En toda la tierra superior las peleas y la explosiones continuaban, parecía que esto no tenía fin. Por su lado, Nami y Aiza actualmente estaban moviéndose por el bosque por una vía láctea. El plan de Nami era ir adonde estaban sus nakamas para engañar a Enel y facilitar el plan de su esposo.

Ahora mismo, el que tenía más problemas era Chopper que estaba subiendo por el tallo. Pero al llegar tuvo una gran sorpresa al encontrarse con otro sacerdote.

-Vaya, el primero que llega. ¿Cómo estás?- dijo Ohm.

Chopper retrocedió al sentir el aura del sacerdote.

-¿No responderás, eh? Eres algo reservado. ¿A qué vienes aquí?- preguntó Ohm.

Chopper volteo y se puso en alerta al ver al perro del sacerdote.

-No te preocupes por él, no atacará a menos que se lo ordene.- dijo Ohm.

-¿En serio? Entonces, me quedo tranquilo por eso.- dijo Chopper con sarcasmo.

-Y dime, ¿qué haces aquí exactamente?- preguntó Ohm.

-Vine por un poquito de oro.- dijo Chopper.

-Ya veo.- dijo Ohm.

En ese momento, Ohm lanzó una ráfaga de su espada y Chopper al verlo intentó correr pero fue demasiado tarde y Chopper cayó al suelo con fuerza.

-Vaya animalito, no eres tan fuerte cómo pensé, al final perdiste. Pero no te preocupes que al final te libere de tus ambiciones.- dijo Ohm con una sonrisa.

Mientras tanto, con Luffy y Marianne

-¡Chopper Nii-sama!- dijo Marianne con lágrimas en los ojos.

-¿Lo sentiste, verdad?- preguntó Luffy.

-Tenemos que apurarnos, varios de nuestros nakamas cayeron, papá.- dijo Marianne entre lágrimas.

Luffy sólo asintió mientras corría más rápido en dirección al tallo. Sin embargo, un rayo hizo que se detuviera y Luffy lo esquivó con un salto hacia atrás.

-Sabía que vendrías por mí.- dijo Luffy con tranquilidad.

-Sombrero de paja, es un placer ver a mis próximas víctimas.- dijo Enel con una sonrisa.

Marianne sólo se bajó de la espalda de Luffy y sacó sus pinceles.

-¿Conque la niña también quiere pelear, eh?- dijo Enel divertido.

-Ella puede vencerte, gran dios Enel.- dijo Luffy con burla.

Enel sólo sonreía mientras observaba a ambos. Entonces, Luffy comenzó a correr mientras cubría su puño de Haki. Enel sólo se confió creyendo que no podía ser tocado ya que era un tipo Logia y parecía que Enel no tenía conocimiento del haki de armadura. Sin embargo, sólo esquivó a Luffy ya que su objetivo no era él y Luffy se detuvo al ver lo que haría Enel.

-¡No te atrevas a hacerlo, maldito infeliz!- grito Luffy con furia.

Marianne sólo pintó rápidamente varios puños de pintura cubiertos de Haki de armadura. Enel apareció arriba de ella y Marianne atacó con sus puños de pintura. Varios puños fueron esquivados por Enel pero dos puñetazos lograron darle sacando sangre y Enel retrocedió al ver esto.

-¡Esto es imposible, yo soy un dios! ¿Cómo te atreves, maldita mocosa?- grito Enel furioso.

Marianne sólo dibujó animales de pintura para lanzarselos a Enel, pero el falso dios al notar que ella dibujaba lanzó una descarga eléctrica al suelo. Luffy fácilmente se subió a un árbol para evitarlo pero se olvidó que Marianne no podía subir tan alto. Al notarlo, Marianne fue electrocutada muy fuertemente y Luffy apretó los dientes con fuerza al ver esto. Marianne cayó al piso, soltando su cuaderno y sus pinceles y Luffy corrió para ayudarla.

-¡Hija, Marianne!- gritó Luffy intentando hacer que reaccionara.

-No te preocupes papá, estoy bien.- dijo Marianne adolorida y con lágrimas.

Al verla en este estado no pudo evitar tener un recuerdo de su vida pasada donde ocurrió algo similar.

Flashback

Isla Dawn, un año antes de la tragedia

Luffy se encontraba en su habitación del Thousand Sunny junto a su reina disfrutando de la compañía del otro muy acaramelados cuando aparecieron sus dos hijos en muy mal estado: golpeados y sucios.

-¡Eddie, Lu! ¿Que paso?- preguntó Nami mirándolos con horror.

