Jungkook se encontraba encerrado en su habitación, estudiando, cuando escuchó a lo lejos una voz conocida.

─ Omega de caramelooo... tienes que ser mío, por fa, ¿mh?

El pequeño Alfa parpadeó varias veces, sacudió sus orejas de lobo e intentó concentrarse.

─ ¡Que no! Oye, ¿Acabas de tocarme el trasero?

─ N-No...bueno sí, pero es porque tenías un insecto.

Ok esa vez sí lo había escuchado claramente. Se puso de pie, ¿De verdad era Namjoon? ¿Namjoonie? Salió corriendo de la habitación y llegó al lobby.

─ ¿Namjoon? ─ Le preguntó algo agitado a la recepcionista.

Ella le señaló la enfermería.

Jungkook corrió en dirección a la enfermería y pronto se encontró con el aroma del pequeño Alfa que había cuidado de él y había sido su mejor amigo en el peor tiempo de su vida.

─ ¡Namjoon! ─ Gritó algo desesperado y Yoongi, quien escuchó el grito del pequeño Alfa pelinegro, abrió la puerta del cubículo donde se encontraba Namjoon.

Jungkook entró corriendo y, al ver a su amigo sentado en la camilla, corrió hacia él y se lanzó entre sus brazos. Sus lágrimas cayendo.

─ Jungkookie. ─ Susurró Namjoon ahogándose con el aroma de amaretto que tanto había extrañado.

El Alfa moreno aspiró profundo llenándose del aroma y sonrió suavemente.

─ Estas bien. ─ Susurró, pues en el burdel muchos días se había preguntado por su Jungkookie, muchos días deseó poder tener noticias de él.

─ Te encontraron, te encontraron Namjoonie. ─ Dijo Jungkook. ─ Ahora vas a estar bien.

El morenito asintió mientras separaban su abrazo y se miraban a los ojos. Parecía que los años no hubieran pasado y que nunca se hubieran separado. Namjoon acarició la mejilla del pequeño Alfa y sonrió mostrando sus lindos hoyuelos.

Entonces Jungkook se giró y miró a Yoongi.

─ ¿Tú lo encontraste? ─ Preguntó sorprendiendo al Omega pelinegro. Yoongi solamente asintió. ─ ¡Gracias! ─Gritó Jungkook y fue a abrazar a Yoongi.

─Tranquilo, Jungkookie, Yoongi será mi Omega. ─ Dijo Namjoon y Yoongi se atoró con su saliva.

─ ¡Que no! ─ Gritó molesto el pelinegro, pero Namjoonie solo sonrió haciendo que Yoongi se sonrojara un poco.

Jungkook ignoró olímpicamente la discusión entre los dos y comenzó a contarle a Namjoon todo lo que había pasado en la sede desde que llegó, contándoles sobre el ex ministro y sobre Hoseok. También le contó sobre su sueño de ser policía. Namjoon sonreía nostalgicamente mientras lo escuchaba y acariciaba suavemente la mejilla de un emocionado Jungkook.

Yoongi suspiró y decidió darle su tiempo a ambos lobitos, pues se notaba el cariño que se tenían y no quería interrumpir. Se dirigió hacia la oficina, sorprendiendose cuando encontró a Hoseok sentado en su oficina revisando papeles.

─ ¡Fuiste a una misión sin mí! ─ Acusó el pelirrojo en el momento en el que sintió el aroma de Yoongi.

El Omega rió.

─ Alguien estaba ocupado con el celo de alguien.─ Hoseok se sonrojó. ─ Así que fui sólo con mi equipo.

─ ¿Cómo fue tu primera misión sólo? ─ Preguntó el pelirrojo con una sonrisa ladeada.

Yoongi lo observó con algo de disgusto y luego encogió los hombros.

─ Salió bien.

─ Con que, Namjoon. ─ Dijo el pelirrojo ya terminando el papeleo por Yoongi.

El asintió.

─ Jungkook está con él ahora. ─ Allí Hoseok se detuvo y bajó todos los papeles.

─ ¿Jungkook está con él? ─ Preguntó.

─ Sí,─ comentó Yoongi. ─ Llegó corriendo a la enfermería y se lanzó sobre él y lo abrazó por un buen rato. Luego me agradeció por encontrarlo. Los dejé solos porque Jungkook estaba hablando con él, contándole muchas cosas.

─ ¿Contandole muchas cosas? ... ─ Las mejillas de Hoseok se sintieron algo calientes al saber que se sentía completamente celoso.

─ Si, hablaba mucho así que me vine. ─ Continuó Yoongi observando con algo de diversión el rostro del detective pelirrojo. ─ Namjoon le sobaba la mejilla, fue muy tierno. ─ Concluyó.

Hoseok tuvo imagenes de Jungkook con otro Alfa en su cabeza y su lobo gruñó completamente molesto y sintiéndose hasta algo traicionado por el alfita pelinegro. El detective negaba para sus adentros, regañandose por sentirse celoso cuando él mismo había dicho que eran amigos nada más.

─ Por cierto. ─ Comentó el Omega. ─ Apestas a él.

Hoseok dejó sus pensamientos de celos y miró a Yoongi pensando en que se había bañado, con abundante jabón, y aparte se había echado neutralizador.

─ ¿Lo dices en serio? ─ Preguntó el pelirrojo y el detective Omega asintió.

─ No es algo disimulado.─ Le dijo Yoongi. ─ Realmente apestas a él.

Hoseok bajó la mirada y se sonrojó por completo, todos podrían sentir el aroma de otro Alfa en él. Entonces, ¿Qué tal Jungkook? Podrían sentir su aroma en él.

