Dicen que un acontecimiento puede cambiar muchas cosas, a veces con buenos resultados y otros con malos resultados. ¿Qué habría pasado si...? Y las cosas salen totalmente distintas.
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En ese día, el pelirrojo llega a la academia junto con unos estudiantes, Son Kenichi había salido a buscar tesoros, se supone que era familiar de la maga del vacío Louise, pero en un malentendido y celos, ella terminó despidiéndolo, eso fue aprovechado para una pelirroja de nombre Kirche para llevarlo y conseguir tesoros, así tener dinero y conseguir una casa.
Louise estuvo buscándolo luego para arreglar las cosas, pero se entristeció al escuchar que él junto con unos estudiantes escaparon, ella se puso celosa al escuchar que Kirche también se fue y eso no le gustó para nada, porque desde el duelo que tuvo con Guiche, ella se interesó en él a pesar de que Louise se sentía más confiada debido al beso que tuvieron, más bien, sin que el otro se entere, dado que después de la misión que tuvieron en Albion y lidiaran con un traidor, pero escapó, el pelirrojo la besó mientras ella fingía dormir y después, cuando ella le permitió dormir en su cama, le robó un beso cuando Kenichi estaba profundamente dormido, por esa razón estaba esperando, hasta que en una tarde, ella vió al los estudiantes llegando con algo que ella no conocía, pero era cargado por varios dragones con cuidado.
Louise: Regresaste... - sale de su habitación para hablar con él.
Gracias profesor Colbert por pagar el transporte. – decía el pelirrojo mientras daba unas palmadas en un objeto metálico de gran tamaño.
Colbert: Apenas puedo creerlo. – respondió emocionado al ver el vehículo. - ¿Qué es?
Kenichi: Ya lo sabrá, pero antes necesito pedirle algo.
Colbert: ¿Pedirme algo? / /(El familiar de la señorita Valiere, según dijo, es de Aiur, un lugar más distante de Rub al'Khali.)
Kenichi: Verá, esto es un avión. De donde yo vengo, hay más de estas cosas volando por todas partes.
Colbert: ¿Esto es capaz de volar? ¡Maravilloso! – respondió con emoción mientras examinaba el vehículo. – Pero las alas están quietas por completo ¿Cómo operan?
Kenichi: Esto tiene propulsores. – señala la parte trasera. – En cuanto a las alas, es para que se mantenga en equilibrio en el aire. Sin embargo, necesita combustible, en este caso, gasolina.
Colbert: ¿Gasolina?
Kenichi: Sí, ahí quería llegar. ¿Se acuerda con la máquina que estaba haciendo, la cajita de serpiente?
Colbert: ¿Hablas de la serpiente feliz?
Kenichi: Claro, usted utilizó un aceite para que funcione.
Colbert: ¿Entonces necesitas ese aceite?
Kenichi: No, necesito que crea una variación, la gasolina, puedo darle las instrucciones.
Colbert: Vaya, así que hay más tipos, pues no hay problema, yo me haré cargo de eso.
Mientras que los estudiantes fueron regañados y castigados, el pelirrojo fue a la cabaña del profesor, y dejando de lado el desastre por las cosas desordenadas.
Colbert: Lamento todo el desastre.
Kenichi: No se preocupe, ya vi cosas así antes. – mira varios líquidos dentro de botellas, tubos de ensayo entre otras cosas, hasta que ve una botella, se acerca y la olfatea, sintiendo algo peculiar. – Este olor... más o menos busco de este tipo, la sustancia no debe calentarse o causaría una explosión.
Colbert: Pero si llego a duplicarlo ¿Podrá volar?
Kenichi: Siempre y cuando no tenga daños internos, por lo que me pondré a revisar.
Colbert: Te llamas Kenichi ¿No es así?
Kenichi: Sí.
Colbert: Dices que eres de Aiur, un país muy distante. ¿Hay otras cosas además de ese avión?
Kenichi: -suspirando- Seré sincero, Aiur no existe en Halkeginia, ni más allá de Rub Al'Khali. Esa nación está en otro mundo y bueno, ya sabe quién me invocó a este.
Colbert: ¿Otro mundo?
Kenichi: Sí, a decir verdad, el mundo donde vengo, hay tecnología en lugar de magia, los transportes no son carruajes, los vehículos aéreos no son barcos voladores y son grandes ciudades.
Colbert: Increíble.
Kenichi: Me sorprende de su asimilación.
Colbert: Bueno, es más que nada por tus prendas, además que tus habilidades y energía es totalmente distinta a la magia, eso es lo que realmente me sorprende.
Kenichi: Je, sí que es raro profesor Colbert, sin embargo... - extiende la mano. – Espero contar con su ayuda.
Colbert: Sólo llámame Colbert y sí, estaré en cantado en ayudarte y trabajar más en estas cosas.
Kenichi: Muchas gracias.
Colbert: Aunque también me gustaría saber más de tu mundo. – dijo con una sonrisa, sacándole una risa al Uzumaki.
Kenichi: Está bien, después le contaré más. – se retira del laboratorio, saca su dispositivo móvil y coloca algo de música mientras se ponía a examinar el caza vikingo. – Mmmm, veamos qué tanto daño recibió.
El pelirrojo procede a abrirlo y las runas se activaban empezando con la inspección.
Kenichi: Mmmm, el motor está a salvo, la batería también ¿Y el armamento? – examina las ametralladoras y la caja de misiles. – El cargador de las balas está casi lleno, pero los misiles son mínimos. El lado positivo es que el seguro sigue activado, así no tener ningún inconveniente o un desastre.
Derflinger: Eso lo compensa.
Kenichi: Sí, pero no todo es perfecto.
Derflinger: ¿A qué te refieres?
Kenichi: Si bien el caza vikingo es el principal avión de combate de mi hogar, los de la primera generación tienen un chapado ligero pero sensible, eso da una buena velocidad sin embargo, un cañón o metralla, podría causarme problemas.
Derflinger: Ya veo ¿Y eso realmente es capaz de volar?
Kenichi: Sí y te cuento que los cazas vikingos de primera generación fueron el terror del cielo, mi padre me contó que mi abuelo fue capaz de lidiar con varios. Es por eso que me encantaban, ya que incluso en las festividades, esto lo ponía más emocionante. – bajaba la tapa y ahora entra a la cabina a examinar los controles.
Derflinger: Increíble compañero, me gustaría poder verlo.
Kenichi: Con esto, la posibilidad de regresar a casa. – da una sonrisa. – La posibilidad de regresar ac asa, es alta.
Louise había llegado y escuchó la conversación, eso le causó un dolor en el corazón, ella fue la única que se quedó en medio de la charla ya que había estudiantes curiosos pero no estaban tan interesados en cosas tecnológicas.
Louise: (¿Volver a casa?) – si bien le prometió llevarlo a casa, por otra parte, - (Eso...Eso....no quiero....) – se acerca con una expresión de enojo y preocupación, hasta que ambos se miraron. - ¿QUÉ ES ESO?
Kenichi: Es un avión. – fue su única respuesta mientras hacía su examinación, era de esperarse la respuesta fría ya que fue despedido por un malentendido.
Louise: ¡Pues sal de esa cosa, avión o lo que sea! – dijo molesta y con las manos en la cintura, pero el pelirrojo no le hizo caso y seguía examinando, eso la enojó más y toma el ala del avión para sacudirlo. - ¡Te dije que bajaras del avión!
Kenichi: Aishh... está bien. – da un salto y se coloca frente a ella. – Ya estoy aquí.
Louise: ¿Qué has estado haciendo?
Kenichi: Fui con Guiche, Tabitha y Kirche a buscar tesoros. – lo dijo con relajo mientras desviaba la mirada.
Louise: ¿Y no me pediste permiso? ¿No pediste permiso a tu ama?
Kenichi: ¿Por qué lo haría? Si tú me despediste – ella sólo bajó la mirada por unos segundos, para luego encararlo nuevamente.
Louise: Mi-Mira, te daré una oportunidad de que me expliques lo que pasó.
Kenichi: Yo te quise explicar en ese momento y tú me golpeaste el estómago y apretaste mi cola. – ella sólo reconoce su error pero no dice nada. – Pero si tanto quieres explicarme, Siesta vino a darme comida, conversamos un poco y ella tropezó, pero abrió su blusa, en ese momento llegaste y creíste que estábamos en algo "raro".
Louise tenía unas ganas de darse una palmada en la cabeza, eso era lo único que pasó, pero su lado inseguro y celoso atacó nuevamente.
Louise: En-Entonces... ¿Realmente no pasó nada? – dijo con un leve sonrojo.
Kenichi: Ya te dije que no. – se rasca la cabeza. – Además ¿Por qué reaccionaste así? Quiero decir, lo que tenga con ella, no es asunto tuyo si no somos nada. – eso lastimó el corazón de la peli rosa, pero no iba a darse por vencida.
Louise: Sé que no es asunto mío, pero de una forma lo es.
Kenichi: ¿Ah sí? ¿De qué forma? – ella sólo baja la cabeza para que no viera su sonrojo y el pelirrojo sólo suspira. – Bueno, ya aclararon las cosas y acepto tus disculpas, en fin, no te culpo del todo ya que estábamos en tu cuarto.
Louise: (Pero...no es eso lo que me enojó.) / Kenichi... - lo mira pero él regresó al avión. – (Quiero solucionar las cosas peros ahora sólo se fija en el avión, la forma de que regrese a casa...pero....)
Kenichi: ¿Qué sucede? – él voltea ya que escuchó que lo llamó y ella simplemente lo abraza con fuerza. - ¿Eh?
Louise: ¡No te vuelvas a ir sin mi permiso! ¡Me preocupaste mucho, idiota! – el pelirrojo sintió una humedad en su pecho y era porque estaba llorando. - ¡Temía que algo te pasara!
Kenichi: Vale. vale, lo siento. – corresponde el abrazo aunque un poco aturdido.
Después de eso, regresó a la habitación, pero un cambio es que ella no sólo dormía con su chaqueta, sino que entre sueños, ella lo tomaba de su polo y lo sujetaba tan fuerte para que no se vaya, dándole más confusión al pelirrojo.
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Al mismo tiempo, Indra ya había llegado al mundo de Halkeginia gracias al portal de Aiur, sin embargo fue destruido después de ingresar, odiaba ser portador de malas noticias, pero lamentablemente tendría decirle a su amigo que el regreso a casa se posterga de forma indefinida. Pero eso no era lo único malo, resulta que donde apareció fue en el país de Albion o ahora llamado Reconquista después de que el ex prometido de Louise asesinara al príncipe y diera fin al linaje real, lo peor es que escuchó una conversación en donde claramente decían que querían eliminar a dos personas quien estropearon sus planes, una no la conocía, pero la descripción del otro, era de su amigo y superior.
Indra: (Mierda, estoy en territorio hostil, debo irme antes de que...) – un soldado logra verlo. – (Carajo)
¡¿Quién eres?! - Indra sólo aparece a gran velocidad y le corta con Lostvaine, sin embargo, el ruido de la armadura hace un fuerte ruido al impactar al suelo.
¡¿Quién anda ahí?! – gritó otro guardia.
Indra: (No es hora de pensar, es hora de correr.) – guarda bien las cosas que llevaba y su espada para salir corriendo. – (Tengo que escapar rápido.) – da una voltereta y sale por una ventana, esquivando un hechizo que casi iba a su espalda, el peli negro entierra su espada en la pared y se impulsa para entrar por otra, pero ya era tarde, fue descubierto y dieron un llamado a los guardias. – (Mierda... Lo siento amigo, me tomará más tiempo.)
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A la mañana siguiente, el pelirrojo seguía haciendo mantenimiento del avión, aunque era observado por Louise, quien estaba fastidiada y celosa, se levantó temprano y sólo ha estado concentrado en esto.
Louise: Desde que regresó, sólo está concentrado en esa "cosa". – aprieta su varita. – Quiero que él venga, quiero recuperar el tiempo perdido.
¿No arreglaste los problemas con él? – la peli rosa voltea y ve a una rubia con pecas.
Louise: ¿Qué quieres Montmorency?
Montmorency: Creí que ya se solucionó tu problema con él.
Louise: S-Sí, se solucionó pero... - mira al pelirrojo quien no salía de la cabina y estaba concentrado con la máquina.
Montmorency: ¿Celosa de que no te ponga atención?
Louise: ¡Ca-Cállate! Además ¿No tienes a alguien a quien golpear por mujeriego?
Montmorency: De eso me ocupo luego. – se acerca mientras mantenía la calma. - ¿Te gusta acaso?
Louise: ¿Gus-Gustar? ¡A mi no me....! – ella le tapa la boca y lo esconde ya que el pelirrojo salió de la cabina.
Kenichi: Qué raro, juraría escuchar algo. – pero nuevamente coloca su música y sigue con su inspección.
Montmorency: Eso estuvo cerca. – retira la mano de la boca de la peli rosa. - ¿Era necesario gritar?
Louise: L-Lo siento... - dijo avergonzada.
Montmorency: Ahora sé sincera. ¿Te gusta él o no?
Louise: ¡No me gusta! – respondió con enojo y un sonrojo.
Montmorency: ¿Entonces despediste a Kenichi por gusto? - ella lo mira. – Kirche y Guiche me lo contaron.
Louise: Bu-Bueno...
Montmorency: ¿Te gusta sí o no? Porque el hecho que lo despidieras fue por algo ¿Verdad?
Louise: No...él....
Montmorency: Entonces no te importará si le presento a una amiga.
Louise: ¿Qué?
Montmorency: Sí, se interesó en él desde que ganó el duelo a Guiche y quiere conocerlo y si es posible....tener algo más....
Louise: ¿Estás bromeando? Quiero decir, es un plebeyo y MI familiar.
Montmorency: ¿Y? Ella igual está interesada, sin importar que es un plebeyo y quién sabe, tal vez sean el uno para el otro y terminen siendo novios, además, lo que importa son los sentimientos – dijo con una sonrisa. – Además, no es de la familia Zerbst, por lo que no tendrás proble....
Louise: ¡No! ¡Me niego! ¡No lo aceptaré! ¡Yo sólo quiero que él me mire a mí! ¡Quiero que esa mirada y ese cariño sólo sea para mí! ¡Quiero que esté conmigo! - reclamó enojada cuando se da cuenta de lo que dijo y se tapa el rostro con un fuerte sonrojo.
Montmorency: ¿Lo ves? No era difícil. – dijo con una sonrisa irónica y burlona.
Louise: Te odio. – respondió avergonzada mientras seguía cubriéndose el rostro.
Montmorency: De nada. – seguía con su sonrisa. – Mejor sé sincera.
Louise: Bueno.... – ella vuelve a mirar al pelirrojo quien seguía con sus cosas. – No sé por qué, pero desde que regresamos de Albion, mi corazón late más rápido cuando lo veo, me sentí nerviosa cuando me mira fijamente, pero... - recuerda el momento. – Creo que fue porque él me besó.
Montmorency: Ahora entiendo por qué lo despediste y no fuiste ni a clases.
Louise: Cállate.
Montmorency: Como sea, continúa.
Louise: Estaba confundida en ese momento, pero mientras los días pasaban, quería que él pasara más tiempo conmigo, duermo con su chaqueta e incluso...
Montmorency: ¿Incluso?
Louise: Lo besé mientras está durmiendo. – se pone más roja.
Montmorency: ¿Y qué pasó?
Louise: Se sintió cálido.
Montmorency: Entonces, la razón por la que lo despediste fue....
Louise: Porque creí que él y la sirvienta estaban... - juega con sus dedos. – Y lo despedí por eso.... Me sentí mal ya que estuvo durmiendo en una tienda y quería hablar con él, pero lamentablemente salió con ellos.
Montmorency: Ah sí, la búsqueda de tesoros. – ella asiente. – Pero ya se nota que te gusta y lo más seguro es que él también, porque no te habría besado por gusto.
Louise: Pe-Pero... yo...
Montmorency: Louise, si dices que es porque eres de la nobleza, entonces estás cometiendo un grave error. – la peli rosa lo mira. – Reprimir tus sentimientos sólo lastimarás tu corazón y terminarías viéndolo feliz con otra chica como la sirvienta.
Louise: Y-Yo... no quiero eso...
Montmorency: Además ¿Y si algo le pasa? ¿O si regresa a su hogar? - Louise bajó la cabeza mientras colocaba su mano en el pecho por otro dolor inconsciente, le dolió mucho cuando se ausentó "¿Y si regresa y nunca regresa?".
Louise: N-No...no quiero...
Montmorency: ¿Lo entiendes? Si por tu orgullo no le dices lo que sientes, podrías arrepentirte por el resto de tu vida. – la peli rosa lo comprendió,
Louise: Está bien, lo entiendo, tengo que decirle, pero ¿Cómo lo hago?
Montmorency: Sé tu misma, dile lo que sientes y demuéstraselo en un momento a solas. – la peli rosa sólo asiente. – Ahora vamos antes de que nos descubra.
Esa misma tarde, el pelirrojo ha estado en la cabina, esperando y escuchando algo de música mientras que esperaba buenas noticias, cuando en eso llega el maestro con una gran cantidad de un líquido de un color raro, era el combustible siguiendo los pasos indicados por el pelirrojo, procedieron a meterlo al avión y el pelirrojo entra nuevamente a la cabina para proceder a encenderlo y para su buena suerte, los motores empezaron a funcionar, mira hacia atrás y no había ningún fallo, estaba en buen estado.
Kenichi:¡FUNCIONA! ¡SÍ FUNCIONA! – levanta los brazos de la emoción.
Colbert: Eso es fantástico. – pero se sorprende ya que el pelirrojo lo apaga. – ¿Qué sucede?
Kenichi: Está bien el combustible, pero necesitaré una buena cantidad, 5 o 6 barriles para ser exacto, apenas puede mantenerse activado.
Colbert: Vaya, es mucho, pero no hay problema, si pude hacerlo, entonces haré más para que pueda volar. – toma la poca muestra que quedó y procede a retirarse mientras que el pelirrojo daba unas palmadas al avión.
Kenichi: Perfecto, este es un gran día para celebrar.
Louise: Kenichi. – el pelirrojo voltea. – Ya vamos a cenar, así que debemos ir al comedor.
Kenichi: Louise, funciona, el avión funciona.
Un nudo en la garganta se formó en Louise, la inseguridad volvió y pregunta con voz temblorosa.
Louise: ¿Qu-Qué es lo que fun-funciona?
Kenichi: El avión, funciona, no tiene fallos, en poco tiempo podrá volar.
Louise: Y... - mordió su labio para dejar de tartamudear. - ¿Y a dónde piensas ir?
Kenichi: ¡Al este, a Rub Al'Khali! – el cabello cubría la mirada de la peli rosa, era lo que temía, el que regrese a casa y no quería eso.
Louise: Tú eres mi familiar, no puedes irte sin mi permiso y lo sabes. No quiero que te vayas... - lo último fue en voz baja.
Kenichi: Oh vamos, vale la pena intentarlo. – dijo perdido en la emoción mientras veía el avión, eso sacó de la paciencia a Louise y le jala de la cola. - ¡Ayayayayay! ¡Me duele!
Louise: Ven aquí.
Kenichi: Pero...
Louise: ¡Que vengas te digo! – sigue jalándolo de la cola.
Unos minutos pasaron y ella suelta a Kenichi en su habitación mientras que el pelirrojo se sobaba la cola.
Kenichi: ¿Era necesario que me jales de la cola?
Louise: Has estado mirando ese avión todo el tiempo, incluso si yo te hablo. – dijo enojada.
Kenichi: Pero era una gran noticia, no pude evitarlo, además, ¿Qué hacemos aquí? – ella da un profundo respiro.
Louise: Kenichi, hay algo que quiero hablar contigo, así que pon atención.
Kenichi: ¿Qué pasa? ¿Viene la princesa?
Louise: No.
Kenichi: ¿Habrá nuevo personal?
Louise: No.
Kenichi: ¿Estaré castigado por no hacerte caso?
Louise: ¡No! ¡Y deja de decir tonterías! Nada de eso es lo que quiero hablar. – el pelirrojo asiente y se calma. – Pues....verás...
Kenichi: ¿Mmmmh?
Louise: Sé que es algo descabellado pero no te burles.
Kenichi: No lo haré.
Louise: Está bien. – trata de decirlo pero le costó, por lo que da un profundo respiro y sigue las instrucciones que le dio la rubia. – Son Kenichi Uzumaki. – lo señala. - ¡Tú....!
Kenichi: ¿Yo? – la peli rosa temblaba de miedo y el rubor aparecía en las mejillas. - ¿Tienes fiebre?
Louise: No.
Kenichi: ¿Entonces qué pasa?
Louise: Tú....- muerde el labio y sólo llega a susurrar. - ...ustas...
Kenichi: ¿Eh?
Louise: Que ...e...stas...
Kenichi: No te entendí. – ella pierde la paciencia y grita.
Louise: ¡QUE SIENTO QUE ME ENAMORÉ DE TI! – gritó con fuerza mientras que sus mejillas se tornaban rojas, demasiado rojas.
Kenichi: ¿E-Eh? – decía completamente en shock.
Louise: ¡Lo que oíste! ¡Me enamoré de ti! – se acerca y lo encara, aunque la diferencia de estatura hace que lo mire hacia arriba.
Kenichi: ... E-Esto...no lo veía venir... - la mira. – Quiero decir... no creí que tú...alguien orgullosa, me diga algo como esto. Realmente es algo que no veía venir ni esperar.
Louise: ... - baja la cabeza, creyendo que la estaba rechazando.
Kenichi: Sin embargo... - ella abre los ojos y lo mira nuevamente, con una sonrisa algo tímida y un sonrojo acompañando sus mejillas. – Me hace feliz que el sentimiento sea mutuo.
Hasta ese punto ella sonrió y sus ojos se mostraron brillosos, pero el pelirrojo no lo notaba todavía.
Kenichi: Verás...tengo....tengo sentimientos por ti...pero creí que me rechazarías...y-ya sabes...por tu estatus social. – mira hacia otro lado mientras se rasca la nuca, pero abre los ojos y ella lo abraza con fuerza, pero al estar con la guardia baja, terminan cayendo en la cama. - ¿Louise?
Sentía una humedad en el pecho y nota que ella lo miraba con lágrimas y coloca sus brazos en el cuello, abrazándolo con fuerza.
Louise: Lo estás diciendo en serio, ¿Verdad? ¿No estarás mintiendo?
Kenichi: Tengo defectos como ser despistado y algo olvidadizo, pero no un mentiroso. – acaricia su mejilla y ella lo abraza con más fuerza. – Ya, ya, no llores.
Louise: ¡Cállate y abrázame! – el pelirrojo sólo ríe y la abraza.
Estuvieron así por unos minutos, hasta que se sientan y se miran a los ojos, el sonrojo estaba presente en ambos, esbozan una sonrisa.
Kenichi: ¿Estás dispuesta a estar con alguien "De baja categoría" como yo?
Louise: Sí, claro que sí. – ambos se acercan y se besan, la peli rosa abraza con fuerza su cuello y lo echa a la cama, los besos aumentaban, al punto que llegaban a chocar las lenguas, la peli rosa lo acaricia mientras seguían con la ronda de los besos, el calor empezó a aumentar y en medio de los besos, la camisa de la peli rosa se abrió un poco.
El pelirrojo nota eso y se sonrojó pero ella lo sigue besando y se coloca en su regazo mientras se sentaban temporalmente.
Louise: ¿Estás temblando? – preguntó con un toque burlesco.
Kenichi: Pues, de no ser por eso.. casi veo tus...- ella sólo sonríe y toma el listón para colocarlo en los ojos. - ¿Eh?
Louise: No te lo quites hasta que te lo diga.
Kenichi: Pero...
Louise: Seremos pareja, pero eres mi familiar, por lo que aún debes hacerme caso.
Kenichi: Aprovechando ¿Eh? – pero no se lo retiró, estuvo esperando por unos segundos mientras sentía que ella hacía algo.
//== (ALERTA DE LEMON) //==//
Louise: Ya puedes quitártelo. – el pelirrojo hace caso y se retira el listón en sus ojos y se sonroja masivamente ya que Louise tenía la camisa abierta y nada debajo, su falda también estaba, pero sentía que algo faltaba cuando se sentó en su regazo nuevamente.
Kenichi: ¿Lo-Louise?
Louise: ¿Sí? – preguntó con naturalidad.
Kenichi: N-No estás usando nada debajo de la camisa.
Louise: Sí, me lo quité
Kenichi: Pero... ¿No te pone nerviosa ni nada?
Louise: ¿Por qué? Tienes permitido mirarme, es más, sólo tú tienes permiso de hacerlo.
Kenichi: Pe-Pero no es lo mismo que al principio, recuerda que... - ella lo calla con un dedo.
Louise: Porque eras mi familiar, no me importó al principio y el por qué después me porté nerviosa, eso es porque te veía con otros ojos, pero ahora...- cruza miradas con el pelirrojo. – Ya no tengo temor y nos confesamos.
Lo besa nuevamente mientras frotaba sus muslos en el regazo del pelirrojo, esa provocación hacía que el pelirrojo se sintiera algo nervioso, Louise estaba ruborizada también ya que sentía algo duro abajo y da una sonrisa entre burlona/nerviosa.
Louise: Es-Esto está... - el sonrojo en sus mejillas se hizo más fuerte.
Kenichi: Es-Espera Louise. – ella retira un poco la falda y nota el bulto del pelirrojo, se sonrojó masivamente ya que estaba mojado, Louise extiende su mano y toca suavemente la punta, sacándole un gruñido al pelirrojo.
Louise: (Esto es...) – el pelirrojo trata de detenerla pero ella aprieta un poco, dejándolo más sensible. – Quédate quieto o será peor el castigo.
Kenichi: ¿Cas-Castigo? – decía nervioso mientras la miraba y ella apretó un poco más su miembro, haciéndolo temblar.
Louise: Te pusiste duro... - decía con descaro mientras acariciaba el órgano reproductor, sacándole algunos gruñidos y gemidos. – Fufufu, encontré un punto débil en ti, además de tu cola.
El pelirrojo había caído a la cama por lo sensible que estaba, apenas podía apoyarse de los codos y mirarla y ella estaba nerviosa.
Kenichi: Lo-Louise... N-No te presiones, si no puedes hacerlo, no te fuerces... - ella aprieta el miembro. – A-Ah...
Louise: No me desconcentres. – ella lentamente retira la ropa inferior del Uzumaki y se sonroja al ver el miembro completamente erecto, ella se intimidó un poco pero tocó la punta suavemente.
Kenichi: A-Ahh... De-Detente...- Louise estaba tan hipnotizada, no hizo caso y empezó a darle un beso la punta. – A-Ah...
Louise: Wow...está temblando. – ella se acerca más, abre la boca y empieza a succionarlo, escuchando los gemidos del pelirrojo y apriete las sábanas.
Kenichi: A-Ah... Louise... es-espera... - ella sigue estimulando miembro del pelirrojo con su boca. – A-Ah... - cierra los ojos debido a la sensibilidad que sufría.
La peli rosa ahora tomó la cola haciéndolo más vulnerable y las fuerzas del Uzumaki se iban, haciendo que suelte las sábanas.
Louise: Fufufu, estás temblando mucho. – da un beso a la punta, sacando un gruñido al pelirrojo para volver a introducirlo en su boca, su cabeza subía y bajaba cada vez más rápido, a la vez que la saliva se derramaba. – Slurp...slurp...
El rito de sube y baja de la cabeza seguía aumentando, la lengua pasaba por la punta, haciendo que poco a poco temblara.
Louise: Está palpitando. – ve al pelirrojo quien jadeaba con dificultad, por lo que ella vuelve a introducirlo en su boca.
Kenichi: A-Ahhh....Louise...espera... - a pesar de la sensibilidad, trata de detenerla pero ella aprieta la cola. – Ahh....
Louise: Nho...mhe...imgterrumphas... - fue lo que trató de decir mientras seguía, el pelirrojo sólo cerró los ojos ya que estaba llegando a su límite.
