no quiero seguir por aquí para que quede en un mísero polvo cibernético. Menos aún con ese cuerpo que me tienes, chico.

Thomas se remueve en la cama nervioso, nota que su entrepierna crece de la excitación. Habérselo dicho tan claro y viendo su foto de perfil ha ayudado bastante a que la temperatura en el cuerpo del rubio ascienda. El problema es que seguramente este tipo solo quiera follar con cualquiera y ya.

Demasiado desesperado por su ciudad.

Sangst.

No creo que mis gustos vayan con los tuyos. Lo mío es el bondage y por muy bueno que estés yo necesito eso, no un polvo cualquiera.

Nada más escribirle eso al chico, se levanta a cerrar la puerta de casa con llave acordándose que cuando se fue Ki, no la cerró. Se va hasta la cocina cogiéndose un poco de café que sobró del desayuno y va hasta el cuarto de nuevo cerrando la puerta detrás de él.

Deja en café en la mesilla y se frota levemente su erección por encima del pijama. Se acuesta de nuevo en la cama y pone el portátil en sus piernas. Tiene 11 mensajes de O'Brxxxn.

O'Brxxxn

Espera, ¿piensas que estoy bueno?

Esto está bien.

Vamos bien.

Si quiero quedar contigo es porque la gente escapa más fácil de Internet cuando ve algo que no conoce y ni se molesta en saber los... detalles.

Quiero atarte.

Mierda.

Por eso quiero verte en persona. Podemos acordar cómo lo haremos y eso.

¿Hola?

¿Estás?

Mierda, dime que no te has ido.

¿Era lo que buscabas, no?

De verdad que quiero hacerlo.

Thomas sonríe leyendo todas las respuestas e irremediablemente su erección se eleva un poco más.

Sangst.

Dame tu nombre, una dirección y una hora a la que estar.

O'Brxxxn

¿En serio?

Dylan O'Brien. A las 20:00 en el café Brus de la esquina de Baker Street.

¿Tu nombre?

Sangst.

¿En la calle donde vivía Shelock Holmes?

¿En serio?

Espero que no te lo estés inventando solo para calentarme porque no me gusta ser el que ata, pero cómo juegues conmigo te ataré y no para bien.

O'Brxxxn

¡Lo juro! Mi casa está en esa calle.

No jugaría con algo así con la erección que tengo solo por verte la foto.

¿Tu nombre? x2

Sangst.

Thomas Brodie-Sangster

¿Ya quieres llevarme a tu casa? Pensaba que solo acordaríamos los términos.

Teniendo en cuenta lo que vamos a hacer, la calle te viene al pelo.

Yo también tengo una y no te estoy molestando con ella.

O'Brxxxn

Puedes molestarme con tu erección todo lo que quieras, pero bien atado.

Me rodeo de misterio.

Espero que seas mayor de edad porque por mucho que me pongas en la foto aparentas un crío de 15 bien salido.

Thomas ríe a carcajadas con lo último. Su desventaja de aparentar ser joven.

Sangst.

Tengo 27 años. Puedes comprobarlo esta noche.

¡Oh! Y para que te asegures te llevaré mi DNI.

¿Tengo que ir con una gabardina entonces?

O'Brxxxn

No te hace falta ninguna gabardina para ser misterioso ni para ponerme como una moto.

Me parece bien lo de comprobarlo por mí mismo.

Sangst.

Nos vemos de noche.

O'Brxxxn

Una última cosa.

Sangst.

¿El qué?

O'Brxxxn

Que sepas que esta conversación me ha ayudado con la erección.

Thomas sonríe. Con la suya no, pero podría haberlo hecho perfectamente si se hubiese puesto a ello.

Sangst.

Mejor. Así estarás al 100% de noche.

O'Bxxxn

¿Eso es un sí a mi casa?

Sangst.

... Touché.

¿Admites entonces que pretendías llevarme a tu casa?

O'Brxxxn

... Touché.

Sangst.

Adiós, Dylan.

O'Brxxxn

Adiós, Thomas.

Thomas cierra la web y el navegador, abre Spotify y se pone alguna lista de reproducción a todo volumen para meterse en el baño de su cuarto.

Se depila a conciencia sabiendo perfectamente que sí van a acabar en casa de Dylan. Se mete en la ducha lavándose bien el pelo y el cuerpo.

Su mano viaja por su miembro recordando al conversación con Dylan. No fue tampoco muy candente, pero todo lo que envuelve al chico y lo que significa lo ha calentado a extremos. Gime en voz alta su nombre apoyándose en la pared ya que sabe que nadie lo escucha.

Ventajas de vivir solo.

