Olivia.

¡Al fin es viernes!, hoy daré mi discurso, mi tan preciado momento ha llegado, decir que no estoy nerviosa, sería una mentira del tamaño de un barco, pero lo que si estoy es ansiosa, quiero leer y poder expresar todo lo que tengo a todos los doctores, hablar de mi pequeña paciente Samantha que sin duda cambio mi vida en general.

A las diez de la mañana seria mi presentación, siendo las nueve y cincuenta y cinco, ya esto lista detrás del escenario para realizar el último discurso de esta convención que ha sido un éxito.

—   Doctores y Doctoras, tengo el honor de presentarles a la doctora Olivia Golden, ella con tan solo veinticuatro años ha logrado escalar mucho en su carrera convirtiéndose en la graduada con mejores calificaciones y reconocida por la universidad, ahora trabaja en el Hospital Central de Londres en el área de la pediatría, su director la define como una persona que tiene vocación y que ama lo que hace. La invito a que pase que nos cuente más sobre su experiencia. – todos aplauden y yo decido salir.

—   Buenos Días doctores y doctoras alrededor del continente, hoy me ha tocado una difícil labor, ser la persona que cierre esta convención, como decía la organizadora de este evento, si, tengo veinticuatro años y estoy trabajando en lo que más amo, los niños, esas personas que son las más indefensas e inocentes del mundo, ellos son nuestro futuro, pero los niños también sufren, por eso mi discurso va más allá de mi experiencia en la universidad, va en ella. – la fotografía de Samantha se proyecta en la pantalla. – Ella es Samantha Winston, tiene ocho años y tiene una falla en su riñón, lo que significa que tiene que realizarse diálisis tres veces a la semana, si bien no soy quien administra su tratamiento en sí, soy la que monitorea como esta su organismo, ella me ha enseñado bastante cosas que hacen que me enamore aún más de mi carrera y que no me arrepiento de haberla elegido, la primera lección que me dio ella, que no importa si tu día es gris siempre habrá algo o alguien que le ponga color a tu día, no hay días malos sino que tu solo no sabes aprovecharlos, ella lleva aproximadamente tres años esperando un trasplante renal, hasta el momento no ha llegado ninguno que reúna las condiciones que ella necesita, pero aquí está ahora y ella me ha demostrado que seguirá luchando toda su vida con tal de estar bien ella y su familia, de hecho hace unos días le cumplí uno de los tantos sueños que tiene, conoció a su cantante favorito de la banda del momento, Harry Styles, ese día no vi una sonrisa tan sincera como la tenía ella, simplemente estaba en las nubes por conocer a la persona que ella dice que es su novio – todos ríen incluyéndome – Ella me ha enseñado varias cosas en la vida, me ha aconsejado, hemos llorado, pero la mayor parte de nuestros días reímos lo suficiente para alegrarnos el día mutuamente, ella es Samantha Winston, la razón por la cual yo estudie medicina y por la cual ahora estoy aquí parada hablándole a ustedes, es mi vocación y no me arrepiento de haber tomado una tan buena decisión como la que tome hace cinco años atrás. Muchas Gracias. – termino mi discurso, todos los oyentes me aplauden, yo sonrió agradecida.

—   Muchas Gracias doctora Golden por esas tan bellas palabras, gente como usted es el futuro de la medicina. Queremos decirles a todos que nos espera un coctel de despedida en el salón magno, muchas gracias por haber asistido a esta convención, nos vemos el otro año.

Todos caminamos hacia el salón donde está preparado todo para hacer nuestro coctel de despedida.

—   Debo decir que estoy impresionado, Golden – dice Alexander llegando a mi lado.

—   Muchas Gracias Lagerfeld – le sonrió – Se me olvidó mencionarte que la pase muy bien en la cena de la otra noche.

—   Yo también.

Alexander Lagerfeld, es un amigo que yo tuve cuando íbamos a la universidad, luego de graduarnos él se vino a Paris a trabajar mientras que yo me quedé en Londres, éramos muy unidos en nuestra época universitaria pero fuimos perdiendo el contacto luego de que la distancia hiciera lo suyo, nunca pensé que me lo iba a encontrar aquí en la cafetería y que luego de la cena me dijera que también asistía a esta convención, fue emocionante por fin tener una persona con la que tú puedas hablar y que además hable tú mismo idioma, es gratificante todo los aplausos que recibí gracias a mi discurso, hoy sin duda es un buen inicio de día.

