Harry.

Durante las diez horas y un poco más de vuelo, no deje de pensar en lo que había pasado con Olivia cuando deje Londres, todo paso tan rápido, asumo toda la responsabilidad, yo y mi bocotá al recalcarle a ella que Kendall es mi novia, aunque es verdad, se supone que ambos estábamos pasando un tiempo en el que solo estábamos los dos, éramos solo Olivia y Harry, nadie más, trate de despejar mi mente viendo cualquier cosa en el avión, pero no pude, me fui mirando todo el tiempo la ventana, pensando en todo lo que había pasado y de que manera podría enmendar mi gran error.

Cuando estaba a punto de tomar el vuelo hacia Los Ángeles, le mande un mensaje a Olivia, pero no recibí respuesta, espero que cuando llegue a tierra americana y vuelva a activar el internet haya un mensaje de su parte.

Luego de tanto pensar, caí rendidamente en los brazos de Morfeo.

Olivia.

Decidí apagar mi teléfono, no quería recibir ni llamada ni mensajes de nadie, solo quería estar sola en mi departamento, quería enfocar mi día a todo lo relacionado conmigo, leer, adelantar un poco de los asuntos del hospital, pero quería estar sola.

Sin Harry Styles en mi vida.

Aunque dudo que me haya escrito o intentado llamar, ya que debe estar en estos momentos en un vuelo comercial con destino a Los Ángeles a ver como esta su novia.

Debo confesar que siento celos, desearía estar con Harry en estos momentos, pero simplemente parece que todo nos está separando, a lo mejor el destino no nos quiero juntos.

Y si sigue así, creo que empezare a hacerle caso.

Decidí hacer lo típico de mis días de soledad, un buen libro junto con una taza de café y unos chocolates, en el balcón de mi departamento que da con una hermosa vista de Londres y una manta para taparme del frio.

Creo que extrañaba esos días de tranquilidad para mí misma.

📍 Los Ángeles, California

Harry.

Llegue aproximadamente a las dos de la tarde de Los Ángeles, no pensaba ir a la casa que tengo aquí, así que solo tome un taxi con dirección al hospital en donde esta Kendall, solo espero que este bien.

Llegue rápidamente, le pague al taxista y baje mi pequeño bolso y camine por la recepción con el fin de preguntarle donde estaba mi novia.

—   Buenas Tardes – salude - ¿La paciente Kendall Jenner?

—   Habitación 406, cuarto piso – me responde la enfermera de mala manera.

—   Muchas Gracias.

Tome al ascensor para que me llevara directamente al cuarto piso en donde esta Kendall, camine directo hacia la habitación que me dijo aquella enfermera y entre sin tocar.

—   ¡Amor! – exclamo Kendall con una sonrisa.

—   Vine a penas supe – deje mi bolso a un costado para poder acercarme a ella - ¿Cómo estás? – le pregunto preocupado.

—   Me duele un poco el cuerpo, pero solo eso. – se encogió de hombros quitándole importancia.

—   ¿solo eso? – pregunto examinándola.

—   Relájate tontito – dice cariñosamente – Porque no me abrazas y besas, mejor.

—   Mejor no – niego y ella me mira extrañada – No quiero romperte un hueso, debes estar débil, mejor quédate acostada.

—   ¿Te quedaras conmigo? – me pregunta mientras me hace caso.

—   Sabes que no puedo quedarme por muchos días, como máximo me puedo quedar esta noche, sabes que el viernes tengo la fiesta de lanzamiento del disco y debo viajar otras diez horas – me excuso, aunque por una parte es verdad, deseo volver rápidamente para hablar con Olivia, la historia se estaba repitiendo, la vez que terminamos nuestra relación fue por un malentendido y falta de comunicación, no quiero que la historia se repita otra vez.

—   Entonces viajaremos juntos – dice feliz mientras entrelaza su mano con la mía, me remuevo incómodo.

