Una discusión más por unos celos de mierda.

Nikki Sixx se sentía realmente jodido y como un pésimo novio. Hacer llorar a Tabatha Lee, su novia, lo hacía sentir como un monstruo sin piedad alguna.

Sentado en la cama de su mejor amigo, tomando un par de cervezas, provocaba que el dolor en el aumentará.

-Si la amas, reconciliate y controla tus celos -aconsejaba Vinnie, su mejor amigo-. Eso pasa con Sharise... Pero ella es la celosa.

-Tu ni controlas tus deseos con otras chicas y me hablas de los celos de Sharise, que novedad -comentó sarcástico el azabache llevándose una mano a la frente-. No se como disculparme.

-La conoces, ¿No? Ve por ella. Dale un beso y reconciliate.

El azabache se levantó decidido, y salió de la casa de su mejor amigo, caminando hacia su motocicleta Harley Davidson

Estaba seguro del lugar donde podría encontrar a su novia, y era en un antro que a ellos dos les gustaba ir.

Llegando al dicho lugar, donde podría estar la chica. Estacionando su motocicleta, se adentró al edificio con rapidez. Si realmente quería algo, era la chica de ojos oscuro que lo conquistó.

La identificó rápidamente. Ver su cabello castaño hasta los hombros, aquellos labios medio gruesos que tanto le atraían, no vestía tan provocadora para la noche (jeans ajustados de mezclilla, la sudadera que le había quitado de L. A. Rams y sus típicas converse rojas), su maquillaje ligero sólo para destacar en el baile.

Abrió a mayor parte de la multitud, cosa que no le importaba a la gente lo que sucediera. Al llegar junto a Tabby, sonrió ampliamente, mientras que ella apenas se dio cuenta que estaba a su lado. Su expresión cambio a una más sería.

- ¿Qué? ¿Ahora es que no puedo salir? -pregunto la chica de buenas notas desviando su mirada.

Nikki río leve.

-No. ¿Quieres un trago?

La chica no acepto y se cruzó de brazos esperando una respuesta que no fuera "No".

Nikki dio vuelta para ver si nadie los miraba, y se regresó a su chica.

-Fui un idiota al encelarme de Steven, lo se. Pero el es lo que yo no te puedo dar: Sonrisas, no puedo ser tierno, no soy lindo a veces. ¡Joder! Soy un completo imbécil.

Tabatha río fuertemente.

-Steven tiene de novia a Adrianna, va en tu clase de filosofía. En si, todo eso -se acercó a su novio sonriente y beso su mejilla-; si lo tienes. Al menos, cuando nos conocimos, lo demostraste y mucho. Con otra persona no lo fuiste. Eres una caja de sorpresas, Nikki Sixx.

El azabache sonrió ampliamente, y beso a su novia de manera rápida y especial. Amaba tanto a Tabatha Lee, estudiante de intercambio proveniente de Grecia, que se sentía tan afortunado de tenerla a su lado.

Esa noche, el beso y la reconciliación dieron producto a que terminarán de sobresalir en la pista de baile, al igual que ella terminará dormida en sus fuertes brazos cuando llegaron al departamento de Sixx... No para hacer la relación sexual, sino, terminar un proyecto de clases.