Holaa chic@s! Aquí les traigo el One short de Castiel a pedido de @HarleyNarley ,  de antemano me disculpo si no me queda muy bien pero el problema es que como Castiel no ha aparecido en CDMU aún no se como es su personalidad por lo tanto tendré que improvisar e imaginar como sería.
También he de decir que me alegra mucho lo bien recibido que se ha vuelto este fanfic y más que nada agradecerles a tod@s los que se encuentran leyéndolo esto,  escribir es un hobbie que disfruto mucho hacer y es aún mejor sí  va a acompañado de personas que disfrutan leer lo que hago \(^o^)/
**Fin del momento emotivo xD**
Por último,  decir que este es el último pedido que tengo así que si tienen alguna idea de lo que puedo escribir para el siguiente capitulo solo tienen que hacermelo saber ya sea en los comentarios o por privado!
En caso de tener nuevos pedidos,  como dije anteriormente, lo subiré el próximo fin de semana ya que retomare las clases ^^
Dicho todo esto no los retengo más y disfruten de este One short.
Chaoo

KUMI

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La gente cantaba y saltaba al ritmo de Crowstorm. Todo se veía como si fuera una cámara lenta a los ojos de Miwa y el sonido era inexistente, su vista se concentraba en el chico de pelo rojo quien en ese momento interpretaba su intenso solo de guitarra,  sus manos presionaban y rascaban las cuerdas del instrumento con maestría.

Al terminar, Castiel posó sus ojos en ella,  era la primera vez que se miraban en cuatro años. Ella se sorprendió,  era imposible que la haya podido reconocer entre toda la multitud. Lo que parecía un contacto visual duró unos pocos segundos y la realidad tomo nuevamente su curso, Miwa ahora podía escuchar la fuerte música y también a la gente a su alrededor que apoyaba con entusiasmo al grupo.

Los recuerdos de esa noche permanecían en su cabeza a la mañana siguiente.  Ella caminaba junto con Chani a la clase de desarrollo personal cuando escucharon un gran alboroto en el patio central,  eran un grupo de chicas que se encontraban alrededor de los chicos de Crowstorm que hoy retomaban sus clases.
Miwa alzó la mirada al cielo, su ex novio era realmente famoso ahora y eso extrañamente le molestaba.

_Miw... ¿Que esperas? Tenemos clase ahora - Chani se veía impaciente,  no le gustaba llegar tarde.

_Si... Lo siento,  vamos - La voz de Miwa sonaba molesta,  ¿Tanto impacto tenía la presencia de Castiel en ella? En realidad no era Castiel,  sino el hecho de que las chicas estuvieran a su alrededor. 

Entraron al salón, el lugar estaba lleno,  Priya al verlas les apartó un lugar.

_La clase está a punto de comenzar,  llegaron a tiempo - Le susurro a Miwa.

_Si,  lo sé... Me distraje en el camino,  es mi culpa - Le susurró Miwa de regreso.

La profesora comenzó la clase pero inmediatamente se vió interrumpida por alguien que entraba tarde.
La señora se dio vuelta enfadada pero su expresión cambio en un instante.

_ Oh no... - Dijo Miwa para si misma. Esto no le podía estar pasando.

_Lo lamento,  llego tarde - Castiel le restaba importancia a sus propias palabras.

_No pasa nada Castiel,  por favor siéntate para poder continuar - La profesora le dijo con dulzura.

¿Esto era en serio? La semana pasada cuando ella misma llego tarde,  la reacción de la mujer no fue nada parecido a lo que estaba ocurriendo en ese preciso momento.

"Claaaro como Castiel es tan famoso merece un trato especial ¿Verdad?" Se dijo a si misma con algo de irritación.

_Señorita Miwa, ¿Le molestaría decirme de que estamos hablando? - Dijo la profesora cruzándose de brazos. Todos y repito,  TODOS los alumnos se habían girado a mirarla,  inclusive Castiel.

_Sobre la forma de enseñar de algunos profesores... - Priya le susurró disimuladamente.

_Sobre la forma de enseñar que tienen ciertos profesores - Miwa repito automáticamente.

La profesora frunció el ceño.

_Muchas gracias señorita Priya,  veo que usted si esta al tanto de la clase. En cuanto a usted joven, le ruego que le preste un mínimo de atención a la clase - Sentenció la mujer y volvieron a retomar la clase ante la mirada burlona de algunos estudiantes.

