Un nuevo año

Las cosas habían transcurrido con algo de prisa para muchos, pero el trabajo y deberes no les habían permitido darse cuenta de que el año seguía avanzando delante de sus ojos. Un año nuevo estaba iniciando y Sakura finalmente iniciaría la operación del pequeño niño bajo su cuidado; a su lado se encontraba una persona de Suna con conocimiento suficiente para poder ayudarla si algo iba mal, además de enfermeras ayudantes y Neji Hyuga que conformaban parte de su equipo. En la cabina de observación se encontraba el Hokage junto a su mano derecha Shikamaru, y a su lado se encontraban Kankuro, Shino y el cabecilla del clan Aburame.

— ¿Cree que ella pueda? —cuestiona el representante de Suna —Sé que es excelente en su profesión, pero consulté con mis doctores y dijeron que es una operación muy riesgosa y
delicada…

—Creo que… ella hará lo mejor posible Kankuro, y si llega a pensar que no puede más simplemente va a detenerse. —vuelve la mirada hacia el joven a su lado —Sakura no es irracional, no se aferra a lo imposible a menos que vea una mínima oportunidad de lograrlo…

—No creo ver lo mismo que usted —ríe —digo… vivió la mayoría del tiempo persiguiendo a Sasuke
tanto como Naruto.

—No habló de ese tema, y además el tiempo ya ha pasado, ahora ella es diferente… hablando medicamente ella ha sido muy meticulosa y conoce los riesgos de este tratamiento, ha preparado todo correctamente, nos ha informado y tiene todo preparado en esa sala… —observa a la gente a
su lado —los ojos de un Hyuga entrenado especialmente por ella, y los ojos de un Hyuga médico para asegurarse, dos enfermeras, una para estar en la sala y la otra por cualquier emergencia, los aparatos necesarios y una mente templada. Sé que logrará algo, y si no lo logra va a detenerse,
mejorará, buscará otra salida y luego nos dirá si realmente es algo posible y realizable por su mano.

Ante las palabras de aquel hombre todos los presentes volvieron la mirada hacia la sala de operación, el pequeño seguía despierto y parecía que ella le decía algunas cosas mientras acariciaba con delicadeza sus rulos castaños; luego de verificar todo Sakura hace una señal hacia
una enfermera para que ponga el gas y duerma al pequeño, ajusta sus guantes abriendo y cerrando las
palmas para después dar un pequeño masaje sobre su palma, y con sus manos listas sube la mirada hacia la cabina pidiendo a la otra enfermera que encienda el micrófono.

—Vamos a iniciar. —observa el reloj de pared —Son las Once treinta y siete, tenemos planeado durar al menos tres horas y avanzar menos de un cuarto de tejido vocal… —hace fluir el chakra dejando ver las agujas de chakra —iniciemos.

Las instrucciones oculares eran muy precisas y Sakura seguía cada palabra con mucha precisión, para la siguiente hora el pulso seguía muy estabilizado, y las enfermeras ayudaban intentando tranquilizar el cuerpo de la doctora para aumentar su resistencia, aún así había pequeños momentos de descanso en los cuales Sakura podía tomar asiento, tomar un poco de agua y relajar las manos que para ese entonces ya se encontraban muy tensas. El comunicador se encendió.

—Lamento decir que debo retirarme, suerte con la operación.

—Vaya con cuidado Hokage sama, tenga un buen día.

Kakashi da un asentimiento evitando decir cualquier cosa de más, al salir de aquella sala ingresan a los pasillos de salida y Shikamaru no se retiene más.

—Pudiste retenerte de decir algo de más, estoy sorprendido.

—Sé contenerme Shikamaru.

—Bueno… —ríe bromista —por un tiempo lo perdiste, amigo.

—Lo sé. —suspira frotando sus manos —Pero… ella sabe que confío en su talento, no necesito decirle justo ahora lo mucho que confío en ella.

—Bien, está muy bien. ¿Crees que de verdad vaya a resultar? Ciertamente es un tratamiento complicado, le tomó mucho tiempo mejorarlo y ponerlo en práctica, ella parecía muy optimista al inicio, pero… al final nos ha dado un quizá.

