Capítulo dedicado a Auroralmhof, feliz cumpleaños atrasado! ❤

Después de un largo mes de recuperación, por fin había llegado el día en que Ritsu ya no tendría que usar la estúpida venda que lo acompañó durante su incapacidad, eso lo hacia sentir realmente feliz, aún más porque su herida había sanado de forma rápida; más rápido de lo que él había pensado.

Se levantó de su cómoda cama casi saltando, el castaño sentía muchos ánimos ese día, dio un largo bostezo al aire mientras estiraba sus brazos; camino hasta el baño de su departamento. Antes de entrar a la ducha se paró en frente de un espejo para contemplar su propio reflejo por varios instantes, su apariencia física también había mejorado bastante, ya no parecía un muerto viviente, su físico ahora correspondía a lo que él era; un ser humano. Soltó un ligero suspiro y entró a la ducha.

Una vez duchado fue de nuevo a su habitación y empezó a vestirse con el cambio que escogió con anterioridad. Hoy era un día feliz para Onodera.

Ya no tendría que tomar esas malditas pastillas.

Ya no usaría más vendas.

Volvería a su trabajo de editor.

Y... volvería a ver a Takano-san.

Un aura un tanto oscura y deprimente rodeo su cuerpo, el pensar en su jefe había provocado que toda su alegría se fuera instantáneamente a la mierda, velozmente sacudió su cabeza como queriendo sacarse esos pensamientos negativos de su mente. No, definitivamente no, nada ni nadie le iba a arrebatar esa felicidad que no había tenido en mucho, pero mucho tiempo; ni siquiera el estúpido, tirano, e hijo de puta de su jefe.

Terminó de vestirse y comenzó a guardar sus cosas en un bolso, por último tomó una hoja que estaba en su mesa de noche, leyó el contenido. La dichosa hoja era su traslado de Shojo a Literatura; Yokozawa-san le ayudó en ese tardado proceso, pues pedir el cambio de sección no era para nada sencillo. Pero aún había dos INSIGNIFICANTES problemas para su traslado:

No había escritores a quien editarle sus obras.

Necesitaba la firma de Takano-san.

De nueva cuenta se sacudió la cabeza, al parecer el ojimiel se metía en sus pensamientos, volvió a suspirar. Su mente tenía que permanecer fría, él era un persona fuerte, no se iba a dejar intimidar por su jefe, ni hoy, ni nunca más. Guardó la hoja en su bolso, tomó sus llaves y salió de su departamento.

Cerrando la puerta de su hogar permaneció parado en el pasillo observando todo a su alrededor por algunos segundos, aún no se acostumbraba a su nuevo edificio ni a su nueva casa, todo era tan nuevo para él, era un ambiente más tranquilo, no tenía vecinos que lo hostigaran cada 10 segundos.
Revisó la hora en su reloj de muñeca, percatandose que ya le quedaba poco tiempo para llegar a la editorial; dio marcha a paso rápido hasta su trabajo.

Llegó a Marukawa y caminó con pasos un tanto largos al elevador donde presionó un botón, esperó unos minutos a que las puertas del ascensor se abrieran, cuando esto pasó entró en el mismo; sus puertas estaban a punto de cerrarse pero entró.

-¡Espera! -gritó una voz deteniendo al elevador con una mano, acto seguido entró-

Ritsu giró a ver a su acompañante.

-Buenos días, Yokozawa-san. -saludó-

El recién nombrado volteo encontrándose al castaño, este parecía alguien totalmente nuevo, como si hubiera vuelto a nacer.

-Buenos días, Onodera. -devolvió el saludo- ¿Hoy se acaba tu permiso?

-Si. -contestó- También hoy hablaré con Takano-san acerca de mi traslado, no estoy seguro como pueda reaccionar, pero tengo fe que todo saldrá bien. -calló por unos segundos- Por cierto, gracias Yokozawa-san.

-¿Eh? ¿Por qué me das las gracias? -interrogó confundido-

-Por haberme ayudado. -sonrió ampliamente-

Ese simple gesto hizo que el rostro del peliazul se tornara de un tenue color carmesí, color que no pasó desapercibido por el de ojos verdes.

