La música resonaba tan fuerte del otro lado de la puerta que los separaba del mundo real que por un momento Jaden esperó desesperadamente no perderse en las caricias de Mike, en la dulzura de sus besos y en el calor de su cuerpo.

Jodidamente se planteó no olvidar que, del otro lado de esa puerta había gente, que estaban ahí en primer lugar para celebrar la llegada de Ash, que todos habían trabajado duro para organizar esa fiesta sorpresa para Ash. Que cualquier persona curiosa podía abrir la puerta y verlos, y que eso sería malditamente vergonzoso, además de incorrecto.

Quiso anclarse a tierra pero cuando la última prenda de su ropa fue retirada de su cuerpo y los brazos de Mike lo arrastraron hasta posicionarlo sobre sí mismo, él ya estaba flotando.

__D-Detente...hay...h-hay personas afuera _ su voz salió pequeña y fragmentada en un millón de trozos afilados que cortaron para salir dejando seca su garganta, en ese momento vio a los labios de Mike con desmesurado deseo, como un hombre loco mira un oasis luego de horas de tortuosa sed. Lo vio sonreír y supo cuán ensimismado estuvo con sus ojos perdidos en el perfecto manjar de su boca.

__Nadie entrará _ aseguró, sus dedos dejando caricias en la delicada barbilla de Jaden mientras su propia dureza se presionaba de forma deliciosa contra el trasero pomposo del precioso omega que tenía sobre su regazo __O prefieres detenernos aquí, irnos a casa, y continuar allí?_ sus palabras brotaron con calma, saboreando su propia sonrisa y admirando la hermosa forma en que la respiración de Jaden se cortaba por momentos mientras sus dedos le recorrían las espalda __Quieres esperar?_ indagó y vio el brillo culpable en sus hermosos ojos cafés__Puedes hacerlo?_ ladeó su cabeza y observándolo con atención él no se perdió la contracción en la expresión contraria cuando sus dedos índice y medio se detuvieron en el centro de su espalda baja, tan cerca de su entrada.

Los dedos de Jaden se apretaron sobre los hombros vestidos del ojiclaro, su piel erizándose, no supo si fue por el frío sobre su piel caliente, o por la estimulación de las caricias y toques ajenos sobre su anatomía, no supo si aquella idea parpadeando peligrosamente en su cerebro se debió al cóctel que bebió antes. Solo supo que cuando la nariz de Mike tocó su barbilla y sus brazos le rodearon la cintura en un abrazo cálido, cada pensamiento lógico se apagó.

Porque cuando el deseo se elevó como llamarada en su interior y el aroma dulcemente delicado de Mike lo envolvió, lo único en lo que Jaden podía pensar era en lo cerca que estaban los dedos contrarios de su intimidad, en cuánto deseaba tenerlo apoderándose de su interior, y que lo único que impedía tenerlo dentro suyo era la tela de aquel molesto pantalón negro que le quedaba tan bien a Mike.

Jadeó apretando el agarre sobre la camisa contraria y meneó sus caderas en un movimiento suave que lo hizo percibir a detalle la erección de Mike en su trasero desnudo. Echó su cabeza hacia atrás cuando la frente del menor se apoyó en su hombro, volvió a moverse sobre él y lo escuchó gruñir contra su piel, su aliento caliente hizo cosquillas en su clavícula.

__Estás temblando_ lo escuchó susurrar sobre su piel y posteriormente un beso fue depositado sobre su clavícula. Jaden gimió cuando el rostro precioso de Mike se alzó y aquellos ojos claros le miraron, porque su mirada estaba embriagada en el deseo y su cuerpo tenso y caliente solo lo invitaba a abrazarlo más y más fuerte__Tienes frío?_ indagó, apretándolo contra su cuerpo y frotando su nariz a la contraria, su aliento cosquilleando en los labios de Jaden.

__No_ respondió bajo, ahogó un gemido cuando los dedos de Mike se acercaron peligrosamente a su lubricada entrada. Entonces lo miró, la súplica escrita en sus orbes ahora más oscurecidos.

__Creí que tu celo se había ido_ fue lo que dijo besando la comisura de sus labios, su índice frotando suavemente la entrada del pelinegro. Su voz suave y su toque amable pellizcando los nervios correctos en el cuerpo de Jaden hasta hacerlo jadear y gemir bajito con cada uno de sus más leves movimientos y sus más triviales conversaciones.

