Las chicas

Elizabeth oye cree que fue buena idea dejar a los chicos solos

Cassidy pensando espero que estos 4 no sean tan pendejos

Charlie los 4 son muy tranquilos que es lo peor que podrían hacer

Los chicos

Evan,andrew y gregory ¡¡ SOMOS 4 PR***ITUTAS ¡¡LAS MÁS GRANDES P*UTAS DE ESTA DISCOTE ¡¡LALALALA

Sammy está en el suelo desmayado

El contraste de expectativas: Elizabeth y Charlie tienen toda la confianza, mientras Cassidy ya sospecha que algo podría salir mal, y obviamente, tenía razón.

La exageración absoluta de los chicos: Pasan de tranquilos a ser "las más grandes p*utas de la discoteca", como si estuvieran en un concurso de descontrol.

El pobre Sammy: Su estado desmayado en el suelo añade un toque visual hilarante, como si fuera la víctima del caos.

Las chicas llegando a casa
Elizabeth: Qué bien estuvo la fiesta. Espero que los chicos hayan... abre la puerta lentamente.
Charlie: con tono de confianza No pasa nada, seguro están durmiendo tranquilos.
Cassidy: susurrando Lo dudo mucho.

La escena de desastre

Jeremy y Fritz están tirados en el sofá, durmiendo en boxer, abrazando cojines como si fueran peluches.Gabriel inexplicablemente está encima del refrigerador, roncando en una posición completamente incómoda.Sammy, desmayado en el suelo con una manta medio tirada sobre él.Gregory, también en boxer, dormido boca abajo en un sillón con un vaso de agua volcado al lado.

El gran momento
Elizabeth: con cara de horror ¿Qué demonios pasó aquí?
Cassidy: viendo a Gabriel en el refrigerador ¿CÓMO llegó ahí?
Charlie: Esto... esto no es normal ni para ellos.

De repente, un ruido en una de las habitaciones.
Las chicas abren la puerta y encuentran a Evan y Andrew, en bragas, tapados hasta el cuello con cobijas, con caras de pánico.

Evan (rojo como un tomate): ¡N-Nuestro secreto!
Andrew (tapándose más con la manta): ¡Cierren la puerta, por favor!

Las chicas se miran entre sí, en completo silencio.
Cassidy: Esto es más de lo que quería saber.
Elizabeth: suspira No vuelvo a dejarlos solos.
Charlie: Sí, no vuelvo a confiar en "son tranquilos".

La escena termina con Gabriel cayéndose del refrigerador con un grito.