ODIO (1)


Tipo: Sad/triste

Advertencia: Ninguna.

________________________________

Todos se encontraban varados caminando sin rumbo por las vías del tren, Rick te dedicó una sonrisa al igual que a todo su grupo que permanecía al lado de él. Por un momento tu mirada cambio buscando a aquel chico con sombrero de sheriff pero él no estaba aquí. "Tal vez se fue al bosque" habias dicho en tu mente.

Con una mirada rapida observaste cómo todos se habían detenido por un instante a descansar pues había sido un viaje largo y sin rumbo. Michonne apareció frente a tu colocando algo en un árbol mientras te llamaba con una mirada cómplice, y al comprender a qué se refería la morena te acercaste hacia ella con velocidad y ambas sonrieron.

—Hey, vamos, al menos inténtalo—decia Michonne y tu sonreiste, suspiraste y diste unos pasos hacías atrás chocando con alguien mientras le devolvías una sonrisa cómo disculpa.

—¿Qué rayos están haciendo?—preguntó Sasha mirandolas a ambas con curiosidad, tu reiste por segunda vez.

—Michonne piensa que tengo mala puntería, así que pienso hacer que ella se retracte—respondiste tú, Sasha solo comenzó a reir y se colocó al lado de Michonne—Espero ganar.

—Apuesto tres barras de chocolate a que gana Michonne—agregó Tara a lo lejos mientras sonreía al lado de Carol y Porter—Eugenne también está de mi lado.

—¡Hey!—te quejaste mirándolas a ambas.

—Yo apuesto tres ardillas a que gana la enana—añadió Daryl desde una esquina caminando hacia Tara y Carol. Miraste delicadamente a Daryl, no sabias porqué te llamaba "enana" si tu tenias una estatura normal.

—Apoyo a (Tn)____—secundó Glenn acercándose con Maggie.

—Nosotros tambien—terciaba Abraham llegando al lado de Michonne junto a Rosita—Sabemos que esa mocosa ganará.

—Hecho—cerró la propuesta Tara chocando puños con Daryl y Glenn.

Desde tu lugar tu solo te dedicaste a bufar por unos instantes y comenzaste a concentrarte en el blanco. "Bien, solo son unos metros, no pasará nada" soltabas en tu mente para tranquilizarte. De todas formas, aquel reto que Mich te había propuesto ya se estaba haciendo cómo una costumbre para ti.

Retrocedistes unos pasos más y tiraste el dardo con sumo cuidado, éste quedo clavado justo en el medio de lo que Michonne había colocado en el árbol, y gracias a tu puntería, sonreiste victoriosa. Michonne hizo lo mismo y por obra del destino, que raramente estaba apoyándote, el dardo que ella tenía en manos se vio afectado por el viento cuándo lo lanzó y aquello la hizo perder mientras tu estallabas en carcajadas, al final ella solo hizo lo mismo.

—¡Revancha!—gritó la morena, sonreiste y cogiste otro dardo.

Sin embargo esta vez no podías concentrarte, estabas completamente nerviosa, sabias que pasaba algo. Soltaste el dardo y éste impactó en el suelo, podías escuchar la risa de Michonne sintiéndose victoriosa, querías sonreír, lo intentaste, pero escuchaste dos disparos, lo suficiente para que todos se pusieran alerta.

Tu primera acción fue cruzar miradas con Rick y Michonne, estos entendieron perfectamente tú incomodidad y preocupación. Buscaste con la mirada a Carl por si ya había llegado pero no lo veías por ningún lugar así que tuviste que correr hacia el bosque a buscarlo, siguiendo el sonido de la bala.

Entre algunos arbustos, Carl se encontraba luchando con un grupo grande de caminantes, un hombre que parecía tener alrededor de 50 años estaba a su lado, analizaste con la mirada a aquel sujeto para reconocer de dónde lo recordabas, pero nada, Aquel hombre luchaba con un caminante, lo miraste enojada cuándo este le lanzó un caminante a Carl para librarse y salir corriendo.

Cogiste tu pistola, y disparaste a ese sujeto sin importarte nada, solo querías proteger a Carl. El cuerpo sin vida del hombre cayó al suelo, Carl y tu cruzaron miradas por un instante, su rostro no era uno de agradecimiento era uno de furia, aún así no pararon hasta matar a todos los caminantes que trataban de saciar su sed de sangre, tan solo con sus navajas.

Cuándo por fin acabaron, buscaste al grupo con la mirada para ver si habían logrado venir hasta aquí, pero estos no llegaban aún, parecía que gracias al sonido que había sido apaciguado por ustedes al resto se le dificultaba llegar hasta aquí, podías intuirlo, o quizás por el mismo ruido aquellos estaban concentrados salvándose de los caminantes que se hubiesen acercado al lugar.

—¡¿En que estupideces estas pensando?!—fue lo único que salió de la boca de Carl, lo miraste confundida pues tú habías salvado su vida—¡¿Eres idiota?!—volvio a gritar.

—Yo solo te ayudaba—respondiste enojada rodando los ojos por la actitud del muchacho—¿Por qué te...

—¡No!, acabas de matar a la única jodida persona que afirmó que tenía una comunidad para que todos nos quedaramos—gritó, Lo miraste fijamente y apretaste tu mandíbula enojada, lo habías ayudado y así te lo pagaba. "Que ingrato" pensaste—¡Estoy cansado de que te entrometas, largate ya!—grito por tercera vez, escuchaste pisadas a tus espaldas sabias quienes eran.—¿Por que eres tan idiota?—preguntó enojado mirándote con furia.

—¡Carl!—escuchaste el grito de Rick a tus espaldas, regañando a su hijo por su mal vocabulario. Volteaste ligeramente y viste a todo el grupo ahí, observandolos a ambos muy confundidos.

—¡Ese hombre te lanzó un caminante!—gritaste en tu defensa logrando ir hasta el cuerpo inerte del sujeto muerto ubicado en el suelo, con rapidez lo despojaste de su arma, una pequeña pistola, le quitaste la tierra y te lo guardaste en tu cinturón—Y luego quiso escapar.

—¡Él solo estaba asustado, tenía una jodida comunidad y tu lo mataste!—volvió a gritar Carl mirándote con rabia. Volviste a apretar tu mandíbula dispuesta a gritarle alguna grosería, lo pensaste unos segundos más y preferias mantenerte callada, después de todo decir groserías no era lo tuyo.

—Carl—esta vez intervino Michonne mirando al chico tratando de calmarlo.

—Te salve—soltaste en un susurro casi inaudible, él cuál solo el muchacho pudo escuchar, con notable furia lo observaste por un momento antes de retirarte—Eres un ingrato.

Después de decir aquello te fuiste del lugar regresando hacia las vías del tren, con rapidez guardaste uno de tus dardos que aún permanecía en el suelo en tus bolsillos, sabiendo en si, que Carl siempre te trataría de esa forma, el pequeño sheriff era muy especial para ti, te importaba mucho, aunque ahora si ya no podías soportarlo más. Sabias que él se encontraba cansado de vagar sin destino, todos lo estaban, tu también lo estabas pero egoistamente el chico solo pensaba en si mismo, en su cansancio, en su tristeza, en sus problemas.

—Bien, me iré—soltasté en un susurro cogiendo uno de los chocolates que Tara escondía en su mochila, que por cierto estaban en las vías del tren junto a algunas carpas que tal vez Maggie había echo y comenzaste a caminar alejándote de todo el camino ya trazado—De todas formas siempre me ha ido mejor estando yo sola, sin preocuparme por nadie más.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top