Kenichi: ¡L-Louise...yo....no puedo...más...! – cierra los ojos, aprieta las sábanas y una carga sale de su miembro, llenando la boca de Louise quien abrió los ojos por la sorpresa, pero en lugar de retirarlo, lo sigue manteniendo dentro, tragando el líquido que estaba saliendo, hasta que segundos después, de que el pelirrojo ya dejara de soltar su carga ella retira su boca y tose un poco.
Louise: Cough....Cough....cough...
Kenichi: Louise ¿Estás bien? – la toma de la mejilla y ella sólo toma su mano con tranquilidad.
Louise: S-Sí... - se limpia la boca. – Lo estoy.. – el pelirrojo le da un poco de agua. – Gracias. – toma un poco para quitarse el atoro. – Esa sensación...fue rara...
Kenichi: Te dije que no podía más y era mejor que sacaras tu boca. – habló avergonzado.
Louise: Fue extraño, pero agradable al mismo tiempo. – tomó un poco más de agua para luego mirarlo. – Aunque sigue duro.
Kenichi: Bueno, se sintió bien.
Louise: Muy bien, para igualar, tienes el privilegio de complacerme también. – dijo con un tono mandona, pero en realidad, quería que él también lo disfrutara, sólo que quería demostrar quién mandaba.
Kenichi: S-Sí. – ella ahora se va al fondo de la cama y separa un poco sus piernas. - ¿Lo-Louise?
Louise: S-Sí...lo haré... - se levanta la falda, mostrando su intimidad totalmente mojada y el líquido estaba deslizándose por sus muslos, el pelirrojo estuvo sonrojado. – N-No mires tanto...es tan....vergonzoso...
Kenichi: Tú miraste el mío y lo estimulaste sin piedad. – extiende su dedo y toca su intimidad, sacándole un tierno gemido a la peli rosa.
Louise: ¡KYA! – junta sus piernas pero el pelirrojo logra detenerla.
Kenichi: Ese gemido fue tierno. – da un beso en la intimidad de la peli rosa, escuchándose otro.
Louise: A-Ahhh....Kenichi.... – desvía su mirada al techo mientras que el pelirrojo estimulaba más su intimidad.
Kenichi: Estás mojada... - decía mientras metía dos dedos en la intimidad.
Louise: E-Eso no es cierto.. .. – decía temblando pero el pelirrojo retira sus dedos y lo coloca delante de ella.
Kenichi: ¿Y esto? – dijo con leve burla, sonrojando a la peli rosa..
Louise: Es-Espe....¡KYAAA! – toma la cabeza del pelirrojo mientras sentía sus labios en su intimidad, estimulando su vagina - A-Ahhhh...
Ahora Louise estaba completamente sensible, apenas podía acariciar la cabeza del pelirrojo mientras gemía, él no se controlaba, besaba y succionaba su intimidad.
Louise: A-Ah... - el pelirrojo seguía besando su intimidad, haciendo que ella mueva sus piernas. – Ke-Kenichi...Es-Espera... ¡KYAAA! – chilló con fuerza ya que Kenichi había besado el punto más sensible.
Kenichi aumentaba la intensidad, haciendo que ella tiemble más y se sujete al pelirrojo con fuerza, pero sentía que poco a poco estaba llegando a su límite.
Louise: Ke-Kenichi...algo viene...algo viene....- el pelirrojo sólo aumenta la intensidad y para estimulación final, introduce su lengua, haciendo que ella abra los ojos. - ¡ME VENGOOOOOOO!
Estira sus piernas con fuerza, entierra sus uñas en los hombros del pelirrojo y sus líquidos salían y empapaban el rostro del pelirrojo,
Louise estaba respirando pesadamente y sus piernas estaban temblando, mientras que el pelirrojo se acercaba a ella, ella lo mira con unos ojos tiernos, se acercan y nuevamente se besan mientras ruedan sobre la cama y él queda encima de ella.
Louise: Ke-Kenichi...
Kenichi: Louise... - la besa una vez más mientras que ella se acomoda. - ¿Eh?
Louise: Cre-Creo que eso entra donde... ya sabes... - dijo sonrojada mientras señalaba levantaba su falda nuevamente y el pelirrojo la mira. - ¿Kenichi?
Kenichi: ¿Estás segura? Si hacemos eso...no hay marcha atrás... - dijo con seriedad, Louise estaba sonrojada y con una sonrisa para luego tomarlo de las mejillas y besarlo, este beso fue muy tierno, dándole todo sentimiento.
Louise: No te preocupes Kenichi, si hago esto...es porque realmente te amo. – le dedica una tierna sonrisa. – Sé que hacer esto no habrá marcha atrás, pero estoy decidida, decidida a ser una contigo, a darte mi castidad, así que, adelante.
El pelirrojo asiente y apunta su miembro en la entrada de Louise, empuja un poco y ella muestra una expresión de dolor ya que él estaba entrando.
Louise: A-Ahh...Ah....¡Ahhh! – Kenichi miró hacia abajo ya que no podía avanzar más, había una barrera en el interior, el pelirrojo la mira con preocupación. - ¿Ke-Kenichi? – mira el rostro preocupado del pelirrojo y ella sonríe, aún así se preocupa por ella. – N-No te preocupes, adelante...estoy lista...
El pelirrojo asiente y procede a empujar, el dolor que tenía Louise era fuerte, por lo que el pelirrojo la toma de las manos y ella entrelaza los dedos con fuerza, mientras lo besa, las lágrimas salían pero aguantaba el dolor.
Hasta que la barrera se rompió, ella ahogaba los llantos con el beso que tenía con el pelirrojo y no se movió hasta que el dolor pasara, Kenichi suavemente pasa sus dedos por los ojos, retirando las lágrimas de la peli rosa, ella sólo da una sonrisa débil y mueve sus caderas. Indicando que ya podía continuar.
Kenichi procede a empujar lentamente, entrando una y otra vez en la intimidad de la peli rosa, el dolor aún estaba, pero poco a poco se iba desvaneciendo y era cambiado por placer.
Louise: (Es-Está pasando...está pasando...soy una con Kenichi...somos...uno.) - miraba hacia su vientre y nota cómo él entraba y salía de ella, la sensación era cada vez más agradable. – (Es-Estoy tan feliz....)
El movimiento de las caderas aumentaban y los gemidos y rechinidos de la cama sonaban con fuerza, menos mal la peli rosa colocó una barrera de silencio ya que no quería que nadie espiara su declaración, el tiempo que pasaba parecía eterno.
Louise: A-Ah...Ke-Kenichi...no me sueltes... - por más que estaban en la cama, ella sentía que se iba a caer si la soltaba.
Kenichi: N-No lo haré. – empuja con más fuerza mientras sentía que era apretado.
Louise: ¿Estarás...ah...conmigo?
Kenichi: S-Sí...Estaré contigo... - ella aprieta el agarre de las manos.
Louise: ¿D-De verdad...? ¿No será pasajero...? – el pelirrojo la besa.
Kenichi: Hacer esto...no es pasajero... - besa su cuello. – Te lo dije ¿No? Que también tengo sentimientos por ti y no miento en lo absoluto.. estaré contigo, aún si me pasa algo, no me separaré de ti...
Louise: Y-Yo...yo tampoco...tampoco quiero separarme de ti...quiero quedarme a tu lado... - decía con una sonrisa.
La inseguridad en ambos se fue por completo, pudieron ser sinceros en ese momento, ese muro que el pelirrojo le pareció inalcanzable, se derribó y para la peli rosa, esa torre en donde podía ver a su amado mostraba un camino para alcanzarlo, esa diferencia de clase sociales dejó de ser un problema para ambos, aunque claro, el pelirrojo no le decía lo su condición en el otro mundo, pero eso es lo de menos ahora.
Louise sentía que el pelirrojo alcanzaba su límite ya que se estaba hinchando y estaba a punto de salir, pero ella lo abraza.
Kenichi: ¿Lo-Louise? – ella lo mira con unos ojos y juraría ver por unos segundos unos corazones.
Louise: Dentro... - dijo mientras lo tomaba de las mejillas pero las piernas se enrollaban en la cintura del pelirrojo. - ¡Hazlo adentro!
El pelirrojo aumentó el ritmo y ya estaba alcanzando el límite, abraza Louise y ella corresponde el abrazo.
Kenichi: Louise...yo...
Louise: Y-Yo...también, hagámoslo juntos.
Ambos alcanzaron el clímax, Kenichi abrazaba a Louise mientras soltaba su carga mientras que ella enterraba sus uñas en la espalda a la vez que gritaba al alcanzar el orgasmo.
Las velas se habían apagado mientras que la luz de la luna iluminaba la habitación, la pareja terminaron en la cama, recuperando el aire y mirando el techo, asimilando lo que acaba de pasar, técnicamente se hicieron uno, entregaron su castidad y ahora estaban muy, pero muy sonrojados, para luego mirarse.
//== Fin del Lemon /==//
Louise: Lo hicimos... - el pelirrojo sólo asiente. – Realmente tú y yo nos hicimos uno ¿Verdad?
Kenichi: S-Sí... el ardor en mi espalda me da a entender que no es un sueño.
Louise: Déjame ver... - el pelirrojo niega con una sonrisa.
Kenichi: Déjalo así, total, se me pasará dentro de poco. – ella lo toma de la mano.
Louise: Esto nos hace más que un familiar y ama.
Kenichi: Je, es verdad. – ella lo toma de la mano.
Louise: Me siento feliz, más que el hecho de que tú y yo...ya sabes...Es porque pude dejar mi orgullo de lado y pude decirte mis sentimientos. – juega con su dedo en el pecho del pelirrojo.
Kenichi: Por un lado, me hace feliz que ambos podamos decir lo que siento. – se acerca y se dan un beso. – Tengo algo para ti.
Louise: ¿Qué es? – ve que el pelirrojo toma algo de su maletín.
Kenichi: Durante la búsqueda de tesoros, varias cosas resultaron ser unas baratijas, pero, pude encontrar algo bueno. – vuelve a la cama y toma la mano de la peli rosa. -. Este anillo con un rubí es para ti.
Louise: Ke-Kenichi... - decía roja mientras el pelirrojo colocaba el anillo en su dedo.
Kenichi: No es mucho, pero es una muestra de cariño. – se rasca la cabeza. – Espero que te guste.. – mira a otro lado sonrojado.
Louise: M-Me gusta... - el pelirrojo la mira. – Atesoraré cada regalo que me des. – le dedica una sonrisa.
Kenichi: Louise...
Louise: Ven aquí. – envuelve sus brazos en el cuello y lo besa, el beso fue tan profundo, cargado de sentimientos y con intercambio de lenguas, hasta que se separan por falta de aire. – Te amo.
Kenichi: Igualmente Louise. – se besan nuevamente hasta que escuchan el estómago del pelirrojo rugir con fuerza, avergonzándolo. – No me arrepiento el saltarme la cena.
Louise: Podemos pedir, total, tienes el respeto de ellos, además, tengo hambre también. – dijo ruborizada.
Kenichi: Je, entonces... Espera ¿Puedes caminar? – ella asiente y se levanta, aunque estaba temblando.
Louise: Estaré bien. – sentía su vientre caliente y lo acaricia. – Sí que me has llenado.
Kenichi: L-Lo siento. – ella sólo lo besa y le dedica una sonrisa.
Louise: No me molesta, más bien, me hace feliz. – acaricia su vientre nuevamente. - ¿Podrías pasarme mi ropa por favor? – el pelirrojo asiente y proceden a salir.
//==//==//
El peli negro estaba siendo perseguido por los guardias del lugar y la cosa empeoró ya que llamaron a más y más soldados para interceptarlo.
Indra: ¡Mierda, no se cansan! – corre a gran velocidad mientras que una ráfaga de fuego lo estaba siguiendo, él simplemente voltea. - ¡FULLCOUNTER!
El ataque es redirigido y con más potencia, mandando a volar a los magos atacantes, sin embargo, llegaban más soldados.
Indra: ¿Y ahora?
Mejor ríndete y entrégate, no podrás detener a todos. – decía un sujeto con una máscara mientras le apuntaba con su estoque.
Indra: ¿Y si mejor te largas? No tengo tiempo para lidiar con idiotas. – le apunta con la espada.
Ya sabes mucho, espía de Tristain o no, no dejaremos que te lleves con esa información. – su voz era siniestra.
Indra: Pues no dejaré que te salgas con la tuya y atentes contra ellos. – esquiva un rayo del enmascarado y se lanza al ataque.
Para su sorpresa, el enmascarado era más ágil de lo que aparentaba, incluso usaba vuelo, para mantenerse alejado de los cortes.
Eres ágil, igual de ágil que ese familiar pelirrojo molesto. – el peli negro afila la mirada.
Indra: ¿Conoces a ese molesto familiar pelirrojo?
Él fue el responsable de que casi me destroce el brazo, pero creo que tú podrías hacerte cargo, tu habilidad está a ese nivel. – el peli negro da volteretas, esquivando flechas de viento que iban a sus piernas, para luego impulsarse en una pared y dar un salto, por poco logra cortarlo, pero la agilidad del enmascarado también era buena.
El peli negro nuevamente aterriza y esquiva los ataques y en una oportunidad, logra posicionarse al lado del mago y perfora su abdomen, haciéndolo vomitar sangre, además de caer con fuerza al suelo. Sin embargo y para su sorpresa, el enmascarado ni sintió miedo ya que desapareció en partículas de luz.
Indra: ¿Qué rayos? – pero no pudo reaccionar ya que le cayó un rayo por la espalda. - ¡AHHHHHHHHHHHHHHH!
Indra trata de mantenerse en pie y voltea para ver al mismo enmascarado sin heridas ni nada, usa la oscuridad para cerrar la herida de su espalda pero antes de atacar, unas manos gruesas de tierra lo atrapan inmovilizándolo por completo.
Indra: ¡Mierda! – trata de soltarse pero le cae una esfera de agua y lo electrifican nuevamente. - ¡AHHHHHHHHHHHHHHHH!
La potencia del rayo no fue tan fuerte como la anterior, ya que querían dejarlo con vida debido a que vieron su habilidad, matando cerca de 50 y dejando heridos a 100.
El enmascarado se retira, resultando ser un caballero con el cabello plateado, barba y una mirada soberbia.
Sí que fue capaz de matar con facilidad a una de tus copias. – dijo una mujer peli verde mientras se acercaba. – Pero me sorprende que lo quisieras con vida, Wardes.
En efecto, Wardes era el ex prometido de Louise, alguien que se ganó el cariño de la familia Valiere y tuvo el permiso de tomar su mano, sin embargo, durante la misión Kenichi y Louise tuvieron meses atrás en Albion, en el que tenían que recibir una carta comprometedora que podría poner en riesgo la alianza de Tristain y Germania y esa carta la tenía el príncipe Wales el último heredero de Albion y amor secreto de la reina Henrietta, desgraciadamente, Wardes resultó ser un traidor y parte de un grupo extremista llamada Reconquista, defraudando a Louise ya que a pesar de que no lo amaba, lo admiraba por ser el líder del escuadrón de grifos a una joven edad.
Indra trataba de liberarse, pero el daño en su cuerpo y el hecho de que su cuerpo fuera atrapado por las manos de tierra, le complicaba el asunto, además que preferiría no usar todo el arsenal.
Wardes: Como sea, este espía tiene habilidades muy interesantes. – Indra sólo lo mira de mala manera. – Y podría ser la manera para eliminar a ese familiar molesto.
Sí que te lo tomaste muy personal ¿Verdad? – dijo con un poco de burla.
Wardes: Ese bastardo portador de Gandalfr, me cortó el brazo y me humilló, no sólo eso, sino se llevó a mi prometida, quien pudo ser el mayor arma para nuestros planes, Fouquet, es por eso que es personal.
Fouquet: Pues sí, ese mocoso pelirrojo con puntas negras es una verdadera molestia, pero ten cuidado con sus habilidades. – decía desinteresada pero nota la sorpresa de Indra. -Oh vaya, tal parece que nuestro invitado lo conoce.
Wardes: ¿Acaso eres su amigo? – el peli negro simplemente le lanza un escupitajo.
Indra: Jódete.
Wardes: Tomaré eso como un sí, será emocionante ver cómo él muere a manos de su mejor amigo.
Indra: Como si obedeciera a tus malditas órdenes.
Wardes: No te dije por favor. – con su estoque, genera un rayo de luz, perforando el pecho del peli negro, haciéndolo escupir sangre.
Indra: Bluarg....maldito....cobarde....
Wardes: Eres igual de molesto que él, pero será divertido ver cómo se derrumba al ver que un amigo suyo es quien le arrebatará la vida. – gira su cabeza. – Todo tuyo Cromwell.
Cromwell: Gracias Wardes. – muestra un anillo y comienza a brillar para hacer que Indra lo mire y sus ojos se apagan mientras que era liberado. – Levántate caballero y sirve a tu nuevo rey.
Indra simplemente inclina su cabeza y el obispo sonríe, Wardes sólo reía ya que sería un espectáculo impresionante según él.
Cromwell: ¿Cómo van los preparativos?
Wardes: Siguen en proceso, terminarán en una semana.
Cromwell: De acuerdo, por el momento, trae a algunos esclavos, quiero ver qué tan hábil es este chico. – el peli plata asiente mientras que Indra sólo seguía al obispo en silencio.
//==//==//==//
En la mañana siguiente, ambos estaban en clase, pese a que el pelirrojo no tenía otra cosa, el avión estaba en buen estado y Louise quería pasar más tiempo con él, aunque fueron el centro de atención ya que la peli rosa colocaba su cabeza en el hombro del pelirrojo y se relajaba.
Al terminas las primeras clases, ella no se despegaba y el pelirrojo se rascaba la mejilla.
Kenichi: Creí que teníamos que estar en privado.
Louise: No, es para que sepan que eres mío y de nadie más. – decía con una mirada seria.
Kenichi: Pero...
Louise: No, dijiste que sólo me mirarías a mí. – lo lleva a una zona apartada del patio y esperaban su pastelito y té.
Kenichi: ¿Y qué tal con esa oración que tienes que hacer?
Louise: Ah.... -suspira. - Es más difícil de lo que pensé, entiendo que es mi amiga de la infancia y todo, pero ¿Tener que hacer esto para su boda?
Kenichi: Y forzada, no lo olvides. – no ocultaba su desagrado, odiaba ese tipo de matrimonio, ya que sólo era para beneficio de otros. - ¿Qué tal si te doy un consejo?
Louise: Me gustaría, pero por el momento veré si puedo tener una idea ya que tengo que mencionar a los cuatro elementos que conforman la magia, fuego, viento, tierra y agua.
Kenichi: (Aún me parece raro que sea magia pentagonal cuando sólo tienen conocimiento de cuatro.) – ella lo mira con una sonrisa. - ¿Mmm? ¿Pasa algo?
Louise: Tranquilo, sólo es que me hace feliz que esto no sea ningún sueño. – decía feliz mientras miraba el anillo con el rubí.
Kenichi: ¿Sigues creyendo que es un sueño? – ella asiente.
Louise: Porque, algo así no suele pasar, una relación entre un amo – familiar, noble y plebeyo.
Kenichi: Es extraño, pero en parte es sincero. – decía con una suave sonrisa. – Aunque preocupa el hecho de que... ya sabes.
Louise: Que ellos digan lo que quieran, yo decido a mi pareja.
Kenichi: ¿Y tus padres? – ella se puso un poco nerviosa, notándose cuando toma la taza y empezaba a temblar.
Louise: Sé que se pondrían furiosos, sobre todo lo que.... – da un profundo respiro para calmarse. – Pero no permitiré que me separen de ti.
Hola chicos. – ambos voltean y ven a Montmorency. – ¿Podemos comer con ustedes?
Louise: Seguro, además es gracias a ti por lo que ... - toma la mano del pelirrojo.
Montmorency: ¿En serio lo hiciste? – ella asiente.
Louise: Fue gracias a tu consejo. – ella sonríe.
Montmorency: De nada. Y tú, más te vale que la valores como se debe, porque es raro este tipo de relación.
Kenichi: Lo sé, pero descuida, mis sentimientos por ellas son auténticos y no soy alguien de promesas vacías. – ella asiente.
Montmorency: Aunque creí que querías mantenerlo oculto.
Louise: ¿Para qué? No me importó que me digan la Zero antes, no me importa que me digan ahora por estar con él. – respondió inflando su pecho,.
Montmorency: El lado positivo, es que tú no eres un mujeriego.
Kenichi: Jejeje. – se rasca la nuca. – Tranquila, Guiche te quiere, aunque bueno, a su manera.
Montmorency: Bu-Bueno... - juega con sus rulos.
Kenichi: Descuida, Louise y yo nos armamos de valor y formalizamos nuestra relación, tú también puedes profundizar tu relación con él.
Montmorency: Gracias. – dijo con honestidad.
Después de las clases, la pareja terminaron de comer temprano y fueron a la habitación, el pelirrojo estaba sentado mientras que Louise estaba en su regazo, apenas usaba la chaqueta del pelirrojo y su ropa interior, le era más cómodo usar su ropa.
Kenichi: El fuego, representa la destrucción, la devastación, el fin, pero al mismo tiempo, representa el inicio, esas cenizas se levantarán cual ave Fénix. – ella anota en su cuaderno.
Louise: No sabía que eres bueno en esto. – dijo con un puchero.
Kenichi: En realidad no, sólo me encargo de improvisar. – decía mientras seguía dándole masajes.
Louise: El agua...a veces violento y a veces calmado. – el pelirrojo da un asentimiento. – Arrasa pero al mismo tiempo alimenta a los seres vivos.
Kenichi: En efecto, en mareas altas o una inundación, es capaz de arrasar, pero si anda tranquila, alimenta a los animales y a las plantas. – Louise asiente y sigue anotando. – El viento, majestuoso y devastador, nos despeja el camino y mientras más fuerte, más peligroso.
Louise: Bueno, ya falta poco, la tierra... - golpea su mentón suavemente con su dedo índice. - Firme y fértil, nos permite hacer hogares, cultivos, además de formar hermosos paisajes.
Kenichi: No está mal, mira la ventana y ella apoya su cabeza en el pecho.
Louise: Hacer esto es más estresante de lo que yo pensaba, pero gracias a ti puedo estar avanzando sin preocuparme tanto. – juega con sus mejillas. – Si no te hubieras ido a buscar tesoros habría estado más tranquila, baka.
Kenichi: Ya sabes por qué pasó eso. – ella hace un puchero. – Pero alégrate, te conseguí algo.
Louise: Sí, un hermoso regalo. – mira el anillo. – Y también te tengo a ti, mi familiar y novio.
Kenichi: Me estás sonrojando. – decía mientras se rascaba la mejilla y ella sonríe.
Louise: Bueno, ya que estoy de ánimos por ayudarme con esto, te mimaré un poco, sé agradecido con tu ama. – se pone a un lado y da unas palmadas en el regazo. – Pon tu cabeza aquí
El pelirrojo se acuesta y su cabeza termina en el regazo de la peli rosa quien empezó a darle algunas caricias, ella fácilmente notaba cómo le gustaba ya que la cola se movía, eso le causó un poco de gracia pero seguía acariciándolo y jugando con sus mejillas.
Louise empezó a tararear como su hermana lo hacía cuando ella era pequeña, haciendo que Kenichi tenga un sentimiento nostálgico, recordando cuando su madre le cantaba antes de dormir, haciendo que le salga una lágrima, cosa que fue notada por la peli rosa.
Louise: ¿Kenichi? – el pelirrojo reacciona y nota cómo la lágrima pasaba por su mejilla. - ¿Qu-Qué pasó?
Kenichi: N-No... no pasa nada. – ella lo toma de las mejillas, haciendo que lo mire a los ojos.
Louise: ¿Qué es lo que pasa?
Kenichi: Pu-Pues.... Cuando tarareaste, sentí nostalgia. – otra lágrima estaba saliendo. – Cuando mamá me cantaba esa canción cuando era pequeño.
Louise: Oh... - baja la cabeza apenada. – L-Lo siento...supongo que la extrañas y ....yo....
Kenichi: Louise... no te sientas mal. – acaricia su mejilla. – Ya pasó, no debes lamentarte por eso.
Louise: Pero...sé que debes extrañarla, a tus padres y a tus hermanos.
Kenichi: ¿Cómo lo sabes?
Louise: Ve-Verás.... Fingí dormir en una mañana cuando tú llegaste de entrenar y mencionaste a tus hermanas.
Kenichi: Oh... así que finges dormir ¿Eh? – ella se avergüenza.
Louise: Bu-Bueno... - juega con sus dedos. – Fue antes de nuestra misión a Albion.
Kenichi: Ahh... entiendo.
Louise: Por eso me sentía triste, que si te vas, tal vez no vuelvas...Por eso quise confesar mis sentimientos, me habría lamentado si negaba mis sentimientos por ti... - dijo con tristeza.
Kenichi: Pero te armaste de valor. – toma su mano. – Eso es lo que me sorprendió y los sentimientos fueron correspondidos.
Louise: Pero...cuando llegue el momento... no quiero que te vayas...quiero que estés conmigo... pero....
Kenichi: ¿Tú quieres venir conmigo?
Louise: Yo quiero...quiero estar contigo...donde sea....
Kenichi: Pero ten en cuenta de la condición que tienes.
Louise: Lo sé. Pero....no me importa...si estoy contigo...estaré bien...no importa si mis padres no lo comprenden.
Kenichi: Louise...
Louise: En toda mi niñez, sólo hubo alguien quien creyó en mí, alguien quien me apoyó mientras que los demás me menospreciaban y me tachaban de inútil, sin talento, cero magia..... – tiembla un poco. – Incluso Wardes, sólo quería aprovecharse...pero igual debió pensar eso...que no tengo nada....
Kenichi: Louise. – se sienta y la mira. – No eres ninguna inútil, todos tenemos momentos de frustración, incluso yo tuve ese problema. Mis hermanos tienen talento para algo y yo tuve que esforzarme, Shun es experto con su precisión y aprende rápidamente su estilo, Enju puede aprender varios libros de golpe y es experta en artes místicas y yo tuve que esforzarme, me sentí inferior ante ellos.
Louise: ¿Tú también?
Kenichi: Puede que no me traten de inferior ni inútil, pero no iba a quedarme de brazos cruzados yo me esmeré para demostrar que yo también puedo, y tú estás haciendo lo mismo. No importa si la mayoría te dice que no lo lograrás, tú estás determinada a mejorar y eso es lo que me gusta de ti, esa fuerza de voluntad.
Louise: Kenichi.... – lo abraza mientras las lágrimas le salían. – Te prometo que seré una gran maga, digna de un guerrero fuerte como tú.
Kenichi: Esa determinación y ese carácter es suficiente para mí, Louise.
Louise: Yo quiero hacerlo, tú demostraste ser alguien fuerte y yo quiero fortalecerme también, eres mi familiar y sé que debes protegerme, pero no pienso quedarme atrás. -el pelirrojo sonríe y la besa.
Kenichi: Sé que lo harás, serás una gran mujer. – ella sonríe y lo besa.
Louise: Te amo. – lo empuja y lo besa.
Kenichi: Y yo a ti. – ella sonríe y baja un poco el cierre de la chaqueta, mostrando su piel desnuda.
Louise: Oh... creo que alguien está travieso ahora. – dijo con una sonrisa burlona mientras sentía algo debajo de ella. – Eres un familiar travieso
Kenichi: E-etto... - ella mueve sus caderas, provocando una fricción.
Louise: Eres un travieso y yo como tu ama, me encargaré de darte un "castigo". – lo besa mientras proceden a tener su momento privado.
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Los demás días pasaron con tranquilidad, Louise no ocultaba nada y se mantenía pegado a su novio Uzumaki, además que empezó con un entrenamiento distinto, además que pidieron ropa elegante para el evento de la boda, la peli rosa entendía el disgusto del pelirrojo por las bodas forzadas, pero tenía que ir en silencio.
