Se encontraba los tres saliendo de Ciudad Z, yendo a un mini supermercado, algo cerca del distrito. Saitama entró como si nada, y era seguido por Deku y Uravity. Cabe decir que unas personas rodearon al Té Verde; estaban algo emocionadas, unos héroes jóvenes  estaban en el lugar del Cuartel General, algo que no veían todos los días... aunque, Child Emperor es la excepción. El calvo con capa no le prestó atención lo que se estaba llevando a cabo detrás de él, solo siguió buscando una buena y jugosa carne en descuento...

- Sa-Saitama-Sensei... -Dijo Izuku muy nervioso, siendo acorralado por los 'fans', tratando de llamar al héroe de Clase B: sin ningún resultado beneficiente-

El calvo solo siguió comprando la carne, y después dejó la tienda, pero al rato, se dio cuenta de que dejó a los dos aspirantes a héroes en el lugar. Se puso nervioso y volvió al sitio, agarrando a los muchachos y llevándolos consigo. Saitama se maldecía internamente; un error como este, y de seguro le bajarían el sueldo como héroe. Bueno, por lo menos agradecía que no hubo algún testigo presente... alto, ¿testigos? ¿Las personas que estaban en el mercado, habrán visto como salió él dejando a unos niños que estaban a su cuidado? Mierda, Saitama sabía a la perfección si esto se hiciese viral, de seguro la desgracia recaerá en él.

Entonces regresó a la tienda...

20 minutos más tarde...

- Ya llevamos un buen tiempo que estamos fuera de la residencia del Sensei... -Pensó Midoriya, con algo de frustración; ya en realidad no quería seguir caminando-

Escucha que el estomago de Uraraka suena, poniendo la castaña avergonzada...

Entonces, Saitama, que estaba delante de ellos, se sorprendió y con las bolsas aún en las manos, corrió a la carretera y detuvo, con su cuerpo, un camión que iba a millón. Y obvio, el móvil fue el que se quedo destruido en la parte delantera. Los chicos se asustaron y fueron a ''auxiliar'' al calvo y al sujeto del vehículo.

- ¡Saitama- Sensei! ¿Se encuentra bien? -Dijo Izuku, agachado y poniéndose a la altura del Héroe. Ochako, que ya había ayudado al tipo del camión, se acercó a ellos-

- ¡Oye, maldito! ¿¡Como se te ocurre ponerte en mi camino así!? -Reprochó la persona del camión a Saitama-

Entonces Saitama se alejó un poco, y se pudo ver que estaba protegiendo un pequeño gato callejero. Izuku se quedó viendo impresionado al responsable de su pasantía; con esto que hizo, pudo entender que él cuidaría a todo ser vivo del planeta. Ochako igual como Deku, y se quedó viendo al minino con emoción. El camionero se empezó a quejar, y dijo que rescatar a un gato era una perdida de tiempo, Midoriya oyó eso, y apoyó a Saitama, no iba a dejar que su Sensei tuviera ese odio injusto. Uraraka apoyaba a los dos. Las personas alrededor apoyaban el rescate de Saitama, y el camionero se fue de ahí, molesto a más no poder...

- Solo salvé a un gato y más nada...

Pero lo malo, era que la carne se había aplastado con la rueda del camión, y entonces tendría que volver a la tienda para comprar otra vez el alimento... mierda...

2 horas después...

El Té Verde tenía como muchos rugidos provenientes de sus estómagos, y estaban algo molestos por decirlo así. Saitama andaba con la carne ya comprada, por lo menos si se sintieron satisfechos, pero no aguantaban con el hambre. El calvo como vio que ellos ya tenían como una especie de cara de desesperación, fue a buscar un medio de transporte para llegar más rápido a su hogar, eso sí, si es que en realidad lo dejaran en Ciudad Z.

Tomaron un autobús, de donde vaya a saber donde apareció. Saitama se quedó parado, agarrándose de un tubo de metal mientras que los chicos, exhaustos, se sentaron al lado de su maestro. Cabe decir que los dos estaban adormilados, más la castaña que el pecoso; a Uraraka le ganó el sueño y se durmió en el asiento, siendo que su cabeza se recostara encima de Izuku, sonrojando a este por la cercanía de la chica. El calvito vio esto y no pudo dejar salir una típica frase...

- No se tu Midoriya, pero en mi opinión ustedes parecen novios... -Esto hizo que el antes mencionado se pusiera rojo como un tomate, mirando avergonzado a su Sensei, poniendo al Héroe de Clase B algo nervioso- Yo... solo digo lo que veo...

