— ¡M! —La llamó su mejor amiga, estando shockeada. — ¿¡Qué fue lo que te hice!? —La interrogó.

  Mal cerró la puerta de un portazo, dejando a la chica de cabello azul en su habitación, y comenzó a caminar por el pasillo del palacio.

—Ah-ah, oh-oh...—Se oyó una voz de repente, que la villana no conocía, por lo tanto decidió ignorarla. —...Ah-ah, oh-oh, ah-ah, oh-oh, oh, oh.

La chica de cabello morado bufó, harta de aquella voz que la molestaba, así que aceleró el paso.

—I can hear you but I won't. —Empezó a cantar la ojiverde, sintiendo un cosquilleo en las manos que decidió ignorar. —Some look for trouble while others don't. —Dijo, apretando los puños, decidió detenerse cuando llegó frente a un espejo.

—There's a thousand reasons I should go about my day. —Insistió, mirando su rostro con atención, ella sabía que algo andaba mal; esa voz se lo estaba haciendo entender. —And ignore your whispers, which I wish would go away, oh-oh-oh. —Dicho esto vio como sus orbes verdes se oscurecieron y cerró los ojos con fuerza para luego voltearse y continuar caminando.

—Ah-ah, oh-oh. —Se oyó esa voz, que, por un instante; se pareció a la de Carter, y sus ojos volvieron a la normalidad.

—Oh-oh. —Murmuró la Princesa del Inframundo, elevando sus manos.

—Ah-ah, oh-oh. —Ahora esa voz sonaba como un lamento, que alarmó a la chica, cuyos ojos volvieron a oscurecerse.

—You're not a voice. —Sentenció, negando con la cabeza, intentando convencerse a sí misma de que estaba enloqueciendo. —You're just a ringing in my ear. —Dijo antes de acomodarse el cabello con una mano.

  Mal suspiró hondo, sintiéndose incómoda, sus ojos regresaron a su característico verde claro.

—And if I heard you, which I don't...—Gruñó, sin queriendo admitir sus debilidades. —...I'm spoken for, I fear. —Se forzó a sí misma a confesar y se detuvo, girándose para ver la pared, en la que había un enorme cuadro –que supuso que la hija de Regina había colgado mientras ella dormía– que le llamó la atención.

—Everyone I've ever loved is here within these walls. —Dijo, mirando la fotografía en la que estaban los cuatro VKs, sonriendo, el día del Cotillón Real. Se volteó, mirando hacia las puertas cerradas del balcón, negó con la cabeza. «Los vas a perder si le haces caso a ella, Bestia, escúchame a mí» le susurró esa voz en su cabeza y sus ojos volvieron a oscurecerse. —I'm sorry, secret siren, but I'm blocking out your calls. —Exclamó, caminando hacia el balcón, pero luego se giró y miró la fotografía; indecisa.

—I've had my adventure, I don't need something new. —Masculló, segura, pero... alguien le faltaba. Carter. Ella se había ido sin despedirse, Mal se lo había permitido. —I'm afraid of what I'm risking if I follow you... —Dicho esto caminó hacia las puertas del balcón y las abrió rápidamente, observando el horizonte.

—...into the unknown. —Comentó, caminando lentamente hacia la baranda del balcón, insegura pero intrigada al mismo tiempo. —Into the unknown, into the unknown!

—Ah-ah, oh-oh. —Se oyó la voz misteriosa, acompañada por el suave viento, mientras Mal observaba hacia el horizonte: el enorme mar interminable y profundo y su hogar, en medio del agua. —Ah-ah, oh-oh, oh, oh. —Prosiguió.

  La voz misteriosa parecía venir de la Isla de los Perdidos.

La villana, conmovida, retrocedió unos pasos para tomar impulso y corrió hacia el balcón para luego saltar hacia el exterior del palacio. Afortunadamente, cayó al suelo de pie, gracias a sus nuevos reflejos.

—What do you want? 'Cause you've been keeping me awake. —Cuestionó, como si la voz pudiera contestarle, claro que no. —Are you here to distract me so I make a big mistake? —Sugirió, frunciendo su ceño.

