•|Cita a ciegas
—¡Zack! Tengo algo que decirte —habló Rachel mientras corría hacia él.
Al llegar estaba agitada de tanto correr, apoyándose en sus rodillas tomó un respiro mientras Zack la miraba confundido.
—¿Qué sucede?
—¡Te conseguí una cita! —dijo Rachel mientras le enseñaba la foto de la chica con la cual le había conseguido la cita.
Él en ese momento hizo una cara de repulsión, colocó su mano en su boca.
—Creo que voy a vomitar... ¡quita eso de mi vista! —Ray le hizo caso.
—Dale una oportunidad, Zack —insistió Rachel —Es para que conozcas a más gente.
Zack rodó los ojos mientras fruncía el ceño, le dio la espalda a Ray mientras seguía con lo suyo. Rachel tocó el hombro de él haciendo que soltara un suspiro.
—¿Eso es lo que quieres?
—Sí.
—¡Pero que sea la última maldita vez! —volteó a verla aún con el ceño fruncido.
—Lo prometo.
Rachel ayudó a Zack a preparse, después muchos gritos de su parte y casi negarse nuevamente lo logró.
Ray odiaba admitirlo pero realmente Zack se veía bien, lastimosamente iría a conocer a una chica (a pesar de que Rachel fue la del plan en primer lugar.) Una vez le dijo la dirección, cómo llegar y casi, casi como comportarse se despidió de Zack y una vez se aseguró de que se fuera fue a sentarse al sillón.
—¿Le irá bien? —se preguntó a si misma mientras veía el perfil de la chica con la cual había mandado a Zack.
Mientras tanto con Zack llegó tarde se había distraído observando una que otra cosa que podría comprarle a Ray.
Cuando llegó al café vio que la chica estaba sentada observando a todos lados buscando a Zack.
—Hola, ¡un gusto conocerte! —saludó ella al ver que Zack se sentaba.
—Ajá —respondió él observándola, definitivamente no le gustaba para nada.
—¿Eres Zack? Te ves mucho mejor en persona —dijo ella riendo.
Si Zack tuviera que describir a la chica en dos palabras sería jodido asco. Su risa era la más ruidosa y fea que había escuchado en toda su vida.
Su sonrisa por otro lado iba mucho peor, literalmente estaba aguantando las ganas de vomitar en ese mismo momento.
—Me gustaría poder decir lo mismo —rodó los ojos.
—Claro... —dijo ella tratando de pensar en alguna otra cosa para hablar con Zack —¿Al alguien que te guste? Yo realmente no tengo a nadie... Bueno tuve una pareja hace un par de semanas pero cortamos porque él me había engañado.
—Razones no le faltaron... —murmuró Zack haciendo que la chica frunciera el ceño —Oh, claro que hay alguien... Es muy linda, sus ojos son hermosos pero ¿sabes que es lo mejor?
La mujer negó.
—Ella me pidió que la matara. —completó con una sonrisa.
—¡Eres muy gracioso! —dijo la chica riendo.
Rachel a quien la curiosidad la estaba matando, había decidido salir de casa y observar como le estaba yendo a Zack, bueno después de todo ella fue la de la idea y ella tenía que cuidarlo.
Salió con la misma ropa que tenía y se encargó de llegar lo más rápido que pudo.
—¿Debo pedirte lo mismo para que te empiece a gustar? —dijo ella aún riendo.
—No, a ti si te mataría sin dudarlo —dijo Zack seriamente.
—¡De verdad eres súper gracioso! —dijo ella casi estallando en carcajadas.
Ray quien ya había llegado al lugar se acercó un poco, tratando de que ni Zack ni esa chica la vieran.
Para su mala suerte Zack volteó a ver a su alrededor con ello viéndola a ella.
Zack le hizo señas para que fuera con él y Ray se negó porque no quería "arruinar" su cita.
—Mira, es ella —Zack sonrió mientras jalaba a Ray y la sentaba en sus piernas.
—¿Ella? —preguntó la chica con su voz chillona, si Rachel la hubiera escuchado desde un principio tampoco hubiese mandando a Zack con ella —¡Es una niña!
—¿Tú crees que eso me importa?
—¿De qué hablan Zack? —preguntó Rachel volteando a verlo.
—Sobre ti —dijo Zack mientras acariciaba su cabello —sé buena chica y no digas nada más.
Ray asintió.
—Mira, si no quieres estar conmigo no tienes que meter a tu hermanita en esto.
Zack no dijo nada, sólo tomó la cara de Rachel y la besó.
Ray confundida sin saber que hacer, aparte de estar avergonzada le siguió el beso.
—Zack... Estamos en un lugar público... —murmuró ella al separarse.
—No me importa —dijo mientras la abrazaba y veía como la otra chica se iba con un gran enojo, parecía toro.
—¿Por qué hiciste eso?
—¿Por qué veniste?
—Bueno yo... —Rachel desvío la mirada.
—Vamos ya, Tengo una mejor idea —Ray lo miró —tengamos una cita nosotros dos...
Rachel no lo notó, pero Zack estaba apenado al decir esas palabras. Ella se levantó junto a él y con una sonrisa tomó su mano.
—La primera vez que sonreiste fue perfecta —comentó Zack mientras comenzaba a caminar —si no hubiese sido por tus ojos.
—¿Ahora que tal? —dijo ella mientras sonreía.
Zack no respondió simplemente apretó más el agarre en la mano de Rachel sin llegar a lastimarla.
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