Rachel miró por la ventana... Era un día envidiable. Últimamente había estado lloviendo como si fuera a suceder un diluvio por lo cual Ray se alegró cuando vio el sol en lo más alto del cielo dando calor, no habían casi nubes grises así que era un 80% asegurado de que no llovería en un largo rato.

Ray se alejó de la ventana para después sentarse en el sofá pensó un poco... Quería salir pero no sola, volteó pensando en si ir por Zack para proponerle salir pero temía de su respuesta.

Se levantó del sofá y fue hacia donde la habitación de Zack, sin decir nada ni tocar abrió la puerta.

—Quiero salir —él volteó a verla.

—¿A dónde?

—No lo sé, el día es lindo me gustaría salir contigo —respondió ella mientras se sentaba en la cama al lado de Zack.

—Bien —él se paró y se estiró —¿qué tal si vamos a comer un helado.

—¡Sí! —respondió feliz.

—Dejame cambiarme.

Rachel asintió y se recostó en la cama de Zack mirando hacia el techo, se volteó y olió las sábanas, olían a Zack.
Ray sonrió habían pasado un par de meses desde que los dos habían empezado a salir y todo iba a la perfección sólo que... esta iba a ser su primera cita en regla.

—¿Qué haces? —preguntó Zack mientras la veía.

—Nada importante —respondió Ray mientras se levantaba rápido —¿ya nos vamos?

Zack asintió mientras tomaba la mano de Rachel y salían de la habitación, seguido de la casa. Comenzaron a caminar, dieron una vuelta por el parque.

—¿No crees que debimos de traer un paraguas? —preguntó Ray mientras miraba a Zack, sus ilusiones de un día hermoso comenzaban a esfumarse.

—No parece que vaya a llover —respondió Zack. —Vamos por ese helado anda.

Ray asintió y siguió a Zack al puesto de helados que estaba cruzando la calle. Rachel apoyo sus manos en sus rodillas mientras miraba la gran cantidad de sabores que había.
Zack la miró con una sonrisa.

—Hola, bienvenidos a Santa Clara —saludó el chico —¿de qué desean su helado?

—¡Quiero un helado de tiramisú con galleta! —le dijo a Zack con una gran sonrisa, él río y así fue como lo pidió.

—¿Y tú? —preguntó al ver como le daban el helado a Zack para después dárselo a Ray, sacó dinero y pagó.

—No te preocupes por ello —Zack caminó junto a ella, cuando volvieron al parque se sentaron en una banca.

Zack aprovechó la oportunidad cuando Ray se distrajo y lamió un poco del helado, cuando ella volteó para quejarse él la agarró de la cara dándole un beso. Ray correspondió algo avergonzada.

—Zack estamos afuera... —murmuró mientras se separaba, tenía un leve sonrojo en la cara.

—No me importa —Zack sonrió mientras le daba un beso a Rachel en la mejilla.

La cara de Ray aumentaba potencialmente de color cada que Zack volvía a darle un beso en la mejilla o la frente.

—Zack, nos podrían ver... —murmuró Ray con pena.

—¿Es eso o tienes pena? —preguntó mientras sonreía.

—Las dos... —murmuró ella mientras desviaba la mirada.

Zack río y abrazó a Rachel, pero de pronto comenzó a llover. La lluvia no era lo suficientemente fuerte pero aún así si se quedaban bajo ella los iba a empapar.

—Creo que si debimos de haber traído siquiera un suéter —habló Zack y Ray lo miró. —¡Hey! Yo no sabía nada, no tengo la maldita culpa.

Zack agarró a Rachel de la mano y la llevó adentro de una cajita de juegos, era la casa y tenía unas vallas que se podían abrir, donde estaba las resbaladillas. Sólo que ellos subieron por la escalera de al lado.
Rachel abrió la puerta y entraron los dos.

—¡Esto está super pequeño! —se quejó Zack mientras se agachaba por y se sentaba.

—Sí, recuerda que es para niños —Rachel también se sentó.

Ray miró por la ventana, había empezado a llover más fuerte.

—Dudo que deje de llover en un buen rato, vamos a tener que quedarnos aquí un largo tiempo.

—Lo sé.

Zack jaló a Ray del brazo y la apoyó en su pecho, abrazándola.

—Sabes que te amo —dijo mientras le daba un beso en la cabeza sacándole una sonrisa.

—Lo sé...

La verdad este no me gustó XD
Recientemente tuve una duda, a que olerá Zack? Ah
A sangre? XDD

En uno de los próximos One shots, va a narrar él UwU