ㅤJungkook gruñó una vez entrado al baño, viendo su aspecto molesto recordando el comportamiento desesperado que su lobo hizo. ¿Qué tanto le preocupaba esa omega? Negó rápidamente y lavó su rostro con agua, quizás de esa forma podría aunque sea calmarse un poco antes de dar explicaciones innecesarias.

ㅤ— ¡Ahhh!- gritó para su suerte, se encontraba solo.— ¿Por qué no puedo quitarte de mi mente?- exageró despeinando su cabello negro. Apenas la conocía, no tenía razón de ser, no podía meterse en su mente tan rápidamente. No se reconocía asimismo, claro que no, nunca en su vida cotidiana sintió tales sensaciones.

ㅤNi en ninguna de sus citas anteriores, nada. Se notaba a cierta distancia que esa omega japonesa era diferente a las demás y no entendía porqué.

ㅤ“Es nuestra omega, no debes pensarlo mucho”.

ㅤOtra vez, su lobo le volvió a repetir las mismas palabras desde que Minatozaki Sana chocó contra él en la cafetería. No obstante, Jungkook seguía negando eso y lo seguiría haciendo hasta que el lado animal dejará de insistir con lo mismo. Una cosa completamente imposible una vez encuentras a tu pareja predestinada sin saberlo.

ㅤ— Calma, debes tener tu mente calmada- se dijo, prácticamente hablando al espejo.

ㅤSuspiró, inhalo y exhalo todo lo que llevaba dentro de sí. Cerró y abrió sus ojos con paciencia, como si de un ritual se tratase. Recordaba bien las palabras de su hermana en los momentos que se sintiera tan estresado o con ansias.

ㅤ“No te dejes abrumar por tus pensamientos, eres un Jeon de familia pura. Sabrás como afrontar tus problemas con un chasquido”.

ㅤ— Si sigues así, juro por mi madre que te daré una patada en ese redondo trasero que te cargas. Alfa gruñón— mencionó Namjoon, quien ingresó al baño minutos antes durante su mini debate astral. Jungkook por supuesto, lo ignoró y siguió con lo suyo, ganándose un bufido o más bien varios impacientes por parte de su hermano. Eso le hizo al alfa, tensar su mandíbula con intención clara de callarlo con un golpe.— Ya, deja de hacer eso que me estás empezando a asustar.- recriminó a su lado. — ¿Lo dejarás de hacer?- insistió con un tono infantil, demasiado para el azabache.

ㅤJungkook asintió con una sonrisa muy maliciosa a ojos del beta. Eso no traía buenos aires. Namjoon sin duda, sonrió y sobó la espalda de su hermano, en lo posible con intención de calmarlo y que no lo asesine.

ㅤ— ¿Qué quieres, hyung?- preguntó directo, demasiado molesto. El mayor se cruzó de brazos, dispuesto a dar lucha contra el endemoniado de su hermano.

ㅤ— ¿Qué ocurrió allí afuera con esa omega?— dijo sin rodeos. Captando perfectamente como el alfa suspiraba con molestia, había dado en el blanco.

ㅤ— No sé a qué te refieres, Nam— respondió haciéndose el desentendido. El beta rió de lado, conociéndose, no se daría por vencido tan fácilmente hasta lograr sacar toda la información necesaria y así, compartirla con Nayeon después.

ㅤ— Claro que sí, esos ataques de celos no se ven todos los días y menos si estos provienen del mismo Jeon Jungkook— con ello, los ojos marrones de Jimin se tornaron a oscuros, casi llegando al negro vivo. Sintiendo la rabia llegar a su sistema y con ganas de volver a donde se encontraba la omega.

ㅤ— Cierra la boca, hyung.- emitió con enojo. — Jeon Jungkook jamás en su vida mostraría tales arranques por nadie.- trató de defenderse. — Esa omega no es más que una ilusa y desesperante japonesa torpe.- recriminó apretando sus puños. El beta no se inmutó, es más, lo vio como alguien totalmente infantil al referirse de esa manera a la chica de ojos miel. Estaba claro que algo de efecto causó en él pero Jungkook era tan orgulloso que nunca lo admitiría delante de él o su familia.

ㅤ— Eres todo un caso, Jeon- rió. — En estos momentos mientras te comportas como un niño tonto, allá afuera hay alguien que está a toda costa, intentando coquetear con esa chica a la cual denominas como torpe e ilusa.- respondió tratando de hacer que su hermano reflexione.

ㅤ— ¿Quién es?— preguntó cayendo en el juego de su hermano.— Responde, ¿quién es?- habló desesperado ante el silencio de Namjoon.

ㅤ— Mingyu, duh— dijo encogiendo sus hombros con total normalidad. Y en cuestión de segundos Jungkook ya no se encontraba a su lado.— Cielos, no me puedo perder esto— susurró yéndose lo más pronto posible del baño.