En el transcurso del viaje fue algo relajante, no había ningún monstruo ni villano cerca haciendo el caos, tampoco había ningún desastre natural o artificial causada por el hombre, era un día tranquilo para los aspirantes a héroes. Izuku se dio el lujo de ver algunos de las edificaciones y algún que otra vista a los campos que había ahí; muy rara vez hay uno...

- Midoriya, ¿de verdad piensas que yo soy un gran héroe? -Preguntó Saitama, que Izuku se quedó atónito a lo que dijo-

¿Qué es lo que iba ala decir? Era muy claro que su Sensei es un gran héroe en el sentido de la justicia, aunque entre elegirlo a él y a All Might en ese mismo sentido, diría que esta en un empate...

- Saitama-Sensei, usted es una gran influencia para muchas personas, lo es para mi... de verdad le digo que su deseo de querer salvar el mundo con tal de arriesgar su vida, me hace pensar que si alguien diga que usted no es la gran cosa es como un insulto para mí; con su poder sobreexplotado puede a salvar a millones de personas, y eso para mi, me dice que usted es superior a todos los Héroe Clase S juntos en todos los sentidos... -Dijo inspirado en sus pensamientos, finalizando con su determinada sonrisa-

- ¿Quien demonios te dijo todo eso de mi? Eso es una mentira, solo soy un tipo que es héroe por diversión... yo solo quería un "si" por tu respuesta...-Pensó algo aterrado el calvo, iba a decir esto, pero después se calló para no quitarle la esperanza al joven-

Ya habían llegado al lugar y la chica despertó, aunque se dio cuenta de lo que paso y se sonrojo a niveles mayores de lo que te odia tu ex... (Ok no XD)

Ya solo faltaba llegar a la casa del calvito, procuraban por lo menos no perder el tiempo en otra cosa y mucho menos con alguien. Aunque, una anciana se le interpuso a los tres...

- Oh, lo siento, me disculpo... -Dijo la mujer un poco avergonzada- ...solo quería que me escucharan un momento por favor, me encantaría contar esta historia a un par de jóvenes... -Dijo con dulzura la mayor-

- Perdone, pero tenemos mucha prisa, vámonos muchachos... -Dijo Saitama, pero, aunque dijese eso, los dos ya estaban curiosos por la historia que iba a relatar la mujer; él se puso frustrante-

Entonces no le quedó más remedio que escuchar el relato de la mujer...

La historia trataba sobre una especie de deidad, una forma humanoide transcendental a las otras, que su apariencia es la de un lobo. Su nombre era "Lobo de la Oscuridad" (en el caso de los japoneses sería "Robo de ra Osukuridad", como los Arrancares de Bleach :v), este ser tenía mas de +1.000.000, aunque es solo una aproximación. Su especie es un híbrido entre un lobo y un ser inmortal.

Lobo nació en la edad antigua en un país llamado Egipto, antes de que se convirtiera en lo relatado, sufrió mucho por haber perdido su familia, que por eso, los humanos comenzaron a torturarlo, sin piedad alguna...

Hasta que un día, un niño decidió ayudarlo, y así fue durante varios años...

Aunque, sus padres lo atraparon y entonces estos mataron a su propio hijo por no obedecer...

Lobo horrorizado por esta escena, lloró de rabia, y por ende, se transformó en la deidad ya relatada. Mató a los padres del asesinado, se convirtió en el ser inmortal y ahora vive actualmente entre nosotros, protegiendo al mundo entero; nadie sabe quién es él, un demonio o guardián...

Luego de que Izuku y Ochako escucharan la historia, se quedaron atónitos, querían escuchar más. Se notaba que estaban muy ansiosos sobre este ser...

- Ese... L-Lobo, ¿usted cree que esta aquí entre nosotros? -Dijo Midoriya algo impresionado-

- Bueno, aún no tengo algunas pruebas que lo demuestran, pero estoy segura que este Dios nos protege de las atrocidades... -Relató la anciana tranquila y un poco triste, se le dificultaba contar este mito/leyenda por alguna razón-

- Pobre ser, ha sufrido mucho por varios años... me siento terrible como ser humana... -Dijo Uraraka triste después de escuchar lo que relató la mujer adulta-

Por un lado, estaban los dos llorones a punto de romper el mar a través de sus iris, por el otro... bueno, Saitama solo tenía una mueca de disgusto, escuchar a esta mujer fue una pérdida de tiempo para todos, aunque, debía admitir que el mito era algo deprimente... y el calvo, se interesó en este tipo, así que le preguntó a la anciana...

