-¡Eren!- tomó la mano del niño-¡Cálmate!-

-¡Pero Armin me está esperando!- jalaba la mano de su hermano mayor.

-Jejeje- su madre le sacaba fotografías- cariño, por favor... Déjame sacarte unas cuantas fotos, ¿Si?-

-Mmh- hizo un puchero- esta bien-

-Bien, bien- le sonrió- quiero una foto de ustedes dos en la entrada de la escuela-

Los hermanos se quedaron en la entrada, la castaña se alejó un poco para mostrar el nombre de la escuela.

Escuela privada "Wings of Liberty".

-Sonrian-

El par sonrió, mostrando sus destaduras.

-¡Que lindo!- gritó la mujer-¡Grisha!- le pasó la cámara a su esposo- una con los chicos, ¿Si? Después tu-

-Esta bien, está bien-

Se situó entre los hermanos, los tres sonrieron para la fotografía.

Luego el padre se tomó fotos con sus hijos.

-Mamá- el castaño frunció levemente el ceño- Haces esto todos los años-

-Lo sé, pero me gusta que sea una tradición- se agachó- Eren- pasó su mano por el cabello del pequeño- no te despeines-

-Pero no me gusta de esa forma- la miró con un poco de molestia- parece que me lamió una vaca-

-Haa- suspiró- está bien- tomó el rostro de su hijo entre las manos- espero que te vaya muy bien en tu primer día, cariño- le besó varias veces el rostro.

-¡M-mamá!- gritó-¡Me estás manchando con tu labial!-

-Es amor de mami, amor de mami- le dió un beso en la frente y lo soltó.

El pequeño trataba de quitarse el labial de su madre, pero era imposible.

-Nos vemos a las una, Eren- agitó su mano.

-Buena suerte, muchachos- se despedía el padre.

-¡Comance todo lo que les prepare!-

-¡Vamos, Zeke!- tomó la mano del rubio y entró a su escuela.

-¡Eren!¡No corras!- esquivaba a las personas, ya que su hermano menor no le importaba nada.

-¡Ah!- sonrío ampliamente-¡Ahí está!- lo apuntó.

A lo lejos se podía ver una cabellera rubia en una fila.

Eren se despidió de su hermano mayor y se acercó a su mejor amigo.

-¡Armin!- gritó alegre.

-¡Nnh!- se sorprendió por aquel gritó- E-eren- lo miró- jeje- le sonrió.

-Estamos en la misma clase-

-Sip, estoy tan feliz- mostró su mochila.

-¡Jaja!- mostró la suya.

Ambos tenían mochilas de superhéroes.

Comenzaron a hablar de todo lo que hicieron en sus vacaciones, hasta que se escuchó cuando el director comenzaba a hablar.

Eren se quedó en silencio.

Miró la fila de las niñas.

Pero encontró algo raro.

De por sí, en esa gran escuela la mayoría de los estudiantes están casi toda su ciclo educacional ahí.

Desde el kinder, hasta preparatoria. Aunque estaba separada por secciones, aunque en los actos de bienvenida y cosas importantes, se reunían todos.

En lo último de la fila, había una niña de cabello oscuro y muy pálida.

Ella estaba temblando y tenía la mirada fija al piso.

-¿Quien es ella?- preguntó el castaño.

-¿Mmh?- Armin miró- no sé, creo que es nueva- susurró.

Eren asintió.

Decidió prestarle atención a las palabras del director y cuando terminó, cada clase fue a su sala.

-¡Chicos!- gritó el rubio a su grupo de amigos.

-¡Armin!- se juntaron para hablar.

-Lo pasamos muy bien en las vacaciones- El niño sonrío- Aunque en Costa Rica hacía un poco de calor, pero era muy bonito-

-Con mis papás fuimos a Alaska- cruzó sus brazos- hacía mucho frío, pero vimos a mis abuelitos-

-¿Y tú, Eren?- le pregunto el niño con pecas.

Pero el castaño sólo miraba a la niña de cabello oscuro, la cual estaba sentada sola.

Nadie se le acercaba, ni siquiera otras niñas.

-¿Eren?- Armin le tocó el brazo.

-¿Eh?- lo miró- lo siento, ¿Que decían?-

-¿Dónde fuiste?-Preguntó nuevamente el pecoso.

-Alemania- contesto- A ver a mis abuelos- se puso de pie- espérenme- se alejó de sus amigos.

-¿Que le pasa?- le preguntaron a Armin, pero el rubio no supo que responder.

Miraba fijamente la mesa, soltó un suspiro.

-Hola-

Escuchó una voz y vio unas manos sobre su mesa.

Elevó levemente su mirada y se encontró con unos grandes ojos verdes, que la miraban.

-¿Eh?- pestañeo varias veces.

-Eres nueva, ¿No?- le sonrió.

-S-si...- asintió- s-soy nueva...- susurró.

Un pequeño sonrojó apareció en sus mejillas, estaba avergonzada.

-Me llamo Eren Jeager- se sentó en una silla- estoy aquí desde el kinder...- ladeó su cabeza- tengo diez años, ¿Y tú?¿Cuál es tu nombre?-

-M-mi nombre...- hizo un pequeño puchero- Me... Me llamo Mikasa Ackerman-

-¿Mikasa?- preguntó curioso.

-Si... Es extraño.. pero no te burles-

-¿Burlarme?¿Por qué? Es un nombre muy bonito-

-La mayoría de los niños que he conocido se burlan de mi nombre... Porque es extranjero, oriental-

-¡No les hagas caso a esos bobos!- sonrío ampliamente- tu nombre es muy bonito, Mikasa-

-Nnh...- trató de sonreír- gracias... Y tengo tu misma edad-

-Genial, ¿Quieres pasar los recesos con nosotros, Mikasa?- apuntó su grupito de amigos.

-Pero todos son niños...-

-¿Y eso que? Estoy seguro que todos te van a agradar mucho, incluso Jean- le susurró- aunque tiene cara de caballo, es un niño-

-¡Ppss!- cubrió su boca con la mano, pero no pudo contener la risa.

Comenzó a reír por lo que su nuevo amigo le había dicho.

Ninguno de los dos sabía que desde ese momento, se iban a volver muy íntimos amigos.