Capítulo Especial:Fall

Capítulo 139.

-Si tienes razón, pero no puede ser... no lo sabes...

-Ya ves que algo sé, no te preocupes -me sonrió.

Ya corazón, deja de doler... recuerda que tu fuiste el que dijo "Arriesgate y confía una vez más"

-Una verdadera relación tiene peleas, confianza, fe, lágrimas, dolor, argumentos, paciencia, secretos, celos y amor, mucho amor.

-No tenemos nada de eso Jackson.

-¿Segura Eunbi? -sonrio.

-A veces pienso que la vida me tenia preparado esto... dolor, tristeza y mucha decepción de por medio.

-Uno aprendé a ser feliz cuando se da cuenta que estar triste es una pérdida de tiempo.

-Oppa... -le mire con mis ojos hinchados.

-Amate lo suficiente para que no te quede duda de que mereces lo mejor para ti misma. -sonrío para mirar el cielo.

-Lo olvidaba -sonreí con tristeza- no debía ilusionarme. Porque si no quieres decepciones, no debes de hacerte ilusiones.

-Nadie tiene derecho a decirte que te rindas. -negó y volvi a verlo- Sólo lucha por lo que creas sentir y hasta donde piensas que debes llegar.

-No es rendirse, es saber que ya fue suficiente -jugué con mis pies.

Él y yo, nunca sera ese tipo de historia romántica...

-No es pecado caer en el amor Eunbi.

-Olvidaba el dolor de la caída -susurre con una sonrisa nostálgica, ya me había pasado- creo que estaba muy arriba...

Negó- Déjate caer.

-Yo... -suspiro.

-El amor tiene tres grandes enemigos. -explico- Uno es la indiferencia que lo mata lentamente, el segundo es la indecisión que no lo deja avanzar y el tercero -sonrío con tristeza- la desilusión, que lo elimina tajantemente de raiz... tal vez no se merecen lo que han conseguido.

-Lo siento Eunbi tengo que ir a verla, perdón... -diaculpandose por plantarme.

Y no se porque me duele, si se supone que ya me había acostumbrado a ello.

-Vamos te acompaño a casa.

-No quiero regresar -susurre cabizbaja.

-¿Eres débil? -sonrió ironico- una vez me dijiste, "así como lloro también sonrió, así como me caigo, también me levantó" ¿por qué no agregarle, así como amó...  también olvido?

Baje la mirada- Estoy decepcionada de mí misma...

-Puede que decepciones a muchos si, pero nunca te decepciones a ti misma -saltó de esa columna en la que nos sentamos- Vamos... -extendió su mano para sonreir, la acepte y bajé con su ayuda.

Sin más, caminamos en silencio.

-Quiero escapar pero no tengo a donde ir, quiero amar pero no tengo a quien amar ¿qué se supone que debo hacer? -susurre mirando la nada misma.

Jackson era un buen amigo, siempre lo ha sido, desde el primer momento que lo conoci detrás de los escenarios.

-Quedate con alguien que te de respuestas y no problemas. Seguridad y no temor. Confianza y no dudas. -respondio con su mirada al frente.

-El problema es que con una sola mentira...

-Con un conocido ejejeh -recorde su mentiras del pasado.

-Se ponen en duda todas las verdades futuras.

-Mi abuelo me dijo una vez... "no creas en quien dice quererte sino en quien lucha por tenerte" -sonrío- mi abuela lucho mucho por el en su juventud... -negó nostálgico.

-¿Cómo sonríes siempre? -frunci el ceño.

-Sonreír no siempre es sinónimo de felicidad Eunbi, aveces es sólo un disfraz.

-¿Qué ocultas? -indague.

-No te lo diré -sonrió, entonces le imite para negar.

Mí corazón...

No hay heridas más profundas y dolorosas que las de un corazón roto.

-Ya entendí, -sobe mi nariz- no ilusionarme con nadie, la gente miente y miente bien, sólo debo confiar en uno mismo.

-Una desilusión no es más que una situación que te ayuda a salir del lugar incorrecto. No debes castigar al resto por ella.

Tranquilo corazón, ya volverás a latir por alguien que valga la pena....