—   Buenos días Doctores. – dice un caballero de como setenta años.

—   Buenos días – decimos con Alexander al unísono.

—   Señorita Golden déjeme decirle que estoy muy conmovido con su discurso, no dudo de sus capacidades, se nota que usted es una buena doctora y que tiene vocación, por eso quería ofrecerle un puesto de trabajo aquí en Paris.

—   ¿Cómo? – pregunto sorprendida.

—   Así como escucho, un puesto de trabajo en el Paris Community Hospital, tenga mi tarjeta. – me tiene un papelito. – Llámeme si acepta nuestra oferta.

—   Lo hare, muchas gracias. – digo sin dejar de sorprenderme - ¡No puedo creerlo! – susurro para mí misma.

—   ¡Felicidades Olivia! – dice Alexander abrazándome.

—   Es maravilloso, no puedo creerlo, tengo que pensarlo. – digo

—   Yo que tu digo que si de inmediato.

—   No puedo, hay muchas personas que me lo impedirán. – sonrió haciendo una mueca.

—   ¿Quiénes?

—   Mis pacientes, no puedo dejarlos, así como así.

—   Solo medítalo, no es malo tener esta gran oportunidad como opción.

—   Tienes razón – concuerdo con el - ¿Vas a ir a la fiesta de esta noche? – pregunto cambiando de tema.

—   Si, ¿tu?

—   Claro – digo riendo – sabes que una fiesta sin mí no es fiesta.

—   Que buen chiste Golden – dice riendo.

Harry.

Seis de la tarde aquí en Paris y con Kendall estábamos posando frente a las cámaras para las revistas de Francia y del mundo, ambos estábamos seguros de que esta era nuestra gran primera exposición oficial para la prensa, ambos quisimos hacer esto, teníamos que enfrentarlos alguna vez en la vida.

Kendall lucia perfecta, ese vestido blanco hacia ver sus piernas aún más largas, yo estaba con un traje azul marino de terciopelo, diez segundos más tarde yo ya me encontraba dentro del salón donde se iba a desarrollar este desfile mientras que Kendall se estaba preparado con su maquillaje y vestuario.

A mi lado tenia a personas que era gran influyente en el mundo de la moda.

El show empezaba en cinco minutos, en cinco minutos iba a estar toda la prensa grabando y fotografiando el momento exacto en que saliera Kendall a la pasarela y mis ojos mirándola a ella.

El momento llego, las luces se apagaron, los focos se centraron en la pasarela, la música empezó a sonar dando inicio al show, las primeras modelos se hicieron presente en la pasarela, debo decir que Chanel siempre ha sabido sorprender en la moda.

Mi novia salió en el quinto lugar luciendo un vestido largo negro con aplicaciones plateadas, con un peinado como el de la princesa Leia de Star Wars se veía hermosa.

Aplaudí apenas ella salió logrando que ella sonriera un poco, cuando paso por el frente mío y le guiñe un ojo, me sentía orgulloso de ella.

[***]

—   Aun no entiendo que hacemos aquí – dice Olivia extrañada mirando a su amigo Alexander.

—   Mi tío me escribió, quiere que lo ayude en algo. – dice el concentrado mostrando un pase, dejándonos entrar.

—   ¿Por qué estamos en este lado del desfile? – pregunto Olivia, pero no recibió respuesta de Alex.

—   Digamos que mi tío trabaja en este lado del desfile. – dice Alex rascándose su nuca.

—   ¿ok? – dice dudosa de creerle.

—   ¡Hasta que llegaste! – exclama el mismísimo diseñador de Chanel.

—   Disculpa – dice Alexander llegando a su lado, Olivia estaba lo demasiado choqueada para creer lo que estaba viendo. – Aquí tienes – le tendió una bolsa con un contenido que era crucial para el diseñador.

—   ¿Chanel es tu tío? – pregunta Olivia sorprendida.

—   Karl Lagerfeld es mi tío – dice Alex riendo por la expresión que tiene Olivia.