-¡Lo que pasó fue que…- empezó a gritar Edward pero su hermana le dio un codazo para que se callara.

-No digas nada o papá provocará un infierno por nuestra culpa.- le susurro Luna enojada.

Luffy noto esto y fue hacia ella para preguntarle.

-¿Lu mi pequeña princesa, que paso?-

-Nada papá, sólo nos caímos por una escalera.-mintió Luna de la misma manera que su padre: tan mala.

-¡Monkey D Luna, sabes que heredaste mi pésimo esfuerzo para decir mentiras y podemos saber que mientes! ¡Ahora dime qué les pasó en verdad!- ordenó Luffy en tono autoritario.

Luna chasqueo la lengua derrotada y empezó a explicar:

-Sucedió que estábamos en el bar de la tía Makino con nuestro primo cuando aparecieron unos bandidos de la montaña. Al vernos, empezaron a decir pestes de nosotros diciendo que éramos los hijos del demonio y que no merecíamos vivir. Entonces, el idiota de mi hermano abrió la boca para gritarles que no dijeran esas cosas sobre ti y que ellos eran unos imbéciles. Luego de eso, se enojaron y nos golpearon y si no fuera por la tía Makino no habrian parado. Eso fue todo lo que pasó.-

Luffy sólo asintió y enseguida su intención asesina se pudo sentir en el Sunny y en toda la isla Dawn.

-Nami, quédate con nuestros hijos que yo iré a destrozar unos malditos traseros.- dijo Luffy con voz oscura.

Nami trató de detenerlo pero fue en vano y se tuvo que quedar con sus hijos rezando que su alocado esposo no cometiera una locura. Ese día fue recordado por todos cómo “La Masacre del Rey Pirata”. Los pobres infelices después de ese día no pudieron comer por la boca durante tres años.

Fin del Flashback

Luffy miraba a Marianne sintiéndose impotente cuando escuchó la voz de Enel detrás de él.

-Vaya la mocosa sobrevivió, creo que tendré que darle otra descarga.-

Luffy tomó a Marianne en sus brazos y la llevó a un árbol para que se alejara del peligro. Marianne sólo sonrió mientras Luffy la recostaba y Luffy al verla en ese estado recordó a sus hijos y lo que pasó con sus nakamas ante Akainu e incluso recordó a la Tama en Wano. Luffy se levantó mientras tenía sus ojos tapados por su sombrero.

-¿Qué pasa Sombrero de Paja? ¿Vas a llorar o algo así? Mira que soy un dios misericordioso y la dejé viva aunque no era mi…- dijo Enel en burla pero no pudo continuar por la presión que sentía.

Miró a Luffy y pudo notar que de él salía una gran aura de furia que lo hizo arrodillarse. Y no fue el  único ya que en toda la isla superior se pudo sentir la furia de Luffy. Los recordados lo reconocieron de inmediato y sabían que su capitán se había convertido en un demonio. En especial Nami, que  al sentir la furia de su esposo recordó lo que pasó con sus amados hijos y sólo pudo sentir pena por el pobre Enel. Recordó que luego de ese incidente se formó un dicho muy importante de recordar: “No te metas con los príncipes del Rey Pirata o tendrás al peor de los demonios frente a ti.” 

Nami sabía que Luffy tenía los defectos de haber sido un gran idiota, impulsivo, gloton e inmanduro, pero si hubo una cualidad buena que ella amaba demasiado de el, es que era un padre responsable y sobreprotector con sus hijos. Recordaba muy bien que Luffy los protegía demasiado de la misma manera que los amaba, sobre todo con su pequeña princesa Luna que era la luz de sus ojos. Nami suspiró y continuó con su camino sintiendo lastima por el pobre Enel que se atrevió a tocar a Marianne.

Mientras tanto, Luffy acomodó su sombrero mientras se acomodaba su chaleco de cuero rojo y le dijo a Enel con voz oscura:

-¡Me has hecho enojar, ahora te haré pedazos!- grito él alzando la mirada.

Por otro lado

En el tallo en el que Chopper había caído, Zoro y Zeimi estaban llegando a la zona encima del pájaro acosador que los estaban siguiendo por su comida. Zoro y Zeimi lo que hicieron fue ofrecerle la comida para que después se los llevaran por el cielo, pero esto fracasó ya que el ave no los quería llevar. Zoro tuvo que sujetarse de las mochilas de comida para que el pájaro lo llevara con una Zeimi sujetada a él. Al final el plan les salió bien, sin embargo para soltarse tuvo que hacerlo él mismo y cayeron contra el suelo. Al llegar, Zoro noto cómo Ohm lo observaba.