-¿Está bien, Yokozawa-san? -el castaño se acercó al mayor creyendo que este tenía fiebre y por ende su rostro estaba rojo-

-¡Si! Estoy bien, no te preocupes. -alejándose rápidamente de Onodera-

-Está bien, supongo. -comentó dudoso-

¿Qué demonios había ocurrido? Fue la primera pregunta que llegó a la mente del oso gruñón, se había sonrojado y ese maldito sonrojo fue por la sonrisa de Onodera. Pero, ¿por qué? Ni él lo sabía.
Aquella tonta sonrisa hizo ocasionó que su corazón casi saliera de su pecho.

Un par de segundos más tarde las puertas del ascensor se abrieron, Onodera había llegado a su destino.

-Nos vemos luego Yokozawa-san. -antes que pudiera salir, el mayor lo tomó de la mano rápidamente, Ritsu sintió su rostro hervir ante el contacto- ¿O-Ocurre algo? -tartamudeo-

-Hmm... -guardó silencio pensando en lo que iba a decir- Ven a cenar a mi casa. -soltó de golpe-

¿Eh? ¿Había escuchado bien? Yokozawa-san... ¿lo estaba invitando a su casa? ¿a cenar? Eso lo había tomado por sorpresa. Permaneció callado pensando en alguna respuesta para el trabajador de ventas.

-Está bien. -aceptó finalmente, el ojiazul soltó su mano al instante-

-Entonces iré a buscarte. -dijo Yokozawa con su cara aun con tonos rojizos, acto seguido revolvió los castaños cabellos del ojiverde- Nos vemos luego, y... buena suerte con tu traslado.

-G-Gracias. -salió del ascensor con bastante confusión en su ser, el de ventas comenzaba a comportarse diferente con él, su comportamiento ahora era... más suave y amable-

Caminó con pasos largos hasta llegar al departamento Emerald, se quedó parado antes que cruzar la entrada, respiró profundamente intentando calmar los nervios que lo estaban invandiendo, demonios, ¿a dónde se había ido toda la seguridad con la que llegó a Marukawa? Al parecer esta desapareció justo antes de llegar a la sección Shojo. Nuevamente tomó aire el cuál rápidamente expulsó, entró.

-Buenos días. -saludó a sus compañeros mientras se sentaba en su respectivo lugar, solo se encontraban Hatori y Mino-

-Llegas tarde Onodera. -habló una voz, provocando que Ritsu diera un brinco en su propio asiento, el castaño volteo su cabeza encontrándose a Takano, el cuál tenía sus ojos fijos en él, lo miraba con severidad-

Tembló levemente al escuchar la voz de su jefe, maldita sea, no lo había visto cuando llegó; se llevó una mano al pecho queriendo tranquilizarse, casi se muere del susto.

-¡Buenos días! -ahora era Kisa el que faltaba- ¡Ritchan! Es bueno que hayas regresado.

-Lo mismo digo -agregó Mino-

-Igualmente. -dijo Hatori-

Una vez el equipo doncella completo todos se pusieron a trabajar en sus respectivos proyectos.

Takano no le quitaba la mirada de encima a Onodera, su subordinado se veía... diferente, si, esa era la palabra; la última vez que lo había visto (sin contar el día de su regreso) Ritsu parecía todo menos un ser humano, su aspecto estaba mejorado, las ojeras del contorno de sus ojos ya no estaban y tampoco el golpe que él mismo le había hecho, su piel ya no era pálida pues recuperó su color natural. En pocas palabras, ese día Ritsu estaba brillando, tenía sus mejillas levemente sonrojadas y una sonrisa estaba en sus labios; por un momento creyó que la persona que estaba frente a él no era Onodera, si no Oda.

-Takano-san. -la voz del heredero lo sacó de sus profundos pensamientos, parpadeo repetidas veces para luego voltear a verlo- ¿Qué se te ofrece, Onodera? -preguntó frío-

-Tome. -le extendió una hoja-

-¿Qué es esto? -rodó los ojos y comenzó a leer, casi se le cae la mandíbula al ver el contenido de la misma-

"Traslado del Departamento de Manga Shojo al Departamento de Literatura".