Cuando se corre, se deja caer unos minutos en el plato de la ducha. Se levanta después para acabar de ducharse a fondo. Se seca y peina el pelo para vestirse.

Acaba a las siete de la tarde, pero como no piensa llegar antes, decide poner un capítulo de alguna serie y así a lo mejor llegar un poco tarde.

(...)

A las once de la noche. Dylan abre la puerta de espaldas mientras se besa sin descanso con Thomas.

El rubio cuela sus manos bajo el pantalón de Dylan tratando de ayudar a la gran erección que tiene el mayor.

-¿Por qué no esperas a que estemos en mi casa?- pregunta Dylan entre besos.

-Pues porque no consigues abrir la puerta- responde Thomas mordiendo el labio inferior de Dylan.

Este gime y por fin consigue abrir la puerta. Thomas salta encima de él para volver a besarlo y el castaño lo sujeta con una mano poniéndola en el trasero del rubio besando sus labios mientras que con la otra, tira las llaves a la mesa del comedor y cierra la puerta.

-Tiene truco, ¿sabes? Y de espaldas no es fácil abrirla- suspira Dylan por los lengüetazos de Thomas en su cuello. Coloca su otra mano en el trasero de Thomas subiéndolo más por su cuerpo para que no se caiga.

-Claro, Sherlock- sonríe Thomas volviendo a morder sus labios- tiene todo el truco que tu quieras.

Suspira agarrándole la barbilla para colar su lengua dentro de la boca de Dylan. Caminan hacia el cuarto de Dylan con sus lenguas rozándose y provocando que ambos suelten varios gemidos.

La entrepierna de Dylan roza con cada movimiento la de Thomas llevándolo al borde de la cordura. Dylan lo tira a la cama y Thomas se pone de rodillas para ir hasta los pies de la cama. Desabrocha su cinturón y baja su pantalón mientras besa y lame sus abdominales.

Dylan gime notando la lengua de Thomas ya en su pelvis y sus manos en sus muslos subiendo para bajarle el bóxer, pero lo separa por los hombros y desabrocha su estrecho pantalón dejando solo el bóxer del rubio para después subirse a su cuerpo y besarlo con fuerza.

Thomas empieza mordiendo su cuello hasta llegar a su clavícula y humedece sus labios para besar cada centímetro de esta y pasar a los hombros. Así de un lado a otro robándole un de los tantos suspiros al castaño.

-Thomas...- gime cuando la boca del rubio baja casi hasta uno de sus pezones buscando morderlo.

-Dime, Dyl- sonríe volviendo a sus labios y pasándolos por toda su mejilla hasta la oreja mordiéndola suavemente mientras que las manos del rubio viajan por todo el torso de Dylan debajo de la camiseta.

Dylan suelta un sonoro gemido en la oreja de Thomas electrizando todo su cuerpo hasta su entrepierna erectándola más.

-Tienes que dejar que me levante para coger las cosas que hablamos en la cena- sonríe Dylan.

Thomas asiente volviendo a besar sus labios y mientras que Dylan se levanta y sale de la habitación para coger las cosas.

Thomas se sienta más en el centro de la cama de Dylan. Suspira abanicándose y moviéndose el pelo.

A mí no me engaña, tiene la calefacción puesta.

Cuando está por quitarse la camisa, Dylan entra y lo mira con una sonrisa traviesa. Thomas detiene sus movimientos mirando la entrepierna mojada del castaño.

Este, trepa por la cama hasta sentarse en las rodillas de Thomas.

-Me gusta más si te quito yo la ropa, gracias- dice Dylan en un tono tranquilo.

Thomas se excita más viendo a Dylan estirarse hacia atrás para coger la bolsa que dejó a los pies de la cama. Saca dos cuerdas de la bolsa tratando de que Thomas no vea el resto del contenido provocando justamente que este se excite más por todo lo que puede tener razón.

Al final va a tener razón con lo del misterio...

Quita la camisa del rubio con fuerza y besa sus labios para llevar sus manos el bóxer de Thomas bajándolo. Thomas gime cuando las manos de Dylan lo acarician tan concienzudamente.

Lleva las suyas propias a la de Dylan y la quita rápidamente dejando al castaño debajo de él. Deja varios chupones por su cuello y baja sus labios hasta los pezones de Dylan. Succionándolos y haciendo gemir a Dylan para después baja su boca por su torso, sus manos acarician los muslos del castaño.

Finalmente, Thomas baja con lentitud el bóxer de Dylan besando su pelvis y nada más libera la erección de Dylan. Este lo pone debajo y se sienta en su cadera inmovilizándolo, alcanza de la bolsa dos cuerdas.