Kenichi: Le doy gracias a Guiche que me diera un traje elegante y mejor que no tenga un cuello tan raro. – decía aliviado mientras se retira la camisa y volvía a ponerse la ropa.
Louise: Te queda bien. – le dedica una sonrisa.
Kenichi: Bueno, al menos ya tengo ropa elegante para el evento. – da un suspiro de alivio.
Louise: Entiendo que no te guste, pero no hay de otra, como familiar, debes estar presente.
Kenichi: Ni modo. – levanta los brazos.
Ambos se retiran de la habitación y proceden a dar una vuelta por el patio, debido a que la boda era próxima, las clases se suspendieron, por lo que tenían más tiempo para disfrutar.
Kenichi: Algo de vacaciones, eso es bueno. – ella lo mira.
Louise: Sabes que apenas son unos días.
Kenichi: Con eso me siento agradecido, además que pasaremos algo de tiempo juntos ¿No? – ella asiente, el pelirrojo mira por unos segundos el avión. - ¿Qué te parece si damos un paseo cuando logre llenarlo?
Louise: ¿Estás seguro? – el pelirrojo asiente.
Kenichi: Así tendrás algo de experiencia con un vehículo de mi mundo.
Louise: Sí, aunque tengo entendido que este es uno del ejército de tu hogar ¿Verdad?
Kenichi: Sí, pero también hay aviones para hacer viajes. – en eso notan a alguien llegar con mucha prisa. - ¿Eh?
Disculpen ¿Dónde queda la oficina del director? – Louise le señala la dirección. – Gracias. – sale corriendo a toda velocidad.
Kenichi: Tengo un mal presentimiento. – Louise se lo lleva a la dirección, ella también tenía eso.
Se acercaron con sigilo a la puerta, escuchando lo que el mensajero le decía a Osmond, pero abrieron los ojos cuando mencionó lo siguiente.
"¡Reconquista ha atacado! ¡Su flota está invadiendo Tarbes!" – Louise estaba impactada, pero Kenichi tenía una mirada temblorosa, mezclada con ira, por lo que sale corriendo y ella lo sigue.
El Uzumaki dio un gran salto, aterrizando y llegando a la nave, abre la compuerta y estaba a punto de encenderla.
Kenichi: ¡Mierda, el combustible!
Derflinger: ¿Qué pasa compañero?
Kenichi: Reconquista está atacando el pueblo de mi amiga.
Derflinger: ¿Y qué esperas?
Kenichi: Me olvidé el combustible. – sale de la cabina pero nota que Louise llega.
Louise: ¿Qué pasa? Te moviste demasiado rápido.
Kenichi: Louise, esa villa es de Siesta ¡Está en peligro! – decía preocupado.
Louise: ¿Tarbes es donde vive ella? – el pelirrojo y trata de irse pero ella lo detiene. - ¡Espera!
Kenichi: ¿Qué pasa?
Louise: ¿Piensas ir?
Kenichi: ¿Tú que crees?
Louise: ¡ES UNA LOCURA! ¿Acaso quieres que te maten? – gritó preocupada. - ¡No importa la diferencia con tu avión de combate! ¡La diferencia es de treinta contra uno!
Kenichi: Pues ese uno será suficiente. – iba a avanzar pero Louise lo detiene una vez más. - ¿Qué?
Louise: No...no quiero que vayas...
Kenichi: ¿Por qué?
Louise: ¡PORQUE TUVE UNA PESADILLA, CREÍ QUE PERDÍA POR HACER ALGO ASÍ! – aprieta el agarre. – ¡Creí que te perdí...!
Kenichi: (Con razón estaba más pegada a mí) – él la abraza. – Estaré bien, pero no puedo quedarme de brazos cruzados.
Louise: Entonces voy contigo.
Kenichi: No lo harás.
Louise: ¡Soy tu ama, así que sí iré! – el pelirrojo iba a protestar pero sabía que ella no iba a dar marcha atrás.
Kenichi: Está bien. – da un suspiro. – Pero tengo que recargar el combustible.
El pelirrojo rápidamente le explica la situación y el profesor entendió, proceden a llenar el tanque aunque para extrañeza, Louise no estaba.
Kenichi: (¿Dónde está Louise?)
Colbert: Ya está. – el pelirrojo asiente y asegura el tanque para proceder a encenderla, el motor sonaba a su máximo poder, el pelirrojo toma la palanca, cierra los ojos por unos segundos y mira al profesor.
Kenichi: Bien, es hora.
Colbert: Buena suerte Kenichi y por favor, regresa, regresa por lo que más quieras. – el pelirrojo asiente y procede a despegar, menos mal había un área plana de gran distancia, aunque sólo requería 100 metros.
//==//==//==//
Tarbes, un pueblo hermoso que Kenichi conoció, un hermoso campo de flores que le daba un hermoso paisaje, Siesta le enseñó ese lugar cuando consiguieron la "coraza dragón" o el Caza Vikingo., el pelirrojo le encantó el lugar ya que era pacífico. Ahora sólo eran ruinas y llamas, Siesta, su familia y la gente del pueblo evacuaron y se ocultaron en el bosque mientras veía a un gran barco llegar y disparar cañonazos a todas direcciones.
Gran parte de la armada de Tristain estaban llegando con Henrietta a la cabeza, aunque la tendrían difícil ya que según sabían, el barco era el mayor orgullo de Albion y cuando Reconquista lo tomó, el bando del fallecido príncipe Wales terminó en una gran desventaja. Este barco fue el principal responsable de arrasar el pueblo y estaba escoltado por los dragones.
El caza vikingo ya estaba llegando y Kenichi estaba viendo con horror los daños en el lugar, las flores que una vez le encantó, fueron erradicadas, las casas ardían en llamas.
Tsk...Grr..... – la palanca se dañó ya que el pelirrojo apretó su mano, el otro puño estaba rojo y sus labios salían sangre debido a la rabia, recordando lo siguiente.
"Siesta: Es hermoso ¿No lo crees? Esto es lo que yo quería mostrarte de todo corazón."
Kenichi apretó los puños y sus ojos se tornaron verdes y su cabello se levantó levemente para luego mirar a los jinetes dragón quienes seguían incendiando el lugar, dañando más el lugar.
Kenichi:...Los mataré.... – afiló la mirada mientras desactivaba el seguro.
Los jinetes dragón notan algo aproximarse, "¿Un dragón?" esa era la pregunta.
¿Qué puede hacer un dragón raro? – dijo uno de los jinetes, cuando escucharon unos ruidos extraños y uno de los dragones es perforado con violencia y el "dragón" pasa al lado del jinete muerto.
¿Pero qué? – gira pero el "dragón" se eleva mientras perforaba el abdomen del dragón con una ráfaga, haciendo que caiga muerto.
Otros jinetes hicieron que sus dragones preparen sus ataques pero la mayoría recibieron balas antes de hacer su movimiento, peor para un dragón que recibió balas en el hocico, reventando su cabeza, Henrietta y su ejército estaban a la distancia vieron eso y los soldados vitorearon de que llegara un dragón a ayudarlos.
Por otro lado Siesta y su familia conocían bien ese "dragón", aquel que su abuelo usó para llegar a su hogar, ahora estaba en los cielos una vez más, poéticamente habría sido un milagro de que fuera a hacer eso, pero Siesta lo sabía y llevó su mano a su corazón.
Siesta: Kenichi-san, por favor cuídese.
Con el pelirrojo, él estaba observando a sus enemigos nuevamente y evaluando su próximo ataque, hasta que escucha una voz.
Increíble, en unos segundos lograste neutralizar a cinco jinetes dragón. – el pelirrojo se sobresalta ya que no esperaba a Louise en la cabina.
Kenichi: ¿Eh? ¿Qué haces aquí Louise?
Louise: He estado aquí mientras cargabas el combustible. – dijo con los brazos cruzados. - ¿Creíste que podrías hacer esto solo? ¡Eres mi familiar! ¡Tú y yo actuamos como uno solo!
Kenichi: Es-Está bien. – ella da un asentimiento.
Louise: Ahora, terminemos con esto, - el pelirrojo asiente y mueve la palanca para lanzarse al ataque. – (Por favor, princesa, fundador, protégenos en este duro momento.) – junta sus manos y cierra los ojos mientras que el pelirrojo por fin encontró un punto de ataque.
Kenichi: Bien, aquí voy, sujétate Louise. – baja la palanca y el avión se lanza al ataque, varios jinetes trataron de hacer una ofensiva en conjunto, sin embargo, gran parte de las llamaradas fueron interrumpidas por las balas, generando explosiones.
Wardes, observándolo todo desde el puente del barco, aprieta su puño ya que sabía quién sería capaz de hacer algo así, además que pudo divisarlo por unos segundos.
Wardes: Ese maldito de Gandalfr. – gruñe con ira. – Juro que acabaré con tu existencia, aunque sea la última cosa que haga.
Kenichi con su experiencia como piloto más el conocimiento que le daban las runas, avanzaba a gran velocidad y eliminaba a los jinetes dragón que quedaban, para luego dirigir su avión hacia el barco grande Lexington.
¡PREPAREN LOS CAÑONES! - múltiples cañones apuntaban al avión y empezaron a disparar, múltiples sonidos se escuchaban y Siesta, que estaba a una distancia segura, llevó una mano a su corazón por el miedo y preocupación al ver eso.
Pero Kenichi, hacía maniobras peligrosas esquivando cada bala de cañón que iba hacia él, ya sea haciendo un ocho, un círculo o girando el avión, aunque claro Louise se aferraba a él para no golpearse por los movimientos bruscos.
Louise: ¡KYAAAAAA! – abraza al pelirrojo.
Kenichi: Lo siento, pero no tengo de otra. – mira el barco y da un chasquido. – Carajo, tiene cañones hasta en la cola, flanquearlo será difícil.
El pelirrojo rodea el barco y presiona el botón, lanzando una ráfaga de balas, varios soldados resultaron heridos de gravedad ya que incluso las balas generaron chispas y prendieron la pólvora para los cañones.
Derflinger: Perfecto, dejaste un punto ciego.
Kenichi: Perfecto. – sale de ahí, evitando varias balas de cañón, sin embargo, una llegó a rozar cerca de la cabina. – Carajo,
Derflinger: ¿Es grave?
Kenichi: Casi le da a lo vital. – mira el daño que estaba cerca del ala. – Un tiro más o un impacto y estamos jodidos.
Derflinger: Ahora entiendo tu queja con el chapado.
Kenichi: Pues sí, es rápido, pero demasiado débil. – usa tácticas evasivas una vez más, esquivando otra andanada de balas de cañón.
Louise: (¿Qué podemos hacer?) – pensó con preocupación mientras que el pelirrojo se enfocaba con el vuelo y los problemas no terminaban, quería lanzar el único misil disponible, sin embargo, el daño que recibió en el avión, era más de lo que pensó, ya que el misil no salió.
Kenichi: ¡Carajo! ¡Se dañó el mecanismo! – usa las balas pero notaba que el cargador estaba agotándose, por lo que da un movimiento circular, evitando más cañones.
Louise miró el libro por unos segundos, tenía el rubí de fuego que le dio Henrietta al lado del libro de oraciones del fundador. Hasta que nota que el rubí comenzaba a brillar, al igual que la página del libro y notó unas runas, algo que ella podía entender con claridad y era cánticos para algo.
Louise: Ta-Tal vez eso ayude... - se dirige al frente incomodando al pelirrojo.
Kenichi: ¿Qué haces Louise?
Louise: Da media vuelta y entra por ese punto ciego que hiciste, tengo una idea.
Kenichi: No sé qué tienes en mente, pero lo haré. – da media vuelta y se preparaba para la ofensiva, aunque esquivó una espada de viento a gran velocidad. – Genial, esto se pone más molesto.
El traidor estaba en un dragón distinto, era más ágil, junto con un encapuchado.
Wardes: ¡Nos volvemos a ver Gandalfr! ¡Y será la última vez! – arroja varias flechas de viento, pero el pelirrojo logra pasar sobre ellos sin daño alguno.
El pelirrojo abre la ventana, recibiendo el fuerte viento, pero con el cinturón pudo sujetarse Louise se aferró a él mientras preparaba su varita, estuvieron sobrevolando el barco, esquivando los cañonazos y ataques de viento del traidor, pero logra alejarlo con una esfera explosiva, cortesía del pelirrojo mientras que Louise estaba haciendo el cántico, el pelirrojo no sabía qué era exactamente, pero como familiar, sabe exactamente su rol y ganará suficiente tiempo para poder hacerlo con éxito.
Los segundos pasaron y Louise terminó, apuntó con su varita al barco mientras que Kenichi se iba en picada al punto ciego, sólo tenía una oportunidad y tenían que hacerlo bien.
Louise: ¡EXPLOSION! – un brillo generó en la cubierta del braco mientras que el avión pasaba por debajo, saliendo del radio justo a tiempo, porque ese brillo pequeño, empezó a expandirse y generar un estruendo en todo el barco, los soldados trataron de salir de ahí, pero fueron succionados por el ataque devastador y el barco empezó a arder a la vez que parte de eso era destruido.
La esfera brillante cubrió todo el barco por unos segundos hasta que se desvaneció y el barco estaba cayendo y ardiendo en llamas, Kenichi no sentía más que satisfacción ya que recibieron lo que merecían, atrapa a Louise quien estaba agotada pero tenía una sonrisa.
Louise: ¿Lo logramos?
Kenichi: Sí. Lo logramos. – pero su sonrisa se borraría ya que algo fuerte impacta contra el avión, era el encapuchado quien enterró su espada en parte del avión, haciendo que empiece a salir llamas. - ¡Mierda!
El encapuchado salta del avión y regresa al dragón de Wardes quien era uno de los pocos que salió del radio de la explosión, Kenichi trató de mantenerlo estable pero el daño era grave y estaban cayendo.
Kenichi: Maldición, está fuera de control.
Louise: ¿Qué hacemos?
Kenichi: Saltar es arriesgado. ¡Sujétate de mí! ¡Haré una aterrizaje forzoso! – ella lo abraza con las fuerzas que le quedaban mientras que el pelirrojo sujetaba la palanca y trataba de mantener el avión estable mientras caían, la distancia era larga por lo que un mago no podía usar levitación para ayudarlos.
Henrietta y algunos soldados estaban preocupados por eso ya que ellos fueron quienes ayudaron y estaban cayendo, lo mismo Siesta y la gente que conocía de ese "dragón". Y lo inevitable pasó, el avión cayó con brusquedad, dañando el suelo y estropeando el chapado, afortunadamente, Kenichi se las arregló para que no saliera lastimado ni él ni Louise.
Kenichi: ¿Te encuentras bien? – ella asiente. – Sal y reúnete con Henrietta, Wardes y ese encapuchado siguen cerca y no nos dejarán en paz.
Louise: Pero...
Kenichi: Sólo hazlo. – ella asiente con algo de timidez mientras que empieza a correr, Wardes trató de atacarla con un hechizo de viento, pero Kenichi sacó a la fuerza el misil y lo arroja hacia su dirección, para hacerlo estallar con una esfera de ki, provocando una explosión.
Pero el encapuchado había salido de la explosión para atacar a Louise quien debido a su agotamiento por su hechizo, estaba a punto de ser atacado pero el pelirrojo logró atraparlo de su pierna.
Kenichi: ¡GRAAAAAAAAAAAAAAAAAH! – da un giro y lo estrella contra el suelo, pero para su sorpresa, el encapuchado usa sus brazos para detener el impacto y usa la otra pierna para golpear su cabeza, cosa que el pelirrojo logra bloquear a tiempo y conectarle una patada en el abdomen. - ¡Corre!
Louise asiente y se dirige con Henrietta quien estaba sorprendida por su aparición junto con su familiar, el pelirrojo estuvo intercambiando golpes con el encapuchado.
Kenichi: Es muy habilidoso. – retrocede hacia la nave y toma su espada para luego abrir los ojos ya que el encapuchado genera unas llamas púrpuras y las arroja hacia él, el pelirrojo rápidamente da un tajo vertical, dividiendo las llamas.
Derflinger: ¿Estás bien compañero?
Kenichi: (Sólo alguien que conozco, haría ese tipo de llamas.) – decía aturdido al ver ese ataque.
Derflinger: ¡Compañero! - el pelirrojo reacciona y bloquea un corte directo a su cuello.
El encapuchado trata de darle otro corte pero el Uzumaki se agacha y lo aparta de una fuerte patada en el abdomen y extiende su mano, generando una esfera de ki, estaba a punto de impactarlo pero el encapuchado gira su espada y devuelve la esfera con mayor potencia, por lo que usa sus brazos en forma de X para bloquear el ataque.
El impacto empujó al Uzumaki por unos metros, además que dejó un rastro ya que había presionado sus piernas, luego mira al encapuchado acercarse y darle un golpe en la cara, ese golpe lo aprovechó para girar y conectarle un puñetazo en el abdomen y luego extiende sus manos, dándole un fuerte empujón.
Kenichi flexiona sus rodillas y se lanza al ataque, dándole varios golpes en el abdomen, un rodillazo en la mandíbula y lo toma de la ropa para darle un puñetazo en el pecho, mandándolo varios metros, quedándose con parte de esa túnica y revelando su identidad.
Kenichi: Lo sabía... - el viento había quitado la capucha, revelando una cabellera negra con puntas azules. – Esa habilidad, esa técnica, esa espada... Indra Dragneel.
Indra estaba usando una chaqueta blanca larga, pantalones negro y una espada con toques esmeralda y dorada con orificios, Kenichi seguía impactado y no notaba la mirada vacía en su amigo y compañero de batalla.
Kenichi: (¿Cómo es que está aquí? ¿Por qué ha atacado a Louise y a mí?) – Tenía más preguntas, pero el problema es que estaba con la guardia baja. – Indra ¿Qué estás haciendo?
....
El mencionado no respondía nada, sólo tenía una mirada fría y seguía sujetando el mango de la espada, Kenichi se acerca ya que cree que no le escuchó.
Kenichi: Indra ¿Qué sucede amigo? ¿Por qué nos atacaste? – extiende su mano. – Venga, deja la espada.
Unos segundos pasaron y el ambiente era muy tenso, Louise y Siesta estaban preocupadas ya que se acercó sin miedo ni nada, Kenichi por otra parte seguía esperando una respuesta, pero el peli negro no decía nada, se acercó y ese fue su grave error y que al extender su mano, Indra lo aparta con violencia y lo sujeta del cuello.
Kenichi: Gah.... – es levantado mientras sentía que el agarre se hacía más y más fuerte, sentía que estaba perdiendo el aire poco a poco.
Louise/ Siesta: ¡KENICHI!
Kenichi estaba a punto de quedarse sin aire, pero en un rápido movimiento y con algo de lástima, usa a Derflinger para cortar el brazo del peli negro y alejarse con una patada mientras recuperaba el aire y tosía.
Kenichi: Cough...cough... - se sujetaba la garganta y por fin pudo recuperar el aliento. - ¿Qu-Qué demonios te pasa?
Wardes: Por lo visto, lo conoces bien. – el pelirrojo lo mira con enojo.
Kenichi: ¿Qué le has hecho?
Wardes: Oh, ¿Lo conoces?
Kenichi: ¡RESPONDE! – el peli plata simplemente da un bufido de burla y arrogancia.
Wardes: Pues por lo visto es tu amigo, pues vino a visitarnos y ahora quiere matarte. – dijo con burla mientras que el pelirrojo afila la mirada. – Será divertido ver cómo eres asesinado por un amigo tuyo. -señala al pelirrojo. - ¿Qué se siente el haberle cortado el brazo?
Kenichi ni se sorprendía mientras que el peli negro extendía su masa oscura, haciendo que el brazo cortado vuelva a su lugar, a los demás les sorprendió eso pero el único que se mantuvo calmado fue Kenichi.
Kenichi: No sé lo que le hicieron, pero haré que reaccione.
Wardes: Inténtalo. - respondió con burla. - ¡Ataca a ese maldito gusano!
Indra flexiona sus rodillas y se lanza al ataque Kenichi logra detener el brazo con la espada con fuerza, el Uzumaki trata de golpearlo pero el peli negro logra interceptarlo y ejercen fuerza, fue tanta que el suelo a su alrededor empezó a agrietarse y algunas rocas se levantaban, sorprendiendo una vez más a los presentes.
La presión duró por unos segundos hasta que el pelirrojo da una patada ascendente, separándose. Indra nuevamente se lanza al ataque y Kenichi contrataca con Derflinger, generando múltiples chispas y otra presión de fuerza, ya que los pies terminaron enterrándose en el suelo, Kenichi gira sobre su eje y le da un corte horizontal, siendo bloqueada a último momento.
Siguen con el choque de espadas una vez más, hasta que el pelirrojo toma delantera y logra darle un corte en el brazo a Indra aunque recibió un corte en un costado de su cuerpo.
El pelirrojo se aleja y lanza una esfera de ki, siendo devuelta por un Fullcounter de Indra, Kenichi lanza otra esfera, generando una explosión y una cortina de humo, de ahí, Derflinger había sido lanzado a gran velocidad, cortando el brazo de Indra, haciendo que quede desarmado, Indra trató de traer el brazo de vuelta, pero Kenichi aterriza sobre el brazo, el pelinegro contrataca con unas patadas mientras que el pelirrojo le lanzaba una esfera a quemarropa separándose nuevamente y el brazo de Indra vuelve a su lugar.
El Uzumaki se preparaba para otra ofensiva pero nota que Indra prepara una esfera y la arroja como cortina de humo, el pelirrojo extiende su mano para desviarlo, pero nota al peli negro lanzándose contra él y logra bloquear la espada, sin embargo, nota que otro peli negro se posiciona detrás de él y casi llega a cortarle la espalda, de no ser porque Kenichi reaccionó a tiempo y detuvo el ataque.
Louise: (¿Qué demonios? ¿Dos?) – pero se da cuenta que había más, había cinco sujetos con la misma apariencia, rodeando al pelirrojo. – (¿Copias?)
Wardes: (Interesante habilidad.) – no sabía si era de él mismo o por la espada, sin embargo sería bueno contra el pelirrojo que odia.
Los clones se lanzan al ataque mientras que Kenichi evaluaba la situación y elaboraba una nueva estrategia, por lo que arroja una esfera al suelo, generando una cortina de humo, la copia que estaba más cerca no se vio venir la patada del Uzumaki quien aprovechó esa corta distracción para salir del rodeo.
Los demás clones se acercan y tratan de cortarlo, pero el pelirrojo se movía con gran agilidad, esquivando o también bloqueando ataques letales, mientras pasaba eso, los clones nuevamente rodean al Uzumaki, pero el pelirrojo no se hacía problemas, pelaba con el mango, el puño y patadas. Los clones no se daban por vencido y se lanzan al ataque una vez más, pero el pelirrojo bloquea un corte, un puñetazo, una patada, el cuarto clon iba a cortarlo pero Kenichi da una voltereta, aturdiendo a los cuatro y finalmente alejarlos con una explosión de ki.
Los clones de Indra se recuperan y toman una posición más alejada mientras que el original corre a gran velocidad y le da una fuerte patada a Kenichi, haciéndolo retroceder, para luego generar una esfera, Kenichi se hace a un lado pero ese fue un error ya que la esfera fue golpeada por la espada de uno de los clones, dirigiéndose a otro quien hace lo mismo. La pequeña esfera se convirtió en una muy grande y se notaba la potencia cargada debido al rebote con el Fullcounter y el original se coloca encima y devuelve la esfera a toda potencia hacia el Uzumaki.
A este punto muchos estaban asustados porque era una habilidad peligrosa y casi mortal, pero el pelirrojo se mantenía calmado hasta que la esfera impacta contra el suelo, generando una explosión.
Louise: ¡Kenichi! – exclamó preocupada porque el radio fue moderado. Siesta también estaba preocupada por el ataque, pero para su alivio, el pelirrojo estaba a una distancia segura de la explosión mientras se levantaba y tenía su mirada serena, Wardes se enojó por eso, pero confiaba que su "arma" fuera capaz de matarlo.
Kenichi: (A pesar de que está bajo control, es capaz de usar bien sus habilidades, ya sea con la energía o con su espada.) – guarda su espada.
Derflinger: ¿Qué haces? – el pelirrojo aprieta los puños.
Kenichi: Calma, sé lo que hago. – flexiona un poco sus rodillas mientras apretaba más sus puños mientras que un vapor está saliendo de su cuerpo. – Grrrrrr....
La presión nuevamente estaba aumentando mientras que el grito del Uzumaki empezaba a escucharse, parecía que lo que estaba haciendo era doloroso y el vapor no era para nada bueno, Louise y Siesta veían cómo el pelirrojo incrementaba su musculatura pero esa expresión de dolor les preocupaba.
Kenichi: ¡AHHHHHHHHH! – ese vapor se convirtió en aura y se hacía más y más violento. - ¡GRRR! ¡GRAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHH!
Indra y sus copias se mantenían tranquilos mientras veían cómo el pelirrojo gritaba de dolor mientras que su musculatura aumentaba, hasta que el aura se hizo mucho más fuerte, el suelo empezó a agrietarse y por donde estaba, se estaba desestabilizando.
Wardes: ¿Pero qué? – el aura del pelirrojo se torna roja.
Kenichi: ¡TRIPLE KAIO-KEN! – da un gran salto, apareciendo frente de uno de los clones, preparando un fuerte puñetazo.
Mandándolo a volar contra unas rocas, después se mueve a gran velocidad, para patear a otro en la mandíbula, el tercer clon recibió un gancho en toda la cara, estrellándolo contra el suelo, el cuarto recibió un rodillazo en el abdomen, mandándolo contra el segundo clon para finalmente enviarlos contra el clon que se estrelló contra las rocas y en cuanto el original, este dio un salto alto y preparaba una esfera de ki potente, pero el pelirrojo se eleva a gran velocidad, quedando encima de él, Indra arroja la esfera, pero Kenichi la esquiva con facilidad y le da una patada a toda potencia, estrellándolo contra los demás clones.
El pelirrojo se mantuvo en su lugar mientras aguantaba el daño en su cuerpo y el aura seguía, ve que Indra rompía se reincorpora mientras destruía la roca, el pelirrojo no pierde tiempo y se lanza a gran velocidad, da un salto en el suelo y esquiva un puñetazo de Indra para darle una patada por atrás, el pelinegro se reincorpora y trata de darle un puñetazo con llamas púrpuras, pero Kenichi le da un fuerte golpe en el estómago.
Ese golpe fue tan fuerte que dejó aturdido a Indra por segundos, tratando de recuperar el aire, una vez recuperado, se lanza al ataque pero Kenichi detiene ambos puños y comienza a apretarlos, el pelinegro, ignorando el dolor, retrocede sus brazos y trata de darle un golpe martillo, pero el Uzumaki contrarresta con un cabezazo.
Seguido le da un puñetazo en la espalda, otro en el hombro, unos diez golpes en el abdomen y lo manda contra el suelo mientras tomaba distancia nuevamente, aunque tambalea un poco debido al uso de la técnica, ese era su as bajo la manga, sin embargo, cuando su padre le enseñó, le advirtió de la peligrosidad.
Derflinger: Wow, esos golpes fueron muy potentes.
Kenichi: S-Sí...pero Indra es alguien fuerte. Debo acabar con esto....antes de que... - siente un dolor en el brazo. – Grrr...mi cuerpo...duele...
Indra se levantaba y escupía sangre de su boca, extiende unas alas oscuras y asciende mientras que era cubierto por un aura morada.
Kenichi: Esto no es bueno...
Derflinger: ¿Qué está haciendo?
Kenichi: Está concentrando su energía, si salgo de ahí, ocasionará un daño tremendo. – aprieta los puños y hace expulsar su aura nuevamente. - ¡AHHHHHHHHHHH!
A distancia se veían dos auras a punto de arrojar un ataque poderoso.
Kenichi: ¡KAME.......! – el dolor en su cuerpo era demasiado. - ¡HAME.......! – sentía que iba a estallar pero tenía que seguir peleando.
