.152.

Narra Jungkook

-Tranquilo, lo entiendo...

-En serio gracias -reverencie avergonzado con ella, despues de todo sigue siendo mi crush.

-No hay de que -sonrío aun confundida- lo único -aquella sonrisa se borró de su rostro- no seas idiota. ¿La perderás sin luchar siquiera?

-Es por su bien -susurre aun con mi vista gacha.

Nego- No es cierto, eso se llama cobardía y si piensas así, creó que no la mereces. Eunbi merece algo mejor y créeme lo obtendrá. -salí de su empresa luego de oir aquello, suspiré.

-Eres un IDIOTA -declaro con sus ojos llorosos.

¿Soy un cobarde? Si el serlo es velar por su seguridad, entonces lo seré.

Narra Yoongi

-Yoongi, ¿podrías ir a levantar a las chicas? -pidió Sojung tomando su bolso- tengo que salir a ver un tema urgente. -asenti- Gracias, volveré rápido -reverencio para salir apresurada.

Me dirigí rumbo a la escalera, la primera habitación era la de Yerin, luego la de Yuna y Eunbi, al final de aquel pasillo, observé la última, la habitación de las maknaes.

Eunbi no se encontraba en su cama, algo raro... mi vista se dirigió a ella. Yewon se veía tan adorable durmiendo.

Me acerqué hacia su cama para sentarme en la orilla del colchón.

Realmente es linda...

Acomodé un mechón de su cabello, alejandole de su rostro, sus mejillas se veian tan adorables.

-Al observarte de cerca, eres como un cachorro -acaricie su mejillas para sonreír.

-Eres bueno Sunbaenim...

-Eres malo, realmente cruel...

-Decídete, ¿cómo rayos me veo delante de tus ojos?

-Bue... -balbuceo- eres... bueno...

-¿Hablas dormida? -sonreí para negar.

-Sunbaenim... pue-des abrazarme... fuerte... sonreírme... yo... no conozco a mi corazón... pero... creo que... me gu... -no dijo más, solo movio ligeramente sus dedos aún costado de su rostro. Sonreí al contemplarle.

-¿¡Por qué diablos me enamoré de ti!? -cuestionó con su voz quebrantada.

-Tu sonrisa es dulce como un caramelo. -me incline hasta ella para rosarvsus labios en un sencillo beso.

-Ye... -me aleje de ella para voltear a verlo- Perdón no quise... -susurro sorprendido.

-Hoseok, no es lo que piensas. -me puse en pie.

-¡Yewon! ¡Eunbi! -la vez de Yerin llegó hasta nuestros oidos- ¡Despiert...! -ingreso corriendo a la habitación- ¿oh? -nos miró a ambos.

Yewon se cayó del colchón gracias a la emocion de Yerin- ¿Qu-qué? -miro para todos lados aun adormilada- yo no hice nada malo...

-Pequeña, ¿estas bien? -se acercó hasta ella para ayudarla.

Me encamine fuera del cuarto y sentí los pasos de Hoseok detrás mío.

Narra Jung Eunbi

Me levanté gracias a Yoongi oppa, él me dijo que unnie salió temprano.

Que raro...

-Unnie iré a comprar esa película que queríamos ver, ¿qué dices? -le sonrió a Yuna- Voy en una escapada y vengo -se alejo- oh Kook... -la oí desde la puerta.

Pero seguí preparando aquel café que me dieron ganas de tomar.

-Si hyung... recién vuelvo de verla... no le pediré autógrafos -rió al teléfono al parecer- no... ella es algo fría, pero linda... Eunbi -abrio sus ojos para susurrar mi nombre al percatarse de mi- hyung háblamos luego. -corto la llamada, para guardar el teléfono y bajar su mirada.

-Está bien. -negué y él me miro sin comprender- Tú y yo no somos... novios o algo asi -dolió decirlo en voz alta. Ignore aquel balbuceo de su parte, intentaba saber que decir, pero ya es el limite, no necesita decir nada más. Al menos no a mi.- Espero seas feliz, ¿sabes? me hubiese gustado compartir todo juntos -el timbre de mi voz se oia en un susurro- hacer tantas cosas... -baje la mirada para dejar caer el agua en la taza- pero bueno, al parecer, sólo yo lo deseaba. -él no dijo ni una palabra y esta bien, porque yo entendí todo- No lucharé más por ti, lo decidi, me duele pero te superare Jungkook.

No podía verlo, entonces seguía revolviendo mi taza sin más.- Espero lo hagas. -fue justo lo que necesitaba oir, lo agradezco. Asi no me arrepentire de esto.