Y es que justo en ese preciso momento lo deseaba tanto que era prácticamente tortura.

__Y lo hizo _ respondió, sus dedos recorriendo la nuca de Mike, enterrándose en el cabello plateado y dejando caricias allí __M-Mike..._ volvió a mecerse sobre su erección y los dedos del menor se apretaron sobre la piel desnuda de su trasero.

__Si?_ besó su cuello innumerables veces en espera de una respuesta. Sabía lo que Jaden quería, solo un tonto no sabría leer la atmósfera correctamente, pero quería oírlo decirlo, lo necesitaba.

__N-No puedo esperar, no quiero hacerlo. Te necesito dentro de mí.....por favor _ susurró abrazándose a su cuerpo caliente, y la sorpresa se adueñó del cuerpo contrario.

Esperaba que lo dijera, quería que lo hiciera, él jodidamente necesitaba oírlo decir que lo deseaba, pero no esperaba que fuera así. Sonrió complacido, y sus dedos se empujaron contra la húmeda entrada finalmente.

__A-Ah!_ chilló ahogando sus gemidos en el hombro de Mike cuando dos de sus dedos embistieron su interior de forma suave, pero profunda y demandante. Su cuerpo se estremeció y sus muslos temblaron cuando sintió los colmillos del menor en su cuello.

__Shh!_ con su mano libre lo tomó de la nuca, y apartándolo de su hombro lo acercó a su rostro __Dije que nadie entraría, y nadie lo hará. Pero aún deberíamos ser discretos con este tipo de cosas. No lo crees así Jade?_ sonrió mientras lo veía morder con nerviosismo sus labios en un intento por acallar sus gemidos y que estos no fueran demasiado estruendosos__Ven aquí _ lo acercó tirando de su nuca hasta tomar su boca en un beso tan suave del que su lengua fue la protagonista.

Solo cuando estuvo bebiendo del sabor adictivo de su boca y succionando su lengua se permitió acelerar las embestidas de sus dedos en el interior de Jaden. Tan mojado y apretado, tan cálido, tan perfecto.

Los jadeos y respiraciones se mezclaron cuando se apartaron para tomar aire. Los ojos nublados en placer y excitación, la mirada cómplice cuando sus dedos abandonaron el apretado interior. El toque tímido de las manos de Jaden sobre su abdomen vestido con la camisa que el pelinegro comenzó a desabotonar poco a poco.

Sonrió ante la desesperación con la que fue desnudado y creyó que el pelinegro se enojaría, pero en su lugar Jaden se acercó para dejar un corto y suave beso en sus labios, beso que lo dejó anonadado.

Lo miró como si lo viera por primera vez, y lo vio lamerse los labios antes de posar ambas manos sobre su abdomen ahora desnudo, disfrutó el tacto cálido de sus dedos suaves y gruñó en voz baja cuando sintió sus dígitos enredarse en la cinturilla de su pantalón.

Mike apoyó el peso de su cuerpo sobre ambas manos y se dedicó a apreciar la belleza del omega sentado sobre sus muslos. Era perfecta la forma en que la tenue luz lo bañaba, su piel canela brillante por el agua de la piscina, los reflejos de dicha agua se esparcían por las paredes, el suelo del lugar, y la piel hermosa del pelinegro.

Sus ojos brillaban en el rojo más profundo de su lujuria y excitación. Su cabello mojado se pegaba en hebras rizadas sobre su frente. Mordió sus labios al verlo abrir con suavidad el cierre de su pantalón y no pudo soportarlo más.

Jaden se sorprendió cuando sus manos fueron tomadas deteniendo así la labor de abrir el cierre del pantalón contrario, pero antes de que pudiera quejarse fue sostenido por la cintura y obligado a ponerse de pie.

Mike comprendía la necesidad de Jaden de tomarse su tiempo, él también quería hacerlo después de todo, pero aquel no era el momento ni el lugar. Cameron había prometido custodiar esa puerta, pero no podía esperar que el chico estuviera la noche entera castigado frente a una puerta cuando su novio estaba allí con él finalmente después de la tortuosa espera.