ㅤSana estaba aún perdida ante el recuerdo vivido con el alfa de hebras oscuras hace unos momentos atrás. Ignorando las risas de su amiga Momo quién se encontraba a gusto con el chico desconocido de cabello rubio, ojos de cazador y sonrisa cuadrada, o bueno, no tan desconocido ya que solo conocía su nombre.

ㅤSin darse cuenta que el mismo castaño que la ayudó, se sentó a su lado. Saludando al par y enfocando su atención en la omega. Carraspeó un poco su garganta, esperando a que esta captara su llamado. Sana desvió la mirada y se exaltó con susto.

ㅤ— Oh, lo siento— se disculpó con el beta, Mingyu negó sonriendo. — ¿Hace mucho me habló?— preguntó inocentemente.

ㅤ— Cinco minutos para ser exactos— respondió.— Lamento si te asusté con mi repentina presencia—

ㅤSana rió tímida. — Claro que no— comentó con apuro. — No lo hizo, me disculpo por mi distracción mental, debo parecerle una maleducada— susurró cabizbaja. Mingyu observó tal perfil de la tierna omega y a simple vista, aquello le pareció lindo.

ㅤ— Para nada, eres muy tierna Sana-chan— dijo sin pensarlo. — Digo, cualquiera que te observará detenidamente sabría eso— trató de reparar sus palabras.

ㅤA la omega le hubiera encantado que otra persona en especial se lo dijera. Mordió su labio con decepción, el alfa que aseguraba ser su compañero de destino le había insultado y rechazado aunque también le dejó sin aliento cuando se la llevó afuera del restaurante. Sana en definitiva no entendía la doble dualidad del alfa pero si era sincera, tampoco le molestó sino que a su lado masoquista le gustó el comportamiento territorial de su ojitos marrones. Sonrió tontamente, pensando cosas irreales.

ㅤ— ¿Te encuentras bien?—

ㅤNuevamente se sintió como una estúpida por estar pensando en Jeon Jungkook. Casi que se da contra la mesa por ser tan obvia y para nada disimulada. Tenía en cuenta que después de esta noche, sería el centro de burlas por parte de Momo. Esa omega no le cabía duda que tenía ojos en la espalda y oídos escuchando y viendo con lujo cada detalle que se encontrase.

ㅤ— C-claro que sí—respondió tontamente. — Lo estoy, Mingyu-ssi— mencionó aclarando su mente y voz.

ㅤMingyy comprendió, siendo consciente de que no lo estaba pero que aún así no forzaría a preguntar por respeto propio. Era un caballero con todas las letras, y eso, fácilmente podía derretir el corazón de cualquiera que lo conociera al instante. Sí algo lo caracteriza, es ser alguien paciente con audacia de oír y aconsejar, estar y ser sincero.

ㅤ—¿Gustarías una copa?—

ㅤSana vio a Momo y esta a ella, por su expresión amena, dio a entender que aceptara. Viendo como le susurró algo a Taehyung, ambos se miraron con asentimiento. Levantándose de la mesa, con el claro pretexto de dar un paseo por los jardines del restaurante. A la nipona menor casi se le sale el músculo palpitante de sí, era todo lo contrario, no quería quedarse a solas con el beta. Mataría a Momo después.

ㅤ— No soy de tomar...— murmuró avergonzada. Era cierto, Sana nunca probó alcohol en su vida, sabía que no sería capaz de tolerar mucho y era capaz de decir cualquier estupidez sin sentido, se conocía tan bien.

ㅤMingyu no pudo ni siquiera responder debido a que una persona se sentó en el puesto que anteriormente ocupaba Momo, dejando a ambos atónitos, sobre todo a la japonesa.

ㅤJungkook sonrió altaneramente, mostrando su impecable perfil de alfa reservado y engreído. Típico de un abogado como él.

ㅤ— Si ella no acepta tu copa, yo sí. Después de todo, viniste con ese motivo ¿no?— mencionó viéndolo cerca de la chica. — Haremos un brindis por mi cumpleaños, ¿estás de acuerdo con ello, cierto hyung?— preguntó.

ㅤMingyu forzó una sonrisa ante el pelinegro. Jungkook no pasó desapercibido tal cosa.

ㅤ— Oh, por supuesto que sí— mencionó haciendo una seña para que la joven moza se acercara a la mesa. — Por favor, trae la mejor botella de vino y dos copas, hay que brindar por el feliz cumpleañero— comentó hacía la chica, esta asintió.

ㅤ— ¿La señorita desea servirse algo?— preguntó a Sana.

ㅤ— Quisiera servirme el postre pendiente, por favor— mencionó evitando mirar a Jungkook, este rió para sus adentros al lograr verla nerviosa.

ㅤLa jóven con los pedidos, se marchó en busca de los mismos. Dejando al trío en la mesa, con un beta algo molesto, una omega completamente nerviosa y un alfa sumamente curioso y calmo.

ㅤY a un Namjoon interesado, observando tal escena al lado de una Nayeon divertida.

ㅤVaya dilema.