✔🔞Hit.🔞✔
Ser secuestrada por un sicario de otro universo no era algo que estaba en tu lista de cómo morir, Hit quería provocar a Goku secuestrando a su propia hermana pero esperar algún tipo de reacción fue vano.
-___: Oye ya no siento mis manos.-te quejaste por las ataduras en tus muñecas.
Tu contrario salió del baño sólo con sus pantalones y una toalla en el cuello, soltó un suspiro aflojando las cuerdas y tomó asiento a un lado de la cama en la que estabas atada.
Hit: Qué?.-dijo notando como lo mirabas pero luego volteaste sonrrojada.
-___: Nada.-susurraste inquieta.- Ya quítame esto se me cansan los brazos.
Hit te había amarrado a la cama con unas cuerdas a los lados del cabecero, estaba molesto por que ahora te quejabas mucho así que te desató para así ponerte unas esposas y volver a empujarte sobre el acolchonado mueble.
Hit: A pasado un tiempo desde que me divertí con una mujer.-dijo acariciando tu rostro asustado.- Tal vez no me contenga.
-___: De-De qué estás hablando.-lo observaste rebuscar en un cajón de la mesita de noche donde sacó un pequeño sobre y una botellita.- Ah?!
El mayor te dió vuelta y colocó su peso sobre ti para que no pudieras huir, intentabas oponerte pero él te había sometido escuchaste atentamente como rompía aquél sobre para quitar el condón y ponérselo al mismo tiempo que destapaba el lubricante, jadeaste sintiendo como removió tus prendas inferiores y el frío líquido en tus partes comenzó a escurrirse.
-___: Haa!? No...oye detente.
Hit: Eres muy ruidosa.-dijo cubriendo tu boca con su mano.- Nunca lastimaría a una mujer.-susurró mientras que su mano libre acarició tu cuerpo de manera tan suave que te provocó cosquillas hasta llegar a su objetivo e introducir dos dedos en ti lentamente.
-___: Jmmgh!.
Tu respiración era fuerte intentabas relajarte para que no doliera podías sentir el calor de su cuerpo contra tu espalda y su respiración cerca de tu oreja, su mano que cubría tu boca se fue aflojando para que pudieras jadear recuperando el aire que necesitabas, Hit no tenía prisa así que se tomaba su tiempo para masturbarte y oír tus adorables jadeos.
-___: De...déjame per-pervertido hgg!.
Hit: Estaría bien si lo hago?.-contradijo estimulando con más frecuencia tu punto débil y quedar a gusto con los gemidos que dejabas escapar.
-___: Haa...Ah!.-era increíble como sólo un par dedos se sentía bien, él sabía dónde tocar y el punto entre la razón y el placer se cruzaron en tu mente sólo una palabra se repetía; más, estabas avergonzada por pedir eso a un extraño que conscientemente también era tu secuestrador.
El mayor ya estaba en su límite separó un poco tus piernas para acomodarse y así penetrar cuidadosamente, mordiste tu labio para soportar hasta que lo metiera todo, Hit empezó a mover su pelvis de manera lenta entrando y saliendo de ti esperando que te acostumbraras.
-___: Haa...hmm ah!.
Sus embestidas eran profundas gemiste intentando negar en lo más profundo de ti que te gustaba, empezabas a gozar hasta sentir como se movía cada vez más pero sin lastimarte, podías escuchar sus gruñidos y leves jadeos roncos unirse a los tuyos que intentabas controlar, su mano que antes cubrió tu boca volvió tomar ese rol para callarte y así embestirte con algo más de fuerza.
-___: Hmmp! Ggh! Jmgh!.-soltaste un par de lágrimas rindiendote ante él y su cuerpo.
Era suave contigo tus oídos captaron el leve rechinar de sus dientes por la presión que ejercía, el sicario legendario estaba por acabar meneo sus caderas un poco más lento para no ser bruto contigo y luego correrse.
Hit: Haa, me dejé llevar veo que aún no te has corrido.-dijo con las voz ronca atrapando entre sus labios tu oreja, sus dedos se harían cargo está vez.
Soltaste un gemido ahogado sus dedos rozaban de manera circular y encima de aquel pequeño órgano sensible, con sus yemas le dió pequeñas caricias hasta provocar tu orgasmo, quedaste sin aliento mientras temblabas ligeramente Hit te giró hacia el para así poder sacarte las esposas, tomó tus manos para entrelazar sus dedos y así ponerlos sobre tu cabeza volviendo a acorralar tu cuerpo, de manera sorpresiva te dió un beso que fue intensificando dejando que sólo un hilo de saliva los uniera cuando se separó.
Luego de todo eso te quedaste dormida y cuando despertaste ya estaba nuevamente en tu casa junto a Goku que no paraba de preguntarte donde estabas.
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