—Es complicado, por ello está siendo tan cuidadosa, son tres horas de tratamiento para un avance mínimo, terminará agotada aun teniendo la posibilidad de que no funcione. Aun así, esto es un avance increíble y tiene una base medianamente sólida, si el tratamiento funciona posiblemente
en un futuro todo esto sea una buena inversión y… ni siquiera hemos invertido mucho, gracia a Suna no hemos invertido demasiado.

—Pensando como jefe de villa, me gusta este cambio. De verdad estás mucho mejor siendo así, más relajado.

Las horas siguientes pasaron como horas tortuosas en las cuales Sakura estaba completamente entumecida de los hombros, manos y espalda, a veces sus dedos temblaban y ella detenía todo movimiento para evitar dañar todo su avance, más pronto que nunca las voces de sus colegas Hyuga quedaban en segundo plano y parecía que sus manos ya sabían que hacer, su mirada de pronto viajaba sobre el rostro de aquel pequeño ángel dormido y entre su tragar grueso detenía las manos subiendo la mirada hasta la enfermera que le daba un asentimiento. Todos estaban tensos y nerviosos esperando las palabras de los Hyuga que se daban una mirada para asegurarse de estar de acuerdo, el micrófono se encendía.

—El tratamiento ha sido un éxito, una parte del cuerpo vocal a sido restaurado con éxito.

Kankuro observaba a los hombres del clan Aburame que al igual que él se mostraban sorprendidos y aliviados, era maravilloso, lo había logrado, lo había logrado. Sakura cerraba los ojos exhalando un respiro exhausto, y al ver la emoción en la sala frotaba sus ojos y pedía en un ademan que
encendieran el micrófono.

—No podemos saber nada hasta que el pequeño se despierte y pueda comprobar el avance. Por favor, no sobre reaccionen.

— ¿Qué dices? —expresa sorprendido — ¡Lo lograste Sakura!

—Creo haberles explicado, Kankuro, que había una gran posibilidad de recrear los pliegues vocales, pero... que aún así no haya un verdadero resultado. Que el niño podría no volver a hablar aún con los pliegues vocales reconstruidos.

—No deberías ser tan negativa. —declara el jefe aburame —Lo has hecho bien, has dado todo de ti para completar una parte de sus pliegues vocales, si funciona o no… has hecho un increíble trabajo, un trabajo que se puede mejorar, tienes la base para algo grande.

La chica permanece en silencio y tragando grueso se decide por dar una reverencia en agradecimiento, el mayor sale junto a su hijo y en aquel lugar solo permanece Kankuro dando una última mirada a toda la sala, no podía evitarlo, estaba emocionado de haber sido de ayuda en algo tan grande. Al estar solos en aquella sala, Sakura vuelve la mirada sobre sus ayudantes.

—Muchas gracias por su ayuda, lo han hecho increíble.

—Tú lo has hecho mejor.

—Lo has hecho increíble.

Expresaban ambas enfermeras entre el acercarse a ella y darle algunos abrazos, la chica estaba nerviosa y sus ojos no paraban de viajar sobre aquel niño en cama, Neji podía ver las ansias que tenía de comprobar si todo estaba bien, pero su atención se desvío hacia el joven Hyuga que se posaba a su lado con ojos brillantes llenos de ilusión mientras observaba tal escena.

—Ella es increíble, jamás me habían llamado para algo de este calibre, siempre había tenido trabajos sencillos o en todo caso… al borde de la muerte, pero ese niño está vivo y ella se encuentra ayudándole… —niega —es increíble apoyarla en esto.

—Si te quedas a su lado posiblemente consiga darte un puesto fijo en el hospital, deberías intentarlo, puedo ver que te gusta bastante.

— ¿De verdad lo crees? —sonríe emocionado —diablos, realmente quiero hacerlo.

Las enfermeras llevaron al niño hasta una habitación en la cual debía descansar hasta poder despertar de la anestesia, mientras Sakura se encontraba quitándose las prendas que había utilizado para la
operación y a su lado uno de los Hyuga se despedía diciendo que estaba deseoso de seguir ayudando. Neji vuelve la mirada sobre su amiga.

— ¿Estás nerviosa?

—Es un tejido falso, sobre puesto… —cubre su rostro con ambas palmas —necesita monitoreo constante para ver cómo reaccionan los escarabajos al chakra ajeno a su cuerpo, si el tejido no es destruido entonces podría caber la posibilidad de que simplemente no funciona, que no sea capaz de hablar aun con el tejido completo.