-Lo haré -voltee para verlo con una sonrisa- dalo por hecho. -reverencie para encaminarme hasta el living y subir las escaleras, pasando de él.

El amor no tendría que doler asi, pero... lo hace y mucho.

Narra Hoseok

-¡No seas idiota!

-Hoseok...

-No la dejes ir solo por tu orgullo, ella es hermosa y encantadora, se merece lo mejor. Créeme, tiene más de uno deseándola. -asintio- No la pierdas, no cómo yo... -susurre.

-¿Hablas de Eunbi? -me miro con preocupación.

-No seas idiota -sonreí con tristeza- ella te gusta, ¿no es así? -dudo en responder o tal vez en la respuesta- Dejá de dudar, dejá de pensarlo tanto, comienza actuar o la perderás hyung.

-Se merece algo mejor, ¿no crees? -me encogi de hombros.

-Pregúntaselo a ella. -palmee su espalda para salir de nuestro cuarto.

Narra Yon

-Solo habla con él. -aconsejó Nam- ¿No quieres? -pregunto con su ceño levemente fruncido.- Es tu papá y lo amas...

-No quiero pelear -susurre mirando el suelo- yo quisiera otra cosa para ambos...

-¿Cual es tu sueño? -pregunto de repente.

-¿Mi sueño? -repeti y él asintió.

Me volví contadora solo porque él asi lo quizo, renuncie a mí sueño por él, yo...

-Hazlo realidad. -me animo.

Negué- El tiempo ya pasó...

-Siempre hay tiempo, mientras respires, hay tiempo. Únicamente está en ti, nadie puede privarte. Deberias dejá de vivir el sueño de alguien más, dime -se detuvo par mirarme nuevamente- ¿te gusta tu "yo" actual? -no pude responder aquello- Puedes ser quien quieras, solo debes dar el paso, dejar de huir Hwang Yon Hye.

-Gracias Namjoon oppa -sonreí con sinceridad.

Sonrió- Sabés...

-¡Yon! -Bin corrió hasta mi- tengo las entradas -sonrío feliz para luego voltear a ver a oppa- Nam Joon.

-Moon Bin. -saludo tambien.

-¿Quieres venir? -alzo una ceja al verlo.

¿Por qué esta atmósfera hostil entre ambos?

Nam dudo, entonces sonrei- Deberias -ambos me miraron sorprendidos- Anda oppa vamos. -pedi para ver a Bin y él asintió para verle.

Nego- Tengo cosas por hacer, diviertansé -ingreso a la casa, ya que estabamos llegando.

-¿Qué pasa? -Bin me observó, aun viendo aquella puerta por la que se alejo- Yon... -tomo mí mano para sonreirme- ¿vamos? -asenti dedicandole una pequeña sonrisa.

Narra Jimin

-Oye Tae, ¿jugamos a la pley? -nego- Cambia la cara...

La puerta se abeio- Hola chicos -nos sonrío.

-Sojung -devolvi el gesto.

-¿Podrían decirle a las chicas que bajen? quiero hablar con ellas, les traje algo. -asenti- Gracias -se acercó a la cocina.

-Oye Tae... -lo mire con preocupación, su rostro me afligia- Prende la pley -lo palmee para levantarme del sofa e ir a las escaleras.

Debe arreglarse con Yerin...

Fui primero a la habitación de Eunbi, estaba a punto de golpear...

-Anda ¿te gusta? -pero oi su tierna voz detrás de la puerta.

¿Gustar? ¿Yo a Yunnie?

-¡Te gusta! -exclamaba Yerin.

-Unnie dejá de gritar... -pidio avergonzada.

-Anda unnie, a él si le gustas. -aquella era Yewon. Al parecer todas estan aui reunidas.

-Dinos, ¿qué te gusta más de él? -pidio Eunbi.

-¿Qué no le gusta? -Yerin reía.

-Yo amo su sonrisa -declaró Yewon ante el grito de todas.

-Yo su altura... -rio Yerin.

-Yo su personalidad, oppa es adorable~ -comento Eunbi. Pero Kookie no es su oppa.

-Yo... -oi la voz de Yuna al fin- a mi me gusta... su trasero... -comento apenada ante los giticos de las tres chicas, podia oir sus risas- Oh vamos, es adorable, tiene más volumen que todas nosotras juntas.

-Es cierto, lo envidio... -reia tentada Yerin.

-Aún así... -la voz de Eunbi sonaba apenada- pobre trasero de Jimin~

-Si, es cierto todas las fans lo ven, ¿recuerdan cuando uso aquel pantalon rojo con la presentación de...? -Yewon intento cayar a Yerin con mucha pena encima.