¡No podía ser cierto! Había quedado ridiculizada frente a Castiel, ¡Que vergüenza! Era la primera vez que se veían en años y ¿Pasaba esto? Simplemente la suerte no estaba de su lado.

En las noches,  Miwa trabajaba en el Snake Room como camarera,  su estilo pegaba mucho con el lugar.

Se encontraba en la barra cuando entró Castiel al lugar junto a dos de sus amigos. Miwa al verlos quiso esconderse,  ir hacia otra parte del establecimiento,  de verdad no los quería atender.

_Miw,  atiende a los chicos que acaban de llegar - Le dijo el barman,  el cual era unos dos años mayor que ella.  Era un sujeto agradable pero muy serio con su trabajo.

Ella realmente tenía mala suerte,  primero en la clase y ahora en el trabajo,  este definitivamente no era su día.

Miwa se acercó a la mesa tratando de disimular sus nervios.

_Buenas noches ¿Que les sirvo?- Su corazón iba a mil.

Castiel junto con sus dos acompañantes se giraron hacia ella,  el pelirrojo,  pese a ser muy discreto,  no pudo ocultar su sorpresa mientas que los otros dos jóvenes se la comían con la mirada,  la belleza de la muchacha no les dejaba indiferentes.

_Claro hermosa,  tomaremos chupitos - Uno de los chicos le dijo a la vez que recorría todo su cuerpo con la mirada, acción que molesto mucho a la chica quien, sin agregar nada más,  se marchó en busca del pedido.

Mientras preparaba todo para regresar a la mesa,  se percató de que los chicos miraban en su dirección y comentaban entre ellos. Castiel, por su parte,  se notaba ajeno a la conversación.

_Vaya par de idiotas...- Comentó para si misma,  Miwa sabia como defenderse así que no le tenía miedo a la situación.
Se acercó nuevamente a la mesa,  sirvió los que serían los primeros tragos y dejó la botella.

_Espero que los disfruten,  si me necesitan estaré en la barra - Miwa se disponía a marcharse cuando uno de los chicos la tomo del brazo y no tuvo más remedio que voltearse a mirarlo.

_Oye, ¿Que te parece si te sientas con nosotros y te invito un trago? - El muchacho sonrió arrogante.

_Gracias pero no me interesa,  además estoy trabajando - Miwa sonrió de manera falsa.

Ella se dio vuelta para seguir su camino cuando el chico la volvió a jalar del brazo.

_Vamos,  no seas así bonita...  Solo será  un rato ¿Si? - El chico le sonrió.

Castiel frunció levemente el ceño,  esta situación no le gustaba en lo absoluto.

_Ya te dije que no ¿Tienes problemas para retener información? - Miwa estaba realmente molesta.

_Creo que no nos has reconocido,  somos Crow... - El chico se vio interrumpido.

_Crowstorm,  lo sé,  no vivo bajo una piedra amigo - Ella sonrió irónicamente.

_¿Entonces cual es tu problema? Nadie se enfadara si te sientas un segundo - El joven comenzaba a perder la paciencia.

_Creo que me has confundido,  no soy ese tipo de chica,  no me vas a sorprender con el nombre de tu banda... - Miwa sonreía arogantemente - Soy de ese tipo de chicas del que seguramente no estas acostumbrado a frecuentar,  lo siento cariño,  pero para conquistarme ¡Tienes que trabajar más! Así que suelta mi brazo y no me molestes más ¡No soy un objeto ni un pasatiempo! - Miwa apartó bruscamente su brazo y se fue de allí,  bajo la mirada atónita de los dos chicos.

  Castiel no podía ocultar su sonrisa mientras miraba sobre su hombro como Miwa se alejaba.

_¡¿Quien rayos se creen?! - La ira de la joven era evidente.

_Tranquila,  yo me encargo ellos a partir de ahora - Le dijo su compañero logrando así tranquilizarla.

Estuvieron sentados algo más de media hora y los tres se retiraron. Poco después,  Miwa tomo sus cosas y se retiró rumbo al campus.

Se había alejado unos dos metros de la puerta del bar cuando se percató de una sombra,  aparentemente era un hombre apoyado contra la pared.

_Ha pasado el tiempo ¿No es así niñita? -  Castiel se aproximó hacia ella.

_Tu lo has dicho - Ella sonrió,  se tenia que mostrar segura de si misma aunque por dentro estuviera muerta de nervios.

_¿Que ha sido de ti?  ¿Como es que volvieste a estudiar a la ciudad? - Castiel le pregunto.

