ㅤSana puchereo, ya no le hacía bien ver tanto doramas. Desde que Jungkook le dijo esas palabras tan hirientes, permaneció encerrada en el departamento de su mejor amiga. No quería ni siquiera salir de allí, ni a la esquina ni nada.

ㅤParecía una muerta viviente, aunque no tanto ya que comía a diario lo que Momo preparaba o llevaba. En fin, ahí estaba en su soledad, riendo o llorando por la ineptitud del protagonista. Y es que, tenía esas enormes ganas de gritarle que dejará su orgullo de lado y confesara lo que siente por la chica, tan ella con Jungkook.

ㅤ— Saldré con Taehyung, ¿quieres venir?—

ㅤMomo apareció de la nada, sentándose a la par de Sana. La bonita pelirosa niega sin despegar sus ojos del televisor.

ㅤ— Cuidate— fue lo único que dijo antes de encerrarse nuevamente en su burbuja.

ㅤMomo rueda sus ojos, harta de verla en ese estado tan deplorable. Bien, quizás ser rechazada por tu pareja implicaba eso. ¡Tampoco necesitaba exagerar!, habiendo tanto por hacer, decide optar por esconderse bajo sábanas. Esa no era Sana Minatozaki, esa no era su amiga. Es por ello que debía hacer algo, aunque se lamentaba en no saber qué. Ya hizo de todo para subir sus ánimos pero la omega no ayudaba mucho que digamos.

ㅤ— Sabes, a Jeon Jungkook no le hubiera gustado verte así— comentó, eso llamó la atención de Sana que pauso el dorama. Momo suspira, logrando finalmente dar en el blanco. — Ya sabes, a veces lo entiendo, tampoco estaría con alguien que llora en silencio por un amorío fallido— dice, conociendo a su amiga, seguramente la estaba fulminando de pies a cabeza con esa mirada aterradora. Aún así, no se detuvo. — Piénsalo Sanake, ¿cómo pretendes que alguien como ese alfa te haga caso si te la pasas encerrada detrás de tus penas mientras comes hasta el cansancio? Jungkook de seguro se iría con otra de inmediato y no lo puedo culpar—

ㅤY eso, eso caló en lo profundo de Sana. Inflo sus mofletes, apretando fuerte la tela de su vestido. ¿Y qué importaba saberlo? Después de todo, Jungkook la rechazó sin pudor alguno. Pero, por otra parte, las palabras de Momo hicieron eco en ella.

ㅤ— ¿Me estás diciendo inútil, Momo?—

ㅤ— Si así lo dedujiste, entonces sí— dijo simple.

ㅤSana abre su boca, sin embargo nada sale de la misma. Ella no era una inútil, ni mucho menos una llorona. Claro que no, le demostraría no solo a Momo sino que al mismo Jeon Jungkook que Minatozaki Sana era una mujer madura, responsable y trabajadora. Al diablo los doramas, al diablo dormir hasta tarde y despertar únicamente para comer, al diablo todo.

ㅤSe levantó de golpe, sorprendiendo a Momo. Sana miró a su amiga y le señaló con el dedo índice, tenía su ceño fruncido, rara veces veía esa faceta en la omega pelirroja.

ㅤ— Ya verás, yo no soy ninguna buena para nada. Te lo demostraré, se lo mostraré a Jungkook y ambos se tragaran sus palabras— dijo, yéndose hacía su habitación. Momo dio un respingo al ser la puerta cerrada fuertemente.

ㅤSonrió de lado, esa si es Minatozaki Sana.

ㅤEl timbre del departamento resonó, Momo se levantó del sillón y acomodó su atuendo. Abrió la puerta sonriente, no obstante, esa misma desapareció al ver a Taehyung, acompañado de Jeon Jungkook.

ㅤ— ¡Tu!— instó a lanzarse contra el alfa pelinegro pero Taehyung se lo impidió, abrazandola entre sus fuertes y acogedores brazos.

ㅤ— Tranquila— susurró, Momo flaquea luego de unos buenos minutos de resistencia. — Él vino con intención de disculparse con Sana noona—

ㅤMomo mira a Jungkook, este tenía sus manos puestas en los bolsillos de su traje. Con su misma aura seria y firme.