Se pone a hacer los nudos comprobando con la medida de Thomas el espacio justo. La coloca primero en un pie apresándolo, le da la vuelta y pone la mano del mismo lado en la espalda. Después ata ambas con la cuerda y con las otras hace lo mismo con la cuerda restante dejándolo totalmente maniatado.

Le tapa los ojos con un antifaz y Thomas gime de la anticipación.

-¿Ya? Todavía no he empezado- dice Dylan con la voz ronca acariciando su espalda baja.

-Pues empieza ya- gime Thomas mordiéndose el labio inferior.

Dylan ríe en bajita cogiendo de la bolsa otras dos. Le da a Thomas la vuelta y primero trata de moverse un poco.

-Recuerdas todo lo que hablamos en la cena, ¿verdad?- pregunta Dylan acariciando la espalda baja del rubio.

Thomas asiente y Dylan coge de la bolsa una fresa. Sonríe y la pasa lentamente desde el cuello hasta la mano. Thomas gime y mueve la cabeza como si así pudiese averiguar así que le pasa Dylan por el brazo.

-¿Qué... qué...?

Thomas trata de hablar pero le es imposible por la excitación. Dylan le pone la fresa en los labios y da un pequeño mordisco.

Gime notando que es una fresa y la lengua de Dylan segundos después tratando de acariciar su lengua. Juega de la misma manera con un cubito de hiel pasándolo por todo su torso y dejándolo en cada uno de sus pezones para después lamer cada parte por la que pasa el hielo.

Dylan sigue con el control durante un rato hasta que no puede más y tira la bolsa al suelo. Besa los labios de Thomas mientras sus caricias viajan por todo su cuerpo.

Coloca su miembro en la entrada del rubio.

-Dylan, por favor...- suplica Thomas- hazlo ya.

Y Dylan le hace caso. Comienza a penetrarlo muy lentamente mientras que Thomas se remueve rozando su cuerpo con las cuerdas.

Thomas sigue tratando de moverse debajo de Dylan mientras que este lo penetra.

-Thomas, deja de moverte- gime Dylan.

-Castígame si quieres- responde Thomas.

Dylan gime quitándole el antifaz y deja una palmada en su trasero. Thomas trata de arquearse en vano soltando un gemido.

-¿Vas a parar de moverte?- pregunta Dylan gruñendo excitado mientras comienza con varias estocadas fuerte.

Thomas suelta un grito y niega con la cabeza.

Dylan vuelve a darle en el trasero y Thomas suelta otro grito. Mueve su cabeza buscando los labios de Dylan y mientras las estocadas aceleran ambos se besan con deseo. Un deseo que durante toda la cena tuvieron que reprimir por no montar el escándalo en el café.

Las estocadas se hacen fuertes y repetidos mientras que sus labios a penas de separan unos segundos.

Dylan termina corriéndose en el interior de Thomas y este, segundos después en el torso de Dylan que cae rendido a su lado. Los dos respiran entrecortadamente y cuando Dylan respira hondo, desata con cuidado a Thomas metiéndolo debajo de las sábanas con él.

-¿Dormimos un poco y repetimos? Estoy agotado- suelta Dylan con una risita.

Thomas se ríe y todavía respirando mal le contesta.

-Por favor.

-Bien- suspira Dylan poniéndose de lado para mirarlo- ha sido increíble.

Thomas lo besa lentamente pegándose a su cuerpo.

-Bastante increíble- ríe al separarse.

Ambos se durmieron así hasta que Thomas despertó a la mañana siguiente y viendo a Dylan dormir no quiso despertarlo. Y Dylan al despertarse vio todo ordenado menos la bolsa que seguía exactamente donde la dejó caer anoche. Vio una nota en su mesilla y sonríe al acabar de leer el número del rubio.

Siento no hacerte el desayuno, Sherlock. Tengo que trabajar.
Llámame si por algún casual quieres repetir el bondage de anoche o improvisar alguna otra cosa como otro polvo, una cena... lo que sea, ¿vale?;)

Sangst.

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He estado pensando en escribir una nueva historia Dylmas.

Una especie de 50 sombras o algo así, no sé. Como este one shot pero con muchos capítulos de diferente smut y algo de trama. A veces me parece buena idea porque tengo muchas ideas que valdrían (lo del Bondage me lo dijo Saeta <3 no se me ocurrió a mí) y creo que quedaría guay pero luego me digo: meh, ¿qué sería? ¿todo smut? Pasan2 mejor😂💔

Espero que te haya gustado, Saeta🙈
Y a los demás igual 7u7

Nadia💜