—   Creo que no – vuelvo a excusarme – Es mejor que te quedes aquí para que te recuperes mejor.

—   Pero, yo quiero acompañarte – hace un puchero.

—   Luego te lo recompensare – le guiño un ojo.

—   Podemos venir a México – propone.

—   Unas pequeñas vacaciones, seria excelente – digo besando su mano.

—   Te amo – me dice y yo suspiro.

—   Mejor descansa – digo besando su frente para que luego nos concentremos en mirar una película que se está reproduciendo en la televisión.

No quería besarla, sabía que si la llegaba a besar la primera cosa que se me iba a venir a la cabeza era Olivia, y las iba a empezar a comparar, aunque los suaves labios de Oli son incomparables al igual que sus besos, con Kendall son más superficiales.

📍 Londres, Reino Unido.

Olivia.

Creo que esto me está haciendo bien, la tranquilidad que me brinda mi hogar es verdaderamente maravilloso, creo que voy a querer más días así, desconectada del mundo, aunque sea por un par de horas, volví a prender mi teléfono, porque recordé que me pueden llamar en cualquier momento del hospital en caso de emergencia.

Tenía como tres llamadas perdidas y cinco mensajes.

Donde tres mensajes eran de las típicas promociones que te llegan al celular y los otros dos eran de Harry, lo abrí, la curiosidad me mato.

Creo que todo esto fue un malentendido, debemos hablarlo, prometo ir a verte apenas llegue a Londres el domingo.

-H❤️

Se me olvido decirte algo en el mensaje anterior.

Te amo.

Espero que nunca lo olvides.

-H ❤️

¡Maldito Harry!, a veces simplemente quisiera odiarte, pero no puedo evitar el sentimiento que tengo en mi corazón y es que siendo sincera conmigo misma lo único que siento por ti en estos momentos es amor y dudo que se vaya de un día para otro, él es irremplazable.

Decidí solo responderle un:

Ok.

-O

Un poco fría, lo sé, pero es para que note que el enojo no se me va a pasar de un día para otro.

Ahora reviso las llamadas, las tres proveniente del mismo número, decido devolverle la llamada, no quiero quedarme con la duda.

Al tercer tono, contestan.

—   Hola, tengo tres llamadas perdidas de este número, ¿puedo saber que necesitan?

—   ¿Doctora Golden? – pregunta una voz llorosa a través de la línea, por lo que distingo es una mujer.

—   Si, ¿Quién es? – pregunto.

—   Soy Margot la madre de Samantha. – dice sollozando.

—   ¿Qué le paso a Sam? – pregunto asustada.

—   Decayó, vamos camino al hospital, está muy débil.

—   Bien – digo nerviosa – Apenas lleguen a urgencias, díganle que vienen de parte de la Doctora Golden y exíjale que la lleven a la primera habitación que encuentren, yo voy saliendo.

—   Está bien.

—   ¿Margot? – pregunto.

—   ¿Sí?

—   Todo va a estar bien, Samantha es una luchadora. – trato de animarla. – Nos vemos allá.

Cuelgo la llamada, para luego correr hacia mi habitación para cambiarme de ropa y luego guardar algunas cosas esenciales en mi cartera, como algunos implementos y el resto de cosas personales.

Salgo de mi casa rápidamente, para tomar el ascensor casi corriendo rogando en mi mente que se demorara poco en llegar al estacionamiento.

Cuando llego subo rápidamente a mi auto, inhalo fuertemente para calmarme a mí misma, pero en un segundo me derrumbe en mi propio asiento, sollozo fuerte no quiero imaginarme a Samantha, la conozco de pequeña, no quiero que nada malo le pase, sé que es fuerte y que va a salir de esta.

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Solo les quiero preguntar una cosa:

¿Que les pareció el capitulo?

Pobre Sam 😭
Esperamos que no le pase nada malo 🤞🏼

Espero sus votos y comentarios 😘

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