Indra: GALICK GUN! – arroja una energía morada a toda potencia pero el pelirrojo no se quedaba atrás.
Kenichi: ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – arroja una energía azul, haciendo que haya un choque de poderes, algunos jinetes sobrevivientes, incluyendo Wardes salieron disparados debido a la presión y viento que estaban ejerciendo.
Incluso el ejército de Henrietta usaron escudos de tierra o aire para que no fueran empujados, Louise era ayudada por su amiga mientras veía con preocupación la pelea y parecía que la luz morada iba avanzando poco a poco, pero el pelirrojo no se quedaría atrás.
Kenichi: ¡CUÁDRUPLE KAIOKEN! – su fuerza y energía aumentaron y la luz azul empezó a tomar terreno, Indra aumentó un poco más pero no fue suficiente y fue golpeado por la técnica, enviándolo al cielo, pero logró zafarse antes de que recibiera un daño crítico.
El Uzumaki respiraba con dificultad mientras su cuerpo estaba completamente adolorido, sus brazos estaban que le pesaban y le costaba levantarlos, pero con eso creía que su amigo podría recuperar la conciencia.
Derflinger: ¡Compañero!
Kenichi: Estoy bien. – se levanta con dificultad y movía sus músculos antes de que se tensaran más y más, hasta que ve a Indra aterrizar a una gran distancia. – (Mierda, logró salir del ataque.)
El peli negro se acercaba más mientras arrancaba una manga de su ropa lo demás seguía en buen estado y sus heridas estaban cerrándose con una masa oscura, para luego expulsar esa aura, Kenichi reconoce el peligro y activa su aura nuevamente, para su preocupación nota que la marca aparece en la frente de su amigo y la oscuridad rodeaba sus brazos hasta hacerse unas garras grandes.
Indra da un salto y prepara un puñetazo mientras que Kenichi salía de ahí antes de ser golpeado, pero tuvo que moverse otra vez ya que el peli negro iba a darle un zarpazo, la velocidad y fuerza había incrementado y ahora el Uzumaki estaba al retroceso.
Rastros de destrucción dejaba mientras que el Uzumaki saltaba, se agachaba o se alejaba de Indra, pero llegó a un punto en donde los jinetes dragón sobrevivientes de Reconquista, le cortaron el paso.
Kenichi: ¡Joder! – cruza los brazos y bloquea los golpes de Indra, cada puñetazo empezaba a aumentar su fuerza y velocidad, cosa que el pelirrojo lo sabía pero no podía salir de ahí, sentía que sus brazos no podían más así que tuvo que alejarse con una explosión de ki a quemarropa, aunque recibió un látigo de viento por parte del traidor. - ¡AGHHHH!
El pelirrojo tambalea por unos segundos mientras que Wardes se alejaba con una sonrisa burlona, Kenichi iba a atacar pero un puño de tierra lo levanta, dejándolo desestabilizado e Indra lo termina con un golpe martillo, estrellándolo contra el suelo y le da un fuerte golpe con la garra, mandándolo cerca del bosque.
Siesta: ¡Kenichi-san! – quería ayudarlo pero su padre la detiene. - ¡No, padre!
¡No puedes! ¡Es muy peligroso! - la peli negra trata de zafarse pero le era imposible, hasta que nota al pelirrojo levantarse con algo de dolor, tenía los brazos muy lastimados, su hombro derecho parecía estar con calambre porque no se movía la sangre salía de su frente y su ropa estaba rasgada.
Kenichi: Maldita sea. – escupe sangre mientras miraba a su amigo. Indra toma a Lostvaine y la levanta. – Mierda, esa técnica.
Derflinger: ¿Qué es lo que hará ahora?
Indra: ¡Ominous Nebula! – el pelirrojo empezó a ser jalado con fuerza y se dirigía hacia el peli negro.
No sólo él, también los que estaban cerca de él fueron arrastrados. El ejército de Tristain pudo reaccionar y colocaron muros sólidos para evitar ser arrastrados, los habitantes que estaban en el bosque se cubrían con los árboles y así no eran arrastrados, aunque tenían que tener cuidado de los árboles con raíces frágiles, pero los jinetes dragón de Albion estaban jodidos ya que estaban cerca, Wardes tomó su distancia y Fouquet creó un muro de tierra para evitar ser arrastrados.
Kenichi trató de mantenerse firme pero la presión fue tan fuerte que fue arrastrado con fuerza, por lo que mueve a Derflinger hacia adelante, bloqueando el ataque mientras era empujado con fuerza, atravesando algunos árboles.
Kenichi: Eso dolió. – se levanta adolorido mientras Siesta se acercaba. - ¿Siesta? ¡Estás bien! Creí que... - ella niega.
Siesta: Habíamos escapado a buen momento. Pero tú...- trata de tocarlo pero el pelirrojo se levanta.
Kenichi: Estoy bien y te pido que saques a tu gente, esto se hará más peligroso. – avanza a pesar del dolor que tenía en su cuerpo.
Siesta: Pero...
Kenichi: Sólo hazlo. – da un potente salto mientras que los padres de la peli negra decidieron hacer caso a la petición del Uzumaki
Indra sólo estaba esperando mientras que había cadáveres de dragones y soldados a su alrededor, no diferenció aliado ni enemigo, sólo tenía un objetivo, eliminar al Uzumaki, por lo que al verlo nuevamente procede a preparar su ataque.
Kenichi: Un vórtice, es lo que siento cuando me arrastra.
Derflinger: Pero compañero, esa técnica también le permite atacar una vez que tiene a sus objetivos muy cerca. – el pelirrojo ejerce presión en sus piernas.
Kenichi: Pero eso lo deja con la guardia abierta, al menos tengo una oportunidad.. – entierra la espada para seguir manteniéndose de pie. – Debo aprovechar ese momento antes de que sea más peligroso.
Derflinger: ¿Listo?
Kenichi: Si. – levanta la espada y se deja arrastrar por el peli negro, cada vez estaba más cerca y podía ver cómo Indra preparaba su ataque, pero el pelirrojo gira a gran velocidad, dejándose llevar por el viento y prepara un contrataque. - ¡QUINTUPLE KAIOKEN! - en el segundo que chocan, levantan una cantidad de polvo mientras se escuchaba un fuerte estruendo.
La presión había desaparecido y los magos retiran su muro y ven a ambos guerreros dándose la espalda, el pelirrojo termina con una rodilla en el suelo por un corte que tuvo en su cintura además que su chaqueta había sido quemada, dejándolo sólo con un polo, Louise y Siesta estaban preocupadas por eso, pero notan que Indra tenía una herida más grave en su pecho, al punto que mucha sangre había salido.
El pelirrojo se levantaba una vez más y bloquea un tajo del peli negro, ambos preparan un puñetazo y se dan un fuerte golpe en la cara, separándose a una gran distancia por el golpe, el pelirrojo se levantaba completamente adolorido mientras veía cómo Indra se levantaba una vez más.
Kenichi: ¿Por qué? ¿Por qué no reacciona? – apretaba los puños con frustración. - ¿Por qué no puedo despertarlo?
Wardes: ¿Preocupado por tu amigo? – preguntó con burla.
Kenichi: ¿QUÉ MIERDA HICISTE WARDES?
Wardes. Tu amigo fue muy habilidoso, mató a muchos de los guardias, incluyendo a los de élite al tratar de escapar. Pero tuve que perforar su corazón para que el hechizo funcionara.
Kenichi: ¿Qué?
Wardes: Gracias a un anillo que tenemos, podemos controlar a quien sea, mientras más herido esté, más útil será el control. – el pelirrojo abre los ojos mientras que sentía la furia recorrer su cuerpo. – Y cómo te conocía, pues, sería muy interesante ver cómo se matan mutuamente, aunque... - mira al peli negro. – Su habilidad es útil, más útil que esa estúpida sin talento que tenía como prometida.
Kenichi: ...
Wardes: Pero después de ver cómo destruyó el barco, tal vez le haga lo mismo. – Louise y Henrietta miraron asqueadas al peli plata. – Y convertirla en una incubadora, dándonos armas para nuestro propósito.
El mayor error de una persona es provocar otra, se dice que la ira nubla el juicio y al mismo tiempo hace que tus ataques se hagan lentos y torpes, pero no es en el caso del pelirrojo, él no era humano y Wardes cometió el error de provocar a la persona equivocada,.
El cielo comenzó a nublarse mientras que el pelirrojo estaba con los puños apretados, todos notaron ese detalle y querían saber lo que pasaba, Wardes miraba con burla al pelirrojo, creyendo que ya estaba resignado, qué equivocado estaba.
Kenichi: ¿Co-Cómo te...atreves...?
Para sorpresa y miedo de algunos, unos rayos empezaron a caer, no estaba lloviendo, pero los rayos caían y uno cayó cerca del pelirrojo quien no se inmutó, la presión se hacía más fuerte hasta el punto que el suelo alrededor del pelirrojo se agrietaba y algunas piedras se levantaban, fue en ese momento que lo notaron.
El cabello pelirrojo empezó a parpadear a dorado mientras se erizaba, eso era algo fuera de su entendimiento, Louise tampoco lo comprendía, aunque en parte quería que su novio le diera su merecido al traidor por lo que acaba de decir.
Kenichi: ¡GRRRRRRRR! ¡ARGHHHHHHHHHHHHHH! – el cabello se erizó por completo, pasó de ser pelirrojo con puntas negras a un dorado, sus ojos se tornaron verde esmeralda y un aura amarilla cubría al pelirrojo.
Wardes: ¿Pero qué? – tanto él como Fouquet quedan intimidados al ver la mirada de furia del Uzumaki.
Kenichi: No te bastó con lo que hiciste. – su mirada se afilaba más. – Liberaste a un criminal, traicionaste a tu hogar, asesinaste al príncipe de Albion, traicionaste y rompiste el corazón a Louise. – voltea y empezaba a caminar. – Atacas el pueblo de mi amiga, utilizaste a mi amigo y compañero de batalla dejándolo en un estado cercano a la muerte y amenazaste con lo que ibas a hacer con Louise.... ¡Y ESO NO TE LO PERDONARÉ! ¡WARDES! – expulsa su aura dorada, flexiona sus rodillas y se lanza al ataque.
Indra se coloca como escudo y recibe un fuerte puñetazo en la cara, mandándolo contra el suelo y rebotas, mandándolo al cielo, Kenichi salta y le da un golpe martillo en el abdomen, generando un fuerte impacto, Kenichi mira a los jinetes dragón de Albion sobrevivientes y se lanza al ataque, no importaba los hechizos o los dragones,
Kenichi atravesó los ataques como si nada y con fuertes golpes, dejaba fuera de combate a los sobrevivientes, algunos con huesos rotos y los otros terminaron muertos, se iba a dirigir con Wardes para terminar con esto de una vez, pero una pared de tierra gruesa se interpone, por lo que le conecta un fuerte puñetazo, haciendo pedazos la pared de tierra.
Wardes preparó unas flechas de viento, pero ni siquiera llegaron a afectarlo, extiende su palma con fuerza y una gran ráfaga de viento manda a volar al traidor, a Fouquet y los pocos soldados que estaban detrás de ellos, el pelirrojo prepara una esfera, pero cuando estaba a escasos metros, Indra se interpone y devuelve el ataque con más potencia, Kenichi simplemente desvía su propio ataque con un puñetazo.
El pelinegro se lanza al ataque con su espada mientras que el pelirrojo simplemente levanta un dedo y bloquea el corte, los más cercanos terminaron con la boca abierta por la sorpresa, Indra hace más ataques pero el Uzumaki simplemente los bloqueaba.
Hasta que Indra concentra energía en su espada y eso hizo que Kenichi sacara a Derflinger.
Kenichi: ¿Puedes tomar esas llamas, verdad? – decía con seriedad
Derflinger: Arde un poco compañero, pero no te defraudaré. – y nuevamente siguen con un choque de espadas.
Los choques eran fuertes, las chispas se notaban y la fuerza, el pelirrojo baja su espada, bloqueando otro ataque, Indra no se detiene y gira con violencia, Kenichi se mantiene firme y logra darle una patada, alejándolo y arroja a Derflinger, el peli negro logra bloquearlo pero no notó que el rubio le da un rodillazo en la mano, desarmándolo nuevamente, y le da una patada de hacha en la cara, sin embargo Indra logra bloquear el ataque y lo aleja de un puñetazo, alejándolo unos metros.
Kenichi se reincorpora y se lanza al ataque mientras que Indra extiende sus alas y se elevan al cielo, dándose varios golpes y tomando distancia, su agilidad era tanta que al momento de movilizarse, parecían dos ráfagas al momento de chocar, los magos novatos no podían notarlo, los experimentados apenas podrían distinguirlos junto con Henrietta pero Louise, pudo aprender más de eso, era capaz de ver el intercambio de golpes, por más rápido que fueran, tenía múltiples emociones por lo que estaba pasando, pero lo preguntaría después.
Los golpes eran cada vez más violentos mientras descendían, provocando un gran impacto al impactar, pero eso no frenaba su pelea, Kenichi no tenía de otra, si tenía que salvar a su amigo, tendría que darle un golpe lo suficientemente devastador para hacerlo reaccionar. El Uzumaki avanza y le da un puñetazo en la cara para luego darle un rodillazo a Indra, el pelinegro aparece detrás de él y trata de golpearlo, pero el rubio se agacha, da un salto y le conecta una patada, mandándolo a los cielos y finalmente un golpe en la espalda, mandándolo al suelo. Indra no se queda atrás, se reincorpora y se eleva para darle un corte al Uzumaki, el pelirrojo lo sigue pero Indra extiende las manos envueltas en oscuridad, generando una fuerte presión de aire, empujándolo con fuerza., mandándolo al suelo y haciendo que se arrastre varios metros, dejando un sendero de destrucción a su paso.
Louise: ¡Kenichi! – esa sensación de miedo le invadió, pero no el morir, sino el miedo a perderlo, ya que no ha dormido bien debido a que esa pesadilla de su novio bañado en sangre le atormentaba, pero se detiene al ver al pelirrojo levantarse.
Kenichi: Estoy bien... - truena su cuello. – Regresa con Henrietta.
Louise. Pe-Pero... - el pelirrojo no controlaba la transformación por completo por lo que el enojo resaltaba.
Kenichi. ¿No me oíste? ¡Regresa con Henrietta! ¡No quiero que te involucres en esto! – fue rudo, pero era para que no salga herida o tomada como rehén.
Louise. Ke-Kenichi... - el pelirrojo nota que Indra estaba aumentando su musculatura. El peli negro aprieta los puños mientras que la marca se alargaba, daba un grito siniestro y el aura oscura que lo cubría, el grito se hacía cada vez más siniestro mientras que era cubierto por pura oscuridad, formándose un tornado.
Kenichi: Esto no se pondrá bueno. – mira a Louise quien sólo dio un asentimiento, no podía cuestionarlo ahora ya que notó el peligro.
El tornado de oscuridad se desvaneció mostrando a Indra con la mayor parte de su cuerpo cubierto de oscuridad, al menos de la cintura para abajo mientras que tenía una especie de chaleco en la parte superior.
Derflinger: ¿Qué es eso?
Kenichi: El modo asalto... - se enfurece más. - ¡Ese maldito de Wardes! ¡LO LAMENTARÁ! – hace expulsar su aura con violencia. - ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
Ambas auras parecían chocar, generando una fuerte presión en el lugar, a simple vista era devastador, pero aquellos que podían detectar (sensores) estaban más impactados porque esa energía era muy abrumadora.
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En el país de Albion, que estaba cerca de Tristain en esos momentos, para ser más preciso, en una montaña, había una presencia, alguien quien estaba en medio de una capa de hielo, parecía no moverse, pero la presión llegó hasta ese lugar, haciendo que la figura comience a reaccionar mientras tenía unos recuerdos. El sujeto apretó los dientes ya que reconoció la energía de una de las dos.
Bardock... - abre los ojos mientras expulsaba su aura y al mismo tiempo rompía el hielo. - ¡BARDOCKKKKK!
Logra liberarse por completo y expulsaba un aura verde con demasiada violencia, destruyendo la montaña donde había estado congelado quién sabe cuántos años.
//==//==//==//
La expulsión de poder había cesado por el momento y ambos contrincantes nuevamente se lanzan al ataque, pero Indra ahora era quien tenía la ventaja, le da un fuerte golpe en el estómago, haciendo que el Uzumaki escupa sangre, seguido de un rodillazo en la cabeza, es golpeado múltiples veces para luego tomarlo y lanzarlo al suelo.
Kenichi se reincorpora mientras descendía aterriza, se impulsa y vuelve al cielo, ambos empezaron a movilizarse de un lado hacia a otro, esquivando el golpe de su contrincante, hasta que el peli negro hace su movida con un derechazo, pero el Uzumaki aprovecha y le da un cabezazo para luego tomarlo del brazo y girar con fuerza, iba a lanzarlo al suelo, pero el peli negro extiende sus alas y se coloca más alto que el pelirrojo.
Kenichi: ¡Kame....!¡HAMEEEE......! -Indra se arroja a gran velocidad. - ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
El ataque frenaba a Indra, pero no por mucho, el pelinegro se aparta del ataque y avanza hasta chocar contra el Uzumaki y de paso lo manda contra el suelo, generando una cortina de humo, el peli negro se eleva nuevamente y ve cómo Kenichi se reincorpora y nuevamente se eleva para seguir con otro intercambio de golpes, cada vez más potentes que el sonido del cada ataque se escuchaba.
Ambos terminan en el suelo y empiezan a ejercer presión en las manos hasta que Indra suelta y le da un rodillazo en la mandíbula para luego darle un puñetazo en la cara, mandándolo contra el suelo, pero Kenichi contrataca con dos puñetazos.
Ambos se levantaban y seguían peleando como si no hubiera un mañana, la sangre incluso salpicaba el lugar, pese a que Indra tuviera más ventaja, Kenichi no se daba por vencido, al punto que dislocó temporalmente un brazo del peli negro, pero.
Indra le da múltiples golpes para luego posicionarse detrás de él y apretarlo con sus brazos, sin embargo, el Uzumaki le da múltiples codazos en las costillas para liberarse. El peli negro retrocede y se prepara para dar otro ataque pero el Uzumaki se agacha y le conecta un fuerte golpe en el estómago, haciendo que Indra vomite sangre y sus ojos por segundos reaccionaran.
Indra: Ke-Kenichi....a-amigo.... – Kenichi abre los ojos mientras veía a su amigo darle una mirada de disculpa y tristeza por cómo terminaron las cosas, sin embargo, la oscuridad nuevamente toma control.
Wardes. ¡JAJAJAJAJA! ¿Qué sucede Kenichi? ¿Te duele dañar a tu mejor amigo?
Kenichi simplemente lo fulmina con la mirada, cosa que no le intimidaba al traidor, mientras Indra esté bajo su control, él no se preocuparía por la furia del Uzumaki. El rubio prepara una esfera y lo arroja hacia el peli plata, pero Indra atrapa la esfera y le arroja una llamarada.
Ambos se acercan y dan otro choque de puños, provocando un estruendo, preparan otro puñetazo y sale el mismo resultado, para luego interceptar el siguiente ataque, ambos estaban ejerciendo fuerza y no retrocedían para nada, por lo que empiezan a darse cabezazos, el golpe fue tal que sangre empezó a salpicar.
Cabezazo, tras cabezazo, los más débiles de mente se tapaban los ojos, los más experimentados, tenían un sentimiento de respeto, al menos por el lado de Tristain, mientras que Wardes y Fouquet estaban con enojo y frustración ya que por más pelea, no moría ese "familiar odioso".
Ambos se suelta e Indra trata de darle una patada, siendo bloqueada por Kenichi, contrataca con un puñetazo pero Indra se agacha y trata de darle una patada de mula en la cara, siendo esquivado a último segundo y le da un rodillazo en el abdomen. Indra se reincorpora y nota a Kenichi acercándose, por lo que hace una barrida, el Uzumaki reacciona a tiempo y se impulsa con las manos, Indra trata de darle un puñetazo pero el rubio se hace para atrás y salta con sus manos para darle un golpe martillo en la cabeza, iba a darle una patada pero el peli negro lo atrapa de la pierna y lo estrella contra el suelo.
Estuvo a punto de pisarle la cabeza, pero Kenichi se hace a un lado, aunque también tuvo que esquivar una patada, para luego dar una barrida y desestabilizar a Indra, aunque era una batalla brutal, el pelirrojo tenía una sensación de satisfacción por ver cómo se han fortalecía, pero era momento de terminar con la pelea.
Indra se aleja y arroja múltiples esferas, Kenichi corre a gran velocidad esquivando los ataques, al estar en un rango muy corto, es obligado a elevarse y arroja una esfera más potente, el rubio simplemente se queda quieto y la esfera explota, los de Reconquista/Albion estaban expectantes del resultado pero más Wardes y Fouquet.
Al dispersarse el polvo, el pelirrojo sólo tenía una expresión seria mientras tenía gran parte de su ropa superior destruida, apenas lo que sujetaba su espada, una manga de su chaqueta y su polo quedaron salvados, Kenichi flexiona sus rodillas nuevamente mientras concentraba ki en sus manos y arroja dos esferas, Indra estuvo a punto de desviarlos con una garra oscura pero para su sorpresa ambas esferas chocan, generando una explosión. El peli negro creyó que iba a aparecer en ese ataque cegador pero era una esfera que fue a gran velocidad y no lo impactó a él, simplemente explotó en su espalda.
Indra sale disparado mientras que Kenichi avanzaba a gran velocidad y le da un fuerte rodillazo en el abdomen dejándolo sin aire, pero no terminó ahí le da varios golpes en la cara, seguido de una patada de chacha, creando un cráter y finalmente extiende sus manos al aire, impulsándose con ki y cae a gran velocidad.
Kenichi: ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – sus brazos iban hacia adelante ahora y se estrella con Indra en el abdomen.
El ataque levanta una cantidad de polvo, los que estaban cerca se cubrieron o dispersaban con hechizos de viento, sólo para ver a Kenichi de pie, respirando con pesadez mientras que Indra estaba de vuelta a la normalidad, ya no tenía esa apariencia oscura. Poco a poco Indra abrió los ojos mientras veía al pelirrojo, pero en lugar de ser vacíos, ahora brillaban, estaba de vuelta.
Indra: ¿Q-Qué me pasó? – el Uzumaki sonríe.
Kenichi: Al fin regresaste.
Indra: Cre-Creo que sí. – se sujetaba la cabeza mientras que la herida que tenía en su pecho se cerraba con materia oscura.
Kenichi: Sí que tienes mucho que explicar.... – su cabello erizado y rubio pasó a la normalidad mientras extendía su mano, el peli negro sólo da una leve sonrisa y corresponde el gesto.
Louise notó eso y por más preguntas que tenía, al menos sonreía ya que la pelea terminó, después recibiría respuestas, tanto ella como su amiga Henrietta.
Wardes: ¡Maldita sea! – golpea el suelo mientras miraba con furia al pelirrojo.
Fouquet: No tenemos de otra, perdimos nuestra arma y estaremos muertos si van a por nosotros.
Wardes: Ese maldito.... – pero nota que su compañera estaba mirando al cielo. - ¿Qué pasa? – dirige su mirada hacia donde observaba y notaron algo verde acercarse a gran velocidad.
Kenichi: Aparte de tu espada ¿Trajiste algo más?
Indra: S-Sí. – saca algo de su bolsillo. – Unas cápsulas aunque.. – tres de las 5 estaban destruidas. – Bueno, al menos es una casa y el otro es médico.
Kenichi: Perfecto, entonces nos salva... - ambos abren los ojos mientras algo aterriza con violencia a una gran distancia de ellos. – Espera... ¿No notaste algo en ese brillo?
Indra: ¡Era un brillo verde! - enfocan su mirada en lo que acababa de aterrizar y abrieron los ojos del miedo. – E-Ese es...
Kenichi: N-No...No puede ser...
Los soldados también observan al recién llegado, era alguien con un cabello erizado rubio, tenía una gran musculatura pero también llevaba cicatrices, sus ojos verdes mostraban algo, ira y locura... El sujeto mira al pelirrojo con puntas negras y su rabia aumenta al notar la cola., entendiendo que era un saiyajín.
Tú....- señala al pelirrojo. – Tu energía, es semejante a ese bastardo de Bardock.
Kenichi: ¡No insultes a mi padre, maldito psicópata!
Así que padre ¿Eh? – sonríe. – Eso quiere decir que eres su hijo, el hijo de esa basura. – la sonrisa se hacía cada vez más siniestra. – Entonces le dejaré un precioso regalo a tu padre. – aprieta los puños. - ¡AAHHHHHHHHHHHHHH!
Expulsa un aura verde haciendo que todos se cubran, mientras que Kenichi e Indra se preparaban para pelear.
Indra: ¡Toma rápido! – activa la cápsula médica, resultando ser píldoras. – No te sanarán por completo, pero al menos recuperarás tu energía. Son sólo seis, así que úsalo con cuidado.
Kenichi asiente y procede a comer uno, al igual que Indra, para expulsar su aura nuevamente, el peli negro activa su marca y el Uzumaki sólo se mantenía con su forma base, pero grande fue su sorpresa que el sujeto se lanzara con una gran velocidad para darle un golpe en la cara al peli negro, lo mismo hace con Kenichi quien queda aturdido por segundos, Indra le arroja una esfera, cosa que el rubio ignoró por completo y toma a Kenichi de la cara para estrellarlo contra Indra y enviarlos a una gran distancia.
Ambos se reincorporan y miran con furia al rubio quien extiende su mano y múltiples esferas verdes iban hacia ellos, cosa que lograron esquivarlo y ahora ello les arrojaban sus esferas, pero el individuo avanzaba sin que le afectasen los ataques.
Derflinger;: ¡Compañero! ¿Quién demonios es él?
Indra: ¿Habla?
Kenichi: Sí y el verdadero problema es callarlo. Pero respondiendo a tu pregunta, él es un saiyajín despiadado y peligroso, alguien que creí que mi padre lo derrotó, su nombre es Broly, el saiyajín legendario.
Indra: ¿Acaso no se supone que tu padre lo derrotó?
Kenichi: Según me contó fue así, en un día con un eclipse, él lo mandó a volar con un puñetazo y sólo hubo un destello, creí que explotó. – pero no pudo decir más ya que el rubio se lanza a gran velocidad, Indra cruza sus brazos y es lanzado contra unas rocas para luego dirigirse hacia el Uzumaki, quien pudo bloquear algunos ataques antes de que Broly lo tome de la pierna y lo estampa contra el suelo.
Broly no se detiene y gira con la pierna del Uzumaki aún en su mano para volver a estamparlo contra una roca que estaba cerca partiéndola con el cuerpo del Uzumaki y mandándola contra el ejército de Tristain, algunos tuvieron la suerte de esquivarlo y otros no, aunque lograron frenar el impacto con su magia.
Kenichi: Argg..... – se mantenía de pie pero sentía que su hombro izquierdo estaba dislocado. – M-Mi brazo.... – veía cómo estaba colgando sin poder moverse, por lo que coloca su mano derecha y lo acomoda aunque se tuvo que aguantar un grito de dolor. - ¡GRRRR!
Henrietta: Espera, necesitas atenderte esas heridas. – el pelirrojo niega.
Kenichi: No, mis heridas no tienen tanta relevancia, sólo preparen su mejor defensa. – la mira. – Y no dejes que nadie interfiera, Indra y yo mantendremos alejados a ese psicópata.
Henrietta: Es muy peligroso.
Kenichi: Ya pasé por algo malo hace rato, esto no es nada. – se limpia la cara que tenía algo de sangre. – Sólo quiero que haga caso a esta orden, manténganse alejados.
Henrietta trató de detenerlo pero el pelirrojo regresa al campo de batalla y ayuda a Indra quien estaba esquivando los ataques de Broly, se acerca con esferas de ki y saca a Indra de ahí con una patada en la cara al rubio,
Kenichi: Lamento la tardanza.