_ ¡Gracias Castiel! ¡Yo también estoy bien! Me alegra verte - Miwa sonrió,  el comentario le hizo mucha gracia al pelirrojo.

_Veo que sigues siendo de carácter fuerte - El le sonrió.

_¿Acaso lo dudabas? - La pregunta retórica de Miwa hacia referencia a lo ocurrido hace un rato - Volviendo a tu pregunta: Nada interesante,  Anteros Academy tiene la especialización que buscaba,  estudio arte moderno y contemporáneo. Creo que no hace falta que te pregunte que tal te ha ido ¿Verdad? Líder de la popular banda en ascenso Crowstorm - Por suerte se había creado un buen ambiente.

Miwa volvió a hablar.

_Ya enserio,  te felicito, estoy segura de que te lo tienes merecido. Después de todo,  este era tu sueño...- La voz de la joven era dulce,  se alegraba de verdad.

_Gracias,  es cierto que he trabajado duro... - Castiel tenia una mirada relajada.

La luz de la luna lo hacía ver aun más atractivo,  se veía genial.

Se hizo un corto silencio y el volvió a hablar.

_Vamos, te acompaño al campus - Dijo el mientras caminaba hacia allí.

_¿No te molesta? - Miwa preguntó.

_¿Por qué crees que estado esperando aquí? Claro que no me molesta- Castiel le respondió con temperamento.

La pregunta de Miwa había sido estúpida,  era obvio que la estaba esperando ¿A quien más sino? El local estaba vacío a no ser por ella y su compañero.

Caminaron juntos hasta las habitaciones. En el camino hablaron de todo y a la vez de nada, era una conversación muy trivial.
Una vez en la puerta de su habitación les tocaba despedirse.

_Bueno, aquí te dejo.... - Castiel le dijo.
_Si,  muchas gracias,  me alegro volver a verte - Ella le respondió alegremente.

_Lo mismo digo.  Nos vemos luego... - Ambos se acercaron para darse un beso de despedida pero por un segundo se pararon en seco. Ambos habían recordado algo importante y era que el último beso que se dieron había sido en los labios.
Se miraron fijamente,  el tiempo parecía congelarse. Se iban acercando poco a poco pero el beso no parecía dirigirse hacia sus mejillas.
En un momento de cordura ambos se alejaron repentinamente.

_Yo... Tu... Esto nunca ocurrió  ¿De acuerdo? - El pelirrojo sentenció.