—Or are you someone out there who's a little bit like me? —Exclamó Mal, arrugando la nariz mientras caminaba por el jardín delantero, pues tal vez había alguien que entendía qué le sucedía; porque ni ella misma lo comprendía. Tal vez su madre o su padre. —Who knows deep down I'm not where I'm meant to be? —Dudó, insegura.

—Every day's a little harder as I feel my power grow. —Se lamentó, mirando sus manos, de las cuales comenzaron a salir pequeños rayos de magia morada, verde y azul; que la rodearon y luego abrieron un portal delante de ella. —Don't you know there's part of me that longs to go... into the unknown? —Inquirió, caminando hacia el portal e ingresando al mismo.

  Los rayos de magia se dividieron, formando muchas figuras de objetos y personas alrededor de ella, quien dio una vuelta para admirar todo.

—Into the unknown! —Cantó Mal, reconociendo un bosque oscuro a su alrededor lleno de árboles gigantes y extraños, alzó la vista hacia el cielo, fascinada y emocionada. —Into the unknown! —Prosiguió, viendo un enorme dragón que voló por encima de ella, luego visualizó las figuras de sus mejores amigos que parecían estar discutiendo por algo.

—Ah-ah, oh-oh. Ah-ah, oh-oh. —Dijo la chica de cabello morado, entusiasmada, movió sus manos para volver a invocar más magia morada que deseaba que le diera respuestas acerca de ella. —Oh-oh-oh...

—Are you out there? —Preguntó cuando una visión de Audrey apareció frente a ella, luego la magia adquirió un tono verde, provocando  un montón de fuego de ese mismo color que adoraba. —Do you know me? —Exclamó al volver a escuchar esa voz, que se transformó en un enorme dragón de ojos verdes.

—Can you feel me? —Le habló a la criatura morada, luego apareció Maléfica frente a ella. —Can you show me? —Pidió, su progenitora soltó una carcajada malvada para luego desaparecer.

—Ah-ah, oh-oh, ah-ah, oh-oh. —Dijo y vio el ámbar de su padre, formado por la magia azul. —Ah-ah, oh-oh, ah-ah, oh-oh. —Exclamó para luego verlo a él, parecía estar molesto por alguna razón desconocida para Mal.

—Oh-oh, oh-oh, oh-oh, oh-oh. —Dijo al ver a Rosie encerrada en los calabozos. —Oh-oh, oh-oh, oh-oh, oh-oh. —Masculló cuando vio el Ojo de Dragón frente a ella, corrió para tomarlo pero éste se alejó de ella hasta estallar en una fuerte ráfaga de magia verde, formando la figura de Carter.

Mal sonrió feliz al verla, pero la morocha comenzó a correr para alejarse de ella y atravesó un portal, la villana fue tras ella y regresó a su dimensión; siguiendo la magia.

—Where are you going? —Le recriminó, curiosa. —Don't leave me alone! —Suplicó, entonces la figura de su amada se convirtió en una especie de luz verde.

—How do I follow you... —Gritó la villana, corriendo para intentar alcanzarla. —...into the unknown? Oh-oh-oh.... —Estiró el brazo para tocarla y en ese momento explotó, evaporándose en una nube de humo verde.

— ¡Por todas las manzanas envenenadas, M! —Dijo Evie detrás de ella, pero la chica de cabello morado no se volteó.

— ¿Qué dálmatas significa esto? —La interrogó De Vil, que acababa de llegar junto a su novio, luego de cazar AKs.

—No creo que Mal esté bien. —Habló Jay en voz baja, quien sostenía la Vara de la Serpiente, cuyos ojos del objeto mágico brillaban y mantenían paralizados a Doug y Chad; que estaban detrás de los VKs.

  La hija de Maléfica se volteó para encararlos.

— ¿Qué? —Dudó Mal, mientras sus orbes verdes adquirían aquel tono oscuro que intimidaba a cualquiera, sus ojos brillaron al ver a sus tres mejores amigos. —No creerán que este es el final de la historia, ¿verdad?