Narrador omnisciente

Las llamadas de Diana al número de Akko no eran más que canceladas, no la podía culpar después de todo.

Dejó de insistir al ya tener un límite en su teléfono.

Narra Diana

¿Qué debería hacer ahora? Hubiera corrido tras ella, pero solo hubiera sido más doloroso...

Narrador omnisciente

Un par de horas habían transcurrido, la joven Cavendish seguía con la incertidumbre sobre el estado de la castaña, los días habían sido nublosos anteriormente y ese día no sería la excepción, no pasó mucho para que la lluvia empezára a caer.

El timbre se hizo sonar, Amanda abrió la puerta de su departamento, encontrándose a la nipona entre lágrimas y escurriendo por la lluvia.

Amanda: Akko...

Akko: Y-Yo sé lo que me dijiste...sobre tú advertencia, pero Sucy y Lotte no se encontraban en casa y me dijeron que viniera aquí, por eso pude conseguir tú dirección.... Ahora entiendo que solo deseabas protegerme... lo siento...

Amanda la miró por unos segundos antes de soltar un leve suspiro.

Amanda: Sabía que Diana tendría que decirte la verdad, pero no pensé que sucedería tan pronto, pasa por favor.

La joven O'neill le ofreció ropa limpia, toalla y cobijas, pasado un rato ambas se encontraban en la pequeña sala.

Akko: No sé cómo agradecerte...

Amanda: Descuida, eres mí amiga, no podía dejarte a tú suerte después de que Lotte me llamara y dijera la situación.

Akko: Así que ya lo sabías antes de que llegara.

Amanda: Así es, les dije que no se preocuparan.

Akko: Gracias...

Amanda: Te ves terrible y no lo digo porque hace un momento estabas completamente empapada y temblando.

Akko: Tenías razón sobre ella...Je, ni siquiera puedo pronunciar su nombre...

Amanda: ...No quiero adelantarme, pero ¿Eso significa que pudiste recuperar tus recuerdos?

Akko: No, no del todo... solo algunos, los negativos, vaya suerte la mía.

Amanda: Parece que llamé a la persona indicada para ésto.

Akko: ¿Qué?

Amanda: Se supone que te vería en la casa de Lotte y Sucy, pero dadas las circunstancias, se encontrarán aquí.

Narrador omnisciente

Diana seguía viendo su teléfono, intentó marcar una vez más, escuchando una grabadora.

Diana: Tal vez ya me bloqueó... No la culpo...

Dejó el dispositivo a un lado y rascó algo frustrada su cabeza, una vibración se hizo presente y no dudo en tomar de inmediato el teléfono sin siquiera ver el número.

Diana: ¿Akko?

Sucy: No, soy Sucy, Lotte y yo estamos afuera de la casa, ¿Nos permites pasar?

Diana: Pierden su tiempo...ella no está aquí.

Sucy: Venimos a buscarte a ti, Diana.

La rubia colgó y se decidió a abrirle al par de chicas que esperaban con una sombrilla para dejarlas pasar.

Diana: ¿De qué quieren hablar? No es un buen momento.

Sucy: Es lo que puedo notar.

Lotte: Sucy, ésto es serio.

Sucy: Bien bien.

Diana: ¿Saben algo de Akko?

Lotte: Está con Amanda, aunque no podría decirte que está del todo bien por su voz en las llamadas.

Diana: La verdad no sé si hice lo correcto.

Sucy: Lo hiciste al decirle la verdad.

Diana: Pero duele...

Lotte: Era inevitable que Akko saliera lastimada, empeoró el hecho de que ella estuviera ansiosa por saber que sus sentimientos hacia ti iban de tiempo atrás y que ya habían estado en una relación.

La ojiazul se inclino para atrás sosteniendo ligeramente su cabeza.

Diana: Fuí demasiado directa cuando se lo dije, pero sentí que era la única forma que ella entendiera la situación. Pero el solo pensar que en éste momento está sufriendo por mí culpa otra vez...me hace sentir una basura.

Sucy: Por eso estamos aquí, sabíamos que tampoco lo tomarías bien.

Diana: Deberían estar con ella, no conmigo.

Lotte: No eres la Diana de antes, no la que le importó poco dejar a Akko atrás.

La rubia no pudo evitar soltar algunas lágrimas, evitando la mirada de las chicas.

Sucy: Calma, eso nos demuestra que de verdad cambiaste

Lotte: Sucy tiene razón.

Diana: ¿De qué sirve pensar en eso cuando las cosas están mal?

La joven Cavendish se levantó algo enojada limpiando sus lágrimas.

Lotte: En reconocer tus errores y aprender de ellos.

Mientras tanto, Amanda revisaba un mensaje de notificación en su teléfono llamando la atención de la castaña.

Amanda: Justo a tiempo.

Akko: ¿A quién esperamos?

Amanda: Ya la verás.

Abrió la puerta mostrando a una mujer de cabello largo y rojizo.

Akko pudo jurar que la había visto en algún lado o tal vez eran pequeños fragmentos de recuerdos que aún no tenía claros.

Amanda: Akko, ella es Chariot du Nord, fue nuestra maestra en diferentes clases de la universidad, además de ser tú orientadora.

Akko: ¿Orientadora?...

Amanda: Así es, digamos que ambas éramos un poco rebeldes y despreocupadas con las clases en los primeros meses, más yo para ser sincera.

Akko: Pero...¿Para qué se encuentra aquí?

Chariot: Bueno, además de maestra, soy terapeuta.

Akko: Oh, genial... ¿Es enserio Amanda?

Amanda: Muy enserio.

Akko: ¿Qué? ¿Quieres que me vuelva a poner a llorar y hable sobre mis sentimientos delante de ella?

Amanda: Intento ayudar ¿Si?

Akko: Parece que no lo haces bien.

Chariot: Akko, pude notar que me viste algo sorprendida, ¿Tuviste algún recuerdo mío?

Akko: No lo llamaría recuerdo, te iba preguntar cómo sabías lo que me pasó, pero veo que mis amigas ya se dieron la molestia de contarte todo.

Chariot: Estoy aquí para que puedas tener alguien con quién desahogarte.

Akko: Gracias, pero llegó tarde, ya le conté todo a Amanda, si desea saber más, pregunteselo a ella.

Chariot: Así no funciona, tenemos que hablar en privado solo nosotras dos.

Akko: No me trate como uno de sus tantos pacientes que ha de tener.

Chariot: Debo imaginar que esa ira no solo de debe por mí, sino a los acontecimientos que pasaron hace un par de horas.

Akko: No quiero hablar de eso.

Apretó ligeramente sus puños, no deseaba mencionar a la rubia o si quiera recordarla.

Chariot: Akko-

Akko: ¡Basta! Déjenme en paz, solo quiero volver a esa maldita cama de hospital y olvidar todo ésto ¡Quiero olvidarla una vez más!

¡Fin del cap! Una disculpa por la tardanza.

¡Agradezco el apoyo y sus estrellitas!

¿Qué esperan para el próximo capítulo?

Por cierto, ¡Mil gracias por hacer que está historia esté en #1 de Diana Cavendish! Se les quiere y agradece mucho