Narra Hancock:

Me sentía TAN BIEN, me quité a esa perra de una vez por todas, solo tendría que inventarle una mentira y que el me la creyera....además de tener 100 hijos con el, obvio.

Cogí el cuerpo de la perra y lo escondí en uno de mis 8 armarios, pero justo en ese momento vino Luffy.

- Hancock...- entró por la puerta.

- Ehh, si!!- empuje a la estatua adentro rápidamente y lo miré nerviosa.

- Emm, ¿pasa algo?- pregunto confuso y se acercó a mi.

Narra Zoro:

Me encontraba en casa mirando televisión, Nojiko se encontraba en su cuarto haciendo asignaciones. Estaba aburrido y no sabía nada de nadie, le envié un mensaje a Robin inconscientemente.

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Robin:

> Oe, sabes donde esta mi hermana? -_-

> Em, sigue con Luffy :3

>........Oh, ok. Y tu estas bien?

> Claro, perfectamente

> Ok, voy a estar en el Baratie...por si acaso necesitas algo.
> Ok :)

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Me fui al cuarto, me cambié, baje las escaleras y cogí las llaves pero cuando iba a salir Nojiko se percató de mi existencia.

- ¿Adonde vas, Zoro?- preguntó bajando las escaleras.

- Voy al Baratie, cuidate!

- Esta bien, adiós!

Me despedí de ella y me dirigí al lugar ya antes mencionado, llegué y me encontré con Vivi.

- Hola...- me senté en la misma mesa que ella.

- Hola!- dijo con entusiasmo- que te trae por aquí?

- Nada, solo vengo por algo de sake.

- Ohh, ok. Yo vine a pedir una malteada e iba a irme pero mejor te hago compañía- terminó de hablar con una sonrisa.

- Mejor para mí- esboze una sonrisa al ver al ero-cook mirarnos con curiosidad.

Narra Hancock:

- N-no, amor, es s-solo que.......eh.....¡¿no tienes habre?! ¡yo tengo aquí carne!- corrí a mi estante y busqué en una gabeta comida, pero solo había un pedazo de maiz- ¡Toma!- me acerqué a el- sé que no es carne pero es lo que tenía!- intenté ponérselo en la boca pero el se negó y se alejó de mi.

- ¡¿Que te sucede?!....- preguntó extrañado por mi comportación- Te notas rara, ¿acaso hay algo que no sepa?

- ¡¿Que?! ¡Claro que no! ¡Bueno...si! Pero...¡ahh! Es solo...- me tomó de los brazos y me sentó junto a el.

- Hancock...- me miró fijamente a los ojos- ¿que te pasa?- preguntó con humildad.

- Yo.....yo....- unas lágrimas se me escaparon por los ojos- yo....¡convertí a la odiosa pelinaranja en una estatua!

- Q-que...?- preguntó tratando de no haber escuchado nada.

- Sii!!- dije rompiendo en llanto- ¡no quise hacerlo! ¡encerio! ¡y-yo solo...!- me interrumpió.

- Liberala...- dijo perdido en sus pensamientos.

- Que, que! ¡No puedo liberarla! ¡Ella te va a conquistar y tu me vas a d-dejar y...!- no me dejó seguir.

- ¡¡Que la liberes dije!!- se paró de la cama y grito a todo pulmón con enojo.

- Luffy, yo lo s-siento..

- Solo hazlo!- dijo cerrando sus ojos para calmarse y mordiendo sus labios con ira.

- Ok.....- me dirigí al armario y saqué su cuerpo de ella y con mi poder deshice lo que la mantenía inmovil.

Al hacerlo, ella se derrumbó al suelo pero Luffy con preocupación la cogió del brazo ayudandola a pararse.

- Que paso?- preguntó confundida. Luego, se acordó de todo lo sucedido- Hancock! Tu.....!- se puso detrás de Luffy asustada.

- No te preocupes.....Luffy vino a salvarte, como siempre- admití mordiéndome el labio superior con tristeza- ya......el me descubrió, y seguro que cortaremos.

- Ohh, yo..- Luffy la interrumpió.

- Nami...¿puedes retirarte?- pregunto el con seriedad.

- H-hai!- aceptó ya que observó el ambiente que se originaba entre nosotros.

Nami se fue, dejándonos a mi y a Luffy a solas, ya yo sabía lo que sucedería.

- Sé lo que vas a decir...así que puedes irte, no es necesario que te quedes- dije cruzandome de brazos mientras aguantaba las ganas de llorar.

- Yo confiaba en ti...te di varias oportunidades...y aún así lo hiciste sabiendo las consecuencias. Enverdad...ya ni sé que pensar de ti!- dijo herido y se fue sumamente serio.

