Rachel volteó a ver a sus compañeras y pensó, pudo haberlo hecho antes de que la convencieran a jugar verdad o reto pero terminó en algo peor; jugar con los sentimientos de una persona.
Suspiró si se negaba le iba peor aunque mirándolo de esa forma es mucho mejor que se volviera una marginada a que jugara con alguien que realmente no lo merecía.

—Me va a costar encontrarlo —intentó evadir el reto mientras desviaba la mirada.

—¡No te preocupes por eso! Sabemos donde se encuentra, sólo es cuestión de que hagas tu parte.

Rachel suspiró mientras asentía, se paró agarrando sus cosas y salió de ese lugar. Zack era el nombre del reto protagonista del reto, sólo que Ray no sabía realmente como debía empezar.
Salió rápidamente de ahí si lo hacía con la intención de hacer un amigo más para después dejarlo... Posiblemente no dolería tanto como suena.

Miró a lo lejos a la persona en la que estaba pensando, dudó en si acercarse o no al final optó por hacerlo.

—Hola —saludó.

Él volteó a verla mientras fruncía el ceño.

—¿Quién demonios eres tú? —preguntó.

—Rachel Gardner —respondió mientras se sentaba a su lado.

—Claro... Realmente no me importa mucho —dijo él mientras dejaba de observarla —tus ojos son un asco.

Rachel tocó sus ojos y dio un suspiro, mientras pasaba su mochila al frente de ella y la recargaba en sus piernas. Abrió una pequeña bolsa que se encontraba a un lado y sacó una paleta de esta, volvió a cerrar su mochila nuevamente, se paró y miró a Zack.

—Ten —dijo mientras le enseñaba la paleta.

—¿Huh? —él la miró —¿Te me estás declarando o algo por el estilo?

—No para nada —respondió tranquila y Zack tomó la paleta.

—Aún si lo hicieras sería imposible tomarlo en serio con esos ojos —suspiró.

Rachel se despidió mientras se iba de ahí.

Enojense lo que quieran, realmente tenía que subir algo hoy y les juro esto iba a ser más largo... (Posible continuación después ya que esta parte tan corta no tiene sentido(¿)