-¿Son más idiotas del mar azul, no?- preguntó Ohm.

-¿Y tú un sacerdote, verdad? Creo que llegue adonde quería.- dijo Zoro con una sonrisa.

-¡Ten más respeto, maldito! Soy Ohm, el sacerdote de la prueba del hierro.- dijo Ohm molesto.

Zoro sólo sonrió mientras sacaba sus espadas y le decía a Zeimi.

-Hermanita, este sacerdote me toca a mi por lo que tú sólo quédate ahí y observa.-

Zeimi asintió pero dos personas no deseadas para ambos llegaron.

-Un momento, ¿quién eres tú?- le dijo Zeimi a Wiper que  había llegado a la zona del tallo.

-¿Son amigos de Sombrero de Paja, verdad?- preguntó Wiper.

-Asi es, yo soy una de sus mujeres y ¿quien eres tu?- dijo Zeimi con su mano en sus espadas.

-Conque tú también llegaste Wiper, ¿quieres llegar al templo del dios Enel, verdad? Pues para tu mala suerte el dios Enel no está ahí.- dijo Ohm.

-¿Qué?- dijo Wiper con sorpresa.

-Lo que dice es verdad, aunque duela decirlo.- dijo Gan fall.

Zoro, Zeimi y Wiper al voltear vieron al antiguo dios observándolos.

-Gan fall, ¿qué haces aquí?- preguntó Wiper enojado.

-Pues quería decirte que si buscas a Enel no está en el templo. Si subes verás todo destruido y en malas condiciones.- dijo Gan fall.

-El dios Enel se está divirtiendo ahora mismo, así que cállense.- dijo Ohm.

-Creo que hemos hablado mucho, ¿no creen?- dijo Zoro.

-¿No me digas que te aburres, maldito ser del mar azul? Pero creo que es hora de dejar las palabras a un lado.- dijo Wiper.

En ese momento, los cuatro sacaron sus armas mientras se observaban, parecía que una pelea se venía entre los cuatro.

Por otro lado

laki iba a buscar a su líder Wiper para avisarle que Kumakiri le había avisado antes de caer inconsciente que Enel era invencible y que no habría nadie que pudiera vencerlo. Sin embargo, ella le diría que confiaba en Sombrero de Paja y que lo dejara en sus manos.

De vuelta en la pelea en el tallo

Wiper estaba atacando a todos ya que él no tenía aliados aquí, aunque Zoro y Gan fall estaban cooperando contra Ohm, Wiper atacaba a todo el mundo. Zoro peleaba contra Ohm y su perro Ollie que parecía saber pelear, incluso se ponía en dos patas. Pero Zoro, gracias a sus conocimientos del Haki de armadura y observación podía contra ambos. Ohm atacaba con todo lo que tenía a Zoro e incluso lo guiaba a trampas hechas de nubes de hierro. Pero gracias a sus recuerdos de su vida pasada, Zoro pudo esquivarlas fácilmente. Pero mientras Zoro seguía peleando, Zeimi noto a una persona tirada a lo lejos.

-¡Chopper, no puede ser!- grito Zeimi.

En ese momento, Zeimi empezó a correr al notar que Chopper estaba en el suelo lleno de sangre.

-¡Hijo, resiste no puedes morir!- grito Zeimi preocupada.

-Conque el tambien es tu amigo, no te preocupes, creo que sigue con vida.- dijo Ohm al notarla.

Zeimi sólo tomó a Chopper en sus brazos mientras apretaba sus dientes.

-Parece que la venganza está ahora en su sistema.- dijo Ohm.

-La venganza mancha la sangre pura, pero debo decirte que nuestra sangre no es nada pura. ¡Eso significa que te haré polvo!- dijo Zoro furioso.

Ohm sólo sonrió, pero al notar su mejilla estaba sangrando.

-¡Te mataré!- gritó Zeimi con su espada desenvainada y furiosa.

-¡Zeimi, guarda tu espada y dejame vengar las heridas de Chopper a mi!- ordenó Zoro.

Zeimi sólo apretó los dientes y guardó su espada mirando a Ohm con furia. Ohm sólo se limpió la herida mientras le decía a Ollie que siguiera atacando con suma velocidad.

Mientras tanto en la batalla de Luffy

Luffy estaba dándole una paliza a Enel que sólo atacaba con rayos pero Luffy los apartaba con Haki de armadura. Entonces, Luffy al llegar cerca de Enel le dio dos puñetazos en la cara con Haki de armadura para después darle una lluvia de puñetazos a Enel en todo su cuerpo con velocidad. Enel intentó apartarse con electricidad pero Luffy usó Soru para ponerse encima de Enel. Al estar encima de Enel, le metió un potente Jet Pistol enterrandolo en el suelo y luego se alejó un poco.

