El viento soplaba con fuerza mientras todo el mundo estaba mirando hacia la torre de la justicia. Sobre todo un joven de pelo negro que sólo tenía una mirada molesta y parecía que pronto desataria su furia. Este joven sólo tenía esa mirada por los recuerdos que pasaban por su cabeza. Por primera vez, él estaba pensando e incluso sus nakamas lo notaron. El idiota de antes se había ido y ahora estaba el capitan serio viendo al CP9 y sobre todo a Spandam que estaba viendolo con una sonrisa divertida. Robin y Franky sólo sonreían al ver el viento soplando contra el sombrero de paja del joven. Robin sólo pensaba que su amado, su capitán y su familia habían llegado por ella.

-Perdón por tardar, querida.- dijo Luffy con una sonrisa mientras veía que el CP9 tenía frutas del Diablo masticadas.

Eso significaba que la mayoría del CP9 ya eran usuarios pero eso no le importaba aun así les patearía el trasero.

-¿Así que ustedes son el CP9 completo? No parecen nada del otro mundo.- bromeó Luffy burlándose de la mayoría de ellos.

El CP9, aunque parecían tranquilos, no les había gustado esa broma.

-¿Qué dijiste, maldito niño? ¡No sé cómo lograste pasar hasta aquí, pero no saldrás de este lugar con vida!- grito Jabra.

Sin embargo, aunque uno del CP9 sólo quería ir contra Luffy, su líder Rob Lucci tuvo que pararlo para que no hiciera una locura y sólo observó a Luffy con cara de seguridad.

-Esta pelea no será cómo la primera, niño. Estás enfrentándote a toda la marina por una persona y no lo entiendo.- dijo Rob Lucci.

Las palabras de Rob Lucci hacia el capitán sólo provocaron más ira en él. ¿Cómo que por una persona? Robin era su nakama, su familia y una de sus mujeres. ¿Cómo iba a dejarla por su cuenta? Jamás lo haría, sin mencionar que él jamás abandonaría a alguno de sus nakamas.

-Sabía que alguien cómo tu no lo comprendería.- dijo Luffy.

El capitán de los Sombreros de paja seguía tranquilo pero parecía que perdía la paciencia.

-Dejame entender algo, mocoso que se cree un capitán. ¿Has atravesado el mar y estás dando tu vida por esta mujer? ¿Acaso es alguien por quien darías tu vida por ella? ¿No sabes dónde estás, verdad?- grito Spandam abriendo los brazos para señalar toda la estructura con una sonrisa.- ¡Estás en la torre de la justicia, el lugar que se conecta con la sede principal de la marina! ¡En serio estás loco por venir a esta zona con tu pequeña tripulación! ¡Te estás enfrentando al Gobierno Mundial, no importa si lloras por tu vida morirás tarde o temprano!-

Las palabras burlonas del hombre sólo hacían que la mirada de Luffy empeorara aún más rápidamente hasta el punto de que una parte del piso donde estaba se rompiera creando grietas muy visibles alrededor suyo, algo que sorprendió un poco al CP9 e incluso a Spandam que sólo veía las señales de peligro.

-¿No tengo motivos para estar aquí? ¡Eso es una tontería! ¡Ella es mi nakama, mi familia y mujer, no me importa que ustedes no lo entiendan, no saldré de aquí sin ella! ¡Y me importa muy poco que el enemigo de Robin sea el Gobierno Mundial, pelearé contra él si es necesario si la vida de uno de mis nakamas está en peligro!- grito Luffy.

El grito de Luffy resonó en la torre de la justicia creando una onda que sorprendió al CP9 y Spandam por su lado estaba viendo la recompensa de 300,000,000 por su cabeza, creyendo que sí podría ser una amenaza para ellos en el futuro. Y aunque el CP9 pensó que él estaba sólo, en esa oración desde el suelo donde se encontraba el capitán se abrió una grieta saliendo los demás Sombreros de paja. Parecía que habían podido pasar por todos los marines con facilidad ya que no tenían heridas visibles en su cuerpo lo cual era sorprendente.