-Es... mi traslado. -susurró- Necesito que lo firme.

-No. -dejó la hoja en su escritorio-

-¡¿Eh?! -Ritsu lo miró incrédulo-

-No te firmare nada, no te irás de aquí. -le devolvió la hoja- Ahora vete a tu puesto.

Unas cuantas venas se hiceron presentes en la frente del editor más joven, definitivamente no iba a dar su brazo a torcer.

-¡No le estoy pidiendo permiso Takano-san! -alzó la voz llamando la atención de sus otros tres compañeros- Le estoy informando que me iré de Emerald, para que vaya consiguiendo otro editor.

El editor en jefe se levantó de su asiento, ahora si que estaba enojado, acorralo a Ritsu contra la pared.

-No lo voy a firmar, ya dije, igual no cambiará nada si lo hiciera, no hay escritores. -una sonrisa altanera se formó en sus labios, no iba a permitir que Onodera se saliera con la suya-

-¡Eso puedo arreglarlo! -todos voltearon encontrando a Isaka-san en la puerta, y a su lado una mujer pelirroja-

-Isaka-san, y mujer desconocida... -habló Masamune- ¿Qué los trae por aquí?

-Venimos por el traslado de Nanahikari. -volvió a hablar el director- Debes firmar el papel Takano.

-Me niego a hacerlo, será una carga más para nosotros si Onodera se va.

-No te preocupes por eso, ya tenemos a su reemplazo contratado. -sonrió- Además, no tienes opción, tienes que firmar si o si.

-¿Quién me va a obligar? -preguntó con altaneria-

-Yo. -dijo Isaka- Por que soy tu jefe y si no lo firmas, te despediré, no me interesa que tan eficiente seas en tu trabajo.

El azabache se puso pálido, ¿era Isaka-san capaz de despedirlo solo por no firma un jodido papel?
Soltó un gruñido con resignación, tomó un bolígrafo y comenzó a firmar el traslado, de muy mala gana, luego se lo aventó a Ritsu en la cara. Salió de Emerald.

-Y... -dijo Onodera nervioso- ¿Cuándo empiezo?

-Ahora mismo. -habló ahora la pelirroja- Toma tus cosas y ve a literatura, luego te alcanzo, debo hablar con Isaka-san.

El ojiverdes obedeció la orden, tomó sus pertenencias y salió de su ahora antiguo departamento.

-¿Está seguro de esto, Isaka-san? ¿Fue buena idea mandar al chico con Usami-sensei?

-Ya han trabajado juntos, no será nada fuera del otro mundo, Aikawa. No creo que soportes más convivir con Chibi-tan después de eso, ya sabes.

-Lo sé. -suspiró- Aún no logró sacarme esa imagen de mi cabeza.

-Te entiendo, fue un shock ver a Chibi-tan con Takano-san. -dijo al recordar como había descubierto el secreto de Misaki- Todo esto es por Usami-sensei, si en verdad Chibi-tan aún lo quiere n0 reaccionará de buena forma al ver a Onodera, ¿cierto?

-Si... Todo por Usami-sensei.

Continuará...

Bueeeno, hasta aquí el capítulo, espero les haya gustado mucho :3

Ahora si se viene lo bueno 7u7

Aquí en mi país aún es sabado 8 de julio, lo cual significa que hoy es mi cumpleaños! Lo sé a nadie le importa pero quería decirlo :'v

Falta poco para las 1000 vistas, así que, les gustaría hacer para cuando lleguemos a ese número?

-Preguntas y respuestas (así como a la autora como a los personajes)
-Detrás de cámaras (así como si estuvieran grabando xd)
-Otra opción.

Gracias a FerPotter, KuranaiNee, Yesy_18, Izumi31, HarukaAlvarado, RenRen, Lucesita, Barbara Cardenas y a Auroralmhof por votar y comentar, las amo ❤❤❤

Este fic ya tiene 105 votos, muchas gracias por el apoyo ❤❤

Ahora sin más que decir, me despido.

Nos leemos

Bye!!