Indra: Descuida, al menos lo mantuve a raya mientras te recuperabas del hombro dislocado. – el pelirrojo sólo ríe mientras miraban a Broly acercarse a ellos nuevamente.
Broly simplemente los mira con superioridad para después dar un grito muy atemorizante.
Broly: ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – su musculatura aumentaba drásticamente, mientras que su pelo rubio pasó a un verde, al igual que su aura se hacía más potente.
Broly: Uzumaki, tú serás el primero en morir, más vale que estés preparado. – decía con una sonrisa sádica mientras señala a Kenichi. - ¡HAAAAAAA!
Kenichi rápidamente aparta a Indra del ataque y se separan pero Broly no los dejaba ni un segundo en paz, ahora era más veloz y sus esferas eran demasiado potentes, al punto que cuando le arrojó a Kenichi y lo esquiva, impacta en una montaña, causando un fuerte brillo, seguido de una explosión.
Kenichi: ¡Bastardo! ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – su cabello se eriza con potencia mientras que Indra hacía extender más su marca y la oscuridad cubría sus brazos.
Broly: ¡RAAAAAAAAAAAAAH! – avanza con violencia, esquivando un golpe de Kenichi y dándole un fuerte puñetazo en la cara para luego darle un derechazo en la mandíbula a Indra.
Ambos se separan y ascienden mientras se alejaban del saiyajín psicópata, pero Kenichi tuvo la mala suerte porque Broly fue directo hacia él, trató de esquivar los ataques como pudo, sin embargo recibe un puñetazo en el estómago, mandándolo contra el suelo, luego aparece detrás y le da una patada en la espalda y finalmente un puñetazo en el abdomen. Kenichi rápidamente se reincorpora en el aire y se eleva nuevamente.
Broly simplemente ríe y procede a seguirlo nuevamente, la velocidad era muy distinta y estaba a punto de atraparlo, pero Kenichi desaparece en el último segundo mientras que Indra le arrojaba a Broly una llamarada, cegándolo por segundos.
Broly iba a atacar a Indra pero nota el suelo crujir, para luego salir Kenichi y le daba un fuerte puñetazo en la mandíbula con todas sus fuerzas. Mas el ataque no parece afectarle ya que lo toma de la cara, lo lanza al cielo y arroja una esfera de ki, generando un brillo verde en el cielo, seguido de una explosión.
Hasta ese punto los soldados, de ambos bandos y los del pueblo estaban asustados por la violencia del sujeto recién llegado, incluso Fouquet admitía tener miedo debido al sadismo.
Kenichi se arroja contra él, esquivando varias esferas para luego chocar puños, generando un fuerte estruendo, dan otro y otro, haciendo que se repita ese sonido para luego estar moviéndose a gran velocidad, esquivando potentes golpes del peli verde, hasta que logra atrapar su brazo y usa el peso en su contra, estrellándolo contra el suelo, Kenichi iba a golpearlo pero recibe una doble patada en el abdomen, mandándolo hacia el cielo nuevamente.
Broly: ¡JAJAJAJAJAJAJAJA! – se acerca con rapidez al Uzumaki. - ¡RAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!
Le encaja un poderoso golpe a Kenichi, haciendo que sus costillas sean destrozadas y Kenichi queda aturdido por un par de segundos mientras su cabello volvía a la normalidad. Los que estaban cerca se taparon la boca del horror, incluidos Louise y Henrietta ya que ese puño se hundió literalmente en el pecho, sin embargo el Uzumaki aprieta los dientes con furia, toma el brazo y gira con violencia.
Kenichi: ¡GRRRRRRRRRRRRRAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH! – lo arroja al suelo, escuchándose un fuerte sonido de impacto, pero no se detiene ya que el Uzumaki aparece al frente y conecta un puñetazo, un codazo y salta para dar una patada de hacha, hundiéndolo en el suelo para luego alejarse ya que Indra había creado tres esferas.
Indra: ¡RÁFAGA DE LA CORONA SOLAR! – la arroja sobre Broly, creando una gran explosión.
Ambos se mantienen a una distancia prudente para su estrategia y notan a Broly levantarse, Kenichi junta sus manos y se prepara para su siguiente ataque.
Kenichi: ¡KAME....! ¡HAME....! – Broly iba a salir. - ¡HAAAAAAAAAAAAHHH! – el ataque no duró mucho ya que Broly se posicionó detrás de él, tomándolo de la cintura. - ¡GAHHHH! – el peli verde da un salto y voltea, impactando con fuerza y dañando severamente al Uzumaki.
Kenichi como pudo sale de ahí y arroja varias esferas, sin embargo, Broly ni se inmuta y toma la pierna para estamparlo contra el suelo, iba agolpear su estómago pero los clones de Indra lo apartan y lo atacan con ferocidad el original saca a Kenichi de ahí y respiraba de forma pesada ya que cuando lo apretó, las costillas dañaron levemente sus órganos internos y escupió un poco de sangre.
Kenichi: Joder. – trata de levantarse, a pesar del dolor en sus costillas. – Agh....
Indra: ¿Tomarás otra?
Kenichi: Será más rato, no pienso malgastar esas píldoras que quedan. – el peli negro asiente cuando ven algo que los dejó con algo de miedo, ya que Broly no sólo golpeó sin piedad a los clones de Indra, sino que le arrancó las extremidades, el último fue más desgarrador porque le arrancó la cabeza, si bien eran clones físicos con el poder dividido de parte del peli negro así que tuvo un escalofrío cuando los disipó y su fuerza quedó al 100%.
Indra: Mierda con este sujeto, es un maldito loco.
Kenichi: Mi padre tuvo muchas dificultades con él y muchos soldados fueron asesinados por este psicópata. – se prepara. - ¡Busca un punto ciego!
Se acerca a gran velocidad, deteniendo ambos brazos del musculoso para luego darle un rodillazo en la mandíbula, pero no le hizo nada, Broly lo levanta y le da una patada, para luego lanzarse contra Indra quien voló hacia un lado, aún así no pudo salvarse de ser atrapado por el peli verde quien lo toma de la cara y lo estrella contra el suelo, para darle después un fuerte puñetazo.
Kenichi se reincorpora y lanza múltiples esferas al peli verde quien no se inmutó ni por un segundo. Broly sólo sonríe y arroja una esfera, lo suficientemente potente para luego arrojársela al pelirrojo quien cerró los ojos sabiendo lo doloroso que iba a ser.
Pero para su sorpresa, la esfera se desvió directo al ejército de Henrietta, Kenichi abre los ojos y se lanza a gran velocidad, los soldados iban a usar un hechizo defensivo pero no iba a ser suficiente, el rubio llega con ellos, desvía la esfera hacia el cielo y extiende sus manos.
Kenichi: ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! - una cúpula empezó a brillar y trató de cubrir un gran espacio posible, en eso la esfera explota, y el radio de la explosión fue demasiado potente, todos los que estaban en la zona terminaron empujados mientras que el Uzumaki seguía canalizando su defensa.
Una vez se disipó toda esa explosión, Louise miera con terror ya que su novio estaba con gran parte de su cuerpo herido y su cabello estaba a la normalidad, pero para su sorpresa, Indra estaba más adelante y tomó más daño, ya que su brazo izquierdo había sido cortado y la extremidad fue destruida de un pisotón por parte de Broly.
Kenichi: In-Indra... - el peli negro sólo esbozaba media sonrisa cuando en eso Broly aparece detrás de él y le da un puñetazo, apartándolo y se acerca al Uzumaki, iba a golpearlo pero se detiene con una explosión cerca de él, la responsable era Louise.
Louise: ¡DÉJALO EN PAZ, MONSTRUO INFERNAL! – gritó con miedo y furia.
Broly: ¿Qué soy un monstruo infernal? – sonríe con arrogancia y sadismo. - Te equivocas, soy el mismo demonio. ¡JAJAJAJAJAJAJAJA!
Broly iba a atacarla pero el pelirrojo le da una doble patada en el abdomen, haciéndolo retroceder, el pelirrojo tenía energías todavía para pelear mientras que el peli verde ríe, a la vez que Indra se coloca a una distancia lateral Kenichi mientras que generaba un brazo de materia oscura.
Broly: Hubiera sido mejor para ustedes morir sin revelarse, pero son obstinados, los admiro porque eso haría un guerrero. – el pelirrojo se lanza al ataque.
Kenichi: ¡AHHHHHH! - trata de golpearlo pero Broly simplemente mueve la parte superior de su cuerpo, esquivando los golpes, Indra se une pero es el mismo resultado, Broly simplemente ríe y los aparta de un manotazo.
Kenichi/ Indra: ¡HAAAAAA! – arrojan una esfera de ki sin mucho esfuerzo, luego Indra trata de golpearlo pero es aturdido por un cabezazo de Broly para luego darle un golpe con el brazo al cuello de Kenichi, derribándolo para luego darle una patada al peli negro con puntas azules.
Broly toma de la pierna a Indra y lo arroja varios metros mientras que Kenichi se levantaba y bloquea una esfera verde que iba hacia el bosque, donde estaban los que evacuaron del pueblo.
Kenichi: ¡BROLY! ¿Acaso no eres consciente de lo que haces?
Broly: ¿Y qué es ser consciente? – arroja varias esferas mientras que Kenichi avanzaba y bloqueaba los ataques, pero el último, genera un gran destello verde. Kenichi se levanta y ve a Broly acercarse, por lo que junta sus manos.
Kenichi: ¡KAMEEEEEEE.....! – el saiyajín se acercaba más. - ¡HAMEEEEEEE.....! – no le importaba ni sentía miedo. - ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – a tan sólo un par de metros, Broly recibe el ataque de lleno.
Los soldados tenían una mirada esperanzadora, al igual que Henrietta, Louise, Siesta, incluso los caballeros de Albion, pero para su miedo y temor, Broly salió de ahí sin ninguna herida, Kenichi estaba con una mirada llena de miedo al ver que su ataque no le hizo ni cosquillas cuando en eso es sujetado de la cabeza.
Kenichi: A-Ah....
Broly: ¿Qué intentaste, gusano engreído? – lo suelta mientras que el pelirrojo sólo caía y recibía un fuerte puñetazo en el pecho.
Indra vuelve al modo asalto y se lanza al ataque Broly sólo lo mira y esquiva un puñetazo, el peli negro sólo gira y le da una patada en el hombro, pero no le afecta y sigue avanzando.
Indra: ¡HELLBLAZE! – arroja una poderosa llamarada púrpura pero Broly sale de ahí con un aura y le da un puñetazo en el abdomen, el peli negro trató de alejarse pero Broly lo atrapa de la cabeza.
Broly: ¿No vas a pelear más? – presiona su mano en la cabeza de Indra quien quedó inconsciente y su chaqueta oscura se desvanecía. - ¿Eso es todo? Naturalmente la basura seguirá siendo basura. – patea a Indra mandándolo hacia el bosque. - ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – expulsa su aura nuevamente, dejando intimidados a todos.
Pero, había alguien que no tenía ese sentimiento, Kenichi una vez más se levanta, su espada quedó con el ejército mientras que él tenía el torso descubierto, lleno de heridas.
Broly: Ese gusano, sigue con vida. – mira con asco al pelirrojo quien a pesar de sus heridas, estaba avanzando.
https://youtu.be/F-kznZJLXr4
Tenía huesos rotos, sangraba, incluso estaba cansado, pero no iba a darse por vencido, sólo camina mientras expulsaba su aura, Kenichi se lanza al ataque mientras que Broly preparaba una esfera. El ataque del saiyajín legendario fue primero y le dio de lleno al Uzumaki, mandándolo contra el suelo.
Kenichi se levanta con dificultad mientras miraba a Broly, el sádico sólo sonríe.
Broly: Al menos estás para entretenerme un poco más, sino esto sería aburrido. – corre a gran velocidad mientras prepara la esfera y le da de lleno a Kenichi, haciéndolo retroceder unos metros, pero aún con eso, se mantiene de pie. – Eres un ser patético.
Kenichi sólo se mantenía en postura de pelea y recibe de lleno un golpe en el estómago, el pelirrojo sólo se mantenía de pie mientras era golpeado varias veces por el saiyajín. Hasta ese punto muchos querían detener esto, otros se desmayaron, Henrietta incluso se tapó la boca del horror al ver tanta brutalidad, pero Louise estaba peor, ver a su novio ser masacrado a golpes, esa frustración.
Pero la situación empeoró cuando lo estrella contra el suelo y salta encima de él, aterrizando en su cuerpo y no teniendo nada de piedad contra él.
Louise: ¡DÉJALO EN PAZ! – corre mientras con su varita extendida le apuntaba a Broly y creaba otra explosión, no era tan potente como la del barco, pero sí tenía un gran radio de daño.
Iba a acercarse a Kenichi pero Broly aparece frente a ella, con una sonrisa maniática, Kenichi voltea y se asusta al verla cerca del psicópata.
Kenichi: ¡N-No! ¡Louise! ¡Aléjate! – la peli rosa le apunta con la varita a Broly, pero antes de usar su magia, el peli verde la toma del brazo.
¡CRACK! El brazo de Louise apuntaba en la posición incorrecta.
Louise: ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – cae mientras se sujetaba el brazo torcido, Broly sólo la ve con esa maldita sonrisa.
Henrietta: ¡LOUISE! – tenía varas emociones pero quería ayudarla.
Broly. Otro insecto repugnante dispuesto a morir. – levanta el pie y apuntaba a la cabeza de la peli rosa, pero recibe un fuerte puñetazo en la cara a Broly, mandándolo varios metros.
El rubio voltea y se acerca a Louise quien se había desmayado del dolor y el exceso de magia, pero el Uzumaki aprieta los puños con fuerza, estaba temblando, Broly sólo lo mira con sangre en la boca y se la limpia con la lengua mientras seguía mostrando esa sonrisa.
Broly: ¿Te importa mucho esa mocosa? Entonces debería matarla. – esas palabras fueron el detonante final.
Kenichi: ¡GRRRRRRRRRRRRR! ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – un potente pilar de luz amarilla se levanta hasta el cielo cegando por unos segundos a todos, no sólo eso, el viento que expulsaba fue tan fuerte que se cubrieron como pudieron.
Broly sólo mira ese pilar con rabia y nota a Kenichi con el cabello más erizado, pero lo resaltante es que unos rayos cubrían su cuerpo, el peli verde grita y se lanza a golpearlo, pero Kenichi lo bloquea con maestría y lo aleja de un puñetazo, Broly se enfurece y arroja múltiples esferas pero Kenichi simplemente grita.
Kenichi: ¡RAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH! - expulsa un campo de ki, bloqueando las esferas por completo.
Kenichi miró a Louise por unos segundos, toma y desaparece para aparecer frente a Henrietta, quien quedó sorprendida por la velocidad, pero no dijo ni una palabra ya que Kenichi dejó a Louise con cuidado frente a ella, deja una píldora medicinal para luego estar a unos metros de Broly. El peli verde sólo expulsa su aura y se lanza al ataque.
Broly: ¡Aún aumentando tu poder no será suficiente! – Kenichi simplemente da un salto y arroja varias esferas, la explosión fue tan fuerte que retrocedió al peli verde, para luego darle una patada en la cara, alejándolo varios metros, pero Kenichi no lo deja ir y lo toma de la cara, para generar varias explosiones de ki en su mano.
El Uzumaki no se detiene y le da varios golpes y patadas, hasta que le arroja una esfera de lleno en el abdomen, mandándolo contra el suelo, Kenichi aterriza y gira su brazo, haciendo que Broly se estampe hacia otro lado, el saiyajín trata de levantarse pero el Uzumaki le da un fuerte golpe en el pecho, estrellándolo contra unas rocas, dándole una mirada completamente fría. Broly, con sangre en la boca se levanta.
Broly. ¡Suficiente! ¡Yo soy el saiyajín legendario y tú eres no eres más que un pedazo de basura! - extiende su mano y genera una esfera, pero la estaba canalizando. - ¡Veamos si puedes sobrevivir a esto! ¡Destruiré este lugar y tú con esos insectos! – refiriéndose a los soldados y a la gente del pueblo, pero Kenichi sólo se mantenía impasible, el peli verde iba a impactar la esfera contra el suelo, pero el Uzumaki lo patea como un balón de fútbol. - ¿QUÉ?
Kenichi no se detuvo ahí y le conecta una fuerte puñetazo en toda la cara, mandándolo lejos. En eso, Indra aparece y le da una patada de hacha al saiyajín, creando un cráter y hundiéndolo.
Indra: Te queda bien el look. – decía con seriedad mientras se colocaba al lado.
Kenichi: Lamento lo de tu brazo.
Indra: No importa, ahora tenemos que lidiar con este loco. – ven a Broly expulsar su aura y se lanza al ataque nuevamente, Kenichi es el primero en atacar, pero al dar el puñetazo Broly responde con un golpe de cabeza, para luego dar un codazo a Indra del abdomen, Kenichi se reincorpora y trata de dar otro golpe pero Broly lo atrapa y lo coloca a espaldas para darle un rodillazo.
Kenichi: ¡AHHHHHHHHHHHH! – sentía que la rodilla empujaba su espalda mientras era sujetado de los brazos, a este punto iba a arrancárselos, pero Indra le da un fuerte puñetazo en la cabeza a Broly, aturdiéndolo, Kenichi aprovecha y le conecta un rodillazo en la cara para poder liberarse.
Ambos nuevamente se lanzan al ataque y esta vez Broly tuvo que bloquear algunos golpes mientras que otros sí llegaba a impactarle, hasta que el peli verde contrataca, coloca la mano en la cara de Indra y lo estampa contra el suelo para luego generar una esfera de ki y darle en el abdomen, hundiéndolo más.
Kenichi, conecta múltiples patadas en la cara al saiyajín, quien sólo usa la mano para tomarlo de la pierna y golpear a Indra, el Uzumaki no se da por vencido y le da una esfera de ki en la cara, más precisos en un ojo, dañándolo severamente.
Broly: ¡AHHHHHHHHHHHHH! ¡MALDITA BASURA! – da una fuerte patada, escuchándose un crujir en los huesos de Indra y Kenichi, mandándolo varios metros.
Por más fuerza aumentada, ambos sabían el nivel de peligrosidad de Broly, mientras más tiempo pase en combate, más poderoso se hará, al punto de que nadie pueda contra él.
Indra se levanta pero recibe una esfera a quema ropa, dejándolo con heridas graves, Broly no se detiene y le da una pisada en el abdomen al Uzumaki mientras toma a Indra de la cara y le da un puñetazo en el abdomen. Ahora toma a Kenichi y comienza a apretarlo de la cintura.
Kenichi: A-Ah.... ¡AHHHHHH! – la tortura duró varios segundos, pero parecían minutos para los espectadores.
Louise finalmente despertaba después de ser curada por Henrietta y recuperar algo de energías, aunque aún estaba agotada.
Louise: ¿Qu-Qué pasó?
Henrietta: ¡Louise! – lo abraza. – Me preocupé mucho cuando ese sujeto te atacó.
Louise: E-Es verdad... - mira una píldora. – Esto es..
Henrietta: Kenichi la dejó contigo, es para que recuperes energías. – ella abre los ojos.
Louise: ¿Y dónde está él? – Henrietta con pena señala al Uzumaki siendo torturado por Broly. - ¡No! – toma la píldora y se levanta.
Henrietta: Louise, espera.
Louise: ¡No puedo quedarme de brazos cruzados, ese loco lo está matando! – Henrietta la toma de la mano.
Henrietta: Por favor, no cometas una locura. – la peli rosa niega.
Louise: ¡Pero a este ritmo va a morir! – se suelta del agarre y sale corriendo hacia el campo de batalla.
El pelirrojo estaba a punto de terminar con la columna partida mientras que Broly sólo sonreía mientras apretaba el abrazo, cuando retrocede su cabeza ya que una espada pasó cerca, siendo Louise la responsable, Broly sólo extiende la mano e iba a tirar una esfera, pero Kenichi nota eso y le da una patada en la mandíbula, logrando zafarse del saiyajín.
Kenichi: ¿Qué haces aquí?
Louise: ¿Qué crees que hago? ¡Te estoy ayudando!
Kenichi: ¡Estás arriesgando tu vida! – toma a Louise y esquivan una esfera de ki de Broly.
Louise: ¡Eres mi familiar! ¡No puedo dejar que hagas esto sólo con tu amigo, también es mi responsabilidad!
Kenichi: Es algo que debo terminar, si sigue así, causaría toda una masacre.
Louise: Pero... - Indra se acerca.
Indra: Kenichi tiene razón, mantente segura, esto es muy peligroso.
Louise: Tal vez lo conozcas, pero no puedo dejarlo solo..
Kenichi: Lo siento Louise, pero no quiero perderte. – antes de que Louise dijera algo el Uzumaki lleva a Louise de vuelta con Henrietta. – No dejes que se aleje. – se reúne con Indra.
Indra: Sí que te preocupa tu novia ¿Verdad?
Kenichi: Je, la verdad que sí. – mira a Broly mientras se come la última píldora mientras que Indra hace lo mismo.
Indra: Tendré que utilizar "Eso". – el pelirrojo lo mira con preocupación,
Kenichi: ¿Te has vuelto loco? En tu estado, las posibilidades de que salgas con vida son...
Indra: ¿Crees que no entiendo los riesgos? – preguntó con enojo. – No hay de otra, tenemos que usar nuestras mejores cartas si queremos ganar a este loco y tú lo sabes.
Kenichi: Es verdad. – cierra los ojos. – (Perdóname Louise por lo que voy a hacer.) – aprieta los puños y hace crecer su musculatura una vez más. - ¡KAIOKEN! AUMENTADO DIEZ VECES!
El aura amarilla se torna rojiza, acompañada de rayos, las venas se le notaban y le salía algo de sangre.
Indra: Necesitaré un poco de más daño. – el pelirrojo asiente y ambos se lanzan ataque, para dolor del pelirrojo ahora Indra era quien recibía más daño, pero tenía que tomar lo suficiente para que funcionara.
Broly arroja varias esferas y Kenichi se apartaba para que Indra las tomara, era una distracción extraña, hasta que Indra es alejado por un puñetazo de Broly.
Indra: ¡Bien! - Kenichi asiente y va con él, el peli negro toma a Lostvaine y se coloca en una posición distinta, expulsando mucho poder, Kenichi no se queda atrás y junta sus manos.
Kenichi: ¡Kame......! – Broly no se queda atrás y se aleja mientras prepara una esfera verde de gran poder. - ¡HAMEEEEEE!
Broly: ¡MUEREEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE! – arroja la esfera.
Kenichi: ¡HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! – el pelirrojo, aún con todo el dolor en su cuerpo, arroja su técnica y empieza un choque de poderes, la pequeña esfera ahora era tan grande y estaba a la par con el kamehameha.
Indra sólo se mantenía en la misma posición, pero la verdad es que su ataque estaba aumentando y no se iba a detener hasta tener la oportunidad perfecta, Broly arroja otra esfera y empezó a ganar el terreno, Kenichi retrocedió un poco pero no se quedó atrás.
Kenichi: ¡HAAAAAAAAAAAAA! – expulsa más aura rojiza con rayos mientras aumentaba el ataque, la potencia hace que nuevamente queden parejos, pero Broly seguía arrojando esferas, haciendo que el ataque.
Louise: Su Majestad. – la peli púrpura asiente, entendieron que el ataque iba con todo pero tenían que ganar tiempo.
Henrietta: ¡Soldados! ¡CONCENTREN SU ATAQUE EN EL SUJETO GRANDE! – todo mago prepara sus mejores hechizos mientras que algunos artillero cargaban los cañones para darle a Broly, los jinetes dragón de Albion no se quedaron atrás y prepararon también sus mejores ataques contra el peli verde.
Los jinetes dragón crearon una esfera de fuego gigante y lo arrojaron a la espalda de Broly, quien pudo bloquearlo con un muro de ki y seguía arrojando esferas para superar el ataque de Kenichi, los magos de Tristain prepararon un dragón de fuego y rayos, además de un tornado de picos de tierra, todo contra el saiyajín legendario quien usó de nuevo ese muro de ki.
Sabían que no era efectivo, sabían que podría defenderse, pero si con eso ganaban tiempo, lo harían hasta que dar agotados y así lo hicieron, cargaron con toda la magia de su reserva, combinado con la artillería pesada, generando daños alrededor de Broly, aunque este sólo reía y seguía empujando a Kenichi quien como pudo, aumentaba su poder y se mantenía a raya.
Los magos empezaron a agotarse mientras eran empujados por la fuerte ráfaga, Broly estaba a punto de arrojarles una esfera, cuando en eso, una explosión se hace presente, Louise volvió a usar su magia, toda la que tenía a su alcance y concentrándolo en la esfera, dañando al saiyajín.
Indra: ¡BIEN! – aprieta con fuerza la empuñadura y gira su brazo. - ¡REVENGE......! – extiende su brazo con toda potencia. - ¡.... COUNTEEEEEEEEEEEER!
Kenichi parte la esfera aprovechando la distracción y logra impactar en Broly, seguido de eso, la técnica de Indra impacta en él, generando una gran explosión, además de un fuerte destello.
Segundos después Indra cae de rodillas mientras volvía a la normalidad Kenichi hacía un esfuerzo para mantenerse de pie después de explotar su cuerpo de esa forma.
Indra: Kurome....lo siento.... – cae bruscamente al suelo, Kenichi iba a ayudarlo hasta que nota a Broly de pie, con una sonrisa, a pesar de que no tenía un brazo y varias heridas.
Broly: ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHH! – expulsa su poder, aterrando a los presentes debilitados, aún con ese poderoso ataque seguía de pie, pero había alguien quien ya tuvo suficiente
Kenichi: ¡MALDITO! ¡GRRRRRRRRRRRRRRR! – aprieta los puños. - ¡KAIOKEN AUMENTADO VEINTE VECES! – era un suicidio pero no dejaría que el saiyajín siga con vida ni un minuto más.
Broly se preparaba para su siguiente ataque mientras que Kenichi levanta su puño derecho y concentra su poder ahí.
Kenichi: ¡RAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH! – se acerca a toda velocidad y antes de que Broly haga algo, recibe un fuerte puñetazo en el pecho, dejándolo sin aire, pero no termina ya que el puño de Kenichi le da en la mandíbula, mandándolo al cielo, a una gran altura, despejando el cielo.
Pero aún no terminaba, Kenichi aparece por encima de Broly quien estaba de cabeza y sujeta sus piernas mientras que con sus pies, apretaba la cintura del saiyajín, los sujeta con fuerza y comienza a descender, cubriéndose de una energía carmesí.
Broly: ¡AHHHHHHHHHHHHH!
Kenichi: ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – concentró todo su poder mientras que esa energía carmesí tomaba forma. - ¡ROYAAAAAAAAAAL SPEAAAAAAAAAAAAAAAAAAAR!
La energía tomó la forma de una lanza y al impactar, la tierra comenzó a temblar, la luz carmesí con rayos se hacía presente, el suelo se agrietó mientras brillaba con esa luz carmesí, hasta que se produjo una poderos explosión.
Los magos como pudieron se cubrieron pero varios salieron volando, los del pueblo también pasaron por lo mismo. Louise caminó como pudo en todo el humo y nota la tierra ardiente, ella nota a Indra en el suelo y en una zona segura.
Louise: ¡Kenichi! ¿Dónde estás? – Henrietta logra alcanzarla.
Henrietta: Espera, iré contigo. – decía con algo de cansancio mientras cargaba a Indra quien respiraba débilmente.
Louise: Está bien. – siguen caminando por la zona quemada, hasta que notan una silueta, ellas por un segundo se asustaron al ver una figura musculosa, pero al disiparse un poco el humo, salió Kenichi en su estado base, llevaba a Broly del brazo y lo arroja de cabeza, rompiendo su cuello, rematándolo, estaba en su estado normal.
Louise y Henrietta vieron eso con una sonrisa, finalmente la pesadilla había terminado, el saiyajín legendario finalmente ha muerto. Kenichi caminaba débilmente mientras dedicaba una débil sonrisa a Louise.