-Tardaron un poco, Shishishi. Me alegra que estén bien.- dijo Luffy.

-Tuvimos algunos inconvenientes en el camino, pero Gin y los demás se están ocupando de los marines que dejamos atrás.- dijo Zoro.

-Si, estarán bien. Sólo dijeron que podrían tardar algo porque sólo había marines débiles por ahí.- dijo Nami con calma.

-No te preocupes papá, Gin, Yosaku, Jhonny, Bon-chan y algunas de las chicas se están encargando de ellos.- dijo Marianne.

-Eso es verdad, ¿pero por el momento que tenemos aqui?- dijo Nojiko con una sonrisa.

-Sólo son unos estúpidos asesinos que amenazan la vida nuestra compañera.- dijo Reiju.

-Si te dan miedo puedes esconderte, fresita.- dijo Zeimi.

-¿Que dijiste, marima?- 

-Lo que oíste.-

-Vaya, en serio parece que quieren morir.- dijo Sanji fumando.

-¡Les pateare el trasero!- grito Laizy.

-No podemos dejar que mama Robin muera, chicos.- dijo Chopper cambiando a su forma de Yeti Point, aunque ahora sus manos estaban cubiertas de Haki haciéndolo ver más intimidante.

-Lo se y no dejaremos que eso pase jamas.- dijo Luffy.

-¡Luffy tiene razón, no abandonamos a ningún nakama!- grito Yamato.

-¡Vamos a salvar a Robin!- grito Sogeking.

-¡Ustedes piratas no son rivales contra el CP9 ni contra el gobierno. ¿Ven esa bandera que está colgada encima de la torre? ¡Es el símbolo del Gobierno Mundial, la bandera que los perseguirá para siempre si no ponen atención a lo que están haciendo! ¿En serio darán sus vidas por esta mujer? ¡Ustedes están locos, piratas!- grito Spandam.

-¡No vinimos solamente por ella idiotas, también vinimos por Franky que es otro de mis nakamas y lo salvaré a él también! ¡Y sobre esa bandera, Nojiko, Usopp: destruyan esa maldita bandera!- grito Luffy con furia.

-¡Entendido, capitán!- dijo Sogeking.

-¡Por supuesto, mi amor!- dijo Nojiko.

Entonces, ambos apuntaron sus armas con dos canicas de diferentes colores: azul y roja.

-¡Estrella del Fénix!- grito Nojiko.

-¡Estrella de Fuego!- grito Sogeking.

Las dos canicas fueron contra la bandera convertidas en fuego de diferentes colores y quemaron la bandera con rapidez, haciendo que todo el mundo quedara en shock, menos los Mugiwaras que sólo estaban sonriendo al ver la bandera ser quemada. La guerra declarada por los Mugiwaras desde Arabasta, ahora tomaba sentido en la torre de la justicia. En todo momento, ellos ya tenían pensado declararles la guerra y más para los recordados hacerlo en un lugar sagrado cómo la torre de la justicia.

-¡Así que a un lado maldito gobierno, nos iremos de aquí con mi querida Robin!- grito Luffy.

Nuevamente el grito provocó el miedo en la mayoría de marines y una sonrisa en la cara de los Mugiwaras.

-En serio no entiendo nada de esto, pero suena divertido. Sin decir que esa chica de pelo naranja junto con las demas no estan nada mal.- dijo Jabra.

-¿Ni en una batalla así puedes actuar serio? Pero si vamos a eso, debo decir que el capitán de esos piratas es tan caliente y me ha entrado el deseo de meterlo en la cama.- dijo Kalifa mirando a Luffy con deseo.

-No te preocupes anciana, el puede ser tierno diciéndonos lindas pero ya estamos apartadas para un sólo hombre. Y sobre lo que dijiste de Luffy, te aconsejo mantener tu boca cerrada si no quieres morir ya que el es mi hombre y de las demás de su harem.- dijo Nami  sonriendo y besando con pasión los labios de Luffy para sorpresa de él, aunque correspondió el beso con felicidad.