Suspirando se acerca y rodea los hombros de su amiga para darle un poco de calma —Intenta
calmarte un poco, estás haciendo todo esto de corazón y con todo tu esfuerzo, el niño es feliz a tu lado y su confianza no sucumbirá por un pequeño fallo. Nadie es perfecto Sakura, pero lo estás haciendo bien, lo estás intentando y eso seguirá contando para él.

Salieron de aquella sala sin mencionar una palabra más, la chica continuaba cabizbaja, pero al entrar a la sala de espera tuvo que subir la mirada al percatarse de los pasos rápidos que se detenían frente a ella.

—Reiji…

—Las enfermeras dijeron que fue bien. —sonríe —Sabía que podrías.

Ella sonríe levemente —Gracias, pero aún falta…

—Él está bien, y eso es lo que cuenta.

Esas palabras lograron callarla por completo, sin tener conciencia de lo que hacía se dejaba caer sobre el hombro de aquel chico de baja estatura, Reiji no se encontraba disgustado por aquella acción y tranquilamente la tomaba en brazos acariciando su espalda mientras le susurraba que todo estaba bien y ella lo había hecho bien. Neji observaba aquella escena en silencio y apenas aquella chica recobraba consciencia de lo que estaba haciendo todos se dirigían a la habitación del pequeño.

[Cinco treinta de la tarde, colinas fuera de Konoha]

El pintar en ese lugar le daba mucha calma, no había distracciones y la única persona que sabía de
su estancia en aquel lugar era su pareja, Ino siempre le llevaba de almorzar y se quedaba a su lado en silencio mientras lo miraba pintar. Pero ese día alguien había llegado sin previo aviso, estaba parado en el borde del risco y admiraba el horizonte con firmeza mientras cargaba con una mochila en el hombro, ese cabello negro y esa mirada fría, Sai la conocía mejor que nadie ya que se vio obligado a ser su sombra por mucho tiempo, no, su remplazo.

— ¿Vas a dejarlos nuevamente? —continúa trazando —Esta vez… no creo que Sakura intente seguirte, posiblemente Naruto lo haga, pero… tampoco lo hará por mucho tiempo. Eso es lo que creo.

—No sé de qué hablas.

—Hay una mochila en tu hombro y esa mirada que anhela lo que hay detrás de las colinas… de no ser porque me desagradas tanto, posiblemente pintaría tu rostro en mi cuadro. Por lo melancólico de la escena.

En silencio, el chico daba media vuelta y se ponía en marcha hacia la villa, Sai sonreía divertido por
sus acciones.

— ¿Para qué regresaste a enamorarlo? Decidiste salir con él, y lo has hecho enamorarse de ti por todos los medios, pero ahora te piensas marchar sin decirle nada, de nuevo.

—No tienes…

—Si lo tengo. Naruto es mi amigo, nuestra relación no ha sido la mejor gracias a tu presencia, pero es un buen tipo… —gira la mirada hacia su rival —y no merece que le hagas esto otra vez. Siento que ha Sakura no le interesará tanto, posiblemente dirá que ya eres lo suficientemente grande como para decidir lo que harás, pero Naruto… él siempre ha sido débil a ti, si te marchas, lo vas a destrozar, otra vez.

Apretando la mandíbula sigue avanzando —No pensaba marcharme… —baja la voz agachando un poco la mirada —no lo haré más.

Sus pasos siguieron hacia la villa mientras Sai volvía a su cuadro. Sakura se encontraba agotada por las horas de tratamiento pero aún así se mantenía sentada tomando la mano del niño mientras dormitaba, su
cabeza iba y venía mientras sus ojos se abrían y cerraban, por momentos podía divisar a Reiji y por momentos el chico desaparecía mientras ella navegaba al valle de los sueños.

—Sakura —movía la pierna de la chica —está despertando.

— ¿Qué? —agitaba su cabeza parpadeando para poder ver al pequeño en cama —Yuki…

Su celeste mirada se dirigía sobre aquella muchacha que se veía agotada, así que para tranquilizarla el pequeño niño sonreía levemente, sabía que ella se encontraba preocupada por su salud, y con tan solo verlo sonreír ella podía suspirar de alivio tomando su morena mano con ambas palmas hasta ser capaz de acercarla sobre su frente.

—Oye, pregunta por su garganta.