Louise también sonríe y corre a recibirlo con los brazos abiertos, pero se detiene y su mirada pasa a una de terror ya que el pelirrojo es perforado por la espalda, al estar exhausto y con la guardia baja, no se vio venir el ataque. La peli rosa ve al responsable y no era otro que Wardes, quien se mantuvo oculto y esbozaba una sonrisa.
Wardes: T-Te dije...que te mataría....aunque fuera...lo último que haga. – decía con algunas heridas al estar cerca del último impacto, retira el estoque y el pelirrojo cae de forma brusca contra el suelo. Louise quedó completamente impactada mientras que el peli plata le dedica una sonrisa. - ¿Qué pasó mi linda prometida? Ah verdad, elegiste estar con un clase baja y quedarte en el fracaso.
Pero no se esperó que Louise le enterrara a Derflinger en el abdomen, dejando en shock al peli plata ya que la última vez ella quedó paralizada cuando se reveló como el traidor.
Louise: ¡ERES UN BASTARDO! – le apunta con su varita, haciendo que brille en la punta y lo deja en la boca del peli plata, Wardes no sabía qué estaba haciendo ya que el brillo desapareció de la varita.
Wardes: - sujetando su herida mientras mira con furia a la peli rosa. - ¿Qué hiciste?
Louise: ¡Desaparece de mi vista!
Wardes: ¡Te mandaré junto con tu novio! – le apunta con el estoque pero nota grietas brillosas en su cuerpo. - ¿Qué? – nota que las grietas brillaban más y más incluso su cara. - ¡AHHHHHHHHHHH!
Wardes termina explotando de la forma más agonizante que se ha visto, incluso Henrietta desvió la mirada para no verlo, no salpicó sangre pero explotar es algo grotesco.
https://youtu.be/YhqHwywHKAc
Louise sólo suelta la espada y la varita y se corre hacia el pelirrojo quien estaba perdiendo una gran cantidad de sangre, la perforación fue en un punto vital y tomando en cuenta que utilizó el kaioken aumentado veinte veces, los músculos habían alcanzado el límite, la pérdida de sangre era inminente, incluso su tos era con sangre.
Louise: ¡KENICHI! ¡RESISTE! ¡POR FAVOR, RESISTE! -Henrietta baja a Indra con cuidado y usa su magia para curar al pelirrojo.
Las heridas cerraban, pero el pelirrojo respiraba con dificultad y abría los ojos lentamente, ella sonríe y lo abraza con cuidado.
Louise: ¡Tranquilo! ¡Ya todo terminó! ¡Todo está bien ahora! – toma sus mejillas y le dedica una tierna sonrisa, aunque estaba llorando.
Kenichi: ¿Ga-Ganamos? – decía débilmente.
Louise: S-Sí, todo acabó.
Kenichi: ¿Cómo está Indra? - Henrietta sólo baja la cabeza con tristeza, había revisado el pulso del peli negro antes de ir a auxiliarlo.
Henrietta: É-Él....ha muerto...su corazón dejó de latir...
Kenichi: Indra....- gira su cabeza y ve al peli negro con los ojos cerrados. – Usaste el Revenge Counter a costa de tu vida...Si tan sólo hubieras llegado a Tristain... -tose con fuerza, escupiendo sangre. – Descansa en paz, Indra Dragneel.
Louise: Kenichi...
Henrietta: Pero si estoy cerrando tus heridas...
Kenichi: E-Es ineficaz.... Usé una técnica peligrosa....el kaioken aumenta mis capacidades...pero aumentarlo sobre tu limitador....es una técnica prohibida que me enseñó....mi padre... - trata de respirar ya que los pulmones no respondían bien.
Louise: ¡Kenichi! – toma su mano. – Tú puedes...has pasado por peores cosas.... – entrelaza los dedos, resaltando el anillo que le dio Kenichi tiempo atrás. – Podemos....podemos estar juntos....
Kenichi: Louise...- ella derramaba más lágrimas.
Louise: No quiero perderte....me reúso, me niego a perderte....se supone que volveríamos a la academia... - la mano izquierda del Uzumaki toma sus mejillas y limpia las lágrimas.
Kenichi: N-No llores. – ella toma su mano. – De-Debo admitir que disfruté cada momento contigo...
Louise: N-No.... Por favor...Kenichi...
Kenichi: Cuando nos conocimos, éramos tan distintos, nos llevamos como perro y gato... - da una leve sonrisa. – Pero...a medida que pasó el tiempo...me enamoré de ti...me enamoré de esa hermosa sonrisa...porque....a pesar de que eras una capa de orgullo....en el fondo, eres alguien hermosa y quien se esfuerza...alguien determinada en esforzarte...
Hasta este punto, Siesta, su familia, la gente del pueblo había llegado, al igual que los soldados de Tristain y Albion, el cielo estaba oscuro y se escuchaban algunos estruendos.
Kenichi: Po-Por favor...Louise....sigue adelante....
Louise: No me pidas esto...Todo esto fue gracias a ti...
Kenichi: Te equivocas... Tú lo hiciste...aunque los demás te llamaban fracasada, inútil, cero....tú te esmeraste en demostrar lo contrario...por favor...no pierdas esa voluntad....
Louise: N-No lo haré...te lo prometo. – el pelirrojo sólo sonríe.
Kenichi: Ojalá hubiera podido pasar más tiempo contigo... quisiera besarte, una vez más.. – ella sonríe.
Louise: Sí, te lo daré con gusto. – lo levanta con cuidado y lo besa, era un beso lleno de amor que ambos se tenían. – Todos los besos que quieras... para ti...
Kenichi: T-Te amo... Louise....- ella sonríe.
Louise: Yo también mi Kenichi, te amo y me gustaría ser tu esposa. – el pelirrojo sonríe.
Kenichi: ¿Usarías mi apellido? – ella sonríe y asiente. – Me hace muy feliz... - se acerca y la besa.
Ella corresponde el beso, este duró más, pero...sentía que la mano del pelirrojo se deslizaba por su mejilla, ella abre los ojos y ve que la mano de Kenichi toca el suelo...ella mira el rostro del pelirrojo y tenía una sonrisa, pero sus ojos estaban cerrados.
Louise: ¿Kenichi? – lo mueve con cuidado. – Kenichi....¡Kenichi!..... – ella toma su mano y la lleva a su mejilla. – ¡Despierta, por favor, despierta! – creyó que el pelirrojo reaccionaría, pero la mano cae al suelo. – Kenichi... - las lágrimas caían, para su dolor, Son Kenichi Uzumaki ha muerto. - ¡NOOOOOOOOOOO! – da un grito al cielo, las lágrimas no dejaban de salir mientras la lluvia caía y apagaba las zonas quemadas.
Todos los espectadores bajaron la cabeza con dolor pero Siesta había caído de rodillas y lloraba también, perdió al chico que amaba, quería acercarse pero sus piernas no respondían, todo bajo el cielo oscuro y lluvioso.
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https://youtu.be/U_vI4U1q8eU
Pasaron unos días y la aldea de Tarbes fue reconstruida con ayuda de Henrietta y los mejores magos, la familia de Siesta ahora tomó el cargo y se encargaron de hacer los preparativos para el funeral de los héroes. Se hicieron un digno entierro tanto a Indra como a Kenichi, usaron magia para que el cuerpo esté bien protegido, las lápidas fueron enterradas en el pueblo donde pelearon, en cuanto a Broly, él fue incinerado y sus cenizas esparcida para evitar que alguien lo reviva. Para sorpresa, los soldados de Tristain que participaron y los de Albion (Quienes se entregaron) estuvieron presentes, además de los civiles, incluso los de la academia estuvieron ahí. Los que conocían al pelirrojo le dieron sus respetos.
Guiche, Montmorency estaban más afectados, seguidos de Kirche y Tabitha, Osmond y Colbert sólo bajaron la cabeza en tristeza. Pero Louise, ella estaba frente a la tumba de su amado, vestida con ropas negras como una viuda, no se casaron, pero ella se declaró su mujer desde que tuvieron relaciones y usaba el anillo que él le dio, por lo que decidió llevar el apellido Uzumaki, claro que muy pocos saben de eso último.
Ahora Henrietta se acerca, mira a todos y procede a hablar.
Henrietta: Muchas gracias por venir. Hoy, nos despedimos de dos valerosas personas quienes no sólo enfrentaron contra soldados de Reconquista, sino que salvaron Tristain de una gran amenaza, lamentablemente, fallecieron después de la pelea, pero su valor y sacrificio no serán olvidados. Dieron su vida para protegernos y le debemos mucho. – levanta su brazo. - ¡Saluden! – los soldados hacen una formación de respeto mientras que la artillería daba tres tiros al cielo.
Las tumbas empezaron a ser enterradas Louise quería extender su mano, quería seguir negándose que su amado había muerto, pero Siesta la tomó de la mano, estaba igual de devastada, pero tenía que acompañarla y fue en un buen momento ya que Louise lloró y la abrazó, Siesta simplemente correspondió el abrazo en silencio, aceptó su derrota pero no iba a dejarla sola en un momento trágico como este.
Los minutos pasaban y la gente se retiraba mientras volvía a llover, dejando una rosa tanto para Kenichi como para Indra, quien sus actos fueron perdonados ya que supieron del control mental por un anillo mágico, menos mal que había estudios de esa clase de objetos mágicos. Seguían pasando los minutos y sólo quedó, Louise, Siesta y los amigos que hicieron en la academia, Henrietta deseó quedarse pero no era el momento, su amiga pasó lo mismo que a ella, perder a su ser amado.
Montmorency: Louise... - ella sólo temblaba.
Louise: Si no hubiera sido débil, si hubiera podido entrenar más tiempo, habría podido detener ese ataque. – refiriéndose a la perforación y su magia contra Broly.
Guiche: No te culpes Louise, tú no eres débil.
Montmorency: Fue algo inesperado pero no te menosprecies. -lo abraza.
Louise: A veces quiero despertar y que nada de esto fuera real. – la rubia le limpia las lágrimas.
Montmorency: Tranquila, él no se ha ido, él estará.... Aquí. – lleva su mano en el pecho de la peli rosa. – Él estará cuidándote como un espíritu protector.
Louise se limpia las lágrimas mientras miraba su pecho, ella lleva su mano ahí y lo comprende, no está ahora con ella, pero la estará cuidando desde el otro lado, no la dejaría derrumbarse ni rendirse, estará para protegerla.
Louise: S-Sí...tienes razón...él está para cuidarme, no como familiar, sino como el hombre que me ama y yo igual.
Montmorency: Así es, él te cuidará. – Louise asiente, pero antes de levantarse, siente unos mareos. - ¿Louise?
Louise: Es-Estoy bien... - dijo mientras se sujetaba la cabeza. – Creo...
Montmorency: Mejor volvamos a casa para que descanses.
Louise: Pero...
Montmorency: Lo verás de nuevo, no iremos a la academia, al menos nosotros no.
Louise: Está bien...
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Gracias a esas palabras Louise no cayó en depresión y pudo avanzar poco a poco, aún le dolía asimilar la muerte de su amado, pero con buena compañía, estaría bien, pero algo extraño es que en las siguientes semanas Louise se mostraba con mareos y nauseas.
Montmorency había estado en Tarbes y averiguando lo que le pasaba a la peli rosa hasta que unió las piezas y las mezcló son su investigación, tenía noticias para su amiga y sale hacia las montañas que están cerca ¿Por qué ahí? Pues Louise se instaló ahí, estaría cerca del pueblo y lejos de cualquiera que la moleste, ni siquiera quería que su familia la buscara porque sabía que ellos ni les importaría la muerte de un plebeyo, por más logro que hizo.
Siesta era quien iba de forma recurrente, llevando la comida o ropa necesaria para que la peli rosa pueda estar tranquila. Aunque la casa donde ella vive es completamente diferente a las casas o castillos que vió antes, resulta que Derflinger le informó de la cápsula que aún tenía Indra, era una vivienda de dos pisos, con cosas que no tenía idea de qué era, pero Derflinger, quien tomó conocimientos de su portador, le explicaba qué era cada cosa.
Montmorency: -golpeando la puerta. – Louise ¿Estás?
Louise: Adelante. -ella abre la puerta y la ve sentada en el sofá mientras hacía una manta con el logo de su novio, un remolino rojo. – Bienvenida.
Montmorency: Sí que te está quedando bien. – mira el logo. - ¿Eso lo pondrás en tus prendas?
Louise: Sí, él me contó que es un símbolo de su familia y como llevaré su apellido, entonces llevaré ese emblema. – ella asiente. – Por cierto ¿Sabes lo que me pasa?
Montmorency: Antes de eso, respóndeme esto. – la mira con seriedad. – Sé que te hiciste pareja con Kenichi. ¿Tú y él ....lo hicieron?
Louise no le contó de eso y se puso nerviosa, ella trató de desviar la mirada pero la rubia no le dejaba rutas de escape.
Montmorency: Lo hiciste ¿Verdad? – Louise asiente avergonzada y con un fuerte sonrojo en las mejillas. – Louise ¿Sabes lo que pasaría cuando lo sepan? Es demasiado peligroso si los demás "nobles" se enteraran, causaría toda una conmoción.
Louise: A mí no me interesa su opinión y tú lo sabes.
Montmorency: Eso lo sé, pero ¿Tus padres? ¿Sus amistades? Pero sobre todo ¿Reconquista? Será complicado que pasen mucho tiempo oculto..
Louise: ¿Pasen? – la rubia da un suspiro. - ¿Qué sucede?
Montmorency: Louise....Seré directa. – la mira a los ojos. – Estás embarazada.
La peli rosa abre los ojos, era consciente que eso pasaría cuando tuvieran relaciones sexuales, pero la pasión y el tiempo juntos la hizo olvidar de ese pequeño detalle.
Louise: Se-Seré mamá.... – lleva su mano a su vientre. - ¿Verdad?
Montmorency: S-Sí. – quería seguir con el tema, pero nota su amiga derramaba lágrimas. – Louise..
Louise: Seré madre...Realmente seré mamá... - una pequeña sonrisa se notaba. – Tendré un hijo con Kenichi.
Montmorency: Louise... - la toma de las manos. – Escúchame, tal vez sea una bonita noticia para ti, pero ten en cuenta los riesgos. – la peli rosa la mira. – Ten en cuenta que los nobles aquí son muy arrogantes y no lo aceptarían, por más logros que hizo Kenichi. Tus padres tampoco lo aceptarían y probablemente exijan que lo abortes, los de Reconquista podrían saber eso y cazarte para tener a tu hijo o hija o peor, que los altos mandos lo reclamen para hacerlo un soldado.
Le dolía decirlo así, pero era mejor ser directa, miró con preocupación a su amiga quien tenía una mirada sombría.
Louise: Que lo hagan.
Montmorency: ¿Qué?
Louise: Que lo hagan y haré que sientan el verdadero infierno. – levanta la mirada, mostrando unos ojos intimidantes. – Tendré un hijo de mi Kenichi y quien quiera quitármelo o atente contra él, lo pagará.
La rubia sabía cómo era cuando se enfurece, además que escuchó cómo su ex prometido Wardes murió por atacar a Kenichi por la espalda, algo rastrero pero recibió lo que merecía., aunque le intimidaba cómo lo hizo.
Montmorency: En-Entiendo... - ve cómo acaricia su vientre. - Te ayudare en todo lo que esté a mi alcance.
Louise: Gracias.
Montmorency: ¿Alguien de confianza a quien puedo contar?
Louise: A Siesta, el director, Colbert-sensei, Tabitha, Kirche y Chii-neesama.
Montmorency: Veré como enviar un mensaje a tu hermana mayor sin que los demás se enteren. – la peli rosa asiente.
Louise: Además no tengo problemas, esta casa se puede mover en caso que quieran buscarme. – la rubia mira el interior y aún seguía sorprendida.
Montmorency: Sigue impresionándome esta casa, no sabía que tu novio era de otro mundo y las cosas son así de desarrolladas.
Louise: Eso es verdad y me gustaría ver ese mundo alguna vez, además que tengo que disculparme con su familia por todo. – dijo bajando la cabeza.
Montmorency: Tranquila Louise, estaremos para ayudarte cuando llegue ese momento. – le da un abrazo, confortando a la peli rosa.
Louise: Muchas gracias Montmorency, gracias por todo el apoyo que me estás brindando.
Montmorency: No te preocupes Louise, estaré ahí para ayudarte.
Y cumpliendo lo pedido por Louise, la rubia contó la noticia del embarazo a los seleccionados, Siesta accedió ayudar en todo para que la peli rosa pueda cuidarse, Tabitha y Kirche se mostraron sorprendidas ya que no esperaban que su amiga terminara embarazada pero se ofrecieron en darle protección por si algún indeseado quiere atentar contra ella. Pero los más impactados fueron Colbert y Osmond, si bien sabían de la relación de Kenichi y Louise, no esperaban que ella terminara embarazada, a pesar de eso, lo asimilaron y decidieron proteger el estatus de la peli rosa, tanto de Henrietta como de los mismos padres de la peli rosa ya que sabían que si se enteran, le harían algo terrible.
En el caso de Cattleya fue muy difícil, Montmorency pidió ayuda a su novio Guiche para que pudieran infiltrarse y contarle a la hermana mayor de Louise sin que se enterara el resto de su familia y se fueron antes de ser descubiertos.
Ya habían pasado cinco meses desde la revelación del embarazo, aunque casi son seis meses, el vientre de Louise había crecido y casi no salía, las cosas las llevaban sus amigos y por el momento seguía viviendo cerca de Tarbes ya que no habían revelado su ubicación y eso le aliviaba.
Kirche: ¡Hola Louise! – decía animada mientras llegaba.
Louise. ¡Kirche, bienvenida! – decía animada.
Siesta: Sean bienvenidos, en unos momentos les serviré la cena. – se dirige a la cocina.
Kirche: Wow, sí que ha crecido. – decía emocionada mientras llevaba su mano al vientre de Louise. – ¿Esa fue una patadita? - la peli rosa ríe.
Louise: Mis pequeños han estado emocionados.
Tabitha: ¿Pequeños?
Louise: Montmorency hizo más estudios y resulta que llevo gemelos. – ambas abrieron los ojos.
Kirche: Vaya, dos bebés, quién diría que eso llegue a pasar. – Tabitha también toca el vientre.
Tabitha: ¿No has tenido ningún problema?
Louise: Bueno, dejando de lado los antojos o el cambio de emociones, no tuve desmayos aunque sí algunos mareos. – decía con tranquilidad mientras dejaba algunos platos y cubiertos en la mesa.
Kirche: Menos mal que no tuviste algo peor.
Louise: Doy gracias a que no. – Siesta llega con la comida lista y todas proceden a servirse.
Kirche: ¿No sales?
Louise: Camino al río que está cerca de aquí, pero no voy al pueblo porque si un soldado me encuentra, puede contarle a Su Majestad.
Kirche: ¿No quieres decírselo?
Louise: Tengo miedo. – ambas la miran. – Tal vez ella pueda ayudar, pero ¿Qué hay de los altos mandos? ¿Qué harían con mis pequeños? – tembló un poco. – Sé que dije que lo lamentarían, pero ¿Y si hacen actos rastreros?
Kirche: Calma, no creo que Henrietta lo permita.
Louise: Sé que no, pero ellos podrían hacerlo a sus espaldas. – ahí la pelirroja no pudo decir nada ya que era verdad. – Ella es de mi edad y ellos podrían tomar las cosas a su favor, hacer las cosas sin que ella se dé cuenta.
Kirche: Tranquila, no dejaremos que dañen a tus hijos y si ignoran las órdenes de la reina, entonces ven a vivir a Germania, aunque tengas que dejar de lado esas tradiciones, pero es por la seguridad de tus hijos.
Louise. Abandonar Tristain, te soy sincera, esa era mi última opción.
Kirche: Podría decir que vayas al hogar de Kenichi pero hasta ahora no hay forma de que vayas.
Louise: Pero tengo algo que no me cuadra, Indra también era del hogar de Kenichi y él pudo llegar, lo que quiero saber ¿Cómo lo hizo? – eso dejó completamente pensativas a las chicas.
Kirche: Es un misterio, pero esperemos que pueda solucionarse.
Louise: Yo sólo quiero que no pase nada para mis pequeños, quiero que tengan la vida que ellos deseen.
Kirche: ¿Aún si uno de ellos desee seguir los pasos de él? – miró a la peli rosa por unos segundos.
Louise: Sé que mi Kenichi tuvo que tomar esa decisión, pero él eligió ser un guerrero, pero si desean ir por ese camino, no los detendré, los ayudaré en todo lo que esté a mi alcance. A diferencia de mis padres, yo si daré a elegir a mis hijos.
Kirche: Esa respuesta me agrada y mucho. – abraza a Louise. – Has madurado bien y serás una gran madre para estos pequeños. – acaricia el vientre.
Louise: E-Eso creo. – dijo aún no segura ya que sinceramente ya que la maternidad no es para nada sencilla.
Siesta: Sí lo serás, has seguido las instrucciones y te has cuidado bien, mantienes un físico estable y conservas tus energías, tomas tu tiempo para darles atención aún sin nacer y eso es un punto positivo.
Louise: Gracias Siesta.
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Los últimos tres meses pasaron rápido, Louise se cuidó lo mejor ya que faltaba poco para dar a luz, aunque estarían expuestos ya que tenía que ir al pueblo para atención profesional, si bien Siesta podía ayudar, necesitaban toda ayuda posible.
Siesta: Ay Dios, lo que faltaba. – miraba la ventana y veía cómo estaba lloviendo.
Guiche: Eso podría retrasar a los maestros. – refiriéndose a Colbert, Osmond y Cheveruse, quien la última se enteró hace poco, casi se desmaya pero no iba a dejarla sola en un momento así, aunque también tuvo cuidado de proteger el estado de la peli rosa.
Louise: Tranquilos, si vendrán pronto. – decía mientras acariciaba su vientre.
Kirche: Sí, pero Montmorency debería estar ya.
Guiche: Llegará a tiempo.
Kirche: Eso espero. – mira a Louise quien tenía una mirada en shock. - ¿Qué pa...?
Louise: L-La fuente...se rompió. – los presentes abren los ojos. – A-Ah....
Guiche: E-Eso quiere decir.
Tabitha: No tenemos tiempo. – carga a Louise quien no podía levantarse debido a dolor.
Siesta: ¡Al cuarto ahora!
Louise: ¡Duele! –la peli negra la ayuda.
Siesta: Apenas es el comienzo, así que aguanta. – la lleva a la habitación, Kirche y Louise también fueron. – Tú afuera. – mirando a Guiche mientras cerraba la puerta.
Guiche: S-Sí... - dijo asustado por la mirada intimidante de la peli negra.
El rubio se sentó en el sofá junto con el padre de Siesta, estaban esperando a que llegaran los invitados.
"¡AHHHHHHHHHHHH!" – el rubio se tensó algo que vió el padre de la peli negra.
Je ¿Primera vez? – el rubio asiente mientras temblaba.
Guiche: No sabía que el parto era así de fuerte.
Lo es, he tenido que pasar por eso cuando nacieron mis hijas chico, el dolor del parto es inimaginable. – el rubio se puso pálido.
Guiche: (Si es así, entonces cuando...)
"¡AHHHHHHHHHH! ¡ME DUELE!" – el rubio abrazó sus piernas.
"¡RESPIRA LOUISE, ESTO NO ES FÁCIL!" – el grito de Siesta era firme pero tapaba la preocupación.
Los gritos siguieron por unos minutos y Guiche no podía con tanto, en tocan la puerta y el rubio atiende, siendo Montmorency con Osmond, Colbert y Cheveruse.
Montmorency: ¿Y Louise? – el rubio señala el segundo piso, escuchando otro grito de dolor. - ¡Ya empezó, vamos!
Ella con la maestra se dirigen al segundo piso mientras que los maestros se quedaron, los hombres estaban dando vueltas de un lado a otro, esperando que terminara este dolo pero los gritos de Louise no cesaban, era un parto muy doloroso y tomando en cuenta que llevaba dos.
Osmond fumaba su pipa en la entrada bajo el techo mientras veía que la lluvia seguía cayendo, Colbert estaba con los brazos cruzados mientras acompañaba a su colega, pero él miraba a las afueras del pueblo, sentía que alguien se acercaba.
"¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!" – fue el último grito antes de queda sólo se escuche el sonido de la lluvia, ambos maestros desvían la mirada y la enfocan en las escaleras, proceden a subir, Guiche dejó de lado su miedo y procede a subir también, parecían que no escuchaban nada, hasta que se acercaron a la puerta y es abierta lentamente por Montmorency quien respiraba de forma pesada.
Los tres se pusieron muy nerviosos pero todo rastro se fue al ver la sonrisa cansada de la rubia.
Montmorency: Ya nacieron, es un niño y una niña. – los tres abren los ojos por la sorpresa y emoción, ingresan y escuchan el llanto de dos bebés, Louise miró al primogénito y débilmente, acaricia su mejilla.
Cheveruse: Aquí está el pequeño. – dijo con una sonrisa mientras que Louise, mostraba una débil sonrisa mientras seguía acariciando al bebé.
Louise: Mi pequeño, hola. – el bebé aún lloraba pero se calmó un poco al sentir la mano de su madre.
Siesta: Y aquí está la pequeña. – se acerca con cuidado y muestra a la niña, Louise no quitaba esa sonrisa, ver a sus hijos es una experiencia muy hermosa.
Louise: Es tan hermosa. – no quería caer dormida pero el cansancio era mucho.
Cheveruse: ¿Cómo los llamarás? – Louise mira a sus hijos y responde.
Louise: Ezequiel....y Elizabeth. – la peli negra carga a sus hijos. – Son Ezequiel y Elizabeth Uzumaki Valière.
Osmond ríe levemente mientras que Colbert sonreía, Guiche abrazó a Montmorency ignorando el hecho que estuviera algo sucia por el tema del parto, cosa que la rubia sonríe y miran la escena, hasta que escuchan la puerta abrirse.
¡Hay una visita! – todos se tensaron ya que no sabían quién era, pero Louise se alivió al reconocer a la persona.
Louise: Chi-neesama. - la peli rosa mayor se acerca y la abraza con delicadeza.
Cattleya: Louise. – dijo con algo de tristeza. – Lamento lo que pasó con tu familiar y novio. Lamento no haber estado ahí para ayudarte en un momento tan difícil.
Louise: Pero...al menos estás en este momento. – le da una palmada en la espalda a su hermana. – Te presento a Ezequiel y a Elizabeth. – la peli rosa mayor se separa del abrazo y mira con ternura a los bebés.
Cattleya: Vaya Louise, no esperaba que fueran dos. – le dan con cuidado a Ezequiel mientras que Louise lleva a Elizabeth. – Soy tu tía Cattleya, mucho gusto en conocerte. – el bebé se movió un poco y ella sonríe.
Louise: Me alegra mucho verte hermana.
Cattleya: No iba a fallarte de nuevo.
Osmond: Sé que me prometí que no iba a llorar, pero esto no puedo soportar. – dijo mientras se limpiaba las lágrimas, Colbert estaba casi igual.
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El nacimiento fue un completo éxito, Louise estaba muy feliz al haber dado luz a Ezequiel y Elizabeth, Cattleya decidió pasar unas semanas, cosa que preocupó a su hermana menor pero ella dijo que visitaría a Louise por un par de semanas, algo que disminuyó las sospechas, pero no al 100%, lo mismo era con el tema del reporte de asistencia.
Henrietta por su parte quería verla ya que no lo hizo después del funeral, más que por respeto, era porque la situación con Albion se tornó muy tensa. Con Louise, ella había ido a la academia, sin esa vergüenza de llevar a sus hijos, ya no importaba si los demás se enteran además, si la situación empeora, tiene un lugar a dónde ir.
Colbert: Me alegra que estés aquí, aunque como visitante.