ㅤ— ¿Es verdad?—

ㅤJungkook no responde con palabras pero si con asentimiento de cabeza. Momo observó fijamente al alfa, buscando una pizca de duda, para su mala suerte no la halló.

ㅤ— ¿Sana se encuentra?— habla por primera vez.

ㅤMomo iba a responder, sin embargo la figura de Sana se hizo presente entre ellos. La omega se había preparado lo antes posible para salir en busca de un empleo, comprar sus materiales de estudio y de paso, pasar a degustar una rica pasta italiana. Todo aquello quedó en segundo plano al verlo parado frente a sus narices.

ㅤParpadeó varias veces, ¿no estaba soñando o sí? Esa pregunta fue respondida con tan solo inhalar el aroma a chocolate amargo y naranjas, acompañado por su perfume de Bvlgari. Casi pierde la estabilidad ante ese alfa tan masculino, sensual, serio y sexy.

ㅤ— ¿Estás aquí?— pregunta de la nada, logrando hacer contacto visual con él por segundos. Olvidándose por completo de Momo y Taehyung.

ㅤJungkook quedó de piedra, verla nuevamente afectó mucho a su sistema. Su lobo gruñó pidiendo cercanía de la omega. El pelinegro escaneo de pies a cabeza a Sana, llevaba puesto un lindo vestido de botones que le llegaba por encima de sus muslos, medias oscuras con transparencia y unos tacones con correa. Su cabello rosado suelto caía en picada con notables ondas al final, su maquillaje fresco y natural, lograron que tragara en seco.

ㅤJungkook aclara su voz. — Hola, Sana— dice sin apartar sus orbes marrones de los mieles de ella.

ㅤOir su nombre salir de él, simplemente le causó un escalofrío interno que tensó su cuerpo en cuestión de milisegundos. Desvía su mirada, teniendo un leve carmín en sus mejillas regordetas.

ㅤ— Hola, J-Jeon— habla nerviosa. Lo que menos deseaba era que él lo notará. Intentó ocultarlo del alfa pero fue inútil, Jungkook notó claramente como sus mejillas entonaron ese carmín intenso, sonriendo de lado ya que ese tono le daba un aspecto lindo, tierno y bonito.

ㅤTodo a vista de Momo y Taehyung.

ㅤ— ¿Ibas de salida?— se atreve a preguntar, desviando los nervios que empezaron a florecer en él.

ㅤVaya, nunca le sucedió cosa igual. Quizás era el efecto Minatozaki Sana.

ㅤSana aprieta la correa de su bolso, sus labios formaron una línea recta. Era obvio que lo sucedía en su mente, más no quería ser tan transparente frente a ellos, sobre todo con Jungkook.

ㅤ— Sí. De hecho, Momo me invitó— dijo, y no era mentira. — De hecho, no quiero seguir atrasandolos— susurra, intentando sonar convincente. — Así que, si no te importa...—

ㅤJungkook ríe ladino, era su imaginación o Sana lo estaba echando. Debía ser mucho más para que logrará siquiera convencerlo un poco.

ㅤ— Quisiera unirme a ustedes, digo uno más no creo que les moleste—  insinúa a Taehyung, este niega y asiente a la vez.

ㅤ— Para nada Kook, será divertido— sonríe, llevándose a Momo antes que se opusiera.

ㅤEl alfa les da el paso, mirando a Sana con expectación también le invita a que pasase. Por supuesto, ella lo hace, no sin antes cerrar la puerta del departamento. Tener a Jungkook cerca, le generaba demasiado en ella y su lobita.

ㅤ“Alfa, él vino por nosotras”.

ㅤ¿Será tan así o sólo era otra cosa? Sana suspira, siendo seguida de Jungkook mientras las puertas del elevador se cerraron con ellos dentro. El silencio abundó entre los dos, uno en que solo sus respiraciones podían oírse junto al latir de sus corazones. Ninguno dejaba de mirarse por el rabillo del ojo, esos segundos dentro de aquella caja metálica, fueron eternos para Sana y rápidos para Jungkook.

ㅤAunque la omega no entendía la razón de su presencia, esperaba poder no actuar impulsivamente. Debía dominar sus sentimientos y emociones, no podía caer otra vez ante alguien como Jeon Jungkook.

ㅤ“Mentirosa”.

ㅤEsa cita no pintaba bien, o tal vez ¿si?