—Oh… —eleva la mirada —Necesitamos un momento más, descansa mientras Neji viene. Él verá si los escarabajos no han destrozado el tejido que hice.

Un asentir animado y el chico simplemente dirigía la mirada al techo mostrándose completamente
tranquilo a la espera del chico Hyuga mientras que Reiji reía por la actitud de ambos y se burlaba mostrando una amplia sonrisa. Al llegar Neji se encontró con una escena muy cálida, Sakura estaba sobre la cama abrazando al pequeño por los hombros mientras lo hacía reír y jugaba con sus castaños cabellos.

—Estoy listo para revisar el tejido.

—Oh, genial. —expresaba más calmada haciendo que el pequeño tomará asiento en el borde de la
cama —No te muevas para que pueda verlo completamente ¿Bien?

Con un asentimiento el pequeño se quedaba muy tranquilo mirando de frente a aquel muchacho que encendía su Byakugan para revisarlo, la visión era clara y una sonrisa orgullosa se dibujaba sobre la cara del Hyuga dejando claro que todo había ido bien, los ojos jades de la chica se abrían llenos de ilusión, a tal grado que se cristalizaron, ella cubrió su boca de la sorpresa obteniendo una
sonrisa entusiasmada por parte del pequeñín.

— ¡Lo hiciste! —exclamaba emocionado el otro pequeño.

—Bien, bien. —exhalaba intentando controlarse —Si ha funcionado… esto solo es la mitad del camino, um… —toma la tablilla con contenido médico —necesito que me digas la reacción de los escaraba… no, no… um… —observa al niño de mayor edad —Reiji, por favor busca al padre de
Shino, tráelo aquí cuanto antes para que accedan a hacer el chequeo de los escarabajos.

— ¡Enseguida!

Neji se acerca a la joven mientras ella sujeta las mejillas del menor susurrando que todo estaría bien con él. Había pasado mucho tiempo desde la operación y lo más seguro era que los escarabajos no hicieran nada al tejido de chakra por cuestiones más médicas, Neji se acerca al oído de la joven consciente de esa idea.

—Los escarabajos no están cerca del chakra, pero creo que la razón es… que siguen afectados por el somnífero.

— ¿Qué? —analiza sus ideas y lo hace alejarse del pequeño — ¿Estás seguro? Shino dijo que posiblemente los escarabajos dormirían menos que Yuki. Ya deberían estar despiertos.

—Están dormidos.

—Bien, entonces la posibilidad de que se deshagan del chakra aun es vigente, yo… le diré.

Ese trabajo era importante para ella, muy importante. El clan Aburame llegó y se quedó el tiempo necesario para que los escarabajos despertarán, el chakra no fue tocado en dos horas más, y las charlas entre adultos dieron inicio, Sakura permanecía aun lado del clan siendo incapaz de
escuchar la charla inicial. Con la reunión terminada el jefe Shibi fue el primero en acercarse.

—Lo normal es que nuestro “Huésped” ataque cualquier tipo de chakra ajeno al nuestro, además
de alimentarse del nuestro, entonces… no deberías bajar la guardia. ¿Pensabas dejarlo hoy en el
hospital?

—Es lo más seguro señor, aquí tengo lo necesario para… —observa de reojo al niño —sinceramente no tengo idea de qué hacer si los escarabajos… ¿Sería peligroso si ellos comieran el
tejido?

—Posiblemente, nunca hemos tenido un acuerdo con esa clase de escarabajos, pero… son agresivos, y hay un chakra invasivo en el interior de su huésped, así que posiblemente comiencen a comerlo… los niños habían dicho que les comenzaron a dar ataques cuando comían más del
chakra que podían soportar, eso sería en el punto que comenzaban a herirlos corporalmente, así que si inicia y sigue sobre el chakra de Yuki… quizá la herida empeore.

Paralizada, sintió una opresión en el pecho mientras la culpa la llevaba al borde de sus lágrimas, tragó grueso en un intento de tranquilizarse, pero sabía que estaba hecha un completo lío. Shino se acercó posando la palma en el hombro de su amiga para dirigirle una mirada tranquilizadora.

—Lo estabas intentando, pase lo que pase sabes que lo estabas intentando. No has hecho nada malo contra él.