Entonces golpee para abrir la puerta, todas quedaron calladas, y ella estaba completamente roja.

Narra Yuna

Ay no...

-¿Qu-qué pasó? -sonrío nerviosa Yerin.

-Sojung las llama -susurre.

-¿Ya vino? -pregunto la menor.

-¿Qué habrá traído? -Eunbi sonreía.

-Espero sea helado -Yerin hacia un puchero.

-Oppa -Yewon me miro apenada- ¿por qué estas... tocando tú...?

Al levantar la mirada, lo contemple, de la nada sujeto su trasero con ambas manos, sonrojandose.

-So-solo bajen -me miro para guiñar su ojo y salir aun con ambas manos en sus nalgas.

Las chicas estallaron en risas, podia sentír mis mejillas explotar de la misma vergüenza.

Entonces me deje caer en el colchón de la cama.- Ahahah que vergüenza~... -patalee al aire con ambas manos cubriendo mi rostro por completo.

Narra Yewon

Bajé entre risas, lo que acaba de pasar realmente fue gracioso.

-Ohh Sunbaenim -sonrei al verlo.

-¿Por que ries? -pregunto directo como siempre.

Negué- Vi algo gracioso jejeje

-Oye.. ¿podemos hablar? -se le veía raro, no lo se, si no lo conociera bien diria que esta apenado. Pero vamos es el poderoso Min Yoon Gi, él no sr apena con facilidad.

-Claro, ¿qué paso sunbaenim?

-Salgamos un momento. -se adelanto sin esperar mi respuesta.

Bueno, será rápido, supongo.

Lo seguí, ambos salimos de la casa para empezar a caminar.- ¿Donde vamos? -pregunte.

-A ningún lado en particular. -le mire- Quería caminaron un rato contigo. -asentí aún sin comprender del todo, pero se sentia bien.- Yewon... -voltee a verlo- ¿Qué piensas del amor?

-Pues... no estoy muy segura... pero creo que es algo lindo y maravilloso -sonreí al pensar en este sentimiento, que pese a todo era único- tener a alguien que te quiera y te admire solo a ti. Suena encantador, ¿no lo crees?

-¿Crees qué el amor dura? -fruncio el ceño- pues no es así. ¿Crees que el amor es fácil? -volvio a cuestionar para negar- No es así. ¿Crees qué el amor es lindo? -lo supuse, negará tambien- Tampoco es así.

Suspire para sonreír levemente- Pero para mi lo es -mire mis pies con una sonrisa aún.

-¿Piensas qué lo hombres somos buenos? -se incluyó en la pregunta.

-Lo son -sonreí segura- y si te aman... su mirada, su sonrisa, ellos son simplemente lindos.

Narra Yoongi

-Yo no creo eso, aquellos tipos de hombres no existen.

-Yo si lo creó. ¿Acaso no puedes considerarte uno? -sonrio divetida para adelantarse.

-El amor no es así Yewon. -la seguí.

-¿Por qué no? -nego aun riendo- en serio te esmeras en ser pesimista.

Negue- No es tan fácil, no es tan lindo y puedes salir herido.

-Pero para mi... lo es -susurro.

-¿Aunque sea malo? -cuestione- ¿aunque te lastimes en el proceso?

-Aunque sea malo y aunque me lastime, lo seguirá siendo, hermoso. -voltee a verla- Si el amor es un juego, simplemente seré tu juguete -sonrío- ese es mí punto de vista, así lo percibo.

Sonreí- Eres rara.

-¡Sunbae! -alargo la palabra para sonreir. Desparrame su cabello junto a una leve risa que solte- Sunbae... ¿tu estás bien? -me miro con preocupación, entonces me aleje para guardar mis manos en los bolsillos y asentir.

-Tengo hambre, vamos. -asintió.

Bien, lo haré, me declarare... ¿qué más puedo perder? Ella es una mujer increíble.

Al llegar a la tienda, ella se detiene- Woah~ que hermosas -sonrio.

-¿Lo son? -me acerque a ver lo que tanto admiraba, asintió varias veces embobada mirándolas- Ahjussi, deme este ramo por favor.

-Claro -sonrío para tomarlas- ¿será para su enamorada? -miró a Yewon.

-¿Eh? -musito sonrojandose.

-Algo así... -desvie la mirada, ella observaba sus manos apenada. Se veia jodidamente tierna.

Sonrió- Sabe, tiene una muy buena elección. -me comento él.

-Supongo, gracias -pague para recibirlas y reverenciar levemente. Seguimos en dirección a la tienda de comida.

-Sunbae -susurro- ¿realmente es para mí? -observaba el ramo entre mis manos.