Louise: Lo sé, pero aún con esta responsabilidad, seguiré practicando mi magia, eso hice cuando estaba en mi tiempo de embarazo y pude comprender el elemento y el por qué el traidor ansiaba tenerlo.
Colbert: Ya veo. – notaba la mirada de los estudiantes hacia la peli rosa quien llevaba a Ezequiel mientras que Siesta llevaba Elizabeth, la peli negra fue designada como maid personal para la peli rosa. - ¿Estás segura de esto?
Louise: Yo tomé mi decisión y no daré marcha atrás, además, no iba a dejarlos solos.
Colbert: Buen punto. – ingresan a la oficina del director.
Osmond: Oh Louise, bienvenida.
Louise: Gracias por tomarse la molestia de recibirme.
Osmond: No hay problema, además que podría darte información necesaria con respecto a la historia de la fundación de Halkeginia y la magia del fundador, podría serte muy útil.
Louise: Muchas gracias director, pasaré la noche aquí y mañana regresaré a Tarbes, si la situación empeora, ya sabe a dónde iré.
Osmond: Sé lo peligroso que será esto, pero estaré para ayudarla en todo lo que pueda. – la peli rosa asiente. – Y no se preocupe, la profesora Cheveruse estará alerta si hay alguien quien se mete con usted.
Louise se dirige a su habitación, pasaría la noche ahí por última vez, pero tanto ella como Siesta escuchaban los comentarios de los estudiantes y la mayoría no era de agrado para Louise.
"¿Has visto? La Cero ha regresado después de meses." – dijo una voz femenina.
"¿Y esos bebés? ¿Acaso son de ella?" – dijo otra.
"Qué vergüenza, ¿Con quién se habrá metido para llevar a esos mocosos?" – ese comentario enojó a Siesta mientras que Louise se mantenía calmada.
"¿Acaso no lo sabías? El padre es el chico que peleó en Tarbes, un tal Son Kenichi." – menciona el nombre con un toque hostil.
"¿Ese no era el nombre de ese plebeyo que invocó?" – la burla se notaba.
"¿En serio tuvo hijos con un clase baja?" – ahora fue una voz masculina.
"¿La tercera hija de la familia Valière con un plebeyo poca cosa?" – respondió otro.
"¿No es el chico que peleó y murió en Tarbes?" – sonó curioso.
"Murió por meterse en asuntos que no correspondían, si hubiera ido, habría vencido esa "amenaza" sin derramar una goa de sudor." – respondió con arrogancia el chico.
"Sí, de seguro lo habríamos derrotado sin problema, no sé por qué la princesa se tomó la molestia de hacer un funeral a ese plebeyo insignificante." – Siesta iba a gritar pero Louise se acerca a ella.
Louise: ¿Puedes llevar a los niños a mi habitación? – decía con una voz "calmada" pero la mirada estaba tapaba por su cabello, Siesta sólo asiente y se retira con algo de miedo.
La peli rosa dirige su mirada a esos estudiantes que hablaron mal de su amado y se dirige hacia ellos.
Miren, la cero se acerca. – dijo uno de los estudiantes. - ¿Qué pasa Louise la Cero? ¿Acaso buscas al padre de esos mocosos que lleva esa plebeya? ¿En serio son tus hijos? – los demás se ríen.
No sé cómo te acostaste con un plebeyo y encima tu familiar ¿En serio caíste tan bajo la Cero? – dijo una estudiante. - ¿Qué diría tu familia si te ve...? – iba a tomar su cabeza pero la peli rosa la toma del brazo y para su sorpresa, lo rompe con fuerza pura. - ¡AHHHHHHHHHHHHH!
La peli rosa le da una patada en el abdomen, estrellándola contra una pared, los estudiantes estaban temblando al ver eso mientras que Louise se acerca ahora al chico que insultó a su amado y antes de que diga algo, recibe una poderosa patada en los testículos, reventándolo.
¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH! – algunos ya se orinaron del miedo mientras que Louise levanta la mirada, no habían visto la muerte pero ella parecía la emisaria.
Louise: Insultan de nuevo a mi amado Kenichi o se meten con mis hijos y te juro que te arrepentirás de haber nacido. ¿Entendieron?
Cheveruse: ¡Louise-san! – la peli rosa pasa al lado de ella.
Louise: Insultaron a mi novio, así que los castigué. – se retira a su habitación mientras que la maestra se queda con los bulíes.
Siesta: Louise-san. – la peli rosa se acerca y la peli negra le da un abrazo. – Tranquila.
Louise: Son unos idiotas, no toleraré que insulten a mi amado después de salvar sus vidas, de no haber sido por él e Indra, ese psicópata habría causado un genocidio. – la peli negra estaba temblando un poco por eso, no había visto a alguien tan despiadado.
Siesta: Lo sé y ellos no vieron a ese monstruo, no saben lo que dicen. – Louise asiente cuando escuchan a Ezequiel llorar. – Oh oh.
Louise: Mi pequeño Ezequiel, ven aquí. – carga a su hijo. – No llores, esas personas malas no insultarán a papá, mamá les dará una lección. – con su dedo trata de darle cosquillas con algo de éxito. – Oh, ¿Acaso quiere comidita mi pequeño?
Ella se sienta en la cama, abre su camisa y amamanta al pequeño y para que esté tranquilo, tararea una canción que le enseñó el pelirrojo, una canción que le cantaba su madre cuando era niño.
Louise: ¿Podrías traer algo de comer?
Siesta: Sí, no tardaré mucho. – se retira mientras que la peli rosa seguía dando de comer a su hijo.
Esa noche ella había sido llamada a la oficina debido a que los estudiantes se quejaron por el comportamiento hostil de Louise, para ser precisos los lesionados.
Louise: Ya estoy aquí director.
Osmond: Oh, Louise, lamento molestarte pero recibí un reporte de que atacaste a ambos estudiantes.
Louise: Sí, lo hice y la razón es que insultaron la memoria de mi amado.
¡No es cierto! ¡Nos atacó de la nada! – la peli rosa simplemente la mira, callándola.
Louise: ¿Acaso tus padres te enseñaron a mentir? – lo dijo con una voz tan fría que congelaría a los más débiles, literalmente.
Oh vamos, ¡Estás así porque murió ese plebeyo! ¡Yo lo habría matado y habrías tenido una mejor vida al lado de un héroe de verdad! – dijo uno de los estudiantes con arrogancia.
Osmond: Con el debido respeto, pero está insultando a un héroe de guerra, no toleraré cualquier insulto hacia él. – la seriedad no era común en él, pero no toleraría una falta.
Pero ¿Por qué no? No entiendo cómo la princesa se tomó su tiempo cuando sólo eran unos plebeyos. – Colbert, Cheveruse y Osmond estaban perdiendo la paciencia pero se tensaron ya que Louise mostró un instinto de matar.
Colbert: Espera Louise, no hace falta que tomes acciones, nosotros nos haremos cargo. – la peli rosa sólo se calma, aliviando a los maestros.
¿Pero por qué nosotros? – dijo una de las chicas.
Osmond: Estoy seguro de su "Valor" pero ese sujeto que atacó, era alguien despiadado, le destruyó el brazo a uno con un ataque devastador, muchos soldados salieron heridos en medio del combate y fueron testigos de su brutalidad al romper huesos, varios huesos ¿Ustedes pasarían por todo eso? – los estudiantes palidecieron desde que escucharon la parte de perder el brazo.
Louise: Cuando peleen hasta romperse los huesos, cuando tengan el temor de perder a un ser querido controlado o capaz de pelear contra una bestia que causó una gran devastación en el campo, que rompe huesos y no diferencia si es hombre o mujer o niño, te pones a alardear, pero si vuelves a insultar a mi amado, lo lamentarán. – se retira de la oficina y regresa a su habitación, sólo tenía que esperar unas horas más y volver a Tarbes.
//==//==//
Lamentablemente no pudo ocultarse por más tiempo, dado que fue a la academia y mostrando a sus hijos, los estudiantes revelaron el estado, haciendo que se arme un escándalo de la noche en la mañana, varios comentarios de los nobles y decían estupideces de "la vergüenza de la tercera hija de la familia Valiere", y mencionando ese apellido, los padres estaban rojos de la vergüenza por eso, no podían, se negaban incluso querían orar al fundador para que todo esto sea una pesadilla o una broma de mal gusto.
Louise estaba guardando todas sus cosas para poder irse a Germania, había guardado la casa en la cápsula y lo esencial a la mano, como suministros o comida, no podía usar barco sino un transporte terrestre lo más discreto.
Siesta: Esto es algo que debimos esperar.
Louise: Bueno, no podía dejar mis hijos solos, además, si tengo que irme, que así sea. – carga a Elizabeth y a Ezequiel. – No se preocupen mis pequeños, nos iremos a un lugar mejor.
Siesta: Será mejor irnos antes de que lleguen por respuestas.
Louise: Ya lo sé. – el pequeño Ezequiel tenía leves quejidos. – Tranquilo Ezequiel, no pasa nada, todo estará bien. – ellos salen del cuarto. – Mamá, papá...
Hija, por favor, cuídate mucho. – decía el padre la peli negra quien sollozaba. – No te arriesgues demasiado.
Y no te preocupes, cuidaremos hasta el final la tumba de nuestros héroes, no dejaremos que les hagan algo. – dijo la madre de Siesta mientras miraba a Louise. – Louise-san, por favor, cuídate también.
Louise: Los extrañaré. – recibe un abrazo de ambos padres. –Muchas gracias. – dijo con una sonrisa.
¡Tenemos una visita inesperada! – Louise y Siesta intercambian miradas por unos segundos y se dirigen a la puerta, la peli rosa abre los ojos ya que nadie usaría prendas raras excepto su novio, pero lo que pudo notar, es que algunos llevaban el emblema Uzumaki.
Siesta: N-No puede ser...
Louise: (¿Realmente son ellos? ¿Realmente son...? -da un paso. - ¿Sí?
Buenos días, estamos buscando a nuestro hijo, Son Kenichi Uzumaki y su amigo Indra Dragneel ¿Lo habrán visto?. – Siesta y sus padres abren los ojos mientras que Louise estaba a punto de lidiar con el encuentro con los padres del Uzumaki, sus suegros.
Louise: Ustedes son...sus padres.
Soy Gine Uzumaki, madre de Kenichi, ha desaparecido más de un año y finalmente llegamos aquí, queremos saber dónde está nuestro hijo. – respondió la pelinegra con puntas rojas.
Louise: Sí, lo conozco....pero...tiene que ser fuerte.
¿Qué pasó con mi hijo? – dijo ahora el peli negro con una voz muy seria y firme, los que estaban cerca, se habían tensado, más porque parecían que estaban con alguien de autoridad.
Louise: Acompáñenme. – los visitantes proceden a seguirla.
A propósito, ¿Cómo te llamas? – decía una pelirroja de casi su edad.
Louise: Me llamo Louise, Louise Uzumaki Valiere. – los invitados se detuvieron bruscamente y notan el emblema de remolino rojo en su ropa, Gine se acerca y la toma de los brazos.
Gine: ¿Qué eres de Kenichi?
Louise: Después le explico, usted quiere ver a su hijo y yo lo llevaré, después les daré las respuestas que pida. – dijo con serenidad, la pelirroja y el pelinegro con un mechón rojo toman los hombros de Gine, para calmarla.
Madre, tranquila, ella nos está guiando así que vamos. – la madre se calma un poco y sigue a Louise, Siesta se veía nerviosa por cómo iba a terminar la situación mientras llevaba a Elizabeth y su madre llevaba a Ezequiel.
Louise: Aquí están. – dijo con una voz triste, Gine se acerca y cae de rodillas, Bardock queda en shock y los jóvenes, incluyendo un rubio, un peli azul y un peli negro con gorra quienes tuvieron una expresión de dolor, pero una peli negra se acerca a la otra tumba, donde estaba la espada Lostvaine enterrada.
Indra-kun....- pasa su mano por la tumba y comienza a sollozar.
Gine: ¡NOOOOOOO! ¡MI HIJO! - tocaba la tumba con el emblema Uzumaki.
Bardock: Hijo... ¿Por qué? – acompaña a Gine mientras las lágrimas ya salían, era alguien de voluntad fuerte, pero los hermanos no tenían esa fuerza de voluntad, las lágrimas salían, la pelirroja también cayó de rodillas mientras que el peli negro de con mechón rojo llevaba su mano al corazón.
Hermano...No...Esto no es posible... - decía la pelirroja negando la realidad.
Chica, ¿Esto no es una broma? – decía un rubio mientras temblaba de ira, pero la seriedad de Louise demostraba que no mentía para nada. - ¿Quién....? ¿Quién lo hizo? – iba a tomarla de los brazos, quería respuestas pero el peli azul lo detiene
¡Satoshi basta! – dijo con seriedad pero sus ojos mostraban dolor, las lágrimas querían salir.
Satoshi. Pero...esto no es justo Takao...esto no es justo. – golpea el suelo. - ¡NO ES JUSTO! – Takao sólo miraba el cielo mientras lloraba en silencio.
Takao: Amigo....- las lágrimas pasaban por sus mejillas y Louise baja la mirada.
Gine: ¡MI HIJOOOO! ¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ? – Bardock la abraza mientras dejaba que libere todo ese dolor que tenía acumulado. – Después de mucho tiempo buscándote... -el peli negro sólo la abraza con más fuerza.
Louise sólo derramaba lágrimas en silencio, estaba dolida y ver así a los padres de su amado, sólo aumentaba ese dolor, los bebés se sintieron incómodos y empezaron a llorar, cosa que la peli rosa se acerca y abraza a ambos y siendo visto únicamente por Takao.
Ya era de tarde y la familia Son-Uzumaki se quedó cerca de la tumba de ambos, no querían irse, Gine estaba en la tumba, cerraba sus ojos y llevaba las manos al corazón con el collar del pelirrojo, un collar para que pueda ver la luna llena sin repercusiones.
Bardock: Señorita Louise ¿Cómo fue que pasó? ¿Cree que pueda contarnos ahora?
Louise: Sí. – Gine se acerca y la mira con el emblema.
Gine: Queremos saber todo y ¿Cómo es que portas el emblema? – dijo mientras la miraba.
Louise entrega sus bebés a Siesta y procede a explicar todo, cómo fue que lo conoció durante la invocación, cómo fue que lo hizo su familiar, las aventuras que tuvieron a lo largo de las semanas, cómo casi muere a manos de su ex prometido, algo que explicó a detalle desde el principio y cómo fue que tuvo sentimientos por el pelirrojo, también el malentendido con Kenichi y el que se fuera a buscar unos tesoros, consiguiendo algo que después les mostrará para finalmente aceptar sus sentimientos y el hecho que se hicieron uno solo. Gine y Enju tenían un aura oscura por corromper a su hijo/hermano, siendo calmadas por Bardock y Gine, Takao y Satoshi estaban mirándola con atención, en especial el peli azul.
Una vez Louise esquivó la bala, continuó con su relato, la invasión de Reconquista y la defensa que hizo Kenichi, Siesta tomó detalle de su amistad con el Uzumaki y cómo protegió su hogar, primero fue contra el ejército enemigo, después contra Indra quien había sido controlado por el ejército enemigo, su breve victoria y liberación de Indra hasta que mencionaron la palabra de alguien que los dejaría erizados, la pelea con el saiyajín legendario...
"BROLY"
Bardock: ¿QUÉ?
Gine: ¡IMPOSIBLE! ¡BROLY FUE DERROTADO POR BARDOCK! – reclamó completamente en shock.
Louise: ¿Fue en un día con eclipse? – Bardock asiente ya que recuerda ese momento. – ¿Cómo fue que lo derrotó?
Bardock: Interrumpí su liberación de poder y le conecté un puñetazo, mandándolo al cielo y haciendo que explote con su propio poder, creí que lo derroté....
Seguro que al explotar, se fue directo al eclipse, eso pudo generar una especie de traslado a este mundo. – todos se confundieron ya que no conocían esa voz, pero Louise y Siesta sí.
Satoshi: ¿Una espada parlante? – todos se sorprendieron por eso.
Saludos, soy Derflinger, fui compañero de Kenichi y me contó parte de la pelea que tuvo usted contra ese monstruo. – respondió la espada parlante.
Bardock: Mi hijo e Indra pelearon contra ese monstruo... - tenía sentimientos encontrados.
Gine: Pero ¿Qué hay de Broly?
Louise: Kenichi lo derrotó, arriesgando todo en un ataque devastador, Royal Spear, según escuché. – Shun y Takao abren los ojos.
Takao: Ese era un ataque devastador de alto nivel y de doble filo, pero a pesar de los daños, estaría en buen estado. – lleva su mano al mentón. - ¿Qué pasó después?
Louise: Wardes, ese traidor, le apuñaló por la espalda, el cuerpo de mi amado...estaba completamente dañado por esas técnicas y colapsó con el ataque de ese miserable. – aún sentía culpa por no haber reaccionado a tiempo. – Además, su previa pelea contra Indra, él expulsó un aura roja y su musculatura aumentó.
Bardock: ¡El kaioken! ¡No creí que fuera capaz de utilizarlo, pero ni con eso, pude contra Broly al principio!
Derflinger: Lo combinó con su estado dorado. – la familia Son-Uzumaki levanta la mirada.
Bardock: ¿Dices que mi hijo alcanzó el estado de super saiyajín? – Louise no comprendía bien lo de la fase pero asintió.
Siesta: ¿Super saiyajín?
Shun: Tú si sabes algo de eso ¿Verdad señorita Louise? – la peli rosa asiente.
Louise: Kenichi me contó que un saiyajín es una raza guerrera, fortaleciéndose por cada combate, también lo del tema de la luna llena, sin embargo, no me contó de todo, pero deduje que cuando se enojó cuando se burló de Kenichi y también amenazó con hacerme lo mismo que su amigo.
Bardock: El detonante de la ira, eso es lo que produce ese estado, el super saiyajín, un guerrero con cabello dorado.
Louise: ¿Y qué hay del otro? Su cabello era dorado al principio y después se tornó verde.
Bardock: Broly, su poder era demasiado, podría haberlo controlado, pero se dejó llevar por su sadismo y crueldad enseñados por Paragus, convirtiéndose en un renegado de Aiur, ambos fueron desterrados pero él, en venganza quiso hacer un golpe de estado. – da un suspiro. -Broly perdió el control y mató a su propio padre, peleé contra él y lo derroté, aunque salí muy malherido.
Louise: Entiendo.
Takao. ¿Qué hay del responsable quien apuñaló a nuestro amigo?
Louise: Wardes...estallé en ira por eso y murió. -el peli azul da un sentimiento. – Si hubiera reaccionado, su hijo, podría tener una oportunidad para salvarse.
Takao: Por cierto ¿Esos pequeños son...? – Bardock, Enju y Gine también notaron a los pequeños.
Louise: S-Sí..- los mira fijamente. – Cuando Kenichi y yo....ya saben... terminé embarazada. – Gine se acerca, la peli rosa estaba temblando. – Y sí, sabía de las consecuencias y me hace feliz cuidar a esos pequeños, me prometí ser una gran madre para ellos.
Gine: ¿Amas de verdad a mi hijo?
Louise: Lo amé y lo sigo amando, no importa la condición, él me dio valor para poder seguir adelante, lo amo porque no sólo fue mi espíritu guardan, fue el hombre quien se llevó mi corazón. – levanta su mano, mostrando el anillo. – Él me entregó esto y yo lo conservaré hasta el final, como Louise Uzumaki Valière, eso le prometí a Kenichi...antes de que se fuera... -a pesar del dolor, no bajó la mirada.
Bardock: Gine...
Gine: ¿Puedo verlos? – Louise asiente, Siesta se acerca y la peli negra toma a Elizabeth, acaricia su mejilla y lágrimas caían de la peli negra al ver a sus nietos. - ¿Cómo se llaman?
Louise: Ella es Elizabeth y él. – carga al niño. – Es Ezequiel.
Gine: Ho-Hola, pequeños...soy su abuela Gine.... – extiende su dedo, y la pequeña cierra su mano, atrapando el dedo, eso le vino un recuerdo cuando su hijo era apenas un bebé e hizo lo mismo.
Bardock se acerca y Louise le da a Ezequiel, el peli negro mira al pequeño con leve ternura, pero las lágrimas salían, salían al recordar todo lo que vivió con su segundo hijo, él, alguien quien se mantenía sereno, quien era tranquilo, lloró, sus hijos querían acercarse pero el peli negro recupera la compostura, por más doloroso que fuera.
Bardock: Te llamas Ezequiel. ¿Eh? – el pequeño da una sonrisa y el peli negro hace lo mismo, aunque con algunas lágrimas traicioneras.
Shun: No esperaba que mi hermano fuera padre. – se acerca y mira a Elizabeth. – Hola, soy tu tío, mucho gusto. – dijo con una leve sonrisa.
Enju: Louise, con todo lo que has contado, a pesar de que eres una chica orgullosa, amaste a mi hermano y aceptaste tener hijos con él, tienes mis respetos. – coloca una mano en el hombro de la peli rosa haciendo que la peli rosa de un asentimiento.
Takao: Aaron ¿Pasa algo?
Aaron: Cuando llegamos ¿No notaste que ella y la peli negra iban a irse del pueblo? – el peli azul asiente.
Gine: ¿Eso es verdad?
Louise: Pasaron muchas cosas, la academia donde estudiaba ya saben que soy madre del héroe de Tarbes, pero ellos lo tratan de plebeyo y debido a que la noticia se esparcirá rápido, me están buscando, incluyendo mis propios padres.
Shun: ¿Tus padres por qué?
Louise: No aprobarían que tuviera hijo con un "plebeyo".
Satoshi: ¿O sea, por el hecho de no tener magia o sin tierras, le llaman plebeyo?
Louise: Lamentablemente en esta nación ven a los plebeyos como meros sacrificios o sirvientes y admito que yo me comporté así antes de conocerlo, pero cambié para bien. Sin embargo, es que como los altos mandos de Tristain saben de la pelea y de las habilidades de Kenichi y ahora que saben que tengo hijos de él.... – Bardock y Gine afilan su mirada.
Bardock: Gine....
Gine: Mi hijo sacrificó su vida por este lugar aunque no le correspondía, pero si hacen algo a mis nietos. – la peli rosa se sentía protegida.
Bardock: ¿A dónde pensabas ir Louise?
Louise: Una de mis amigas me ofreció ir a Germania, pero también tengo algunos puntos negativos ya que podrían pedir que regrese a Tristain.
Gine: Pero podrías regresar con nosotros, en Aiur podrás estar segura y nuestros consejeros son avariciosos.
Louise: ¿Es-Está segura? Sé que Kenichi me ofreció conocer Aiur y vivir ahí también, pero quería conocerlos a ustedes primero.
Bardock: Pues ya nos conoces y estaremos para protegerte, tanto a ti como a tus hijos.
Louise: Gracias.
Siesta: Louise, tenemos problemas. – señala unos jinetes que se acercaban a gran velocidad y las ropas eran de soldados de Tristain, al acercarse, resultaron ser mosqueteras, un grupo de soldados sin magia muy bien entrenados.
Satoshi y Takao preparaban sus armas, Aaron se ajusta la gorra, pero Shun y Enju los detienen, a no ser que muestren intenciones hostiles, se mantendrían con la guardia alta, Louise sólo suspira mientras ve a los jinetes acercarse.
Señorita Louise Valière, Su Majestad solicita su presencia. – mira a los recién llegados y nota el emblema. - ¿Son familiares de Son Kenichi?
Bardock: Padres, hermanos y amigos.
Soy Agnes, mucho gusto, por favor, venga con nosotros. – Bardock y Gine intercambian miradas y asienten, dado que podrían hacer una salida de emergencia cuando fuera necesario.
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Los chicos de Aiur llegaron al palacio, estaban algo sorprendidos que la infraestructura era como en la Edad Media de donde venía. Los guardias miraban con cautela a los recién llegados, en especial el emblema, ya que era correspondiente a aquel chico que peleó y murió en Tarbes.
Al momento de ingresar al salón principal, ven a una chica peli púrpura y se alegra de ver a Louise ya que no la vió por mucho tiempo desde el funeral, aunque se sorprendió al ver otros invitados.
Henrietta: Bienvenida Louise, ha pasado mucho tiempo. – la abraza con cuidado ya que llevaba a Elizabeth. – Así que era verdad.
Louise: Sí, no le comenté esto ya que quería proteger a mis hijos.
Henrietta: Puedo comprenderlo. – mira a Ezequiel. – ¿Dos hijos?
Louise: Sí. – se rasca la mejilla mientras que la peli púrpura mira a los invitados.
Henrietta: ¿Ustedes cuidaron de Louise?
Louise: No, en realidad, son ... los padres de Kenichi. – Henrietta abre los ojos y mira a Bardock y a Gine.
Henrietta: O-Oh...
Gine: Mucho gusto Su Majestad, soy Gine Uzumaki. – da una leve reverencia.
Bardock: Y yo soy Son Bardock, rey de Aiur y padre de Kenichi. – dijo con seriedad y tras esa noticia, Siesta, Louise y Henrietta abren los ojos.
Louise: (¿Re-REYES?)
Henrietta estaba completamente asustada, si bien sabía que su héroe era de otro mundo y quería agradecerle por todo lo que hizo, no se esperó que sus padres fueran reyes.
Henrietta: ¡Lo lamento! – baja la cabeza.
Bardock: Mantenga la firmeza, si bien ya sé lo que pasó, no tengo nada en contra de usted.
Henrietta: Y-Ya veo... - dijo nerviosa.
Bardock: Pero hemos venido ya que Louise nos contó de la situación y estamos para hablar con usted.
Henrietta: Sí y realmente quería ayudarla ya que la situación está saliéndose de control.
Bardock: ¿Acaso no puede controlar a sus subordinados? Porque ser joven no es ninguna excusa.
Henrietta: Lo tengo claro, pero es muy complicado debido a la tensa situación que pasa ahora. - da una reverencia. - No quiero que la situación empeore, por eso llame a Louise.
Bardock: Podría ocultarla en Aiur.
Henrietta: ¿Lo dice de verdad?
Bardock: Considérelo una ayuda extranjera oculto, al menos hasta que dejen en paz a la señorita Louise y a sus hijos.
Desafortunadamente Agnes ingresa con una mirada de angustia y molestia.
Henrietta: ¿Qué sucede?
Agnes:Los guardias del consejo han visto la llegada de la señorita Valière y han organizado una reunión urgente.
Henrietta: Oh no.
Bardock: Pues a ver qué quieren. - dijo con seriedad, quería saber ¿Que dirían?
Todos proceden a ir a la sala del consejo, siendo vistos por algunos soldados, los murmullos alcanzaban a los oídos de los extranjeros, pero lo que más decían era del emblema que llevaban algunos, relacionando con el héroe de Tarbes, algunos positivos y otros negativos.
Hasta que llegaron, al entrar, habían seis personas, con una mirada completamente seria, pero Bardock no era tonto, detrás de esa mirada, podía ver la mirada codiciosa de esas personas, dirigida hacia Louise y los bebés que llevaba.
Henrietta: Escuché que solicitaron una reunión con mi invitada. ¿Se podría saber para que es?
Bueno Su Majestad, queríamos aprovechar en hablar con la señorita Valière sobre algunos temas. - dijo un consejero.
En primer lugar ¿Qué hace la servidumbre aquí? Solo pedimos la presencia de la señorita Valière.- Henrietta se puso algo pálida ya que estaban hablando mal del líder de otra nación.
Henrietta: Ellos son los padres y amigos de los guerreros que lucharon en Tarbes!
¿Los héroes de Tarbes? Oh, ya veo, pues no esperaba que contáramos con la visita de los padres de nuestros soldados. - eso no le gustó ni a Henrietta ni a Louise, para empezar, ellos no le deben lealtad, es más, Kenichi solo la apoyaba a Louise y pelea por sus seres queridos, pero ni él ni Idea pelean por una nación que no le corresponde.