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─ No creo que nadie más lo sienta. ─ Comentó Namjoon.─ Yo por que tengo olfato super desarrollado. ─ Dijo señalando su naricita de lobo.

Jungkook asintió algo sonrojado.

─ Pero... creo que no me verá nunca como una posible pareja.─ Comentó Jungkook después de haber contado todo.

Namjoon asintió algo triste.

─ No te rindas Jungkookie, ¿Sabes? Hemos vivido suficiente tiempo encerrados sin que logremos ser algo que deseamos o estar con quien queremos. ─ Dijo el Alfita moreno.─ Sería justo decir que podemos esforzarnos por estár con quien queremos ahora.

Jungkook asintió.

─ ¿Entonces de verdad te gustó el Omega confite quemado? ─ Preguntó el pequeño alfita pelinegro.

─ Pues... si... ─ Dijo Namjoon sonrojandose y ambos rieron suavemente. ─ A demás es tan adorable. ─ Dijo el pequeño moreno. ─ Nunca había visto a alguien quejarse tanto en tan poco tiempo.

Jungkook frunció el ceño.

¿Adorable? Adorable sería ver a su Alfa pelirrojo sonrojado y sin saber qué hacer. El Omega gruñón no era para nada adorable.

─ Tienes que apurarte a instalarte. ─ Le dijo Jungkook cambiando de tema. ─ Así te llevo a conocer a Jin y luego podremos ir a la ciudad.

El mayor sonrió, aquello sonaba casi utópico. Ir a conocer la ciudad con dos amigos... era algo que él nunca soñó hacer. Pensó que toda su vida sería complacer a los demás, sin querer una pequeña lágrima se escapó de sus ojos. Pero cuando vió hacia el pequeño Alfa frente a él y sus ojos coloridos, éstos le decían que él sabía lo que Namjoon estaba sintiendo.

Jungkook tomó la mano de Namjoon y con éste gesto le prometió que todo lo que estaban viviendo en ese momento era real, y que realmente eran libres.

─ Quiero ser un Alfa como él. ─ Dijo Jungkook. ─ Después de tí, es el mejor Alfa que he conocido.

Namjoon rió suavemente.

─ Yo no soy un gran Alfa, Jungkookie. ─ Dijo el moreno.

─ Si lo eres, el mejor. ─ Comentó su pequeño amigo y Namjoon recordó al pequeñito Jungkook que llegó a aquel cruel edificio, luego vió a éste Jungkook sonriendo y le gustó verlo tan feliz.

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Jungkook no se separó de su amigo en todo el tiempo que le tomó ponerse al día con la sede, todos reían de ver al alfita pelinegro completamente cambiado, pues ya no se mostraba tímido, si no que emocionado por que Namjoon experimentara lo mismo que él. Ahora estaban en la oficina del jefecito.

─ Vaya... Hoseok se pondrá celoso... ─ Susurró el Omega peliblanco a su esposo.

Jungkook se giró a verlo molesto y éste le sonrió angelicalmente. Namjoon tomaba la cajita que el jefecito le había dado, la cuál el pelinegro ya sabía qué contenía. Finalmente se fueron a la nueva habitación del morenito y Jungkook esperó impacientemente a que Namjoon sacara sus cosas de la caja. Le mostró cómo colocarle clave a su collar anti mordidas y luego se pasó toda la tarde mostrándole cómo usar su nuevo celular.

─ ¡Necesito el número de Yoongi! ─ Dijo Namjoon y el pelinegro asintió. Tal vez luego podría pedírselo a Hoseok para ayudar un poco su amiguito moreno.

Luego Jungkook envió un mensaje a Jin para pedirle que salieran a pasear, pero pronto recordó que el Omega estaría atravesando su celo. Suspiró algo decepcionado de que su plan no saliera tan perfecto, Namjoon negó con la cabeza y tomó la mano de su pequeño amigo asegurandole que había sido un gran día.

Pues realmente lo había sido, no había tenido que entregarse a nadie, ni sufrir humillaciones y maltratos en su tiempo más vulnerable.

Jungkook salió de la habitación de Namjoon despidiéndose ya tarde de noche, caminó por los pasillos que cada vez se hacían más conocidos. Recordó que no había estudiado todo lo que quería para su exámen de admisión y pronto se encontró algo nervioso por ello. Pero todas esas ideas se fueron de su mente cuando encontró a Hoseok esperándolo frente a su habitación.

El Alfa esperaba con su espalda apoyada a la pared y se notaba su expresión con un poco de nerviosismo y timidez. Jungkook también se sintió así cuando Hoseok levantó la mirada y lo vió.

─ Hola. ─Saludó el pelirrojo.

─ Hola. ─ Respondió él acercándose más. ─ ¿Qué tal tu día?

El Alfa Hoseok sonrió al ver que Jungkook no parecía estár resentido con él.

─ Tuve que hacer mucho papeleo. ─ Comentó Hoseok.─ Tu amigo Namjoon, fue rescatado.

─ Lo sé, lo acompañe todo el día. ─ Dijo Jungkook.

─ Lo sé. ─ Contestó Hoseok sin pensarlo y ambos se sonrojaron, desviando la mirada.

─ ¿Qui-Quieres entrar? ─ Preguntó Jungkook. ─ Iba a estudiar un poco para el examen de admisión.

─ Puedo ayudarte, si quieres. ─ Dijo el pelirrojo y el Jungkook sonrió con sus orejitas muy levantadas.

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