—No con intensión… —musita agachando la mirada —pero podría empeorar su situación…

—Estamos —interviene Shibi —estudiando a los escarabajos de los chicos lo mejor que podemos,
si esto sale mal podrías tomar un descanso del tratamiento mientras nosotros encontramos algo que repela a los escarabajos del nuevo tejido. Lo hiciste bien, lograste una tarea complicada, pero faltan muchas más. ¿Podrás con esto?

Su mirada dudaba —Permítame hablar con él un segundo.

Con el asentimiento de ambos hombres ella retrocedía con las manos temblorosas y el miedo
perfectamente reflejado en su rostro, comenzó a explicarle al niño la situación y en lugar de mostrarse preocupado, el pequeño terminó sonriendo y tomando la mano de ella la dirigió sobre su propio pecho.

—Graci… as.

Comenzó a señalar que no era culpa de ella, y que estaba agradecido con lo que había intentado hacer, que si ella estaba dispuesta a seguir intentando él también lo haría. Ella asentía y volvía la mirada a los Aburame.

—Si él puede con esto, yo daré todo de mí para poder. Así que le pido me permita seguir con la investigación.

—Seguro.

La noche había llegado y Sakura había permanecido al lado del muchacho durante todo el tiempo,
pero ya era hora de dormir, Shino salía de la habitación con dirección a la oficina de la joven médico para poder dormir en el sofá mientras que Reiji se quedaba en aquel lugar durmiendo en la cama disponible, y Sakura compartía cama con el pequeño Yuki acariciando sus cabellos castaños con cariño.

—Gracias por confiar tanto en mí, de verdad lo estoy intentando y quiero que puedas volver a hablar, lo haré, te lo prometo, lo haré así sea lo último que haga, existe la posibilidad y voy a ir tras ella.

Sonriente tocaba su garganta y negaba explicando que no era necesario, señalaba su pecho y
elevaba el pulgar diciendo que él se encontraba bien. Ella simplemente sonreía y lo tomaba entre sus brazos permitiéndole dormir.
Eran las dos de la madrugada cuando el pequeño niño comenzó a convulsionar entre sus brazos,
Sakura llamó por la atención del chico mayor cuanto antes y mientras él salía en busca de ayuda ella se posicionó sobre el pequeño, decidida por enviar su chakra al interior del cuerpo del niño… las convulsiones se detuvieron ante la aplicación de chakra logrando causar la completa calma de
aquella mujer, pero de pronto sintió como la tomaron del hombro alejándola del pequeño, los insectos cayeron al suelo ante el flujo roto de chakra.

— ¡No vuelvas a hacer eso! Los niños no tienen control sobre ellos así que son muy invasivos hacia cualquier fuente que les proporcione un chakra suficiente… —saca sus insectos para detener a los escarabajos —si entran en ti, no creo que vayan a salir nunca, eres un ninja médico con un control
espectacular sobre el chakra, tienes una reserva increíble… ellos se quedarán ahí.

— ¡Yuki nuevamente! —avanza con prisa.

— ¡No! —aparta a la chica —Solo hay una opción, se han vuelto locos por el chakra que les diste… necesitas dormirlos.

— ¿Qué?

—Tienes que dormirlos Sakura, ahora.

En una carrera clamaba por los sedantes que le salvarían la vida al pequeño niño que estaba bajo
su cuidado. Al volver aplicaba el suero cuanto antes y apretaba los puños deseando que el niño se repusiera de lo que estaba ocurriendo, el Hyuga llegó unas horas más tarde analizando el cuerpo herido del niño, el tejido había desaparecido por completo y los pliegues naturales habían sido
gravemente heridos. Con un suspiro observa a su amiga de frente.

— ¿Qué harás? —observa al Aburame — ¿Qué hay que hacer?

—Esto será complicado. —informa —Probaron el chakra de Sakura y parecen estar desesperados
por obtenerlo, son una especie muy peligrosa, no dejarán de perseguir tu chakra ahora que lo conocen… padre está buscando alguna sustancia que los haga apartarse del chakra, así no podrán comer el tejido que hagas, pero… creo que tendremos que hacer que Yuki permanezca dormido
hasta que encontremos el repelente de los escarabajos, también, dormirlos constantemente puede hacer que olviden el sabor de tu chakra y el peligro disminuiría…

Vencida por esas palabras sujetaba el tronco de su nariz y luego frotaba su rostro con desesperación mientras retrocedía, parecía arrepentida de haber hecho las cosas que había hecho. Pero era imposible que en ese momento aquel niño le diera algo de consuelo sobre aquello.

