Era una tarde tranquila en la casa de los Hinata. Haruto y su madre, [TN], estaban en la sala, haciendo tareas y jugando juntos. Shoyo Hinata había estado fuera de casa por un torneo en otro país, y habían estado esperando su regreso con entusiasmo. Sin embargo, la espera se volvió inquietante cuando el teléfono de [TN] sonó, mostrando el nombre del entrenador de Shoyo en la pantalla.

[TN] contestó la llamada, notando un tono serio en la voz de la otra persona. "Hola, [Nombre del entrenador]. ¿Todo está bien?"

La voz al otro lado de la línea era grave. "Hola, [TN]. Lamento tener que decirte esto, pero Shoyo se ha lesionado durante el torneo. Ha tenido una fractura en el tobillo y los médicos le han dicho que no podrá volver a casa por un tiempo. Está recibiendo tratamiento en el extranjero."

El corazón de [TN] se hundió al escuchar la noticia. Miró a Haruto, que estaba sentado cerca, sin comprender el motivo de la preocupación en el rostro de su madre. "¿Cómo está él? ¿Está bien?" preguntó con voz temblorosa.

"Está en manos de buenos médicos," aseguró el entrenador. "Pero la recuperación llevará tiempo. Te recomendaría que hables con Shoyo lo antes posible para que pueda explicarte más detalles."

[TN] asintió, tratando de mantener la calma. "Gracias por informarnos. Lo llamaré ahora."

Colgó el teléfono y se volvió hacia Haruto, que estaba mirando con curiosidad. "Haruto, hay algo que necesitamos hablar," dijo con un tono suave pero serio.

Haruto levantó la vista, notando la preocupación en el rostro de su madre. "¿Qué pasa, mamá?"

[TN] se arrodilló a su altura, buscando las palabras adecuadas. "Tu papá ha tenido un accidente en el torneo. Se ha lastimado el tobillo y no podrá volver a casa por un tiempo."

El rostro de Haruto se palideció y sus ojos se llenaron de confusión y preocupación. "¿Papá está bien? ¿Cuánto tiempo estará fuera?"

"Está en un buen hospital y está recibiendo el cuidado que necesita," explicó [TN]. "Pero la recuperación tomará más tiempo del que esperábamos. Lo más importante es que él está siendo bien atendido."

Haruto se quedó en silencio por un momento, asimilando la noticia. Finalmente, dijo en voz baja, "No quiero que esté lejos por tanto tiempo."

[TN] lo abrazó con ternura, tratando de consolarlo. "Yo tampoco, cariño. Pero tenemos que ser fuertes y apoyarnos mutuamente. Tu papá nos ama mucho y hará todo lo posible para recuperarse rápido."

Haruto asentió, aunque su tristeza era evidente. "¿Podemos hablar con papá por teléfono?"

"Sí, vamos a llamarlo ahora," dijo [TN], tratando de darle un sentido de normalidad a la situación.

[TN] llamó a Shoyo, y pronto la voz familiar de su esposo resonó en el altavoz del teléfono. "Hola, amor. ¿Cómo están?"

"Hola, Shoyo," respondió [TN], su voz temblando un poco. "Haruto está aquí conmigo. Quería que hablara contigo."

Haruto tomó el teléfono con manos temblorosas. "Hola, papá."

"Hola, campeón," dijo Shoyo, su voz llena de calidez a pesar de la distancia. "Siento mucho no poder estar en casa. ¿Cómo estás?"

Haruto trató de contener las lágrimas. "Te extrañamos mucho, papá. ¿Cómo te sientes?"

"Me siento bien, considerando la situación," respondió Shoyo con una sonrisa en la voz. "Los médicos están cuidando de mí, y estoy trabajando duro para recuperarme. Quiero que sepas que pienso en ti y en tu mamá todo el tiempo."

"¿Cuánto tiempo estarás fuera?" preguntó Haruto, su voz apenas un susurro.

"Lo siento, no estoy seguro de cuánto tiempo tomará," dijo Shoyo. "Pero quiero que sepas que haré todo lo posible para volver a casa tan pronto como pueda. Mientras tanto, prometo que te llamaré siempre que pueda."

Haruto asintió, sintiendo un poco de consuelo al escuchar la voz de su padre. "Está bien, papá. Te queremos mucho."

"Y yo los quiero a ustedes," respondió Shoyo, con un tono reconfortante. "Cuídense mucho y recuerden que siempre estoy pensando en ustedes."

[TN] tomó el teléfono de vuelta y le dijo a Shoyo: "Cuídate, por favor. Te esperamos con ansias."

"Lo haré. Gracias por todo," dijo Shoyo antes de despedirse.

[TN] colgó el teléfono y miró a Haruto, que estaba más tranquilo pero aún preocupado. "Vamos a estar bien, Haruto. Lo importante es que papá está en buenas manos, y nosotros tenemos que ser fuertes mientras él se recupera."

Haruto asintió, tomando la mano de su madre. "Lo sé, mamá. Solo quiero que vuelva pronto."

[TN] lo abrazó nuevamente, sintiendo una mezcla de tristeza y esperanza. "Yo también, cariño. Pero mientras tanto, vamos a hacer todo lo posible para mantenernos unidos y felices. Tu papá se recuperará pronto, lo prometo."

En el silencio de la noche, mientras las estrellas brillaban afuera, la familia Hinata se unió en su preocupación y amor, esperando con ansias el regreso de Shoyo y manteniendo viva la esperanza de que la recuperación sería rápida y completa.

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