─ Hola, vino temprano hoy, licenciada Roseanne. ─ Saludó al oficial Park.

─ Hola, Oficial. Llameme Rosé. ─ Saludó la chica algo tímida. Aunque en su trabajo estaba acostumbrada a estar rodeada de Alfas, se sentía algo expuesta al saber que en la academia se encontraba su Alfa predestinado.

Le parecía demasiado injusto que éste ya tuviera una pareja, su Omega se sintió herido por eso. Había hablado sobre ellos con su abuela y la mujer le aconsejó no rendirse con su Alfa. La luna los había unido de nuevo por alguna razón.

Ella lo creía y no le importaba tener que separar al Alfa de la o el Omega que lo estuviera reteniendo.

Se sentía en su derecho y sabía que todos la apoyarían.

─ ¿A qué se debe su temprana visita? ─ Y era el momento de comprobarlo.

─ Lamento hablarle del tema con tanta confianza, oficial, pero me parece que he encontrado a mi Alfa predestinado. ─ Comentó ella aún con sus mejillas sonrojadas.

Hyungsik la miró sorprendido, él nunca había conocido a una pareja predestinada, aunque claro que sabía sobre la leyenda y cómo ésta a veces se cumplía.

─ ¿De verdad? ─ Preguntó feliz por la chica, ella asintió.

─ Pero he venido a hablar con él, para decirle que no voy a rendirme. Al parecer tiene pareja. ─ Comentó ella.

Hyungsik frunció el ceño, diablos si él conociera a su pareja predestinada todos sus problemas se resolverían. Tal vez dejaría de pensar en Hoseok... Al menos eso pensaba. Pues ahora que sabía que Hoseok tenía una pareja Alfa, él se sentía mal. Él no había sido suficiente para hacer a Hoseok enamorarse de él. Pero tampoco era tan inmaduro como para inculpar a Jungkook por ello. Simplemente las cosas habían pasado así.

─ ¿Quieres contarme quién es tu Alfa predestinado?

─ Es el detective que da la clase sobre la protección de los lobos defectuosos.

─ ¿El detective Jung? ─ Y si Hyungsik no tuviera un entrenamiento para disimular sus emociones habría abierto su boca y se hubiera pellizcado veinte veces.

─ ¿Jung? ─ Preguntó ella con una pequeña risa. ─ ¿Cuál es su nombre?

─ Hoseok. ─ Comentó Hyungsik.

─ Jung Hoseok. ─ Dijo ella en un suspiro enamorado. ─ ¿Sabes donde puedo encontrarlo?

─ Hoy no lo he visto. ─Le dijo él. ─ Lo siento.

La chica hizo un puchero. Tendría que hablar con él después de clase.

-🐺-

-🐺-

Hoseok despertó de su celo al día siguiente aunque Jungkook seguía durmiendo, completamente agotado. Se levantó y caminó al baño de la habitación de su Alfa, se observó al espejo. Estaba completamente confundido por haber tenido su celo de forma tan repentina.

¿Había sido por ella?

Suspiró profundamente observando la marca incompleta a punto de sanar, no quería que sanara, quería mantenerla. Cielos, en ese momento pensaba que lo único que estaba impidiendo que su lobo fuera tras esa chica era la marca de su pequeño Alfa. Llevó sus dedos a la piel y acarició suavemente.

¿Debía decirle a Jungkook sobre esa Omega?

Escuchó un débil quejido y se apresuró a la habitación, encontrando a Jungkook sentado con una expresión de dolor.

─ Jungkookie. ─ Se acercó y tomó al Alfa de las mejillas para dejar un suave beso en los labios. ─ Perdoname, yo... no sabía que mi celo vendría, lamento tanto si te lastimé. ─ Y miró directo a los ojos bicolor de su pareja.

─ Está bien, estoy bien. ─ Dijo el pequeño Alfa.

