18. Devuelveme el corazón -Aguslina-
Segunda parte
Después de haber llorado por ella me prometí no volver a hacerlo, comenzar de nuevo, aunque era casi imposible, no puedo hacer de cuentas que no amo a alguien de un día para otro, más cuando ese amor crece a cada instante.
Había estado saliendo de fiesta, viviendo la vida pero nada era real, al llegar a la soledad de mi apartamento todos los recuerdos me atormentaban, era en ese momento cuando Maxi, Pocho y Juli se daban cuenta de lo que realmente hubo entre Caro y yo.
Cantaba, reía, hacía de cuenta que ella nunca había estado pero no podía y lo peor fue dar like a la foto con su novio, no se que quería demostrarle con eso. Me estaba refugiando en la música pero por momentos sentía que todos notaban mi dolor, que todos presentían lo que estaba sufriendo a causa de Caro. Si me preguntaban por ella, contestaba con una sonrisa porque no podía evitarlo, con sólo escuchar su nombre todo en mi se encendía.
Maxi había llegado a mi apartamento, para que no estuviera solo, ya que Pocho había salido.
- ¿Cómo estas hermano? -preguntó al entrar. Me puse a pensar como realmente me sentía.
- Miserable, ella está feliz, enamorada, disfrutando de todo -comencé a decir demasiado molesto. -Esta dándole el amor que me pertenecía a otro, mientras yo estoy cada vez peor -agregué al sentarme en el sillón.
- Te dije que no te rindieras, vamos Agus, nada está perdido. Escríbele una canción, envíale un mensaje o llamala diciéndole todo lo que sientes por ella -Maxi nunca se iba a cansar de repetirme lo mismo y estaba seguro que en cualquier momento iba a hacerle caso, que iba a ir en busca que Caro me devolviera el corazón.
- Ella no me perdonaría que hiciera algo que la lastimara, no puedo ir, ella es feliz y aunque me duele, sólo me quedan sus recuerdos -el recuerdo de una canción llegó a mi memoria. Quería cantar, quería sacar todo lo que siento por medio de la música.
- Cantemos devuelveme el corazón, lo necesito -le dije a Maxi, él asintió y se puso frente al piano, me senté sobre la mesa, dispuesto a decirle por medio de esa canción lo que estaba sintiendo.
Narra Carolina
Los últimos días todo había sido demasiado confuso, me sentía feliz, sentía que verdaderamente amaba a mi novio pero me había dolido que Agustín diera like a nuestra foto.
Después de tanto tiempo sintiendo algo por él, de habernos amado en secreto, me había ido de su vida sin explicación, pero no podía, sentía que mi vida merecía algo mejor. Agustín nunca dejaría la fiesta, sus actitudes que demostraban que no me amaba, entonces lo mejor fue irme, pero intentaba y me negaba a seguir sintiendo algo por él, algo que no lograba porque siempre que lo miraba o sabía de él, algo dentro de mi se encendía, volvía a nacer esa luz que yo había decidido apagar.
Quería verlo, quería hablar con él y explicarle porque me había ido, necesitaba hacerlo. Una notificación de Agustín me llegó y no dude en ver de qué se trataba.
Agustín y Maxi, cantando justamente devuelveme el corazón.
Los primeros segundos sólo era Maxi, pero mi atención estaba centrada en Agustín, en cada gesto y movimiento que realizaba. Lo miraba y sentía que estaba perdido en otro mundo, que su mente estaba en otra parte. Sabía lo que él estaba sintiendo, lo conocía perfectamente o creía conocerlo.
En cuanto lo escuche, en cuanto esas palabras salieron sentí tanto, devuelveme el corazón, no quiero vivir así, devuelveme las promesas y la vida que te di. Mi corazón se hizo pedazos, quizás de la misma forma que yo se lo hice a Agustín.
- Carolina, lo intento y no puedo sacarte de mi mente, aún recuerdo el primer día del casting -dijo, Agustín, cuando estábamos en mi camerino, había ido a buscar a Valentina pero al final ella se fue y nos dejo solos. -Me gustas y mucho -agregó con una sonrisa.
