dia 2: OS de tu pareja favorita.

(Flarrow) (Olivarry)

Barry

Oliver

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Entrábamos en una relación muy estable. ¡ES INCREÍBLE!

Antes tenía miedo de lo que Oliver me diría cuando le confesara mi amor por el, ¡pero no fue necesario!

No tuve que esperar a que me entrará el valor porque, ¡el fue quien me declaró su amor!

Cuando me lo dijo, no me lo podía creer, me sentía el hombre más afortunado; feliz y enamorado del mundo entero.

Estábamos en la habitación de Oliver en la mansión Queen, recién despertando, algo doloridos, después de la intensa noche. Siento que solo dormí unos minutos.

Me habían contado que Oliver podía ser intenso, (cosa que ya no me gustaba oír de otras personas) pero nunca previnieron que podía ser TAN INTENSO.

-hola, cariño. - dijo Oliver con esa ronca voz que me vuelve loco - ¿Cómo dormiste?

- De maravilla - conteste mientras me tomaba entre sus brazos - ¿Qué tal tú?

- Perfecto - me gire y le entregue un beso lleno de cariño y amor. Como te amo Oliver -  ¿Tienes hambre?

- Si, eso creo.

-Vamos a desayunar.

Y se levantó de la cama, entregadome una vista que no dejaba nada que desear.

Comenzamos a vestirnos y bajamos a la cocina.  No nos detuvimos por nada, ya que la mansión Queen estaba completamente deshabitada (a excepción de nosotros dos, obviamente).

Oliver preparo huevo,  mientras yo servía jugo y café, y preparaba pan tostado. Cuando nos sentamos a la mesa, compartimos nuestros alimentos llevando una porción de comida a la boca del otro. Todo iba de maravilla.

De pronto sonó el teléfono de Oliver.
Contestó de inmediato lanzando una maldición por lo bajo.

-hola. -  su rostro dibujo una expresión de tristeza, miedo, pánico...  Algo que no sabría explicar.

-...

- Si,  seguro. - se levantó de la mesa y yo lo seguí preocupado por que seria lo que estaba pasando.

- Así será. Hasta entonces.

- ¿Qué sucede? - pregunte cuando por fin volteó a verme -  ¿todo esta bien?

- Si,  perfecto. - dijo con una amplia sonrisa -  solo que me necesitan en la oficina.

- ¿Quieres que te acompañe?

-  Eso quisiera.  Pero tengo que ir solo,  además, tu tienes cosas que hacer.

- Si,  pero soy el hombre más rápido del mundo,  ¿lo olvidas?

Sonrió tristemente y me dijo <<Te amo>> para que después de cambiarse,  partiera a la oficina y desapareciera de mi vida, para siempre.