-Ahora, hay que ser muy idiota para no valorar el poco lado cursi que te brinda una persona sólo a ti, sabiendo que es más fría que el hielo. -sonreí divertida al oirlo- Llegamos princesa. -miré esa casa en silencio- ¿No quieres entrar verdad? -asentí cabizbaja- Hey -rodeo mis mejillas aun sonriendo- todo saldrá bien, después de todo, cada situación se soluciona.

-Me pregunto... ¿por qué eres tan bueno conmigo? -le mire atenta, esa calides, la atención. No merezco tanto.

-Porque seré tu ángel -me sonrío.

-¿Por qué eres tan amable conmigo? -miré directamente sus ojos, se que estos no mienten. Pero no logro descifrar ese brillo intenso.

-Porque eres la persona más rara y maravillosa que he conocido en toda mí vida -acaricio mis mejillas.

Tal vez si lo sé, y sólo quiero ignorarlo, porque me resulta mas sencillo.

-Quisiera saber, ¿por qué no me enamore de ti? -me miró un momento en silencio para luego irse acercando lentamente.

-Yo igual... -susurro encima de mis labios. Pude sentir sus labios, suaves, tiernos, dulces y armoniosos.

-Jackson... -susurre una vez nos alejamos mutuamente.

Sonrió- Eres mí amiga, no necesitas decir nada y si quieres olvidarlo, házlo, la amistad es tan importante como el amor para mi. -limpio mis lágrimas, estas rebeldes que no dejan de salir frente a él- Deja de llorar, porque puedes decepcionar a todos, incluso a ti misma -sonrió- pero no a mi, nunca lo harás.

Ofrecer amistad al que pide amor, es como dar pan al que muere de sed... lo sé bien.

-¿Estás...?

-No te preocupes por mí -se alejó avergonzado, soltando mis mejillas- lamento mi vil acto.

Sonreí- ¿Vil? -limpie mis mejillas- ¿de que época eres?

-Me alegra que sonrías.

-Espero que estás lágrimas dejen de caer algún día, un día después de que esta oscuridad aclare...

Asintió- No existe tal cosa como una herida que no se cure. -lo abracé sin dudar.

-Gracias -le susurre. Sentí sus brazos rodearme con ternura.

-No hay de que -me sonrío.

-Te quiero... -contuve las lágrimas.

Sonrió- Yo más, y no te das una idea.

-Oppa... -lo miré alejandome de su cálido y reconfortante pecho.

Él acarició mi mejilla para sonreir- Entra, cualquier cosa me llamas.

Asentí para reverenciar pero antes de entrar a la casa, voltee para verlo.

Él sonreía, entonces sonreí.

Narra Namjoon

-Yon yo tenia algo especial preparado para ti hoy.

-Oh ¿en serio? -Moonbin asintió para tomar su mano.

Por otro lado, estaba yo, caminado en silencio, la frente en alto y el alma... el alma en el bolsillo trasero.

-Mira -señalo el cielo. Fuegos artificiales aparecieron ante nuestros ojos.

-Woah~ -sonreía como una niña pequeña.

Aquella sonrisa que amaba contemplar, amplia y radiante, simplemente hermosa.

-Yon, nos conocemos desde niños, recuerdo -sonreía con un brillo al que no puedo competir. Memorias en común- los días en los que pasábamos los tres juntos, las travesuras, las risas...

-Siempre terminaban peleando con Eunbi -ambos reían ante recuerdo.

-Si, en aquella época, ella me gustaba... -lo miré atento a lo que fuera a decir, implorando que no sea lo que estoy pensando- Pero... ese sentimiento se clarifico, me di cuenta -tomó su delicada mano- que no era ella, sino tú.

-O-oppa yo...

-Me gustas, y ya no quiero ocultarlo más. Estar enamorado es algo bueno, no hay razón para ocultarlo -sonrió avergonzado- me gustas.

-Yo... -volteó a verme por un momento, como si sus ojos imploraran porque dijera algo.

Más el nudo en la garganta empezo a formarse, como aquel mar a punto de desbordarse por los ojos, de ahí su sabor a sal.

Me di la vuelta dispuesto a marcharme, no podía ver más, no podía interrumpir más, era su momento, sólo el de ellos dos.

¿Cómo competir con sus recuerdos?, ¿con su amigo de toda la vida?, ¿con un niño flor?

Si Cupido no tiene cuidado de dónde lanza la flecha, puede crear grandes problemas, grandes dolores en lo profundo del alma...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top