—Los insectos duermen tres horas luego de que Yuki despierte. —todas las miradas se centran en él —No necesitará estar dormido para siempre, podrá despertar y estar con nosotros por un tiempo… necesitas centrarte, no has hecho nada malo y él está muy agradecido con lo que estás haciendo, deja de culparte y asegúrate de hacer algo para ayudarlo.

—Yo… Reiji… —aprieta los labios intentando contener su llanto —Yo realmente…

—Te están dando información inconclusa, no tienes la suficiente información sobre los escarabajos, no es tú culpa este fallo. Ni siquiera sabias que si compartías tu chakra como cebo, los escarabajos se volverían locos. No es tú culpa.

Entre sus palabras el chico había avanzado lo suficiente como para poder darle consuelo entre sus
brazos ¿Qué estaba haciendo al comportarse tan débil? Debía buscar soluciones en lugar de perderse en su culpa, Yuki estaba esperando por ella.

—Bien. —traga grueso girando hacia el Aburame —Necesito que me des más información, necesito saber si de verdad lo están intentando y si puedo ayudarles en algo, necesito… saberlo
todo.

Baja la mirada —Será un poco complicado decirte esas cosas.

—Pongan un sello.

— ¿Qué?

—Estoy permitiendo que me pongan un sello para que toda la información que me den se borré de mi mente apenas Yuki se encuentre a salvo.

—Um… —analiza el rostro de su amiga — ¿Estás segura Sakura?

—Estoy muy segura. —vuelve la mirada al Hyuga —Vamos a interrumpir el tratamiento hasta que el repelente de los escarabajos se encuentre listo, yo te informo.

—Bien. ¿Quieres que me retiré?

—Sí, voy a… ir por más sedante y voy a darle la información a las enfermeras para que lo apliquen
si es que no estoy presente. —observa al menor — ¿Crees poder quedarte aquí mientras yo hago mis prácticas, turnos e investigación?

—Claro que sí.

Con esas palabras la chica salió cuanto antes de aquella habitación y los tres hombres en el interior se observaron para charlar un poco de la situación y dividirse cuanto antes. Las cosas estaban decididas.

[Mañana siguiente]

Con dos mochilas al hombro Sakura avanzaba por la calle principal de Konoha mientras comía una
manzana manteniendo una caminata rápida. A punto de salir del centro Sakura se ve detenida por
una persona bien conocida, ella traga el bocado de manzana y limpia su boca con el dorso de la mano para dedicarle una leve sonrisa inquieta, aunque su mirada jade viajaba sobre el camino que debía recorrer.

—Ey Sai. ¿Necesitas algo?

—Sasuke piensa marcharse de la villa, otra vez.

— ¿Qué? —mantiene la vista sobre aquel hombre — ¿Qué dijiste?

—Sasuke, va a marcharse, otra vez.

— ¿Qué dices? ¿Cómo sabes? No. ¿Por qué piensas eso?

—Ayer tenía una mochila sobre el hombro, estaba en una colina a las afuera de la villa mirando el
horizonte con… —señala sus propios ojos —esa mirada, ya sabes, esa mirada.

—Esa… —parpadea bajando el rostro —mirada… —traga grueso —esa mirada. —observa al hombre —No tengo tiempo para eso, —avanza —agradezco que me lo hayas dicho Sai, pero creo que ya es lo suficientemente mayor para saber lo que hace… —detiene su andar —si hiere a
Naruto, ya verá cómo solucionarlo, esta vez no puedo intervenir, tengo otras cosas que hacer. —avanza —será muy mi amigo, lo quiero y aprecio, pero no puedo intervenir más en su vida, es su vida.

Era una mentira, le importaba bastante y quería intervenir de la manera que le fuera posible, pero
realmente tenía una cosa importante que hacer… cuidar a ese pequeño niño era su principal prioridad. Al verla marcharse Sai exhalaba un suspiro posando las palmas sobre sus caderas, su amigo estaba muy feliz con ese chico a su lado como para que todo volviera a ser como antes.

— ¿Realmente tenía esa mirada?

Algo sorprendido deja caer sus brazos y da media vuelta percatándose del chico rubio que con una mirada cabizbaja mordía su labio inferior. Sai avanzó y suavemente sujetó el hombro de su amigo.

