Rachel.
Las noches en ese lugar me hacían querer suicidarme. Cada noche era igual, no podía dormir, miraba al techo pensando que era de Zack...

—La persona con la que te encontraron... —habló la doctora —me alegra que ya no estés tan obsesionada con ella, ese asesino... ¿sabes? Pronto va a morir.

Sentí una punzada en mi pecho al escuchar eso, ¿Zack moriría pronto?... Entré a mi habitación e ignorando a la doctora cerré la puerta. Busqué entre los cajones el cuchillo que Zack me había dado anteriormente antes de salir. Me senté en el piso mientras lo observaba, me lo había dado para protegerme era un gran obsequio de su parte.

Lo guardé en el mismo lugar, las palabras de aquella doctora resonaban en mi cabeza «—Ese asesino... ¿sabes? Pronto morirá.» Negué mientras bajaba la cabeza, me sentía vacía no había podido ni despedirme de él; pero me salvó, Zack me había salvado había un poco de esperanza dentro de mí.

Me subí a la cama y me acosté, no pasó mucho tiempo hasta que escuché golpes en la ventana.

—¿Rachel?, ¡abre la puerta!

¿No es un trabajador?... Sentía que uns ola de esperanza me invadía, me acerqué al mueble al lado de la puerta y lo tiré para bloquearla. Miré la ventana, di un par de pasos hasta quedar en frente de ella.

—¡Quítate! —el grito me hizo caer al piso y solo retrocedí.

El corazón me dio un vuelco cuando reconocí la voz, mi ritmo cardíaco estaba acelerado. Sentía que me faltaba el aire.

—¡Zack! —lo vi en la ventana y en mis ojos comenzaban a formarse lágrimas juraría que podría llegar a llorar en cualquier momento.

—¿Sigues con esa tonta cara? ¡Vamos vine por ti! Siquiera sonríe —dijo el mientras por supuesto sonreía.

Me acerqué y le di un fuerte abrazo, no aguantaba más. Tenía mis ojos cerrados y mientras lo abrazaba las pequeñas gotas de agua de mi llanto comenzaban a mojar su sudadera.
El correspondió al abrazo mientras me daba palmaditas en mi cabeza.

—¡Empujen! —escuchamos.

—Llamaron a la policía... —murmuró Zack —¿Entonces?

—Vamos... —tomé su mano, el me cargó y huímos inmediatamente de ese lugar.

Miré a Zack, me di cuenta de que a pesar del tiempo no había cambiado, había sangre en su sudadera algo normal para mí después de haber pasado suficientemente tiempo con él.
El cargardonme aún me llevo hasta un callejón lejos del lugar donde se encontraba la policía.

Zack.
Bajé a Rachel de mis brazos y me recargue en la pared. Había corrido mucho, estaba cansado. Miré a Rachel y sonreí me acerqué ella, me agache. Puse mi mano en su cara mientras acariciaba su mejilla.

—¿Estar ahí eran un asco? —pregunté mientras secaba sus lágrimas, aún caían por su cara.

Estaba un poco roja sus ojos por igual ya que estaba llorando.

—Era todo un asco —afirmó. —No podía dormir pensando en como estabas y que te sucedería... Después de todo te culparon de asesinar a mis padres y según de secuestrarme...

Rodé los ojos formando una sonrisa mientras la volvía a abrazar.

—Yo también estaba muy preocupado por ti.

—Zack... Nuestro juramento, a pesar de que no se cumpliera... Es un juramento de los dos, ahora que estoy contigo después de haber pasado tanto tiempo juntos... realmente estoy feliz.

Desvíe la mirada, Ray había logrado que me avergonzara. La miré por el rabillo del ojo y pensé un momento. Rápidamente me acerqué y besé su frente. Me quité la mochila que traía colgada y saqué una sudadera para Ray y otra para cambiarme yo. No me molestaba estar lleno de sangre pero si queríamos que no nos descubrieran tenía que ser más sútil.

—Huele a ti... —volteé a verla ya que no había escuchado del todo bien.

—¿Qué dijiste?

—Que ya me vestí —dijo ella mientras apenas se ponía la sudadera.

No le hice caso y me quité la mía guardándola. Volví a colgar la mochila en mi hombro y agarré su mano para comenzar a caminar, era aproximadamente 1 kilómetro, casi no quedaba lejos.
Rachel no decía nada mientras caminabamos, podía entenderla tal vez era muy difícil para ella.

—Me tomé la molestia de arreglar todo... Esa es la razón por la que tarde tanto ~ —hablé rompiendo el silencio.

Rachel me miró con la cara que normalmente tenía antes, parecía no creer mis palabras.

—¿Desde cuándo tú..? —negó. —Gracias Zack.

Seguímos caminando un poco, íbamos a un paso considerablemente rápido ya que en menos de 2 horas nuestra cara estaría casi por toda la ciudad.
Al llegar a la parada de autobuses nos subimos a uno rápidamente mientras ocultabamos nuestra cara. Ya que nos habían dado una pequeña comida para el viaje Ray estaría bien. Nos sentamos hasta atrás para tener más tranquilidad.

—¿A dónde iremos? —preguntó Ray mientras me miraba.

—A un lugar lejano, no quiero que nos atrapen rápido... Sólo que el viaje es algo largo.

—No importa.

Se recargó en el respaldo del asiento y cerró los ojos, al parecer dormiría. Sentía un poco de pena ya que había ido en la noche cuando ella realmente debería de estar durmiendo pero después de todo; la saqué del peor lugar de su vida.
Aparté un poco de cabello que cubría su cara y me acerqué.

—Buenas noches... —al terminar de decir esas palabras besé su frente.

—Igualmente Zack...

Abrió los ojos mientras sonreía para después agarrar mi cara y volver a cerrarlos mientras me daba un beso.
Por obvias razones no me aparté, sólo dejé que lo siguiera haciendo, sólo le correspondí.

—Recordé que un día me dijiste que me dejarías usarte como yo quisiera... —Dijo al separarse volviendo a su antigua posición.

—¿¡Cuándo fue eso!?

—Cuando estabamos en el piso de Cathy y te inyectaste las dos jeringas.

Di un suspiro recordando mis palabras, sentía pena al recordar la estupidez que había dicho.

—Buenas noches —respondí mientras desviaba la mirada hacia la ventana.

Mi mano se dirigió a la de Rachel, la tomé y entrelace nuestros dedos.

Ternura pa' body'
Estaba haciendo anotaciones de futuros OS y hay uno que les encantará ~ 7w7
Es una historia súper alternativa a todo pero les diré una parte.

Los padres de Ray están vivos y son policías, ella va con ellos a su trabajo un día y ve a Zack.

Sonaba más interesante cuando lo había anotado :,v

Espero les haya gustado este💕
Muchas gracias por leer ~