Lo vio morderse los labios cuando finalmente se deshizo de su pantalón y ropa interior quedando tan desnudo como Jaden, aunque sentía que se quitaba mucho más que su ropa frente a él.

Quiso apartar ese pensamiento al ser enteramente consciente de los sentimientos de Jaden y, agarrando las cálidas mejillas lo acercó para iniciar un desordenado y apasionado beso. Jaden gimió contra su boca y rodeó su nuca con los brazos.

Sus manos le sujetaron de las nalgas y lo alzó pegándolo a su cuerpo, las piernas de Jaden lo rodearon de la cintura y Mike se sintió caer de rodillas frente a su belleza cuando se apartó de su boca con los labios rojos y sus ojos brillantes.

Su vida sexual era un desastre. Nunca logró llegar hasta el final con un alfa, incluso en su época de celo, mismos que siempre resultaban en los tres días más tortuosos de su vida. En lugar de alfas Mike había encontrado la comodidad en el ámbito sexual reuniéndose con betas.

Eran contadas las veces en su vida que había logrado relajarse lo suficiente para ser el pasivo, no se sentía cómodo haciéndolo por detrás y sus experiencias eran o muy desagradables, o muy insípidas, en cambio tomar el control sobre el cuerpo de alguien más y la responsabilidad sobre el placer a otorgar, lo hacía sentir en confianza y plenitud, lo disfrutaba muy a pesar de su condición omega y su propia naturaleza. Sabía que sería difícil cuando estuviera próximo a su época de celo, pero por ahora él solo tomaría el control.

La primera vez que compartió la cama con Jaden lo había follado, duro, con rabia y cero compasión. Se había hecho responsable de su placer y lo había hecho tocar el cielo y el infierno con las puntas de sus dedos al mismo tiempo.

Ahora quería hacerlo suave, quería decorar el lienzo de su cuerpo con los más suaves y dulces besos, quería recorrerlo entero con su lengua y besar su existencia como si fuera la más preciosa creación, aunque ciertamente lo era para él.

Odiaba el tiempo por ser tan injusto, egoísta hijo de puta por ponerlo en una situación de pura dicha que no podría disfrutar a paso lento como deseaba porque si lo hacía Cameron lo mataría.

Aún así, quería jugar un poco más con su resistencia. Rodeó su cintura con un solo brazo y lo agarró fuerte antes de agarrar su propio miembro y presionarlo contra la suave y mojada entrada de Jaden.

__Mgh!_ gimió sorprendido cuando sintió la punta de Mike abriendo con suavidad su entrada__Así?_ indagó mirándolo con ojos anonadados y mejillas ardiendo, sus manos afianzadas en la nuca de Mike.

__Porqué? No te gusta así?_ cuestionó con una sonrisa ladeada que robó un suspiro de los labios de Jaden antes de empujarse un poco más en su interior, el gemidito del pelinegro le erizó la piel__O prefieres hacerlo en la piscina?_ propuso con una sonrisa cómplice cuando Jaden alzó su rostro para mirarlo.

__T-Tú estás loco...._ negó con la cabeza sonriendo pequeño, lo cierto era que se sentía más avergonzado y nervioso de lo que le gustaría, y quizá que Mike le estuviera mirando tan fijamente mientras entraba en él tenía algo que ver __Agh!_ gimió, sus dedos enterrándose en los hombros de Mike con tanta fuerza como aquel duro y caliente trozo de carne se enterraba en él.

__Estás apretado _ gruñó apretándole las nalgas __Te ha gustado la idea?_ indagó empujándose hasta estar por completo en su interior en un jadeo.

__Ahj..._ gimió gustoso aferrándose al cuerpo de Mike para mantenerse a flote y no terminar siendo arrastrado por las olas de placer que lo recorrieron al tenerlo, nuevamente en su interior __Hay.... personas afuera, n-no tenemos tiempo para perder en la piscina _ la posición era incómoda para moverse por sí mismo, pero aún así él movió suavemente su cadera arrancando un jadeo de aquellos labios con sabor a sandía que estaba muriendo por besar.

__Creí que no eras consciente del mundo exterior _ se burla con dulzura frotando la punta de su nariz contra la mejilla suave y caliente de Jaden.

__Bájame_ pidió con ojitos de cachorro viéndolo desde entre sus gruesas y rizadas pestañas azabaches y Mike se quedó sin aire.