-Buena demostración Nami-san, pero ese lobo de mierda es mio y lo matare.- dijo Sanji con una sonrisa macabra.

-Bien, entonces vamos chicos.- grito Luffy.

Al decir esto, nubes eléctricas se pusieron debajo de ellos y fueron contra la torre de la justicia. Spandam sólo se asustó al ver esto y tomó a Robin de las esposas para llevarsela de la zona. Sin embargo, fue detenido cuando un brazo de goma lo tomó por la espalda y lo hizo caer contra el suelo. Los Mugiwaras habían entrado a la torre y no se irían sin antes destruir toda la zona. Los Mugiwaras se dividieron con los enemigos que les convenía y empezaron una pequeña lucha en el balcón. Sin embargo, el CP9 empezó a retroceder para ir a otros lugares y no enfrentarse en un mismo lugar.

-¡Cobardes, vuelvan y peleen contra nosotros!- gritó Zeimi enojada al ver su retirada.

-Sólo quieren que los sigamos, bien pero antes de eso le daré una paliza a Spandam por mi querida Robin y ustedes liberen a Franky de esas cadenas.- ordenó Luffy.

Todos asintieron en ese momento con una sonrisa divertida. Luego de eso, Luffy le estaba dando golpes fuertes y llenos de furia a Spandam que daban un sonido de satisfacción a Robin, que por el momento aún estaba con las esposas en sus manos.

-¡Me dices cómo sacarle las esposas o aquí mismo te mato!- grito Luffy con furia y en tono frío.

El hombre casi inconsciente le dio una señal de que tenían que buscar las llaves. Luffy al ver la señal ya sabía lo que tenía que hacer por lo que le dio otro golpe a Spandam y lo dejó en el suelo para que no los molestara por el momento.

-Bien chicos, separense y sigan a los enemigos que tienen que enfrentar. Lo importante es recuperar esas llaves y liberar a Robin. Franky cuento contigo cómo en los viejos tiempos.- dijo Luffy.

-¡Super! El gran Franky, carpintero de los Mugiwaras está listo para la diversión.- grito Franky emocionado.

-Bien, vamos entonces. Nojiko, Reiju, Zeimi, Laizy y Marianne quédense junto a Robin. Yo iré tras Rob Lucci y te necesito Jack para lidiar con esa paloma. Tengan suerte y no se preocupen que aunque estemos en el mismo infierno, juro que volveremos al mar.- dijo Luffy.

Al decir esto, Luffy junto al pequeño mono Jack fueron detrás de Lucci y la paloma con una cara enfocada.

-¡Ire por Kaku, ese idiota y yo tenemos una lucha pendientes!- grito Zoro.

-¡Yo iré por Jabra, tengo una cuenta pendiente con él! ¡Lo haré pedazos! ¡Hermana quédate aquí!- gritó Sanji, caminando al lado de Zoro.

-Creo que yo apoyaré a Sanji en su lucha, nos vemos.- dijo Sogeking.

-Yo iré por el tipo con el cabello rosado, lo venceré esta vez de la manera correcta.- dijo Chopper corriendo a buscar a ese tipo.

-Yo iré por cola para luchar y acabare con esa pelota verde.- dijo Franky.

-Yo acompañare a Franky.- dijo Yamato.

-Cuida a Robin hermana, yo buscaré a la vieja que ella será mi víctima.- dijo Nami con una sonrisa y corriendo para buscar a Kalifa.

-Gracias por venir por mí.- dijo Robin con una sonrisa.

-¿Qué dices, mamá Robin? Papa no te dejaría jamás.- dijo Marianne.

-Tampoco nosotros, somos una familia muy unida gracias a Luffy.- dijo Nojiko.

-Así es, nuestro querido no dejará que te pase nada ya que él es un hombre que no se encuentra en todos lados.- dijo Reiju.

-Es una de las pocas veces en que tengo que estar de acuerdo con la fresita, ni Luffy ni el resto dejaríamos que te hagan algo.- dijo Zeimi.

-Tienen razón, no me  pasará nada ya que los tengo a todos, jejeje.- dijo Robin.

