Dedicado a ChicoAmanteDelYaoi

El albino apagó la pantalla de su pc y se levantó suspirando agotado, sus ojos se movieron con lentitud hacia las cortinas, aún estando bajadas podía notarse como los rayos de sol entraban por los lados. Genial, se había pasado otra noche entera trabajando sin descanso. Se rascó uno de los ojos con la mano, estaba más que agotado, apenas podía mantenerlos abiertos sin que le molestaran, quizá debería irse a dormir de una vez. Así mismo lo hizo, nada más su cuerpo tocó el suave colchón, se sumió en un profundo sueño.

- Ora... Sora... - Escuchaba como una lejana voz no paraba de llamarle repetidas veces, sin embargo estaba demasiado agotado como para prestarle atención. No fue hasta que al sentir el peso de algo saltar sobre él se despertó.

- ¡¿Q-Qu...?! - Abrió los ojos rápidamente asustado, lo primero que entró en su campo de visión fue un blaquecino Pachirisu.

- ¡Al fin te despiertas, buenos días! - Una conocida voz le saludó desde los pies de la cama, se giró hacia ella encontrándose a una chica de cabellos rojos.

- Y-Yami... - La reconoció - ¿Qu-Que haces aquí?

- ¡Hemos venido a visitarte! - Contestó, dejándole un poco confundido al principio. Espera, se giró hacia el Pokémon eléctrico que le miraba con una sonrisa.

- Tienes~ una pinta horrible~ - Intervino otra persona entrando por la puerta.

- Aika, t-tú también has ve-venido...

- No~ he tenido opción~ - Respondió con aburrimiento.

- Hermanita, no seas así, hemos venido a ver a Sora - Le dijo la otra - ¡Venga vamos, vístete y salgamos a hacer algo divertido!

- No s-se si... - Empezó a decir en tono bajo.

- ¡Te esperamos fuera! - Le interrumpió sacando a la castaña del cuarto para dejarle privacidad.

El albino suspiró, en parte le alegraba que fueran a verle, pero seguía sin acostumbrarse a estar con gente físicamente. Además, según podía observar en su reloj solo había podido dormir unas cuatro horas, por lo que aún se encontraba casi sin fuerzas, aun así se levantó poco a poco. Sabía que aunque se negara la pelirroja seguiría insistiendo en sacarlo de casa, hasta sería capaz de intentar cambiarlo ella misma con tal de que se divirtiera con ellas. Al rato entró a la sala, encontrándose con la castaña tirada sobre una mesa durmiendo, mientras la otra hablaba con su Gardevoir.

- ¡Bien, ya estamos todos listos! - Anunció - Ahora vayamos a hacer algo.

- Que~ pereza~... - Se quejó Aika sin mover el mínimo músculo.

- ¡Sora, tengamos un combate mientras duerme! - Antes de que lo notara, Yami ya se encontraba frente a él mirándole con ojos brillantes.

- Yo n-no... - Empezó a decir, pero tuvo que evitar mirarla - Sabes que n-no soy bu-bueno con eso... - Finalizó.

- No pasa nada, Grace y yo te enseñaremos - Le restó importancia con una sonrisa a la vez que su Gardevoir asentía.

- A-Aun así... - Agachó la cabeza quedándose callado.

- Um~... - Un fuerte bostezo por parte de la castaña les interrumpió - Hermanita~, deja al perdedor~ en paz~.

El nombrado se encogió sobre si mismo, no le agradaba del todo que le llamara así, pero realmente tenía razón y, aunque ese no fuera el caso, tampoco se atrevería a decirle nada.

- Solo uno, como cuando éramos pequeños ¡Por favor! - Suplicó la otra Líder - Si aceptas luego iremos a por un helado.

- Esta bien - Aceptó con una pequeña sonrisa, después de todo sabía que iba a acabar cediendo ante ella como siempre lo hacía.

Luego de eso los tres salieron al exterior, aunque Aika era cargada por la otra, pero no podían hacer más. Sora levantó la mirada, ¿hacía cuanto que no salía de la oscuridad de su laboratorio? ¿Días? ¿Semanas? Ya ni estaba seguro.

- ¿A que sienta bien? - Le preguntó Yami sonriendo a su lado, dejando a la otra en el suelo.

- ...S-Sí

- ¡Bien, que empiece el combate! - Anunció haciendo que su Gardevoir se pusiera delante de ella, él, por su parte, sacó a su Sylveon, aún sin encontrarse cómodo con la situación, pero ya no había vuelta a atrás.

Tal y como la mayor parte de los presentes esperaban el combate no duró más de cinco minutos, la pelirroja se encontraba a un nivel muy superior que él y sus nervios no hacían más que perjudicarle a la hora de pensar.

- ¡Has estado increíble! ¡Hasta has conseguido que haya una explosión! - Le dijo ella, como siempre tan animada.

- "No es algo tan increíble, suele pasar cuando dos ataques chocan" - Pensó él, pero prefirió contestar otra cosa - Gr-Gracias...

- Hermanita, te toca - La llamó.

- Paso~

- Vamos, estoy segura de que Sora está deseando enfrentarse a ti.