-¡Te voy a hacer polvo, Enel!- grito Luffy.

Enel sólo se levantó con sangre.

-¡Maldición, tengo que irme de aquí ahora mismo!- dijo Enel desesperado.

Entonces, empezó a usar su electricidad para escapar de manera rápida de Luffy. Aunque a Luffy le doliera no acabar con Enel en estos momentos, él tenía que curar a su hija Marianne de sus heridas.

Por otro lado

Nami y Aiza eran perseguidas por soldados celestiales pero Nami fue la Reina Pirata por una razón y era por haber sido la más lista de todos los Mugiwaras, por lo que cada vez que se encontraban con más soldados celestiales, Nami siempre los derrotaba con su bastón o de un sólo puñetazo.

-Estamos a punto de llegar al tallo, no te preocupes Aiza.- dijo Nami.

-Si por favor, ahí está Wiper.- dijo Aiza.

Mientras tanto

Zoro estaba sudando un poco mientras le daba un potente puño a Ohm haciéndolo retroceder con fuerza.

-Pensé que me vencerias, maldito idiota.- dijo Zoro con una sonrisa.

Ohm lo siguió atacando casi desesperado notando que sus ataques eran inútiles y Ollie peleaba contra Gan Fall y Wiper, aunque a decir verdad, aunque Gan fall diera el máximo casi estaba en las últimas ya que Ollie lo estaba haciendo polvo dado que Ollie atacaba más a Gan fall. Pero en la batalla llegaron más refuerzos para ambos bandos ya que Nami junto con Aiza llegaron a la zona de la pelea.

-Bruja, ¿qué haces?- grito Zoro.

-Vine a ayudarte, eso es obvio.- dijo Nami.

-Aiza, ¿qué haces tú aquí?- gritó Wiper.

-Perdón por fallarte Wiper, pero necesitaba ayudarte en esto.- dijo Aiza.

-Parece que han llegado refuerzos para ambos bandos: los últimos soldados celestiales y los últimos guerrilleros.- dijo Ohm.

Sin embargo, al acabar de decir esto los soldados celestiales al igual que los guerrilleros fueron electrocutados fuertemente y todos cayeron.

-Parece que el dios llego.- dijo Ohm.

Al decir esto, toda la zona en la que se encontraban se cerró en una jaula hecha de alambre de nubes de hierro.

-Parece que esto se complica. Zoro, ¿sabes dónde están los demás?- dijo Nami mirando a Zoro.

-Ni idea, los perdí cuando la serpiente nos atacó pero pude sentir el instinto asesino de Luffy.- dijo Zoro.

Ohm atacó a Wiper, pero Zoro intervino.

-Parece que la fiesta continúa, ¿verdad?- dijo Enel apareciendo con heridas.

-Dios Enel, ¿que le paso?- preguntó Ohm.

-Nada, sólo matalos la hora ya viene.- dijo Enel tirando a Laki electrocutada al suelo y desapareciendo.

-¡Laki, maldito Enel!- grito Wiper.

-¡Laki, no puede ser, no ella!- grito Aiza llorando.

-¡Aiza, no vayas! ¡Zoro, encárgate de ellos yo cuidare a Aiza!- grito Nami.

-Bien, pero ten cuidado que no podré ayudarte si pasa algo mas serio.- dijo Zoro.

-Estaré bien no te preocupes, recuerda que hablas con la Reina Pirata.- dijo Nami con una sonrisa.

Zoro sólo asintió mientras seguía atacando al igual que Wiper. Entonces, ambos empezaron a pelear al mismo tiempo contra Ohm y Ollie y parecía que ambos se habían vuelto un dúo dinámico contra Ohm.

Por otro lado

Luffy estaba junto a Marianne y la pequeña estaba vendada con algunas hojas secas. Luffy había hecho una buena medicina para el dolor y las quemaduras. Al final, Luffy aprendió mucho de Nami y Chopper en muchos sentidos. Marianne seguía dormida por lo que Luffy hizo un pequeño lazo para poder sujetarlo a su espalda. Luffy sabía una cosa: tenía que llegar en el momento preciso para llevar a cabo el plan, pero antes tenía que encontrar algo que necesitaba. Por lo tanto, amarró a Marianne a su espalda y al hacerlo empezó a correr hacia el tallo gigante donde pelearía ahora seriamente contra Enel y lo haría polvo.