Yo también vivía pensando en él, no podía evitarlo y era más fuerte de lo que quería, recordaba cuando estábamos en entrevistas o presentaciones y por momentos me perdía, sentía que sólo éramos él y yo, mi mundo se tornaba diferente, él me sonreía y yo sonreía aún más, él me hacía pasar aún mejor ese momento. Sin duda alguna esos eran de mis momentos favoritos, cuando parecía que sólo éramos Agustín y yo.
- Tampoco puedo sacarte de mis pensamientos -dije con una sonrisa. Él sonrió y se comenzó a acercar, colocando una mano en mi mejilla, me deje llevar por el momento hasta que nuestros labios se unieron.
Lleve mis manos alrededor de su cuello, haciendo que el beso se profundizará, ya nos habíamos besado pero no de esta forma. Sin duda se había convertido en el mejor beso. Los segundos pasaban y no quería soltarlo, quería seguir besándome con él, quería seguir sintiendo lo que estaba experimentando.
- Ahora no pienso dejarte, quiero tenerte así, siempre -dijo al separarnos, me estaba haciendo feliz. Sonreimos y sus brazos terminaron rodeandome, haciendo que guardara su aroma.
Volví a mi presente, donde me encontraba viendo el vídeo de Agustín y dándome cuenta de la realidad. Cuando se tomó el pelo entre sus manos, me sentí mal, cuando dijo llevate los recuerdos que me duelen más que a ti, me hizo querer ir y devolverle todo lo que le quite.
Devuelveme el corazón.
Haría lo correcto, afrontaria la realidad.
(...)
El timbre de mi apartamento comenzó a sonar sin parar, era demasiado tarde para tener visita y por la manera desesperada de tocar, parecía algo urgente e importante. Mire a Maxi y me apresure a abrir la puerta quedándome completamente sorprendido al ver de quien se trataba.
- ¿Carolina? -pregunté casi en un susurro. Ella me miro de una manera muy diferente, su mirada estaba siendo tan penetrante que llegaba a asustarme.
Tomándome nuevamente por sorpresa, tenía los labios de Carolina sobre los míos, creía estar en un sueño, como los que tenía últimamente, pero no, era real, la tenía nuevamente entre mis brazos, siendo mía, amandola por unos segundos.
Nos separamos y sin decir nada deje que pasará, ella miro alrededor de mi apartamento, probablemente buscando si algo había cambiado. Al mirar a Maxi se sorprendió, por un momento me había olvidado que él estaba aquí.
- Perdón, no quise interrumpir -dijo Carolina en forma de disculpa, nosotros negamos con la cabeza rápidamente. Nunca iba a interrumpir.
- No te preocupes, ya me iba -dijo comenzando a caminar, cuando pasó junto a mi, se detuvo. -No la dejes ir, lucha por ella, dile lo que sientes -agregó en un susurro. Asentí haciendo caso por primera vez a sus palabras después de tanto tiempo.
Una vez él ya no estaba, mire a Carolina esperando que me explicara porque estaba en mi casa, pero sobre todo porque me había besado, si ella había decidido ya no estar en mi vida.
- No quise irme de esa forma, pensé que nunca cambiarias -me estaba dando la explicación que tanto había pedido. -Quería algo diferente en mi vida, sentía que necesitaba amar libremente.
- Eso podía pasar conmigo, podíamos amarnos sin ocultarlo, podíamos ser felices y vivir nuestro amor -dije acercándome a ella. -Perdón, Carolina, perdóname por no ser la persona que merecias, perdón por haber provocado que te fueras de mi vida, perdón por no intentarlo, perdóname por amarte de esta manera... -hice una pausa para observar sus reacciones, estaba sin habla, con los ojos llorosos. -Porque si, te amo con mi vida entera, te amo como nunca lo hice.
- Agustín... -dijo en voz baja y entrecortada.