—   ¿Quién? – ella frunce el ceño

—   El diseñador de la marca Chanel, se llama Karl Lagerfeld, más conocido para mí, mi tío, pero para el mundo es "Chanel" – hace un movimiento con sus manos aludiendo a que brillaba.

—   Sorprendente. – dice Olivia maravillada, mirando cómo era el mundo del modelaje.

—   Gracias, sobrino – Dice el diseñador arreglando los últimos detalles de una de sus modelos. - ¿Cómo te fue en tu convención? – pregunta ahora más descansado.

—   Bien, de hecho, termino hoy – dice el chico metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón.

—   Perfecto – dice el sonriendo - ¿Y no me vas a presentar quien es esta hermosa chica que está acompañándote? – Alex sonríe y Olivia solo sonríe tímidamente.

—   Ella es Olivia Golden, doctora del área de pediatría y mi amiga de la universidad de Londres.

—   Lindo nombre para tan bella mujer, un gusto querida. – dice el tomando respetuosamente la mano de Olivia y besa el dorso de su mano.

—   Muchas Gracias.

—   Creo que es tu turno de salir tío – dice Alex.

—   Esta vez lo haremos distinto. – dice el famoso diseñador. - ¿Me acompañan? – dice mirando a Olivia y a su sobrino.

—   No – dice Olivia, a ella nunca le gustaron los flashes en su rostro – Miren como estoy vestida.

—   Eso se arregla en unos segundos – dice el diseñador chasqueando sus dedos y aparece rápidamente con un vestido retro en sus manos. – Tienes cinco segundos para cambiarte tu belleza natural en tu rostro iluminara más el vestido. – dice ahora mirando a Alex – Ponte solo esta chaqueta y estos zapatos – dice ahora su sobrino cambiándose rápidamente. - ¿Listos? – le pregunta Karl a Olivia y Alexander, los chicos asienten riendo.

La música da el fin del desfile, es el momento en donde salen todas las modelos para luego en un final salga el diseñador con una de sus modelos favoritas, es una tradición en el mundo de la moda, Harry aplaudía mientras ve a Kendall salir con otra de esos vestuarios que ocupo esta noche.

Finalmente sale el famoso diseñador Chanel y todos los espectadores se ponen de pie para aplaudirlo, todas las cámaras están expectantes del diseñador y quien será la modelo elegida, sale Chanel poniéndose en medio de la pasarela, estira su mano izquierda señalando a un chico que saluda con su mano, ahora estira su brazo derecho invitando a otra persona, una Olivia sale tímidamente de su rincón, dejando a Harry totalmente perpetuo, ahora los tres se disponen a caminar en medio de las modelos y cuando llegan a la punta de la pasarela, los tres sonríen, una Olivia sonríe tímidamente, ella no se había percatado que su ex novio estaba presente ahí, porque se dedicó a mirar un punto fijo para luego simplemente sonreír.

Una persona que parece ser un asistente técnico le pasa un micrófono al diseñador para que diga unas palabras.

—   Muchas gracias primero que todo a las personas que asistieron a mi nueva colección de primavera-verano 2015, quiero agradecer personalmente a mi sobrino Alexander y a su amiga la Doctora Olivia Golden, para que vean que una doctora también se puede ver perfecta, ella está vistiendo un exclusivo diseño de mi próxima colección.

Todos los flashes se van directamente a Olivia, ella solo sonríe, pero se siente un poco invadida y así lo sabe Harry Styles, a ella nunca le ha gustado la prensa y sus cámaras, saldría en busca de su ayuda, pero eso sería aún más cámaras apuntándolos a ellos, y eso es algo que prefería ignorar.

El fin del desfile se dio cuando las luces se prendieron nuevamente y todos los espectadores y la prensa salieron por la puerta principal.

Harry solo vio una sombra parecida a Olivia dejar rápidamente el lugar, pero no podía ir a ver cómo estaba luego de tan grande exposición, tenía que quedarse a esperar a su actual novia.

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Una pequeña sorpresa de la moda para Olivia.
¿Ustedes creen que Harry debería haber ido tras Olivia y haber dejado a su actual novia botada?
Espero sus respuestas.
Besos.
Bestylesgirl. 👸

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