—No puedo estar completamente seguro ya que no lo conozco tanto como ustedes, pero… creo
que es así.

Su mirada cristalizada viajaba sobre la calle —Es… —eleva la mirada inhalando para calmarse —es
algo que Sasuke haría, aún tiene muchas cosas que pensar sobre el pasado… —sonríe tocando el
pecho de su amigo —Gracias, Sai.

—Espero todo este bien contigo Naruto.

La mirada en aquel rostro pálido era la usual, una mirada desinteresada completamente evasiva a las emociones humanas, pero… a pesar de que ese chico aun no sabía exteriorizar las emociones, Naruto sabía que se había preocupado por él. Sus brazos rodearon el torso del muchacho azabache, que a pesar de su sorpresa unía sus palmas a la espalda de su amigo para recibir tal
cálido gesto.

—Gracias por ser tan buen amigo, Sai. De verdad, muchas gracias.

—No es nada.

Una, un poco intensa sonrisa, invadía el rostro pálido de aquel muchacho causando una leve risa por parte del rubio. Al llegar a su hogar Naruto podía ver a su pareja sentado en el sofá con el antebrazo cubriendo sus ojos, solo basto que la puerta fuera cerrada para obtener la atención de
aquel joven; Sasuke sonrío al verlo y se incorporó en el sofá bajando las piernas de los cojines.

—Ya llegas.

—Sí.

No estaba interesado en ocultar sus emociones, y eso era claro para el Uchiha, podía ver la molestia y descontento que invadía a su pareja. Naruto llegó frente a él y simplemente tomó asiento en la mesa de centro mirándolo directamente a los ojos.

—Estamos saliendo —declara.

—Eso lo sé, idiota —ríe empujando la frente ajena.

—No creo que lo sepas lo suficiente, si es que, ni siquiera tienes la idea de contarme sobre aquello que te causa molestia.

La comprensión llegó como una brisa fría a través de aquella mirada traicionada, Naruto era muy
sensible sobre aquellos temas, y en especial cuando se trataba de aquel chico.

— ¿Sai, te contó?

—Sí.

—Wow. —sonríe calmado —Me sorprende que no dudes, tu mirada sigue manteniéndose…

— ¿Por qué no me dijiste nada? Yo… —traga grueso —podría haber intentado entenderte y ayudarte, estar para ti… —aprieta sus manos entre si —no me has dicho nada sobre aquel viaje de redención, no mencionas nada de tu familia, y no es que quiera obligarte a decirlo Sasuke, pero…
sigues guardando todo para ti… y eso de verdad me preocupa porque sé… —inhala elevando la vista entre un tragar grueso —que un día simplemente podrías desaparecer de mi lado otra vez.

El chico era torpe, muy bobo, completamente inútil para decir las cosas de manera clara y sin ofender a la gente, sumamente irracional al hablar, pero… en aquel momento se había comportado de una manera tan madura y había dicho todo lo que debía decir de una manera tan
calmada que, Sasuke por un segundo sintió su corazón palpitar con demasiada emoción.

—Yo no… no me iré… —tragando grueso toma las manos de aquel chico —Naruto, no me iré, lo juro. —mantiene la mirada de frente —Lo que pasa, es que… tuve un momento de locura, pensé demasiadas cosas y mis pies se dirigieron hacia allá sin percatarme. Lo juro, eso paso.

— ¿Y la mochila?

—Fui a una misión hoy, bobo. —sonríe —Te hablé de ello por la mañana, pero mientras volvía a
casa comencé a pensar de más, no lo tenía planeado, simplemente… —suspira levemente desanimado —sucedió, y fui a ese lugar sin darme cuenta.

— ¿Qué fue lo que…?

—Mi familia. Al inició estaba pensando en nosotros dos y lo bien que me siento sobre esta relación, pero… el sentimiento era como el de antes, cuando tenía a mi familia a mi lado, las ideas se revolvieron y luego vino Itachi a mi mente.

—Y fuiste ahí. Yo… —suspira —he intentado buscarlo, encontrar información de él, pero… es difícil. Al menos me dijiste eso. Y creo que, estoy de acuerdo con la idea de que vayas a buscarlo… tan solo dime si piensas marcharte, no solo desaparezcas.

Sus miradas se encuentran y Sasuke se aproxima hasta rodear a aquel chico entre sus brazos y
susurrarle que trataría de decirle las cosas.