Bueno, les damos las gracias y Su Majestad ha hecho un funeral en honor a ambos, también se le brindará una recompensa por los aportes que hicieron. - dijo restándole importancia, un grave error que le va a costar más adelante.
Y volviendo al tema principal, señorita Louise, según informes de la academia de magos de Tristain, usted se dió de baja indefinida debido a asunto de maternidad. - Louise solo chasquea la lengua de forma disimulada, tenía una idea en mente.
Louise: Si, Kenichi y yo tuvimos dos hijos y asumiendo la responsabilidad, decidí retirarme de la academia para cuidarlos.
Recibimos un mensaje de sus padres, quieren hablar seriamente con usted y también queríamos cuidar de los niños. - dijo un consejero con una falsa amabilidad.
Louise: Hablaré con mis padres cuando decidan venir. - eso no vio venir a los consejeros ya que creyeron que ella tomaría un transporte y se iría. - Además ¿Por qué quieren cuidar a MIS hijos?
Queríamos entrenarlos y darles una educación de primera calidad, estoy seguro que usted pensaba hacer eso. - Louise afila un poco su mirada.
Louise: Si, es verdad que quiero darles la educación y que entrenarlos cuando adquieran cierta edad, pero de eso puedo encargarme yo.
Pero necesita educación de la mejor y podemos darle todo lo necesario para estos niños, en lo que usted soluciona sus cosas. - dijo otro consejero quien no midió sus palabras.
Louise: Esos asuntos me haré cargo a su debido tiempo, estoy más enfocada en el cuidado de mis hijos que los "problemas" que tengo con mis padres, además, rechazo generosamente su oferta.
Es algo que no debería, piénselo bien, serían perfectos magos para....- Louise no aguantó más e interrumpir.
Louise: ¿Para hacerlos fiel a Tristain? - el consejero se quedó sin palabras y con los ojos abiertos. - Por favor, no me quieran ver la cara, sé que toda esta "amabilidad" es para que mis hijos estén a sus órdenes.
Nacieron en Tristain y de usted, son de Tristain por derecho. - las máscaras de amabilidad se fueron.
Señorita Valière, debe entregarnos a sus hijos, deben tener un buen potencial y no debe ser desperdiciado, además, serán bien tratados, son hijos del héroe. - Louise empezó a temblar, ¿Tan descarados quieren llegar?
Louise: Mi respuesta es no, además, no quiero que sean bien tratados, tener esos lujos desde el comienzo, hará que se hagan mimados. - Gine miraba con orgullo a su nuera mientras que Bardock tenía una mirada muy seria.
Es por el bien de Tristain. - Louise levanta la voz.
Louise: ¡He dicho que no! Quien cuidara de Ezequiel y Elizabeth seré yo, los educaré cómo debe ser y no se los daré.
Henrietta-sama, debe comprenderlo también, esto es por el bien de nuestra nación, no podemos dejar que se pierda ese potencial. - antes de que la peli púrpura o Louise hablen, Bardock empieza a soltar su instinto asesino.
Louise inmediatamente lo sintió y retrocede para no hacer llorar a sus hijos, mientras que el peli negro da unos pasos hacia adelante.
Bardock: Ya he tenido suficiente, ustedes no tocarán a esos niños y punto. ¿Creen que soy idiota para no darme cuenta de que quieren usar a estos pequeños como muñecos sin emociones? ¿Que quieren convertirlos en arma lara su maldito beneficio? - la voz era firme y amenazante mientras seguía emanando su aura.
¿Quién es usted para hablarnos así? - dijo un consejero.
Será el padre de uno de los héroes pero le sugiero que cuide sus palabras, está ante el consejo de Su Majestad y velamos por la seguridad de esta nación. - Bardock solo se enoja más.
Bardock: ¡MEDIRÉ MIS PALABRAS CUANDO USTEDES RESPETEN LA MEMORIA DE MI HIJO COMO SE DEBE!
¡Guardias! - exclamó un consejero mientras los soldados entraban de forma brusca y apuntaban con sus armas a los invitados.
Henrietta: ¿Qué cree que hace?
Su Majestad, esto es por el bien de la nación. - mira a los soldados. - Escolten a la señorita Louise Valière a una habitación y esperen la llegada de su familia, en cuanto a este insurgente, envíelo a prisión por faltarnos el respeto.
Justo cuando los soldados dieron un paso, antes de que Louise saque su varita, escuchó unos rayos, mira al peli azul quien estaba con las manos rodeadas de electricidad, el rubio tenía las manos envueltas en fuego, el peli negro con gorra respiro profundamente y era envuelto en un aura amarilla con rayos, mientras que Enju y Shun expulsan un aura similar a la de su hermano.
Los soldados vieron esto como un acto hostil y usan la fuerza, grave error, Takao genera una descarga en el suelo, paralizando a los soldados y Satoshi arroja las llamas al suelo, generando una ola llameante, impactando a los soldados, dejándolos incapacitados.
Otro grupo se lanza al ataque pero Enju y Shun extienden su mano, expulsando su poder y empujándolos contra la pared, el último de gran tamaño iba a atacar pero Aaron de acerca y le da múltiples golpes, dejándolo con varios huesos rotos.
¡Miserables! ¿Cómo se atreven? - se levantan todos completamente furiosos pero Bardock da un paso, su cabello se eriza y expulsa un aura amarilla, su cabello negro paso a dorado y sus ojos se tornaron verdes.
Bardock: ¡Ya he tenido suficiente! - Louise y Gine calman a los bebés ya que el alzamiento de voz intimidó a todos, incluído la reina. - ¡ESCÚCHENME BIEN MISERABLES OPORTUNISTAS! ¡NO DEJARÉ QUE USEN A MIS NIETOS COMO ARMAS!
¿Quién demonios te crees que eres para faltarnos el respeto? - dijo uno con el atrevimiento, pero la respuesta fue...
Bardock: Soy el rey de Aiur, una tierra distante ¡SOY SON BARDOCK Y MI HIJO DIO SU VIDA EN ESTA NACIÓN LLENA DE ARROGANTES MALAGRADECIDOS! ¿En serio creyeron que no me daría cuenta de sus intenciones? Sólo quieren usar a mis nietos, envenenar sus mentes y hacerlos sus armas y eso no lo permitiré.
Hasta ese punto los consejeros quedaron más pálido que un muerto, que sea un príncipe de otra nación cambiaba las cosas y de forma drástica.
¿RE-REY? - gritó uno asustado.
¿CÓMO NO SUPIMOS ENTONCES? DE SEGURO ESTÁ MINTIENDO. - se defendió otro, negando está situación.
Bardock: ¿ACASO CREE QUE BROMEO? - extiende su mano y genera una esfera azul demasiado potente, la peli rosa sentía su energía y se tensó un poco.
¡Hacer eso es declararnos la guerra! - trató de ponerlo en jaque mate.
Bardock: Ustedes saldrían perdiendo porque Aiur no sé andan con tonterías.
Henrietta: ¡Por favor, no llegue a esto! - mira a los soldados. - ¡GUARDIAS! - las mosqueteras ingresan con sus armas listas. - !ARRESTEN A ESTOS CONSEJEROS!
¡NO PUEDE HACER ESTO! - gritó un consejero molesto.
Henrietta: ¡COMO REINA DE TRISTAIN, NO NECESITO DE UN CONSEJO QUE QUIERE SACAR PROVECHO PARA SÍ MISMOS! ¡AHORA LLÉVENSELOS!
Las mosqueteras redujeron a los consejeros y se los llevan mientras que Bardock volvía a su estado base.
Henrietta: - Temblando- No creo acostumbrarme a esa apariencia.
Bardock: Es intimidante, me disculpo por eso.
Henrietta: N-No hay problema.
Bardock: Henrietta, permítame llevar a Louise a Aiur, estará sana y salva ahí. - la peli púrpura mira a su amiga, lo piensa por unos segundos y asiente.
Henrietta: Acepto, no dejaría que usen a mi amiga ni a sus hijos como armas, estoy segura que estarán a salvo.
Louise: Su Majestad.
Henrietta: Esto lo hago para que tengas una mejor vida, aprovéchala. - la peli rosa solo tuvo una expresión de tristeza. - No estés así, no quiero que te traten como arma ni como esclava.
La peli rosa abraza a su amiga, siendo correspondida, Bardock mira a Enju y asiente, la peli roja procede a mover sus brazos, generando un círculo místico, mostrando el pueblo de Tarbes.
Louise: ¿Nos vamos ya?
Bardock: No creo que sean los únicos, además, tu familia estará buscándote con furia.
Louise: ¿Al menos puedo dejar una carta? - Enju asiente y la peli rosa toma una hoja para hacer lo que quería.
Bardock: También pedimos llevarnos a los chicos.
Henrietta: S-sé que pedirán algo así, por lo que deje sus cuerpos en un hechizo de protección para que sus cuerpos se mantengan saludable. - el peli negro asiente. - Pero quiero ir con ustedes.
Bardock: Muy bien, entonces vamos. - los demás atraviesan el portal quedando sólo Louise y Enju, la peli rosa toma el papel y procede a entrar.
Louise: No sabía que podías hacer eso.
Enju: Solo funciona si conozco el lugar previamente. - la peli rosa asiente.
Bardock estuvo preparando el dispotivo para poder hacer el portal de mundo mientras que Enju y Shun desenterraban con el mayor cuidado, Kurome lleva la espada de Indra en su espalda mientras esperaba el cuerpo de su amado.
Minutos después el cuerpo de Kenichi e Indra son retirados mientras que Shun, con el dolor de su corazón lo carga junto con Takao, Indra era cargado por Satoshi y Aaron, era doloroso pero debían llevarlo.
Bardock: Está listo. - activa la máquina y el portal se abre. - Adelante.
Los hermanos del pelirrojo junto con Takao se despiden de la reina y proceden a atravesar, seguidos de Gine, después fue Satoshi y Aaron, seguidos de Kurome.
Bardock: ¿Todo listo Louise?
Louise: Sí, todo está listo. - toma la carta y e lo da a Henrietta. - Uno es para ti, este para los chicos de la academia y otro es para mí hermana mayor Cattleya.
Henrietta: Louise, realmente gracias por todo.
Louise: Ojalá no hubiera sido de esta forma.
Henrietta: Es lo mejor, habrían personas que querrían usarte para sus beneficios y no quiero que eso pase.
Louise: Gracias por tu amistad.
Henrietta: Lo mismo digo Louise, por favor, se feliz con tu familia. - lo abraza con fuerza.
Louise: Adiós Henrietta, sé una buena reina.
Henrietta: Lo haré, te lo prometo. - se separan del abrazo y Louise, junto con Siesta toman a los bebés. - Adiós pequeños, cuídense mucho. - con el dolor en su corazón, ve como su amiga atraviesa el portal.
Bardock: Le agradezco por todo Su Majestad, espero que la situación pueda mejorar.
Henrietta: Haré todo a mi alcance para hacer de Tristain un lugar mejor. - extiende la mano. - Gracias señor Bardock, por todo.
El peli negro asiente y atraviesa el portal, cerrándolo por completo, la peli violeta mira las tumbas, quedaron como antes, solo que ella sabe lo que acaba de pasar, por lo que procede a quedarse ahí.
//==// Epílogo //==//
Unos años pasaron y tanto Louise como Siesta se instalaron en Aiur, la nación tuvo un año de silencio al saber de la muerte de Indra Dragneel y Son Kenichi Uzumaki, Shun, decidió tomar el camino del rey, por su hermano.
Kurome, también se despidió de su amado mientras cuidaba a su hijo, tenía un año más de edad que Ezequiel y Elizabeth.
Hablando de ambos niños, ellos crecieron y se hicieron fuertes, ambos decidieron seguir los pasos de su padre y Louise, con los hermanos Son Uzumaki, les dieron una buena tutela, asegurándose que no hagan mimados ni arrogantes.
Y durante el cumpleaños número 15...
Louise: ¡BUENOS DIAS MIS PEQUEÑOS! - saludaba con una sonrisa mientras veía a sus hijos.
Ezequiel: Buenos días mamá. - dijo completamente energizado.
Elizabeth: Buenos días madre. - la peli rosa los abraza.
Louise: Feliz cumpleaños mis pequeños. - ambos se ruborizan.
Ezequiel: Mamá, ya no somos niños.
Louise: Para mi, son mis niños. - les dedica una sonrisa. - ¿Que les gustaría hacer hoy?
Ezequiel: Mmmm, ¿Qué tal si vemos a papá primero?
Elizabeth: Si, quisiéramos verlo antes de empezar nuestro día.
Louise: ¿Quieren ver a su padre? - ambos asienten. - De acuerdo, preparen sus cosas para pasar el día.
Todos se preparan cuando en eso escuchan el timbre de la puerta, Ezequiel va a atender pero solo encuentra una carta.
Louise: ¿Qué pasa hijo?
Ezequiel: Dice que vayamos a la casa del abuelo.
Elizabeth: No esperaba eso.
Ezequiel: Lo mismo digo, pero quiere que vayamos ahora.
Louise: Me pregunto que querrá Bardock-san.
Elizabeth: No lo sabemos, pero supongo que debemos ir si es carácter urgente.
Louise: Preparen sus cosas chicos. - ambos asienten y se alistan mientras que ella daba un suspiro.
Derflinger: Su determinación me trae recuerdos.
Louise: Lo sé, están decididos a pelear, eligieron la senda sin que yo se los ordenara.
Derflinger: Y eso me alegra mucho. - ve que los chicos llegan con sus cosas listas.
Louise: Bueno chicos, vamos allá. - el pelo negro con puntas rojas toma a Derflinger y se lo lleva en la espalda mientras que Elizabeth llevaba el libro de oraciones, libro que se lo dió Louise en su 12° cumpleaños.
Tardaron unos minutos en llegar y ahí estaban, conocidos, amigos, familiares quienes dieron una cálida bienvenida a Louise, Ezequiel y Elizabeth.
Bardock: Gracias por venir.
Louise: No hay de que Bardock-san.
Gine: Feliz cumpleaños mis retoños. - abraza con fuerza a cada uno.
Elizabeth: Gracias abuelita.
Bardock: Te has vuelto muy fuerte. - el pelo negro puntas rojas asiente. - Y feliz cumpleaños.
Ezequiel: Gracias abuelito.
Elizabeth: ¿De qué era lo que querían hablar con nosotros?
Bardock: Pues, estuve hablando con una conocida mía y pude acceder que cumpla una petición. - toma un par de vendas. - Ponganselo en los ojos.
Louise: ¿Eh? - sus ojos también son vendados además de Kurome.
Gine: Se paciente.
Bardock: ¡Ya puedes pasar! - en eso escucha una voz distinta.
Gracias por tu paciencia. - dijo uan voz senil.
Bardock: Muchas gracias a ti Uranai, realmente lo aprecio mucho.
Uranai: No hay problema, además que los niños estarán felices. - los chicos estaban confundidos.
Gine: Ya pueden quitarse la venda.- los cuatro hacen caso y al voltear quedan anodados.
Hola Kurome, ha pasado mucho tiempo. - dijo el peli negro con puntas azules.
Louise, me alegra verte de nuevo. - ahora toma la palabra el pelirrojo con puntas negras pero ambos tenían un detalle, llevaban una aureola dorada en la cabeza y flotaba.
Kurome/ Louise: Indra/ Kenichi...- se acercan lentamente mientras que los chicos sonreían, al reconocerlos por completo, se lanzan a abrazar a sus respectivas parejas.
Indra: Kurome, mi bella Kurome, ha pasada mucho tiempo y estás igual de hermosa.
Kurome: Te extrañé mucho, tu hijo y yo te extrañamos muchísimo.
Indra: Hijo. - ve a un peli negro con puntas azules y ojos rojos.
Pa-Papá....- Indra extiende sus brazos y recibe el abrazo de su hijo. - ¡Papá!
Mientras que Kenichi, recibía el abrazo de la mujer que se enamoró años atrás, Louise lo abrazaba con tanta fuerza y no quería soltarlo.
Louise: Realmente eres tu, mi Kenichi, mi querido Kenichi.
Kenichi: Tranquila Louise, no llores. - toma su rostro y la levanta. - Estas tan hermosa.
Louise: To-Tonto...- salta y lo besa, siendo correspondido por el pelirrojo.
Ezequiel: En-Entonces él....
Elizabeth: Si, lo es...papá.
Louise se separa y ambos se acercan al pelirrojo, Kenichi miraba a los chicos y camina hacia ellos hasta quedar a un metro.
Kenichi: Hi-Hijo....hija....Ho-Hola. - no dijo más ya que fue abrazado.
Ezequiel/ Elizabeth: ¡PAPÁ! - llegaron a derribarlo pero no importaba, por fin, por fin verían a su padre en carne y hueso mientras que Louise lloraba de felicidad.
Louise: ¿Cómo lo hizo?
Bardock: De tantos favores que le hice a Uranai-san, ella fue amable en concederme uno, traer a mi hijo y a Indra para que así puedan conocer a sus hijos.
Uranai: Pude conseguir que estén por dos días, así que es mejor que aprovechen todo el tiempo.
Louise: ¿Dos días?.
Bardock: Lo lamento Louise, fue todo lo que pude tener, esto ya es un asunto delicado, pero espero que te guste el regalo.
Louise: Gracias Bardock-san, realmente te lo agradezco.
Kenichi: No creí que tuviera dos hijos. - decía aún sorprendido.
Louise: Yo me emocione cuando me diagnosticaron mi embarazo, pero después me dijeron que llevaba dos, eso me hizo más feliz y ellos son Son Ezequiel y Elizabeth Uzumaki Valière
Kenichi: Ezequiel, Elizabeth, bonitos nombres. - abraza a sus hijos con fuerza. - Mira lo grandes que están.
Louise: Siguieron tus pasos sin que yo me oponga, ellos querían ser grandes guerreros.
Kenichi: ¿Se verdad hicieron esto por mi?
Ezequiel: Si papá, queríamos ser guerreros fuertes como tú.
Elizabeth: Cuando mamá nos contó de tu combate en el mundo de ella, jamás cediste, jamás te arrodillaste y siempre te mantenías una convicción fuerte a pesar de las adversidades.
Ezequiel: Tu fuerza de voluntad es inquebrantable y quisimos seguir tus pasos, decidimos ser guerreros tan fuerte como tú para cuidar a mamá y a la familia.
Kenichi: Me llenan de orgullo, siempre hay que proteger a la familia. - revuelve sus cabezas.
Louise; Entonces no perdamos el tiempo, vamos a disfrutar de estos dos días.
Elizabeth: Si papá, queremos que nos cuentes de tus aventuras desde tu perspectiva. - el pelirrojo sonríe de forma nerviosa.
Kenichi: Está bien, entonces vayamos a disfrutar. - Louise lo toma del brazo y procesden a caminar por las calles de Aiur.
El pelirrojo miraba con nostalgia su hogar, nunca pudo regresar pero ahora, tenía la oportunidad de estar un par de días,la gente lo recibía con ánimos, con los brazos abiertos y lo saludaban, sabían del plan de Bardock pero mantuvieron el secreto.
Kenichi recorrió cada lugar preferido de sus hijos y de Louise, quien se había adaptado por completo a esta nueva vida, era saludada con respeto y querida por muchos niños ya que temporalmente fue maestra, también fueron al palacio, Kenichi dió un suspiro y Louise lo abrazo, supo de parte de Enju que Kenichi no quería ser el rey, no quería cargar con una responsabilidad tan importante, no se sentía apto para eso, pero tenía las cualidades, vela por su gente, por sus seres queridos y está a la vanguardia.
Al caer la noche, Elizabeth y Ezequiel escucharon los relatos que tuvo su padre, antes de ser Invocado primero y después de conocer a su madre, decía que a pesar de lo fuerte que era, Louise lograba intimidarlo, eso saco una risa en los niños mientras que la peli rosa inflabla su pecho con orgullo.
La cena fue abundante, Louise era ayudada por sus hijos en hacer la comida pero el detalle es que ambos heredaron ese metabolismo de su padre, por lo que debían de comer mucho, Kenichi no se quedó atrás y ayudó también.
Kenichi: ¿Y que tal es mi hogar?
Louise: Es completamente distinto, la tecnología aquí es interesante, me costó mucho aprender de todo esto, pero ¿Que haya más de 100 países?
Kenichi: Jejeje, pues si, cada país tiene sus cosas unicas, he visitado unos cuantos con mi padre cuando tenía 14 - 15. Por cierto ¿Pudiste regresar?
Louise: Fue cuando los pequeños cumplieron 8 años, Tristain casi era conquistada por Reconquista y Galia.
Kenichi: ¿No que eran neutrales?
Louise: El rey incompetente de Galia se alió con ellos y diezmaron a Germania, Kirche y su gente se salvaron por poco pero muchos cayeron, dado que ya comprendí mi magia, les hice un pare al ejército, pero quedaron tan asustados que terminaron rindiendose, además que los líderes enemigos fueron parte de las bajas.
Kenichi: Sabía que tenías un potencial, aunque no esperaba que fuera devastador, me alegra poder ayudarte en todo lo que estaba a mi alcance.
Louise: Y lo aprecio mucho, uso mi magia de forma prudente y nuestros hijos también lo están practicando, pero no se quedan atrás con las artes que tú aprendiste.
Kenichi: ¿Y...tu familia?
Louise: Me pidieron perdón, que no me vieran por años les afectó, el querer quitarme a mis hijos despareció por completo, porque inmediatamente me abrazaron y pidieron perdón por todo.
Kenichi: Años sin que te vieran debió cambiarlos por completo.
Louise: Si, aunque deje en cllaro que sólo estaría ahi temporalmente, ya que aún seguía molesta por lo que trataron de hacer a mis hijos cuando apenas eran unos bebés.
Kenichi: Malditos buitres.
Louise: Tu padre los puso en su lugar, así no molestarán más, me despedí de mis hermanas y regrese a Aiur, ya que considero este lugar mi hogar. - eso saco una sonrisa al pelirrojo. - Pero igual visito cada dos años a mi familia.
Kenichi: Eso está bien, al menos la situación ha ido para mejor.
Terminaron de cenar y sus hijos fueron a descansar ya que querían pasar con su papá desde temprano, quedando sólo la pareja.
Louise: Kenichi....- lo abraza. - Realmente, realmente te echaba de menos.
Kenichi: Digo lo mismo Louise, realmente te extrañé. - nota que ella seguía usando el anillo. - ¿Aún lo llevas?
Louise: Hasta el último día de mi vida, no pienso quitármelo. - el pelirrojo entrelaza sus dedos. - Y conservo el apellido Uzumaki.
Kenichi: Mi querida Louise. - ambos se dirigen a la habitación de la peli rosa. - No esperaba que vivieras en mi casa.
Louise: Deseaba eso, tus padres me ofrecieron una casa pero decidí vivir en la tuya. - se echa en el pecho del pelirrojo mientras era abrazada.
Kenichi: Oh Louise, perdóname por no poder estar en casa momento con nuestros hijos. Perdóname por no cumplir mi palabra, creí que ya terminó y baje la guardia.
Louise: No te disculpes, fueron sucesos inesperados, pero me alegra mucho verte, mi corazón late con rapidez. - lleva la mano de su amado a su corazón.
Kenichi: Louise.
Louise: Quiero abrazarte y sentir tu calor todo el tiempo que se pueda.- el pelirrojo la abraza con fuerza.
Kenichi: Te daré todo el calor que quieras. - ella lo besa y se quedan dormidos.
Al día siguiente el pelirrojo se reunió con sus padres y hermanos, le dolio ver a su madre llorar, sus hermanos estaban emotivos al verlo y lo abrazaron con fuerza.
Sus amigos, incluida Siesta , lo recibieron con los brazos abiertos y tuvieron un almuerzo familiar, un almuerzo que el pelirrojo y el peli negro lo atesorarian.
Lamentablemente, antes del amanecer, Uranai llega, el tiempo se estaba acabando y era momento de irse.
Uranai: Ojalá hayan podido aprovechar el tiempo posible.
Kenichi: Si Uranai-san, he pasado tiempo con mis hijos y con mi amada, con mis padres, con mis hermanos y mis amigos y realmente lo pasé fenomenal.
Indra: Lo mismo digo, Natsu tomara mi lugar y será un gran guerrero al servicio de Aiur, superandome.
Kenichi: Igual con Ezequiel y Elizabeth, sé que serán grandes guerreros y protegerán a la familia. - mira a sus hijo quienes le dedican una sonrisa aunque estaban llorando. - No lloren mis pequeños.
Ezequiel: Pe-Pero...- el pelirrojo coloca una mano en el hombro de sus hijos.
Kenichi: Esto pasaría y la verdad no me arrepiento, fueron los dos mejores días de mi vida y si Uranai consigue permiso, pues nos veremos una vez más. - sus hijos lo abraza y él lo corresponde, aguantando las lágrimas para luego mirar a Louise.
Louise: Me encantó que estuvieras aquí, a mi lado,recibir tu calor,crealmenre me hizo muy feliz y le diste el mejor regalo de cumpleaños a tus hijos, soy la mujer más afortunada al tener a un hombre tan maravilloso y de corazón puro.
Kenichi: Y yo de conocer a una mujer de carácter fuerte, con un orgullo de respetar.
Louise: ¿Te volveré a ver?
Kenichi: El tiempo lo dirá, pero nunca lo olvides, yo siempre estaré aquí. - coloca su mano en el corazón de Louise.
Indra: No olvides Natsu, fortalécete y cuida mucho a tu madre.
Natsu: Así lo haré papá, así lo haré. - abraza a su padre para darle tiempo a su mamá.
Indra: No llores Kurome, tal vez me vaya pero volveremos a vernos, te lo prometo.
Kurome: Esperaré ese día con ansias.
Ambos proceden a iluminarse un poco, dando a entender que el tiempo se acabó.
Louise: ¡Kenichi! - lo abraza, asimiló que se iría, lo acepto pero su foszoj no quería que se fuera.
Kenichi: No llores.
Louise: Te prometo que cuando llegue mi hora, reunirme contigo y si volvemos a renacer, decirte que si desde un comienzo.
Kenichi: ¿Harías eso...estás segura?
Louise: Eso quiero, si volvemos a vernos en un futuro, quiero pasar ese tiempo perdido que lo perdí por mi orgullo y no valorar cuando había tiempo, atesorare y revivire cada momento contigo, te lo prometo.
Kenichi: Entonces...prometo esperarte para estar juntos y si renacemos, te elegiré a ti.- ella lo besa con tanto amor siendo correspondido por el pelirrojo.
Louise: Hasta pronto. - el Uzumaki le limpia las lágrimas.
Kenichi: Es verdad, esto no es un adiós, es un hasta pronto. - le dedica una sonrisa mientras veía a su familia. - Hasta pronto amigos.
Indra: Hasta que volvamos a vernos. - hace lo mismo.
Sus amigos y familiares se despedían con una sonrisa triste mientras que Uranai se retiraba y ambos chicos brillaron con tanta intensidad, hasta desaparecer. Louise y Kurome fueron abrazadas por sus hijos y proceden a retirarse mientras que los demás lloraban en silencio.
Poco a poco se retiraron hasta que quedó Louise con sus hijos en el lugar.
Elizabeth: Pudimos ver a papá, eso nos hizo muy feliz mamá y si hay oportunidad de verlo otra vez, será genial.
Ezequiel; Si mamá.
Louise: Gracias hijos, realmente aprecio sus palabras.
Ezequiel: Con las historias de mi padre, me haré más fuerte para proteger este mundo y tu hogar madre.
Elizabeth: Para proteger a nuestros seres queridos aún si eso significa arriesgar nuestras vidas. - la peli rosa sonríe.
Louise: Eso me hace feliz, vengan, les prepararé su comida favorita. - ambos sonríen y se adelantan mientras que la peli rosa mira al cielo. - (Hasta pronto Kenichi, volveremos a vernos) - prosigue su camino a casa, sonriendo ya que sabía que volvería a verlo algún día.
FIN DEL ONE-SHOT
ESPERO HAYA SIDO DE SU AGRADO.
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