Se conocían desde q eran bebés, se hicieron mejores amigos desde preescolar, iban a todos lados juntos y con los años esa amistad de fue transformando en algo más.

Junjei Yang e Eli Shane desde pequeños sentían una gran conexión en sus corazones, Junjei era un pequeño muy serio, correcto, inteligente y calmado, era muy raro verlo enojado o perdiendo la paciencia, en cambio, Eli Shane era un pequeño revoltoso, alegre, dulce, terco, de un gran corazón y también muy inteligente, de los dos, era quien más se metía en problemas y casi siempre arrastraba a Junjei en sus travesuras, los dos pequeños se protegían mutuamente y nunca se separaban.

A los 15 años las cosas comenzaron a cambiar para ambos, comenzaron a tener sentimientos uno por el otro, ninguno decía nada por el simple hecho de q temían al rechazo, los amigos q habían hecho en la secundaria y sus familias al darse cuenta de lo q sucedía decidieron darles un empujón; comenzaron a ayudarlos para q por fin confesaran sus sentimientos y después de casi 1 año se logró, fue Eli quien tomo el valor un día y simplemente le dió un beso a Junjei

Eli:*se comenzó a separar lentamente*

Junjei:*sorprendido por ese beso*

Eli:Junjei? *Pregunto temeroso* por favor di algo

Junjei:*lo miro* yo...

Eli:*siente su corazón latir con fuerza* entiendo..*susurra apenas audible* perdón por el beso, creo q no debí hacerlo

Eli estaba por marcharse cuando Junjei lo tomo de su muñeca, lo jalo a su cuerpo y lo beso nuevamente, esta vez el sorprendido fue el peliazul pero decidió no pensarlo más y simplemente siguió el beso mientras lo abrazaba del cuello y sentía su cuerpo estremecerse al sentir el calor del contrario chocar contra su cuerpo; todo su ser se sentía pleno y feliz al saber q Junjei también sentía lo mismo q el.
Cuando el aire comenzó a faltar se separaron muy lentamente y con la respiración agitada se vieron a los ojos

Junjei:me has tomado por sorpresa *comenzó diciendo* solo en mis sueños esto sucedía, no tenía el valor para siquiera decirte algo

Eli:yo tampoco tenía la valentía para decirte q te amo, q solo tu me haces estremecer cuando tomas mi mano, me abrazas o me das algún beso cmo despedida *lo miro con sus ojos brillando* pero hablando con mi padre me di cuenta q tenía q arriesgarme, q no podía vivir con la duda de saber si sentirías lo mismo por mi y q si no era así, al menos podría decir q lo intente

Junjei:y lo lograste, solo tu tienes la capacidad de calmarme en mis peores momentos, solo tu me lees así cmo yo te leo, solo tu puedes hacerme reír cmo nunca y solo tu tienes mi corazón, Eli Shane, te amo y quiero pedirte q seas mi pareja eterna, el único al q amare en esta y en mis siguientes vidas y el único al q le pertenece mi corazón

Eli:*sonríe* si quiero Junjei, solo a ti te aceptaría una y mil veces sin importar en q vida estemos, porq solo a ti mi corazón le va a pertenecer por la eternidad

Ambos sellaron su promesa con un beso, desde ese día, los años pasaron muy rápido para ambos; en un abrir y cerrar de ojos entraron a la universidad, tuvieron sus momentos bajos dónde parecía q todo se derrumbaría, pero ellos se levantaban juntos y lograban superar esos momentos, después de graduarse de la universidad se casaron y su luna de miel fue mágica para los dos, de esa unión poco después nació el fruto de su amor, una hermosa niña llamada Mei quien era la luz de sus vidas.

Más años y años siguieron pasando, Eli y Junjei tuvieron un total de 3 hijos, su primogénita Mei, un hermoso varoncito llamado Daniel y un lindo doncelito de nombre Evan, los tres pequeños crecieron con amor y buena educación, también fueron inculcados con grandes valores y los tres eran el orgullo de sus padres quienes ya en la tercera edad se jubilaron y ahora disfrutaban la vida viajando de vez en cuando solos o con sus hijos y nietos, la vida les sonreía a ambos desde hace tantos años q estaban agradecidos con el destino y la vida misma por juntarlos y q así formarán la familia q tanto soñaban

Junjei:te amo *susurra con su voz rasposa debido a su edad* no deje de hacerlo en estos casi 40 años juntos y seguiré amándote aún después de la muerte

Eli:yo tampoco dejaré de amarte, ni en esta, ni en mi próxima vida, siempre serás mi único amor y agradezco al destino y a la vida por ponerte en mi camino

Sellaron sus palabras con un beso, como el primero q se dieron hace casi 40 años.