- Este tipo... ¿es fuerte?

La anciana le explicó los poderes de este ser... Saitama no se encontraba nada asustado, más bien estaba algo decidido a pelear contra esta "persona", pensaba que por lo menos le puede dar pelea hasta que él mismo se cansé, teniendo la emoción y la adrenalina que sentía anteriormente antes de perder su pelo, bueno, esto era una falsa ilusión ya que o puede ser verdadera esta historia o puede ser falsa, que lo ultimo es lo que más creía...

Ya el grupo salió del lugar de la anciana y llegaron al departamento. Los dos muchachos ya estaban hambrientos, eran como las 9:32am, sobrevivieron más de lo esperado...

Bueno, no se quejaban por como cocinaba el calvito, era muy rico, más para el chico porque el desayuno era Katsudon...

Minutos después...

El grupo salió a patrullar por los alrededores de la Ciudad Z, tenían que decirlo, estaba abandonado, pocas personas sin embargo, estaban presentes en aquel lugar post-apocaliptico. Cabe decir que los chicos estaban nerviosos por andar en ese lugar "fantasmal", por lo menos a su par venía Saitama, puesto que esto les daba un poco de seguridad al tenerlo cerca...

En un lugar algo poblado, estaban unas personas en peligro, porque un monstruo ha aparecido ahí...

- Ja, no hay nadie aquí que me detenga. Con este lugar podré poner mis huevos y saldrán mis hijitos, jiji... -Era una especie de mujer araña, con lo que parecía tener rasgos de serpiente y un tamaño de 2 metros. En un momento, esta mujer noto la presencia de los tres héroes- Oh, aquí tenemos otras pequeñas moscas más... -Fijó la vista en el chico verde, que estaba en pose de lucha- Tu eres muy rico, chiquito. Te ves muy adorable héroe verde...

Izuku tenía los ojos como platos al ver que la mujer se acercaba con intenciones nada santas... al ella atacar, el chico respondió con un St. Louis Smash en todo el estómago de la mujer, ella lo recibió completo e iba a atacar, pero para su sorpresa, estaba flotando, lo que quería decir que la castaña usó su Quirk para retrasarla un poco. Esto favoreció al peliverde, lo que hizo que contraatacó con un Detroit Smash a la mujer; hizo retroceder a la monstruo. Uraraka levantó algunos escombros del piso, e Izuku "disparó" con sus dedos esos trozos del pavimento hacia la mujer, lo que hizo que recibiera todo el ataque del dúo...

Parecía que lo habían conseguido...

Pero, la mujer araña salió con gran rapidez del lugar y con la cola de serpiente, golpeó a Ochako, haciendo que volará un poco...

La mujer le dio sarpazos a Midoriya, sin que este pudiera protegerse del ataque. La monstruo lo agarró del cuello y lo empezó a estrangular...

- Eres alguien muy hermoso para ser un héroe, que pena que tenga que violar tu cadáver, pequeño~

- ¡N-No puedo respirar...! ¡Mierda, esta mujer es demasiado fuerte, subestime a los monstruos que están con Saitama-Sensei! ¡Por... favor, alguien...! Quién... sea... -Pensó desesperado por ayuda Izuku-

La castaña estaba sin la posibilidad de moverse...

- ¡Muevete, debo ayudar a Deku...! ¡No puedo permitir que él, muera aquí ahora! Por favor, levantate, ¡levantate! ¡Este dolor... no se compara, a un mundo sin Deku! ¡Por favor, levantate...! -Desesperada por levantarse, quería ir a ayudar al chico-

Antes de que Izuku fuera al cielo, hubo un momento en el que Midoriya dejó de sentir las manos de esa mujer, se trató de que Saitama le dio un golpe normal a la mujer, lo que hizo que el montón de sangre se pintará en el mismo lugar donde estaban los huevos y órganos de la misma. Izuku recobraba el aliento, aún asustado...

- Sobrevivieron más de lo que pensaba, bueno, creo que es hora de descansar... -Dijo Saitama algo inexpresivo, pero en su interior, se notaba que esteba preocupado por ellos dos-

El calvo solo recogió a los dos, cargándolos en sus hombros. Volviendo al hogar del calvo, estaban algo en claro los dos, el lugar donde vivía su Sensei era más que todo el peligro en carne y hueso... literalmente...

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