Estaba tan enamorado que no entendía cómo era posible que en una vida pasada tuviera otra pareja que no fuera Jungkook. Pero él no deseaba continuar con esa persona, deseaba quedarse con ese pequeño Alfa que jadeaba suavemente entre sus manos. Sus mejillas estaban sonrojadas y podía notar que temblaba.

Al parecer se había esmerado durante su celo...

Cargó al pequeño Alfa al baño decidiendo que se darían un baño juntos pues deseaba consentirlo. Jungkook se dejó hacer quejándose un poco por las zonas adoloridas, pero disfrutando las caricias de Hoseok.

─ Debo apresurarme. ─ Comentó Jungkook, pues ya había perdido toda la mañana y aunque sabía que el celo de su lo excusaría, no estaba seguro de querer que todos lo supieran.

Hoseok lo ayudó a colocarse el uniforme de cadete, bastante preocupado por verlo débil y algo tembloroso.

Luego Jungkook salió de la habitación y al estar algo lejos se pegó a una pared y se dejó caer. Jadeó suavemente abrazándose a sí mismo mientras una lágrima caía.

¿Por qué Hoseok había llamado a un Omega mientras lo hacían? ¿Se habría confundido su lobo?

Estaba tan confundido y se había sentido tan ahogado que simplemente necesitaba salir de su habitación. Quería hablar con Sungjae y preguntarle si alguna vez le pasó con Jimin... Si eso haría en cuanto sus piernas dejaran de temblar. Sus orejitas estaban agachadas mientras su mente imaginaba un sin fin de posibilidades. Pensando que tal vez Hoseok se estaría arrepintiendo de estar con un Alfa como él.

-🐺-

-🐺-

Hoseok se apresuró a su habitación para preparar su clase, no quería llegar tarde dos días seguidos. En ese momento alguien golpeó su puerta y él se apresuró a abrir.

─ Oficial. ─ Saludó a Hyungsik. ─ ¿Sucede algo?

─ ¿Eres imbécil o qué? ─ Preguntó el oficial Park empujando a Hoseok y entrando a la habitación para cerrarla tras él. Hoseok se miraba bastante confundido, no sabía que había hecho para enojar así a Hyungsik. ─ ¿Sabes cuantos lobos quisieran encontrar a su pareja predestinada?

Oh... eso...

─ No te metas, por favor. ─ Rogó Hoseok cansado con el asunto. ─ Ya tengo pareja.

─ No seas tonto, Hoseok, sabes que no estás hecho para estar con un Alfa. Tú mismo me lo dijiste hace muchos años. Éste era tu sueño, ¿No es así? No eres un desviado. Quieres esto también. ─ Insistió el oficial Park.

─ No, tal cómo lo dijiste, ese era mi sueño. ─ Dijo Hoseok, lo aceptaba él deseaba ser un gran Alfa y tener una vida normal, donde nadie lo molestara por su extraño aroma. ─ Ahora mi sueño es Jungkook.

Hyungsik negó con la cabeza.

─ Es inútil luchar, Hoseok. ─ Le dijo el Alfa contrario. ─ Tu propio lobo sabe con quien debes estár.

─ ¡Basta! ¡No sómos solo instinto! ─ Hoseok jadeó suavemente e intentó recobrar la compostura. ─ No quiero estar con ella.

─ Eres un imbécil, cuando todos se den cuenta que rechazaste a tu Omega predestinada por estar con un Alfa defectuoso...

─ ¡Que importa! ─ Hoseok empujó al Alfa. ─ ¡¿Qué importa lo que todos digan?! ¡Lo que importa es que yo sea feliz! ¡¿Crees que seré feliz estando con alguien a quien no amo sólo porque mi lobo la recuerda de su vida pasada?! ¡Aún sigo amando a Jungkook!

Hyungsik negó con la cabeza.

─ Perdiste la cabeza. ─ Le dijo. ─ No estas pensando con claridad. Lo mejor que puedes hacer es terminar con Jungkook antes de lastimarlo más y aceptar tu destino, serás feliz con tu Omega.