Mientras tanto

Zoro y Ohm tenían su batalla final ahora mismo. Ohm estaba lleno de heridas y de sangre y estaba débil.

-¿Eso es todo lo que tienes, maldito idiota del mar azul?- grito Ohm.

Zoro sólo sonrió mientras se ponía su pañuelo y alzaba sus espadas.

-¡Esto es por Chopper! ¡Pagarás por lo que le hiciste a mi sobrino! ¡Estilo de tres espadas: Ataque de largo alcance modo demoníaco!- grito Zoro.

Al decir esto, Zoro lanzó un potente ataque desde sus espadas y al hacerlo le dio de lleno a Ohm derrotandolo sin mucho esfuerzo. Zoro respiró mientras bajaba sus espadas. Por su lado, Gan fall cayó al suelo del cansancio ya que sus heridas aún le dolían. Al hacerlo dejó caer su arma y Aiza sujetó el arma rápidamente dejando a Nami mirándola seria.

-¿Qué crees que haces, Aiza?- le preguntó Nami con seriedad.

-¡El nos quito la tierra superior el hogar de los Shandia, el es tan culpable cómo Enel! ¡Jamás hicieron nada para devolver la tierra a los Shandia!- grito Aiza.

-En cierto sentido tiene razón, si te hace feliz matarme pues adelante hazlo seria lo mejor. Pero, sólo quiero decirte que lo siento.- dijo Gan fall.

Aiza sólo lo miró mientras alzaba el arma y estuvo a punto de matarlo pero las manos de Nami la detuvieron.

-Aiza, ¿crees que con matarlo solucionaras todo?- le preguntó Nami con voz firme.

-Pero él es culpable de todo esto, debes entenderme Nami, yo, yo…- dijo Aiza con lágrimas.

Nami sólo la abrazó para que se desahogara y al hacerlo Aiza soltó el arma. Wiper al notar esto sólo se concentró porque ahora mismo tenía a Ollie el perro del sacerdote aun siguiéndolo.

Mientras tanto, en el Merry

Palaya junto a Connie habían llegado justo al punto para huir. Sin embargo, los Mugiwaras aun no llegaban y esto era algo que les preocupaba a ambos. Pero tenían que seguir fuertes y Connie cuidaba a los chicos que seguían dormidos. Ahora mismo tenían que recuperarse para ayudar a los demás. Sin embargo, al estar haciendo esto alguien se acercaba al Merry por el bosque y esto era algo que Zou el zorro de Connie empezó a avisar con su chillido.

Por otro lado

Robin y las chicas seguían buscando el Poneglyph y la campana de oro. Sin embargo, se encontraron con alguien.

-Parece que alguien encontró mis ruinas. Se ve que son buenas arqueólogas, ¿verdad?- dijo Enel.

-Debes ser el dios Enel, ¿verdad?- dijo Robin con cautela.

Enel sólo asintió mientras comía una manzana. Nojiko y Yamato se pusieron detrás de Robin listas para cualquier cosa. Reiju sólo lo observaba e incluso con su Haki pudo observar la electricidad que Enel exponía y con eso supo que no deberían actuar sin pensar.

-¿Ustedes buscan el oro, no?- preguntó Enel con calma.

-Si eso buscábamos, pero parece que todo te lo llevaste.- dijo Robin.

-Así es, jajaja.- dijo Enel con una sonrisa.

-¿También la campana de oro?- preguntó Yamato.

-¿Campana de oro? No escuche de ella, aunque tiene sentido. En las leyendas dice que cuando esta isla subió se escucharon campanadas.- dijo Enel.

-Nosotros pensamos que la campana no está aquí.- dijo Nojiko.

-Puede ser, pero podemos buscar juntos.- dijo Enel.

Sin embargo, él sintió algo y alzó su mano.

-No se preocupen, sólo acabaré con una molestia.- dijo Enel con una sonrisa.

Al decir esto, lanzó un potente rayo a una dirección. Nojiko, Reiju y Yamato se sorprendieron al ver esto y Robin sólo lo miraba con furia. El rayo fue dirigido hacia el Merry pero no fue dirigido al barco, sino a una persona que le había dicho a Connie y a Palaya que Enel quería destruir la isla del cielo y que el único que se salvaría sería Enel porque él tenía un arca. Esto lo dijo un desertor de las fuerzas divinas y al hacerlo el rayo cayó en esa zona ya que ya sabían del plan de Enel.

¿Qué pasará ahora? ¿Será que Luffy llegue a tiempo para pelear contra Enel de verdad? ¿Será que Marianne despierte?