POV. SOFIA
Hace al menos unos dos años conocí a Dove en una fiesta en la universidad y quedé enamorada de ella prácticamente desde aquel momento, esa noche hablamos y nos conocimos, nos dimos cuenta que estudiábamos en la misma universidad más nuestros intereses eran totalmente diferente, nuestra primera cita fue en una cafetería no muy lejana del campus, no mucho tiempo después nuestro primer beso, en una banca que se encontraba fuera de su fraternidad, algunos meses después empezamos una relación, una relación que me hacía sentir segura, yo confiaba en ella, la amaba como loca.

Algún tiempo después terminamos la universidad y tomamos la valiente decisión de empezar una vida juntas, una vida más formal, donde mi mundo fuera suyo y su mundo fuera el mío.

El vecindario era lindo y nuestro departamento era lo suficientemente grande para nosotras, habíamos encontrado buenos amigos, Cameron que vivía justo cruzando la calle, Thomas que vivía en una de las casas de junto, Sabrina que vivía del lado opuesto de nuestra casa.

Dove no había conectado del todo con Sabrina pues decía que le incomodaba que la rubia podía tener sentimientos por mi, Dove tampoco conecto con Cameron porque el chico era demasiado cariñoso, más sin embargo Dove si conectó con Thomas, conectaron de una manera espiritual si se podría decir de aquella forma, aquellos dos eran inseparables, pero yo confiaba en Dove y confiaba en Thomas. Confiaba en ellos para saber que estábamos juntas y ellos jamás intentarían algo que no fuera correcto, yo confiaba en ellos.

*

-Sof, saldré con Thomas, no me esperes despierta- dio un beso en la cima de mi cabeza

-¿De nuevo?- mi voz era más confusión que enojo

-Sabes que no pasa nada- respondió mientras metía algunas cosas a su bolso, guarde silencio por un momento.

Ya habían pasado cuatro meses y estos chicos eran más que inseparables, me había dado cuenta que la forma en la que Thomas miraba a Dove era diferente, que un brillo había aparecido en aquellos ojos color café.

-Bueno, tu le gustas- mi voz seguía calmada, mi mente estaba centrada en los diseños puestos sobre mi pequeño escritorio

-Claro que no, es solo un amigo- dijo con normalidad, mi paciencia terminó, ella sabía que Thomas la amaba, ¿pero ella lo amaba también?

-No me vengas con el "es solo un amigo" ambas sabemos que esta loco por ti- tomé mi cuaderno y salí de nuestra habitación -Me voy a pasar el rato con Sab, nos vemos luego, que te diviertas- ella me siguió por las escaleras y cuando estábamos en la puerta quiso besar mis labios pero corrí la cara -Puedes buscarme si llegas temprano, aunque espero volver a la casa antes de que regreses de tu 'cita'- me di la vuelta para dirigirme hacía la casa de mi ahora mejor amiga

Las horas pasaron y me tuve que retirar de la casa de Sabrina pues no quería ser un motivo de desvelo para la rubia, caminaba hacía la casa que compartía con Dove, faltaban algunos metros para llegar a la puerta de la casa y escuché un auto y seguido de eso su risa.

-¡Shhhh!- le decía Thomas -Vas a despertar a todo el mundo- besó sus labios y Dove le correspondió

-Bien, pero llévame a mi habitación- le respondió la rubia seguido planto un beso en los labios del castaño

-Sofia está ahí, mejor te llevo a mi habitación- dijo el castaño y la dirigió en sentido contrario, ahora atravesaban la pequeña barda que cubría los alrededores de la casa de Thomas

No quería armar una escena en medio de la calle y en medio de la noche, no me quedaba más que resignarme a que había perdido al amor de mi vida.

Dormí la mayor parte de la mañana siguiente, no sabía si se debía al cansancio o a la tristeza acumulada, posiblemente la mezcla de estas dos y eso me hacía sentirme peor.