- ¡¿Y-Yo?! - Se señaló sorprendido, ¿de verdad tenía que seguir combatiendo?

- Que~ pereza~ - Contestó ella haciendo que suspirara aliviado - Kiba~, ve tú~

- ¡Risu! - Aceptó la pequeña corriendo hacia el campo de batalla.

Minutos después Sora se encontraba en la misma situación, era verdad que Aika no era tan buena como Yami o no se esforzaba tanto, pero aun así apenas si había rozado a su Pokémon. Al menos provocaron otra explosión tal y como decía la pelirroja, aunque continuaba dudando que eso fuera algo tan destacable.

- ¿Sora? - Una voz nueva le hizo salir de sus pensamientos, levantó un poco la mirada con curiosidad, pero nada más reconoció al chico fue a esconderse tras Yami.

- ¿? - La chica se le quedó mirando confundida - Hola, ¿eres su amigo? - Saludó al moreno.

- Seguro~ es un abusón~

- Aún no del todo y claro que no - Contestó él manteniendo la calma - Nos conocimos hace un par de días debido a un pequeño incidente.

- ¿Um~?... ¿Sora~, han intentado ukearte~ de nuevo~? - Le preguntó ella con un deje de burla haciendo que el nombrado se sonrojara negando rápidamente.

- Mi Pokémon trató de comerse al suyo, nada más.

- Hermanita~, creo~ que es una clase~ de eufemismo~

- ¿Eufe... qué? - Repitió ella sin entender nada.

- ¿Y vosotras quienes sois?

- Yo soy Yami y ella es Aika, somos hermanas de Sora - Explicó haciendo que el chico los fuera mirando de uno en uno.

- No tenemos~ ninguna relación~ de sangre~

- ...Supongo que lo entiendo - Afirmó finalmente, aunque la noticia le había provocado un corto circuito mental. Si no eran hermanos ¿por qué se denominaban así?

- ¿Y tú como te llamas, amigo de Sora?

- A-Apenas nos co-conocemos... - Murmuró él jugando nervioso con sus dedos.

- Nikolay, pero puedes seguir considerándome su amigo, siempre que a él le parezca bien - Contestó haciendo que el nombrado asintiera levemente con un rubor en sus mejillas.

- ¡Sora, estoy muy feliz por ti, al fin has hecho un amigo! - Celebró Yami abrazándolo con fuerza.

- ¿Seguro~ que no~ es una ilusión~? - Comentó Aika tocándole con un palo - Um~... Quizá~ sea un Ditto~.

- A-Aika... No deberías d-decir eso... - Susurró Sora, cada vez estaba más preocupado de que Nikolay fuera a molestarse por las ocurrencias de la castaña.

- No pasa nada, tranquilo - Le restó importancia él sonriéndole.

- Hermanita~, combate~ contra él~ - Propuso creando confusión entre todos - Así~ mostrará su verdadera apariencia~

- ¡¿Puedo?! - Preguntó ella totalmente emocionada. El moreno aceptó tras suspirar, al parecer era su única opción para demostrar que era totalmente sincero - Adelante Grace - Sacó de nuevo a su Pokémon.

- Decidueye, te toca - La imitó él.

Sin duda el combate desde su inicio estuvo bastante igualado

- ¿Animando~ a tu seme~? - Se rió levemente Aika al notar como Sora se tensaba cada vez que la pelirroja lograba golpear a su Pokémon.

- N-No es mi seme... - Susurró mirando hacia el suelo.

- Hai~ hai~

No obstante, tras una gran explosión de humo, que la Líder de tipo Hada aprovechó para asestar su golpe final, logró alzarse con la victoria.

- ¡Buen trabajo, sois muy fuertes! - Le felicitó ella ofreciéndole su mano para estrecharla.

- Tú también lo eres - Le correspondió sonriendo - ¿Has conseguido comprobar que no soy un Ditto ni una ilusión? - Preguntó mirando hacia la castaña.

- Um~... ¿Quién~ sabe~? Aún así~ sigo preguntándome~ por qué deseas~ ser amigo~ de un perdedor como Sora~

- No es ningún perdedor - Respondió directamente, su cara seguía estando tranquila, pero por su tono de voz, el comentario le había molestado.

- Hai~ hai~, señor seme~. Solo espero~ que nos hagas~ tías pronto~.

- ¡A-Aika! - Se quejó el albino sonrojado, mientras el otro alzaba la ceja sin entender demasiado.

- Chicos - Les llamó Yami, al parecer en medio de la conversación se había alejado unos metros - Mirad lo que he encontrado.

- Eso e-es... - Empezó a decir Sora temblando de miedo.

- Un Voltorb~ con cara~ de pocos amigos~ - Continuó la castaña monótona.

- ¡Corred! - Ordenó Nikolay, empujándolos antes de empezar a huir él.

- ¿? - La pelirroja se detuvo y miró hacia el Pokémon - ¿Tú sabes qué les ocurre?

Justo en ese instante la esfera empezó a brillar con fuerza provocando una gran explosión, menos mal que el Gardevoir de la chica llegó justo a tiempo de lanzar el Pokémon con sus poderes psíquicos y de hacer una barrera protectora al rededor de ella, librándola de cualquier peligro.