-¿Qué? -no la mire, solome encamine- ¿Crees que las compré para ti? -bajó su mirada apenada.- Pues, ni que fueran para mi, ten -se las extendí.

-Woah kamnsamida~ -sonreía apreciandolas- son hermosas...

-Pero, ¿por qué me las compraste? -volvio a verme.

-Las querías -encogi mis hombros- llegamos. -ingrese al lugar, era tan tranquilo, rústico y familiar, bastante humilde de hecho. Solía venir cuando era más joven.- Sigue igual -susurre para mi mismo.

¿Le gustará?

-Woah~ es muy acogedor, que lindo -se acercó hasta una mesa.

Sonreí para acercarme al mesero y pedirle un pequeño favor.

-¿Que pediremos? -miro el menú y pregunto al verme acercarme.

-Lo que quieras -tome asiento para imitarla.

Comimos mientras hablamos, de hecho ella era quien lo hacia, yo solo me limitaba a oír cada cosa y asentir de vez en cuando

-Sunbae, ¿te aburro? -un tierno mohin aparecio en sus labios. Negué- Tsk -rió- ¿sabes...? -observe al mesero hacerme una seña, entendí rápidamente la referencia, ya estaba listo.

-Yewon -la interrumpi.

-¿Si? -pregunto curiosa. Quien lo diría, todo esto empezó por un curioso deseo de reprenderla aquella noche, pero termine consolandola obligatoriamente. Ahora, ella es mi "novia" ante los ojos de los demás. Le pedi que no se enamorara- ¿Sumbaenim? -ladeo su cabeza en busca de mi atención. Quién diria que me encantaría esta bella niña.

-Sabes... tú y yo no empezamos de la mejor manera, quizás ni siquiera normalmente. -mencione y ella asintió sonriendo con nostalgia.

-Somos algo anormales sumbae~ -observo su ramo de rosas.

Sonreí- Algo así.

-Sunbae me alegra que sonrías -me dedicó una de aquellas tiernas sonrisas, que aún no logró comprender todo el poder que tienen sobre mi- deberías hacerlo más seguido~.

-Escucha, yo debo decirte algo importante. -asintió- Tú... a mí...

Ring~ su celular se hizo oir- Perdón -se disculpó para atender la llamada.- Hola... ¿oppa?... -frunci el ceño levemente- ¿eh?... ¿qué le pasó?... -ahora si lo frunci con razón- ¡Changsub!... olvídalo voy para allá... si gracias... adiós -se levantó con prisa.

-¿Qué ocurre? -mi ceño seguia fruncido, no me gustaba la situación.

-Chabsub oppa... yo no sé... -nego aterrada- pero me necesita. -se notaba realmente preocupada.

-Yewon, estoy tratando de decirte algo importante, ¿no puede esperar un momento? -cuestione con algo de molestia.

-Lo siento sunbaenim, pero, pero él me necesita, -tomó su morral- ¿es realmente importante? -volteo a verme con su expresión alterada, queria irse del lugar, era demasiado obvia. Justo cuando estuve a punto de decirle lo que sentía, de armarme de valor, me interrumpió- Por favor se rápido o... ¿podrías decirmelo luego? -sonaba a suplica de hecho- ¿si? -reverencio para adelantarse sin mi, pero me levanté para tomar su mano.

-Yewon es importante. -declare suplicando que se quedara.

-Perdona sunbaenim -reverencio nuevamente para salir corriendo de la tienda.

-Ye... -pero se fue, no volteo ni por un segundo hacia atrás.

El mesero tajo consigo aquel pastel que le pedí, el primero que comí al llegar a Seúl, el que significó tanto para mi en aquél entonces, recuerdo que no podía darme ningún lujo. Fue aquel que probé siendo un don nadie, aquel que quitó mi hambre... el que quería compartir con ella...

-¿Te gusta? -pregunto.

-No tengo como pagarlo. -declare.

-No pregunté eso -sonrío divertida- come, toma fuerzas y sigue. -me animo.

-Yo... ¿cómo se lo pagaré?

-Quiero que el día de mañana que ames a alguien, la traigas aquí y lo compartas con ella -sonrío- Prometelo -extendió su meñique.

-Lo prometo.

Puso a otro por encima, quizás no era como creí, quizás no era la indicada o tal vez, no era el momento adecuado.

-Me creí demasiado importante... -observé el ramo a un lado del pastel, en aquella mesa solitaria.

Quizás, este es mí destino, no amar y no ser amado...

-Perdón Yoongi -mis lágrimas salieron- no puedo aceptarte -acarició mi mejilla- sabes que no tengo mucho tiempo -sonrío- quiero tu felicidad oppa.






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