- N-no....no.....¡NO!- tiré el vaso de agua que se encontraba en la gabineta al espejo que este tenía con furia- No, no, no, no, no, NOOO!- agarré mi cabeza y me dejé caer al suelo mientras rompía en llanto.- No!........¡¿porque?! ¡¿Porque a mi?!- dije llorando cada vez más.

Me acosté en el suelo a llorar y a llorar, a lamentarme por lo que hice y a maldecir a esa pelinaranja. Vino una mis hermanas con Margaret y me vieron tirada en el suelo, sin pensarlo me ayudaron.

- Hancock!- corrieron a donde mi- ¡¿que te paso?!

- L-Luffy.........e-el me dejó!- dije sin fuerzas alguna sorprendiendo a ambas.

- Hermana, te tienes que tranquilizar, se te pasará!

- Qyue pasa aqui???- preguntó Nyon al escuchar el escándalo.

- Luffy......dejó a Hancock!- le informó Margaret con preocupación.

- Tendremos que hacer algo- dijo Nyon pensativa- ¡te dije qyue no te enamoraras, pero qyue paso?! ¡Te enamoryaste y sufriste! ¡Siempre te he...!- la interrumpí.

- Lo haré sufrir!- dije muy enojada.

- P-pero que dices, hermana? Solo estas...

- ¡Déjenme sola!- ordené.-......¡¡Ahora!!- grité y ellas obedecieron, aunque no muy convencidas de ello.

Nyon me trajo un chocolate y me dejó recostada en la cama, ella dijo que así me sentiría mejor, se fue a orden mía dejándome sola.

- Idiota......¡si no estas conmigo- apreté el chocolate con ira- no estarás con nadie más!

En el Baratie;
Narra Sanji:

Quedaban solo una familia, Zoro y Vivi comenzaron hablando, pero luego terminaron emborrachandose, se reían hasta por ver a una hormiga caminando. Me extrañaba mucho el comportamiento que tenía Vivi con el, y demasiado.

- Wow! ¡Mira! ¡Una hormiga!- dijo Vivi fingiendo asombro.

- Jajajaja, eso quiere decir que no limpian bien el Baratie. El cocinero de mierda dijo que supuestamente este bar no tenía ni una sola hormiga de sucio y esta es la prueba de que no es cierto!- dijo entre risas.

- Jajajajajaja, es cierto!

- Jajaja ¡espera!- dijo pensando.

- ¡¿Que?!- se asustó.

- No era una cucaracha?

- No, mira! Es una hormiga!- señaló al pobre insecto que ni sabía lo que sucedía con ellos.

- Noooo, jajajaja, yo decía lo que dijo cejas rizadas!

- Que, que?! Jajajajajajaja- los dos compartían sus risas continuamente.

Todos los de allí los miraban con rareza, aunque un grupo se reía junto a ellos por las estupideces que decían, mientras que yo solo moría de vergüenza.

- Oe, Sanji! ¡Dame más!- replicó Vivi cogiendo su botella y mostrandomela.

- No, Vivi-chan, ya estas pasada de copas. Y no quiero que tus padres vengan a demandar este sitio. ¿Sabes que? Hablando de tus padres, es mejor que vallas a casa, toma- le dí unos 20 berries- vé con un taxi.

- Así que no quieres que demanden este lugar? Mejor consiguete un exterminador para que limpien esto que ya me encontre una hormiga! ¡kuajajajajajajaja!- rompió a risas al igual que la peliazul.

- ¡Ya! ¡Para! Jajajajajajaja ¡me duele el estomago! Jajajajajaja- dijo tocándose la panza con dolor y a la vez pavera.

- Tsk!- me dirigí hacía ella y la cargué en brazos- Si no te importa, viejo. Me iré a llevar a esta mujer a casa.

- Esta bien! Solo estoy limpiando los trastes, sabes que mañana los lavas tu!

- Si, si...

- Oe, adonde vas con ella? Estamos divirtiéndonos!- Zoro me agarró del brazo impidiéndome llevarmela.

- Ya es suficiente! Tu también ve a casa, tu hermana debe estar preocupada por ti.

- Cállate y déjala aquí!

- No entiendes?! Estas borracho! Me la voy a llevar quieras o no.

Nose porque, pero parece como si lo hubiera entendido, pero de todas maneras me fui sin dejarlo seguir, me monté en mi carro y la puse en el asiento del visitante mientras que yo me al otro lado. Conduje hasta su casa pero el estacionamiento estaba lejos de esta, así que sin poder hacer más, me estacioné allí. La bajé y ella se tambaleaba de lado a lado. Yo cogí uno de sus brazos y lo coloqué en mi hombro para que sirviera de apoyo, además de que con mi mano agarré su cintura.

- Que haces?- preguntó confusa.

- Llevarte a casa.

- Yo....estoy bien ¿ok?- se separó de mi- asi que..ay!- casi se caía pero yo logré cogerla antes de que tocará el suelo.