__Porqué? Te da miedo caerte?_ cuestionó y lo vio asentir con un adorable puchero en sus labios, y quizá Jaden no lo sabía, pero él se sintió a morir incontrolables veces en el pasado ante el deseo innegable de besar ese puchero, así que eso hizo. Y le robó otro beso cuando el pelinegro tuvo la queja en la punta de su lengua en el momento en que lo sintió moverse__No te dejaré caer.... jamás _ besó nuevamente sus labios de forma suave y salió de él con cuidado antes de ponerlo de nuevo en el suelo.

Estaba jodido, estaba tan jodido por ese cabello azabache rizado, por esos ojos cafés con un brillo rojo cual espesor de un bosque en pleno otoño, por la mirada en ellos, estaba jodido por esos lunares que, como lluvia de estrellas adornaban su nariz y mejillas como si a alguna divinidad se le hubiera antojado salpicar ese rostro precioso directamente con las estrellas más brillantes y bellas del universo. Estaba jodido por los labios más suaves y deliciosos y por esa sonrisa encantadora e infantil. Estaba jodido por su piel canela y su cuerpo suave, por cada curva de su anatomía, jodido por su desnudes que se cernía sobre él como la más grande existencia de perfección.

Estaba jodido por él, totalmente jodido por Jaden Pierce.

Tantas veces se había preguntado el origen de sus sentimientos, y el nombre que estos tomaban. Se lo había preguntado desde la primera vez que cayó por esos ojos, los mismos ojos que lo miraron como si estuviera loco en cuanto puso un pie dentro de la piscina hasta quedar dentro del agua hasta la cintura y completamente desnudo.

__Qué haces?_ cuestionó arqueando una ceja en cuanto Mike extendió sus manos en su dirección.

__Ven_ pidió en cambio con una sonrisa.

__Estás loco_ dijo Jaden, pero igualmente se acercó al borde de la piscina y se arrodilló allí con una sonrisa en sus labios, esperando a ser sostenido por los brazos que se extendían hacia él.

Mike lo sostuvo de la cintura y lo jaló más hacia su cuerpo metiéndose entre sus piernas antes de besar su pecho y clavículas con absoluta suavidad. Rodeó su nuca con las manos y se aferró a él cuando fue empujado hacia él, su cuerpo colisionando contra la calidez de Mike.

Se crispó al sentir la temperatura del agua en su piel caliente mientras el cuerpo cálido del menor lo presionaba contra el borde de la piscina, sintió sus manos en su cintura y sus besos en el cuello y simplemente él se dejó ir.

__Tienes frío?_ lo oyó preguntar bajito y entreabrió sus ojos para ver aquellos orbes claros que le miraban con desbordante amor. Algo hizo click en su cabeza, pero Jaden no estaba dispuesto a revisarlo en ese momento. Asintió suave y el cuerpo de Mike se pegó más al suyo__Te haré entrar en calor..._ susurró con sus labios sobre el cuello de Jaden, su lengua aflorando para dejar un camino de besos y saliva hasta su mandíbula __..solo un poco más precioso _ susurró, sus labios presionándose sobre la yugular del pelinegro tomando espacio sobre su piel de dulce aroma cuando Jaden dejó caer su cabeza hacia atrás dándole más acceso.

Los dedos de Jaden se enterraron en el pecho del menor mientras entornaba su mirada cuando sintió la diestra de Mike en su muslo izquierdo, alzándolo y colocándolo alrededor de su cintura antes de presionar su miembro dolorosamente duro contra la caliente y mojada entrada.

Jadeó entrecortado cuando lo sintió entrar, y se perdió en el cielo empedrado de sus ojos, esos que no dejaron de mirarlo como si pudieran grabar cada gesto y contracción de placer en su rostro como si de una fotografía instantánea se tratase.

__A-Ahj_ gimió cuando el brazo derecho de Mike se metió tras su pantorrilla y sujetándolo justo debajo de la rodilla alzó aún más su pierna para embestirlo más profundo __M-Mierda_ maldijo con sus mejillas ardiendo y sus ojos nublados en el más puro placer __Q-Qué tan profundo llegarás?_ indagó con verguenza ante la lucha que Mike llevaba con sus embestidas en el intento de llegar aún más profundo en él.