Por el lado de los recordados

Zoro estaba atravesando las paredes ya que no ubicaba donde estaba el nariz cuadrada llamado Kaku que quería volver a enfrentarlo cómo en su vida pasada. Luego de haber cruzado por varias paredes por fin varias paredes por fin llegó frente a Kaku. El hombre sólo estaba esperándolo en una silla con una sonrisa bastante divertida y parecía que ambos de verdad esperaban una pelea épica.

-Conque llegaste Roronoa Zoro, el segundo con recompensa más alta en la tripulación de los Mugiwaras.- dijo Kaku.

Zoro sólo salió corriendo en ese momento apuntando con sus espadas a Kaku.

-¡Nitoryu: Estilo dos espadas ancestrales!- grito Zoro.

Al gritar esto una poderosa ráfaga fue hacia Kaku quien sólo lo pudo esquivar por unos centímetros pero al ver hacia al frente fue cortado justo en el pecho. Kaku cayó contra el suelo con dolor pero pudo levantarse rápido.

-¿Qué hiciste? ¡Eres más rápido que antes, no pude verte ni un centímetro!- grito Kaku.

-¡No hice nada, sólo que ahora si estoy enojado en serio, así que prepárate!- grito Zoro.

En ese momento, Kaku empezó a cambiar de forma hasta convertirse en una jirafa. Esto sólo hizo sonreír a Zoro que cubrió sus katanas de Haki.

-¿Empezarás con todo? Bien, podrás hacer que luzca ante el mundo jirafa.- dijo Zoro.

Al decir esto, ambos chocaron espadas que produjo un destello el cual cortó parte de la torre donde estaban.

En otra parte

Usopp y Sanji sólo estaban corriendo directo a una puerta buscando a jabra y al entrar en la habitación de una patada encontraron al hombre todo relajado y sin nada de aura tumbado en el suelo. Sanji y Usopp al verlo sólo se pusieron en guardia ya que Usopp le lanzó una canica explosiva que le dio directo en la cara a jabra sacándolo a volar unos metros. Jabra al sentir esto sólo se levantó y cambió a su fruta del diablo modo lobo que lo hizo crecer de una gran manera. Sanji y Usopp no dudaron ni un segundo en cubrir sus puños de Haki y el mayor cobarde que era antes Usopp desapareció quitándose la parte de arriba de su vestimenta mostrando su cuerpo tonificado gracias al sudor de su entrenamiento.

-¿Listo, Usopp? Esto será lo más duro que harás hasta ahora.- dijo Sanji.

-¡Claro que sí, vamos!- dijo Usopp.

Al decir esto, ambos corrieron hasta Jabra y chocaron golpes.

Por otro lado

El capitán de los Sombreros de paja estaba serio frente a Lucci con una mirada furiosa. Luffy sólo lo miraba con una mirada fría y unos ojos casi muertos.

-¡Me darás tu llave y me ire de aqui, no detendrás al Rey de los Piratas!- le gritó Luffy.

Lucci sonrió y le dio la llave a su paloma que se alejó volando por la habitación.

-¿Tú el Rey de los Piratas? Sólo eres un moscoso con varios sueños inútiles y esta recompensa de 300,000,000 de berries que ya veremos cuando te dura.- dijo Lucci en tono burlón.

Luffy sonrió y miró a su pequeño amigo quien entendió y fue tras la paloma para quitarle la llave al estilo de su maestra Nami.

-Eso es verdad, cuando te derrote de seguro subirá a 350,000,000.- dijo Luffy con su sonrisa.

Lucci salió corriendo cambiando a su forma de leopardo para combatir contra Luffy. Nuestro capitán sólo chocó su puño contra el hombre para empezar la pelea que destruiría la torre de la justicia.

¿Qué pasará ahora? Las batallas están empezando en este lugar. ¿Lograrán los Mugiwaras derrotar al CP9 cómo en su vida pasada? ¿Lograrán liberar a Robin de nuevo? Se ha desatado la batalla de Luffy contra Lucci. ¿Quién ganará?