- Por favor, Vivi-chwan dejame ayudarte- suplique, a la verdad estaba muy preocupado por ella.

- ............Ok, pero antes dame un lindo beso- intento darme un beso pero yo evité que eso sucediera. Me dolió mucho rechazar esa oferta, pero no quería que Vivi se molestará conmigo por aceptar su propuesta sabiendo que no estaba en sus mejores condiciones.

- Oe, es mejor llevarte a escondidas a tu habitación. Si tu padre vé que estás así me ahorcará con sus propias manos.

- O te matará.....- dijo como si esa fuera una opción.

- No es lo mismo...?- dije en mi mente.

- Bueno, ¿me vas a llevar o no? Tengo sueño y quiero mimir- recostó su cabeza en mi hombro a la vez que cerraba sus ojos.

- Em, si, solo que........- entrecerré mis ojos pensando en una entrada segura y fácil de lograr.- Ok, ya sé. Tu me abrazarás lo más fuerte que puedas de mi, así, yo escalaré esos muros y te entraré por la azotea que tienes. Aunque será un poco difícil ya que hay guardias vigilando allí y pues...- me interrumpió.

- Oe, oe, solo haz lo que vallas a hacer ¿ok? Así que..- se trepó en mi espalda- vamos!- gritó entusiasmada alzando el brazo izquierdo y el pie derecho.

- Por el amor de la faz de la Tierra........¡no te duermas!- le pedí exagerando.

- Como crees, jaja, si estoy a tu lado mi corazón no para de latir- dijo apretandome más fuerte, eso en forma de abrazo.

- Ohhh..............¡no digas esas cosas que las malinterpreto!- grité captando la atención del guardia.

- Hey! ¡¿Quien anda hay?!- dijo el tipo que se encontraba en la azotea reforzando su arma. Yo, en cambio, salí corriendo lo más rápido posible a un lugar oculto.

- Mm, tendré que usar medidas drásticas- pensé mientras observaba si se había ido el guardia o seguía allí.

Luego de un rato de espera, me decidí por intentar entrar al cuarto de la peliazul sin ser descubierto. Como pensé, sería imposible.

Escalé con cautela las paredes, tener a Vivi-chan en mi espalda dificultaba las cosas pero eso no era impedimento para mi. Logré llegar al balcón pero uno de los oficiales se dio la vuelta encontrándose a mi. Al ver que Vivi iba a mis espaldas intuyo que la estaba tratando de llevarmela.

- Intentan llevarse a la señorita Nefertari!- uno de los vigilantes avisó al mencionado y este se dio la vuelta alertado.

- Oe, baje a la princesa y entreguese, asi no habrá problemas!- me sugirió uno de ellos.

- ....No!- dije sin interés de hacer caso.

Los tres empezamos a pelear, ellos atacaban y yo contraatacaba, de vez en cuando cada uno nos dejabanos heridas pero todas sin importancia. Uno de los guardias se alejó un poco dejándome la partida más facil, o eso creía. Le pegué una patada al tipo con el cuál peleaba dejándolo inconsciente por unos segundos, pero cuando me dirigía hacia el guardia restante este me apunto con su pistola. Yo abrí los ojos y sin más, alcé mis brazos diciéndole así con mis gestos que me rendía.

- Ahora, tírate al piso y pon tus manos detrás de tu cabeza!- me ordenó.

Me arrodille e hice lo que el me ordenó, enverdad no quería morir, y menos frente a Vivi-chan por eso empecé a suplicar.

- Porfavor, si me matas que no sea delante de ella. No quiero que vea mi derrota- dije cerrando los ojos con arrepentimiento. Ella se encontraba en una esquina de el balcón aterrorizada.- Además, de que no quiero morir virgen.

- Pero que tonterias dices!

- Sanji-san.......- susurró la peliazul asustada.

Apretó poco a poco el gatillo del arma, yo cerré mis ojos fuertemente preparado para lo que venía. Escuché el sonido de una bala impactar en alguien, este se calló al suelo por el golpe. Abrí uno de mis ojos y observé al oficial que había derrumbado hace unos minutos y el se encontraba intacto pero muy sorprendido. Giré mi cuello lentamente con temor a encontrarme aquello que me temía.

- V-vivi-chan.......- logré decir espantado por la escena en la que me encontraba.

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O-M-G, Yeah, lookit jer bot Yeah, O-M-G, YEAH lokit jer bot (~7w7)~

Okno xD, pero apuesto a que no se lo esperaban ¿no? 7u7

¡Como les dije!, sería mas largo y bueno....hace tiempo no les dejó la intriga encima así que quise hacerlo. Son libres de expresar lo que creen que pasará a continuación y también son bienvenidas las lindas ☆ convertidas en ★. Así que sin más que decir, ¡Sayonara's!