__Quiero llenarte _ dijo en cambio Mike, y, como si de una bestia hambrienta se tratase se abalanzó sobre él tomando su boca en un beso descontrolado y desordenado en saliva y sus lenguas luchando por el control__ Quiero llegar al fondo de tí _ repitiendo la operación anterior alza esta vez la otra pierna de Jaden hasta dejarlo en el aire con sus extremidades enredadas a su cuerpo mientras lo embestía con fuerza contra el borde de la piscina __Quiero conocer tu interior a la perfección y que no haya rincón de tu cuerpo que no haya visto, sentido, tocado o besado_ susurró viendo en los ojos aturdidos del pelinegro antes de tomar su boca nuevamente.

__Ahj!_ gimió en alto, el miembro de Mike estaba taladrando su interior sin compasión y las palabras del menor ponían su corazón a correr una maratón. El agua chapoteaba y saltaba en todas las direcciones empapándolo cada vez que Mike embestía su interior. Estaba más que seguro que a la mañana siguiente le dolería la espalda por los roces contra la pared interior de la piscina, pero le encantaba tanto lo que hacían, y como lo hacían que no se atrevería a quejarse por eso__M-Mike ahí..._ llamó su nombre en un gemido y juró que lo embistió mucho más fuerte que antes.

__Si?_ gruñó en respuesta pegando su frente a la de Jaden.

__D-Deja...ya deja de mirarme _ pidió avergonzado y los movimientos de Mike cesaron solo un segundo antes de volver a embestir con fuerza su interior y arrancarle un gemido que movió su centro de gravedad. Echó su cabeza hacia atrás mordiendo sus labios, había golpeado de forma certera su punto dulce.

__No_ respondió con una sonrisa __Estoy a punto de darte la vuelta y quiero grabarme tu expresión en la memoria antes de hacerlo _ dijo embistiéndolo de nuevo, con fuerza.

__Q-Qué dices....._ se sintió desorientado cuando sus pies tocaron el suelo y los dedos de Mike acariciaron sus muslos bajo el agua antes de sostenerlo de la nuca para acercarlo a su boca.

__Date la vuelta _ gruñó lamiendo el labio inferior de Jaden quien obedientemente se dio la vuelta entre los brazos de Mike y apoyó sus manos en el borde de la piscina.

__Ahh!_ gimió en alto cuando Mike se enterró en su interior de una sola embestida, sus dedos se aferraron de su cadera antes de volver a embestirlo y Jaden sintió sus piernas temblar cuando su punto dulce fue golpeado brutalmente más de tres veces seguidas.

La posición era perfecta, el ángulo de la penetración era profundo, y lo fue aún más cuando Mike lo sostuvo de la nuca con una mano, mientras la otra se deslizaba por la linea de su columna hasta llegar al centro de su espalda donde presionó haciéndolo arquearse y alzar el trasero.

Jaden lloriqueó cuando el pecho de Mike se pegó a su espalda y sus brazos lo rodearon en un abrazo que le dió calor, seguridad y calma a su cuerpo. Nuevamente estaba siendo duro, lo follaba sin piedad embistiéndolo profundo hasta dejarlo sin habla, y sin voz, pero ahí estaba ese cariño, ese tacto suave y el toque desbordante de dulzura con el que deslizaba sus dedos sobre su piel.

El aroma relajante de la sandía con su ligero dulzor se hizo notar en su nariz y él gimió con el suave movimiento del miembro de Mike deslizándose solo un poco hacia afuera para volver a enterrarse profundo en su interior.

Sintió la nariz del menor en su cuello, olfateando su piel y no pudo evitar darle acceso al ladear su cabeza. Se deleitó con el sonido de su agitada respiración y sus bajos gruñidos, con el latido estruendoso de su corazón contra su espalda y le pareció adorable la forma en la que la mano  de Mike se presionó sobre su vientre, como si buscara sentirse en su interior con cada embestida.

__Hoy no vas a pedirme que te muerda?_ indagó, bajo y ronco, su diestra se arrastró sobre el vientre de Jaden hasta llegar a su erección, misma que agarró con dureza y propiedad, como si fuera su propia polla.