Miwa frunció el ceño,  el comentario le molestó en gran medida.
_No te confundas Castiel,  aquí no ha ocurrido nada realmente. - Ella se cruzó de brazos.
_Hpm...  Di lo que quieras...  Por algo terminamos después de todo - El se arrepintió ni bien había terminado de pronunciar la última palabra.
_¡Te recuerdo que fuiste tu quien terminó conmigo!  - Miwa comenzaba a perder los estribos.
_¡Claro, que si! ¿A caso creias que me quedaria esperándote? - Castiel toco un tema sensible para ella.
Los ojos de la muchacha se volvieron cristalinos.
_Lo lamento ¿sabes? Hice lo mejor que pude,  pero tu comenzabas tu carrera y yo no quería estorbar,  además me quiera concentar en lo mio también... ¿Es eso lo que me estás recriminando idiota? - Las lágrimas corrían por sus mejillas.
_Miwa,  yo... - Castiel se mostraba arrepentido,  este también era un tema sensible para el,  después de todo el al igual que ella,  tampoco había logrado olvidarla.
Ella no lo dejo terminar y se metió en su habitación cerrando de un portazo.
_Bien hecho genio... - Se dijo Castiel,  claramente impotente.
Esa noche no fue de las mejores para ellos,  Miwa se la pasó llorando y Castiel no podía dormir,  el recuerdo de lo ocurrido lo atormentaba.
Paso una semana entera y ellos no se dirigieron la palabra.
Es más,  Miwa se negaba a mirarlo. 
Llego el viernes,  Castiel sabia que ella trabajaría esa noche así que decidió ir con sus amigos nuevamente.
Ella los vio llegar y una mueca de asco se hiso lugar en su rostro.
_Por favor,  ¿te puedes encarar tu de ellos amigo? - Miwa le suplicó a su compañero.
_Me gustaría poder ayudarte Miw,  pero, como ves, estoy ocupado. - Le respondió mientras preparaba un Daikiri.
_Está Bieen! - Dijo ella fastidiada.
Se acerco a la mesa y,  al igual que la semana pasada,  les pregunto que iban a tomar.
_Hola de nuevo preciosa!- El joven de la última vez habló.
Ella suspiró mientras miraba hacia el cielo.
_Con que el payaso de la última vez. - Lo miro sin ningún tipo de emoción.
El chico la tomo bruscamente del brazo y la acercó a el.
_Escucha princesa,  no te conviene meterte conmigo. - El joven la miro enfadado.
Ella estaba apunto de hablar cuando una tercera persona se le adelanto.
_Oye! Sino quieres ganarte un puñetazo,  te conviene dejarla en este momento!- Castiel había perdido todo rastro de tranquilidad.
El chico lo miro sorprendido.
_Lo siento hermano,  no sabía que te gustaba. - El joven la soltó.
_Es mi ex novia,  la conozco muy bien y no me hacen gracia tus bromas... - Dijo el pelirrojo intentando no mirar a nadie.
Miwa aprovecho el momento de distracción que le ofreció la declaración de Castiel y se fue hacia la barra.
Se repetía lo mismo de la otra semana,   luego del incidente su compañero se encargó de ellos y luego de un rato se fueron.
Una vez más,  Miwa tomó sus cosas y se fue,  miró hacia todos lados asegurándose de no encontrarse con nadie,  al ver que no había nadie a la vista decidido emprender su camino de regreso a su habitación.
Estaba pasando por en frente de un callejón cuando alguien la tomó del brazo y la atrajo hacia el. De un segundo al otro,  Miwa se veía acorralada entre la pared y el cuerpo de su atacante quien le tapaba la boca para callar sus gritos.
_¡Has silencio tonta! Soy yo. - El rostro de la joven paso del susto al enfado. El le retiró la mano de la boca.
_¡¿Eres imbécil?! ¡Casi me matas del susto!  ¿Porque no podías ser como una persona normal? -  Miwa le replicaba.
_No soy idiota,  sabía que no accederias a hablar conmigo por las buenas. - Castiel le respondió.
Miwa no tenía  nada que decir acerca de eso,  el tenia razón.
_¿Que rayos quieres de mi? - Preguntó algo enfadada y desviaba su mirada.
_Quiero pedirte perdón por lo que ocurrió la última vez, ¿de acuerdo?   lo admito,  fui un tonto. - Castiel se lo dijo suavemente.
_Esta bien, acepto tus disculpas, ahora me tengo que ir. - Ella estaba decidida a irse cuando el volvió a hablar.
_Te acompaño.
_No,  me puedo ir por mi propio pie. - Ella le respondió cortante.
_No era una pregunta Miwa,  vámonos. - La tomó del brazo pero ella enseguida se apartó.
_Castiel,  creo que sería mejor si no nos volvemos a hablar. - La joven lo miraba directo a los ojos.
Esto para Castiel se sentía como si terminaran por segunda vez.
_No,  no voy a hacer eso. - El pelirrojo la miraba con el ceño fruncido.
_Por favor!  Esto no me está haciendo bien y a ti tampoco,  es evidente que aún sentimos cierta atracción fiscia,  pero yo... - Miwa no se lo podía decir.
_¿Aun me amas? - El se acerco a la joven quien se sintió intimidada y se pegó contra la pared.
Se miraban intensamente, estuvieron así,  en silencio,  mediante un par de segundos.
Castiel la tomó por la cintura y se acercó a su cuello donde le daba besos fugaces.
_N-no,  no podemos... - Miwa decía eso pero, aun así,  enterraba sus dedos en su roja cabellera.
_Si podemos... No te haré daño. - Dijo el mientras le daba un beso en la mejilla. - Te amo y no quiero olvidarte.
Sus labios se rozaron.
_Sabes que te amo Castiel,  pero,  ¿como se yo que me dices la verdad? - Ella cerraba los ojos,  disfrutando el roce de sus labios.
Castiel comenzó a tararear una canción que ella reconoció de inmediato,  sus ojos se abrieron lentamente.
_Castiel... - El la interrumpió.
_Te compuse mi primera canción...  Al igual que el primer álbum de Crowstorm. Contigo hay que trabajar de más ¿verdad? - La miro fijamente.
Ella no se hiso esperar más y lo beso de manera intensa. Miwa lo tomaba por el cuello mientras que él con una mano sostenía su cintura y con la otra acariciaba su pierna.
De un momento para el otro,  se encontraban encerrados en la habitación de Castiel y la ropa les comenzaba sobrar.
No hace falta explicar lo que ocurrió,  simplemente decir que se habían dado una segunda oportunidad.

Fin