─ Callate, no haré eso. ─ Hoseok apretó los puños. ─ No voy terminar con Jungkook y no voy a aceptar a la chica. Solamente quiero estar con mi Alfa.─ Llevó una mano a su marca incompleta.

─ Te lo advertí.─ Le dijo Hyungsik.

El Alfa pelirrojo suspiró.

─ Gracias, pero no necesito que me lo adviertas. Ya tomé una decisión. ─ Hyungsik se fue molesto de la habitación y Hoseok se dió cuenta que el tiempo había pasado durante la conversación.

Tomó sus cosas y salió camino al aula de clases. Pasó en el camino por la clase que debía estar recibiendo Jungkook y se extrañó al no verlo. Así que continuó caminando, sintió su corazón acelerarse cuando a cierta distancia logró sentir el aroma de la Omega. Su lobo exigiendo y arañando en su interior.

Hoseok intentó reprimirlo pero sus pasos se aceleraron al encuentro hasta que estaba frente a la entrada de su aula. Sacudió la cabeza y maldijo en bajo a su insitino. Entró al aula y no pudo evitar que sus ojos se conectaran con los de la chica. Ella le sonrió coqueta y llevó su cabello tras su oreja, exponiendo su cuello para el Alfa.

Él sintió su boca llenarse de saliva.

Nuevamente comenzó a asfixiarse con el aroma dulce y embriagante mientras intentaba disimular.

¿Por qué aún no habían inventado una forma de tapar su nariz sin asfixiarse para no sentir el aroma de los demás?

Comenzó su clase preocupandose al volver a sentir los suaves y deliciosos calambres en su abdomen bajo y se giró para que nadie lo viera jadear, sonrojandose por su estúpido instintio.

Mordió su labio inferior con fuerza, intentando que el dolor lo trajera de vuelta a la realidad y así no dejarse llevar por el instinto.

─ ¿Oficial, está bien? ─ Preguntó un Alfa.

Hoseok limpio sus labios con el brazo, sabiendo que se había herido.

─ Si, continuemos. ─ Dijo volviendo a su explicación.

La chica le sonrió, sabiendo que ella estaba ocasionando aquello en su Alfa. Ella deseaba besar esos labios y lo haría. Solamente era cuestión de que Hoseok la dejara intentar enamorarlo y que aceptara que ella era su pareja.

La clase terminó y todos comenzaron a salir. Hoseok se apresuró a salir para evitar cualquier situación, pero la chica volvió a seguirlo.

─ ¡Espera! ─Le dijo ella, llegando hasta su lado cuando Hoseok se detuvo por instinto ante el llamado de la Omega. ─ Quiero hablar contigo.

─ No. ─ Dijo Hoseok girandose. ─ No hablemos, no quiero conocerte.Entiende por favor que tengo pareja, no pienso dejarlo.

La chica frunció el ceño.

─ P-Pero estamos destinados a estar juntos, todos lo saben. ─ Dijo ella. ─Mi Omega te quiere, yo quiero que me des una oportunidad. ─ Insistió.

─ Lo lamento, en serio. ─ Dijo el Alfa pelirrojo dando un paso hacia atrás cuando ella se acercó dejando que sus feromonas de Omega hicieran el trabajo de convencer a su Alfa.

Hoseok comenzó a sentirse asfixiado otra vez, porque era tan malditamente suave y delicioso.

─ Será perfecto. ─ Le dijo ella acercándose y acariciando el brazo del Alfa suavemente, dejando su aroma en él.

─ Alejate. ─ Dijo Hoseok, sus pupilas dilatándose y sus mejillas sonrojándose por el calor. ─ Realmente no deseo ésto.

─ Tu lobo no parece pensar lo mismo. ─ Dijo ella, su Omega llamándolo y Hoseok se giró y corrió lo más rápido que pudo, perdiendo a la chica entre los dormitorios.

Llevó su mano a su abdomen bajo presionando. Maldiciendo el calor.