- No, no quiero que digas que ya tienes a alguien en tu vida, no puedo seguir así, me duele saber que no te tengo y no quiero más seguir de esta forma -dije tomando sus mejillas entre mis manos. -Te amo, ¿entiendes? Eres el amor de mi vida, Carolina -agregué con las lágrimas rodando por mis mejillas. Ella comenzó a llorar.
- Ahora déjame hablar, si, me fui porque creí que nunca me tomarías enserio, me conoces y sabes como soy, lo que espero de una relación... -me miro fijamente, sabía que ella estaba siendo muy sincera, su mirada también refleja lo que ella siente y estaba seguro que aún me sigue amando. -Me aferre a alguien más, quería creer que por él siento lo mismo que por ti, pero no es así, hoy me di cuenta con tu vídeo que te amo y que no puedo seguir así, alejada de lo que me hace feliz.
Sus palabras estaban reconstruyendo todo lo que se había partido, todo lo que pensaba nunca volver a tener curado.
- Te estaba pidiendo que me devolvieras el corazón -dije aún más cerca de ella. Cerré mis ojos unos segundos, haciéndome completamente a la idea que la tenía junto a mi. -Te pedía que volvieras a ser mía, que volvieras a mi vida, ya no quería seguir de esta forma.
- Aquí estoy nuevamente y está vez prometo cumplir, prometo no irme de tu vida porque no puedo vivir sin ti -dijo a escasos centímetros de mi boca. -Te amo, Agustín, esa es la única realidad -agregó antes de unir nuestras bocas, me sentía feliz, estaba nuevamente junto a la persona que amo y que amaré por el resto de mi vida.
- Siento que estas más guapo -dijo al separarnos, sonreí ante su comentario, era todo lo contrario.
- Te equivocas, es otra persona la que está más guapa, estas hermosa, Caro -dije sonriendo, la atrape entre mis brazos y la lleve hasta el sillón, la había extrañado y no quería soltarla, la sente en mi regazo, aferrandome a ella, volviendo a disfrutar de su aroma.
- Estas cambiado, eres otro Agustín -dijo mientras acariciaba mi rostro.
- Cuando amo verdaderamente, me convierto en el Agustín que realmente soy -la abrace, quería tenerla de esa forma mucho tiempo.
- Y quiero que siempre sea así -comenzó a dejar besos por mi cuello, me aferre más a ella, a Carolina, la persona que amo con mi vida, quien me tenía completamente.
- Te amo y siempre voy a necesitar de ti -le dije en un susurro, la recoste sobre el sillón y comenzamos a besarnos durante largos minutos.
- Prometo nunca más llevarme tu corazón, porque prometo nunca irme de tu vida, estaré atada a ti, Agustín -dijo lo último entre risas.
- Para mi perfecto que estés atada a todo lo que soy, si quieres desde hoy te quedas aquí, así estaremos más atados y podremos amarnos, disfrutar de nuestra compañía a cada hora -no sólo era por el momento, estaba decidido y muy seguro de querer formar una vida junto a ella.
Quería compartir todo con ella, quería formar una familia con Ella, disfrutar de nuestros logros, amarnos cada día y aumentar ese amor. Quería que fuera mía cada día.
- Tenemos toda una vida, nada nos volvera separar -dijo sonriendo. Amaba verla sonreír, amaba su ternura, su sencillez, su tranquilidad, amaba cada parte de ella.
- Te amo -dijimos al unísono, lo cual fue lo más hermoso del momento.
Ella me había devuelto el corazón.
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Un One Shoot super largo, el más largo de todos, espero haya quedado bueno y compensado lo que las hice sufrir con la primera parte.
Aclaraciones: algunos detalles agregados ocurrieron en momentos diferentes, y Maxi conocía del amor de Agus hacia Caro, por lo poco que él les decía, por las miradas, la forma que él hablaba de ella y porque en alguna ocasión se encontraron en el apartamento.
Sin más, les deseo que sueñen lindo y pueden decirme de que canción les gustaría el próximo.
L@s quiero ❤
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