__Ahj .....h-hazlo_ pidió ladeando su cabeza para darle más acceso a su cuello, su cuerpo se crispó cuando la mano de Mike comenzó a moverse sobre su longitud a la par que la velocidad de las embestidas se volvía imposible de resistir, lentas y profundas __M-Mierda ahh....m-me correré si sigues...._ cuando la lengua de Mike recorrió su hombro y ese punto en el que su cuello y su hombro se juntan, su piel se erizó. Mierda, era tan bueno que se correría cuando los colmillos del menor hicieran contacto con su piel.

La ola de placer fue instantánea y su cuerpo tembló estrepitosamente cuando los colmillos de Mike penetraron su piel con fuerza moderada. Se corrió en tiras blancas bajo el agua y su gemido fue tan alto que Mike se vio obligado a cubrir su boca con su palma.

__Agh mierda_ gruñó sobre la piel herida del pelinegro, sus labios con el sabor dulce de su sangre, su lengua afloró para mimar la herida mientras el cuerpo de Jaden temblaba y su interior lo apretaba tan deliciosamente que no pudo evitar correrse en su interior sin dejar de follarlo a través de su poderoso orgasmo.

No estaba tan cansado como la primera vez, y a diferencia de la primera vez, él no podía quedarse dormido inmediatamente. Pero, al igual que la primera vez, los mimos llegaron incluso antes de abandonar su interior, los besos en su espalda y nuca fueron tan repetitivos como dulces. Mike lo sostuvo con dulzura y amabilidad en cuanto abandonó su interior, y sus piernas temblaban tanto que se vio aferrándose al cuerpo cálido de Mike como un koala.

__No te duermas, tenemos que salir de aquí para volver a casa _ lo escuchó decir antes de ser alzado en sus brazos y sacado del agua. Y Jaden no quería dormir, en verdad no lo hacía, pero el calor de Mike era tan entrañable que simplemente lo invitaba a dormir.

Sintió el frío calarlo cuando su cuerpo fue abandonado junto a la piscina, y sus ojos nublados en la somnolencia que viene tras un buen orgasmo se fijaron en el agua en movimiento de la piscina sin olvidar ni un solo segundo que, ellos acababan de tener sexo en esa piscina.

Y esta vez no estaba borracho, no estaba pasando por su celo, y no estaba siendo empujado al borde por Mike. No tenía excusas ni culpables, porque él, había disfrutado cada momento y si bien no tenía ni idea de cómo seguir o qué demonios haría al despertar la mañana siguiente, Jaden no se arrepentía de nada.

Un segundo antes de que empezara a temblar, su cuerpo fue cubierto por una toalla grande que lo tapó hasta los tobillos y envuelto en ella.

__Vamos a secarte_ le dijo con una sonrisa agarrándolo con cuidado para ponerlo de pie_ Ven aquí _ la mejilla de Jaden se apoyó contra su pecho ya vestido con la ropa húmeda una vez estuvo de pie y Mike solo se dedicó a secarlo con suavidad __Vamos a vestirte y nos iremos a casa, tranquilo, pronto estarás cómodo en tu cama _ propuso con una sonrisa para que así el mimoso pelinegro pusiera de su parte.

__Tengo frío _ se quejó volviendo a pegarse a su cuerpo al estar solo un par de minutos separados, de ese modo Mike solo pudo ponerle la ropa interior y el pantalón __Y tú eres cálido _ susurró apoyando su barbilla en el pecho de Mike, sus brazos rodeándolo del torso en un abrazo extraño.

__Te abrazaré más entonces _ dijo dedicándole una sonrisa.

__Vas a abrazarme hasta que me duerma?_ cuestionó Jaden no totalmente ajeno al estruendoso latir del corazón contrario.

__Lo haré _ asintió acariciando con dulzura el cabello azabache húmedo y apretándolo contra su cuerpo.

Y quizá Cameron lo mataría mañana, quizá era de mala educación que los organizadores de la fiesta se marcharan antes que el resto, quizá alguien más que él había escuchado los gemidos de Jaden esa noche, quizá luego tendría mucho que explicar, y quizá el corazón de Jaden no estaba acelerándose como el suyo, pero justo en ese momento el único pensamiento que tenía cupo en su cabeza era que Jaden Pierce estaba entre sus brazos.

Así que la fiesta acabaría muy pronto para esos dos cuyos sentidos estaban atestados del otro esa noche.