¿Por qué? ¿Por qué ella lo hacía entrar en celo tan fácilmente?

Llegó a la habitación de Jungkook y golpeó la puerta nuevamente. El pequeño Alfa abrió y jadeó al ser tomado de nuevo en brazos mientras los labios de su Alfa volvían a besarlo con desesperación. Hoseok jadeó sobre la boca de su Alfa, ambos respirando el aliento del contrario.

El pelirrojo cerró la puerta mientras el pequeño Alfa miraba los ojos dilatados de su pareja. ¿Otra vez en celo? Eso era imposible. Jungkook gimió cuando Hoseok lo apretó con sus brazos restregandose en él en su aroma y entonces el pequeño Alfa sintió el leve aroma a Omega en Hoseok.

Su corazón se apretó dolorosamente, pues había hablado con Sungjae y éste explicó que Jimin jamás había llamado a un Omega durante su celo.

─ ¿P-Por qué hueles a Omega? ─ Preguntó Jungkook, sus feromonas de Alfa llenando la habitación.

Sus orejas se erizaron y sus ojos brillaron en enojo. Su Alfa se estaba poniendo posesivo con su pareja.

Hoseok intentaba aferrarse a la poca consciencia que le quedaba antes de caer por completo en el celo.

─ M-Marcame.─ Le pidió desesperadamente al pequeño Alfa.

─ ¿Q-Qué?

─Muerdeme.─ Pidió de nuevo Hoseok. ─ Ahora, hazlo ahora.

El Alfa pelirrojo expuso su cuello, soportando a su Alfa para que Jungkook pudiera dejar otra marca incompleta.

Jungkook no entendía no sabía que estaba pasando. Pero no iba a negarse a su pareja así que se acercó a su cuello y mordió sobre la marca a punto de sanar mientras escuchaba a Hoseok quejarse. El pelirrojo lo apretó entre sus brazos temblando levemente al sentir la marca ser reabierta.

Lo necesitaba.

El pequeño Alfa se separó y lamió la mordida.

─ No la lamas. ─ Pidió Hoseok. ─ No quiero que sane, no ahora.

Ambos se miraron a los ojos. Jungkook sentía mejor ahora la ansiedad de su Alfa y el celo de Hoseok comenzaba a hacerlo jadear. Pero cielos aún estaba cansado del día anterior.

Cerró los ojos cuando su pareja volvió a besarlo, llevándolo a la cama. Hoseok respiró profundo el aroma de su Alfa. No iba a rendirse, no iba a dejar que algo como el "destino" se metiera entre su amor.

Y mientras Hoseok se entregaba a su Alfa en un celo que había sido llamado por alguien más, su Omega predestinada comenzaba a llenarse de odio. Ella no sería la única Omega predestinada que se quedara sin su Alfa. No lo sería, ella iba a hacer lo que fuera para quedarse con Hoseok, incluso si eso incluía hablar con el Omega de Hoseok y hacerle saber que decía alejarse de él.

Se apresuró a encontrar al Oficial Park para preguntarle por la pareja de Hoseok y lo encontró en la entrada de la academia antes de que éste se fuera.

Que suerte...

─ Oficial.─ Ella lo llamó con una gran sonrisa.

─ Oh, hola Rosé.─ Saludó él. ─ ¿Qué tal te fue con Hoseok, hablaste con él?

La chica hizo un puchero mientras asentía.

─ Quiero hablar con su pareja, ¿Sabes quien es la Omega? ─ Preguntó ella.

─ ¿La Omega? ─ Hyungsik rió. ─ La pareja de Hoseok es un Alfa. Un Alfa defectuoso.

¿Qué?...

La chica se quedó perpleja, su pareja destinada la estaba rechazando por un Alfa, y no solamente eso, la estaba rechazando por un Alfa defectuoso.

─ ¿Me puedes decir su nombre? ─ Pidió ella.

Hyungsik encogió los hombros.

─ Se llama Jungkook.

-🐺-

-🐺-