Alrededor del medio día pude escuchar que algo cayó, posiblemente un jarrón en la sala de estar, una Dove desorientada puede causar un desastre

-¿Dove?- pues realmente no sabía si había sido ella la que había irrumpido en la casa

-Hola, ¿sigues aquí?- dijo Dove cuando se dejó caer junto a mi, me levante inmediatamente -Pensé que trabajabas temprano hoy-

-¿Qué haces aquí?- hizo un gesto como si todo lo que salió de mi boca fuese incorrecto

-¿Disculpa? Yo vivo aquí, en caso de que lo olvidarás- ella me creía la más grande estúpida en la tierra y eso dolía aún más

-No se trata de eso, Dove- mis lagrimas eran retenidas con todas mis fuerzas

-¿Entonces?- se levantó de la cama enojada, como si tuviera el derecho de estarlo

-No tienes ningún derecho a enojarte, Dove- me vio a los ojos -¿Crees que soy una estúpida?- era todo lo que podía decir sin llorar en aquel momento

-¿De que hablas?- se sentó frente a mi

-Te vi, anoche- levanté mi rostro para ver su expresión. Nada

-¿Y?- cínica

-"¿Y?" Dove, vi que lo basaste y Dios sabe que más hicieron- mis lágrimas estaban cayendo silenciosamente

-¿Hablas de Thomas y de mi?- no podía creer su facilidad para mentir -Porque entre el y yo no pasa nada- se acercó para besarme pero corrí el rostro

-Dove, por favor ya no me mientas, ya no hay nada que perder, no finjas que el no significa nada para ti- mis lágrimas corrían y corrían por lo largo de mi rostro

-Sofia ¿Qué fue lo que viste? Porque te aseguro que no fue lo que parecía- tomó mis manos

-Dove, puedes intentar enredarme en mentiras todo lo que quieras, pero yo se lo que vi y ya no tengo nada más que perder contigo- yo sabía que ella no haría ningún otro esfuerzo que no fuera tratar de convencerme de que estaba completamente loca, me levanté de la cama y abrí el closet, tome la maleta más grande que encontré y sin mirarle a los ojos, sin importarme la expresión en su rostro o las preguntas de "¿Qué es lo que haces?" Seguí empacando algunas de mis cosas y textee a mi hermana para que me buscara lo más pronto posible

-Sofia, te prometo que entre el y yo no pasa nada, perdóname-

-Ya no puedo perdonarte más, sabemos que no es la primera vez y tampoco será la última, ya no puedo ser esa tonta que quieres que sea- podía sentir mi corazón latir un poco, no tan fuerte como solía hacerlo ante Dove pero latía -No llores- limpie algunas lágrimas rebeldes en su rostro -Tu llanto ya no me hace sentir mal, ni siquiera tengo porque sentirme mal-

-Sofia...-

-Espero que lo tuyo con Thomas valga la pena, espero que el te ame como yo solía hacerlo- pase una mano por lo largo de su rostro -Espero que las noches que pases entre sus brazos, valgan la pena-

-Sofia... yo no estaba en mis cinco sentidos cuando sucedió- tomo mis manos entre las suyas

-No culpes al alcohol por algo que sabemos no fue cosa de una sola noche- le di media sonrisa -Puedes guardar tus excusas para alguien más. Estuve tratando de darme un motivo para perdonarte por esto, pero de verdad ya tengo suficiente de esta mierda, te perdoné más de lo debido, te perdoné porque pensé que cambiarías, porque cada que venías con lágrimas en tus ojos yo pensé que todo era real y que lo sentías en serio. Ya no puedo sentirme mal por esto, espero estés satisfecha- saque mi pijama y coloque un hoodie que me quedaba algo holgado

-Esto no fue tu culpa y tampoco mía, creo que...- decía mientras preparaba mis cosas, ya con un deshago y tranquilidad

-No lo hace mejor que digas "esto no es tu culpa" pensé que te conocía del todo y supongo que no te conocí en lo absoluto...- di un beso en su mejilla -Espero que Thomas y tu sean muy felices, que todo esto valiera la pena y que con el si logres sentir lo que yo no pude hacerte sentir, que te enamores y que sean fieles el uno con el otro, porque yo ya no tengo más oportunidades para ti- me levanté y abrí la puerta de la que solía ser mi habitación, nuestra -Aquí se cerrará esta puerta y también todo lo que alguna vez pasamos juntas, ve a ser feliz con él-