Capítulo 10

Miles de imágenes y pensamientos pasaron por la mente de Hoseok en el momento en el que sus oídos percibieron el sonido de la alarma contra incendios. Estos pasaron en segundos en su cabeza. Fueron desde insultarse a sí mismo, hasta recordar las pocas cosas vividas con Jungkook en las últimas horas.

─ ¡Jungkook! ─ Fue lo primero que salió de su boca.

─ ¡¿Qué?! ─ Gritó Yoongi observando cómo Hoseok corría por el pasillo.

Se giró al escuchar un gruñido proveniente del interior de la sala de interrogatorios. Maldijo en su interior mientras alcanzaba su arma oculta en su ropa. Sabía que no sería suficiente pero tal vez podría retenerlo. Gruñó mientras soltaba feromonas de terror esperando que algunos policías Alfas vinieran hacia él por instinto.

─ ¡Maldito! ¡No creas que dejaré escapar! ─ Gritó Yoongi al ver el gran lobo salir de la puerta.

Sintió una gota de sudor deslizarse por su rostro mientras observaba los dientes del lobo que gruñía hacia él. Su respiración se aceleró y un golpe adrenalínico hizo que su mente se tensara. El primer disparo resonó cuando aquel lobo avanzó contra él.

El ex ministro cayó al suelo, pero Yoongi sabía que no por mucho tiempo. Respiró profundo intentando sentir el aroma de algún otro Alfa mientras maldecía. Al ver que el lobo del ex ministro se levantaba y gruñia hacia él nuevamente. Tenía dos opciones, convertirse en lobo o intentar llenar al ex ministro de balas antes de que éste lo matara con sus fauces.

─ Mierda...

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Jungkook se encontraba sentado en la silla donde lo habían dejado. Sus orejitas moviéndose mientras escuchaba lo que sucedía en aquel lugar. Con sus ojos cerrados podía concentrarse bastante bien. Escuchaba bastante ruido, conversaciones que se llevaban al mismo tiempo, entre otros sonidos. Se notaba que era un lugar lleno de mucha gente, pero sobre todo, de mucha gente ocupada.

Suspiró profundo, pues ya se le hacía que iba a ser una espera muy larga y aburrida. Excepto que pronto pudo distinguir las voz de Hoseok entre las de los demás. Al principio tuvo un poco de temor, sin embargo pensó que era un poco genial cómo se llevaba a cabo un interrogatorio.

Fue hasta que ese hombre comenzó a hablar de él, que Jungkook sintió su respiración algo pesada, especialmente cuando insinuó que él y Hoseok... Jungkook entonces llevó sus manos a sus orejas para taparlas, pero era demasiado tarde.

¿Me ayudarás a escapar?

─ N-No... ─ Susurró intentando controlarse, pero terminó agachando su cabeza. Su lobo sufriendo por la voz de Alfa. No deseaba someterse, no frente a otro Alfa.

Abrelos.

Sus ojos se abrieron automáticamente y sintió las lágrimas comenzar a acumularse. No deseaba hacer caso. Se levantó de su silla y comenzó a correr por el pasillo, intentando alejarse, si lograba llegar lo suficientemente lejos tal vez no escucharía las órdenes del Alfa de élite.

Busca, busca la alarma contra incendios.

Su cuerpo se detuvo instantáneamente.

─ No quiero... ─ Susurró. ─ Por favor... no quiere hacerlo.

Pero su cuerpo se giró y caminó como si su mente estuviera desconectada de sus miembros. Su cabeza se giraba buscando. Él había visto las cajas de bomberos antes, cuando era chico y andaba con su madre. Sus lágrimas caían mientras obedecía. Deseaba escapar, pero no podía.

En el siguiente pasillo pudo ver la caja roja y a la para el botón que accionaría la alarma contra incendios. Caminó hacia ella y sus dos ojos se posaron sobre el botón.

─ No lo hagas... No lo hagas, no lo hagas, ¡No lo hagas! ─ Gritó mientras su mano se movía lentamente hacia el botón por el esfuerzo que estaba haciendo para no obedecer.

Un sollozo salió de su garganta cuando sintió el botón con la yema de sus dedos.

─ Lo siento tanto... ─ Dijo en un sollozo y sus orejitas se agacharon por el fuerte sonido de la alarma.

Cayó de rodillas al sentirse libre de la voluntad del Alfa, pero sabía que más órdenes vendrían. Se odiaba. Odiaba obedecer y someterse. Mordió su labio, quería huir, pero se sentía débil.

Respiró profundo, intentando calmarse, pero no podía. ¿Cuánto tiempo había pasado desde que activó la alarma? se preguntaba mientras los segundos avanzaban. Quería cerrar sus ojos, pero al parecer el efecto de esa orden aún no desaparecía, sus párpados se volvían a abrir tras cerrarlos.

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─ ¡Jungkook! ¡¿Dónde éstas? ─ Hoseok llegó al lugar donde había dejando a Jungkook, preguntándose hacia a dónde iría el Alfa.

Por suerte el aroma a amaretto le ayudó a encontrar el camino correcto, pues era tan fuerte. Podía escuchar el movimiento en todo el lugar, probablemente los policías siguiendo el protocolo contra incendios. Se maldijo por no haber pensado en lo que Jungkook le había contado.

Corrió siguiendo su olfato hasta que giró por un pasillo y encontró a Jungkook de rodillas y apoyado en sus manos frente a una caja de emergencia de bomberos.

─ Jungkook. ─ Inmediatamente los ojos del pequeño Alfa se posaron en él.

Hoseok pudo notar el temblor en el cuerpo del pelinegro. Sus orejas encontraban agachadas y su rostro demostraba completo terror. Se sorprendió de que el pequeño mantuviera sus ojos abiertos.

─ Ayúdame... ─ Rogó Jungkook observandolo. ─ Sácame de a-aquí...

─ ¿Qué hiciste? ─ Preguntó Hoseok acercándose lentamente.

Jungkook respiraba de forma erratica, pues se encontraba realmente asustado. Al ver a Hoseok un poco de esperanza había regresado a él. Hoseok era un Alfa de verdad y podría ayudarlo, ¿Verdad?

─ N-No quise... la voz... la voz... ─ Mencionó Jungkook. ─ Ayúdame...

─ Tranquilo, todo estará bien. ─ Dijo Hoseok acercándose más al pequeño Alfa.

─ N-No... Hoseok, escuchame. ─ Dijo Jungkook entre respiraciones profundas. ─ No ha acabado, no ha...

Jungkookie, buscame... Ven con tu dueño, mi Jungkookie.

─ ¡N-No me dejes ir! ─ Gritó Jungkook mientras se colocaba de pie y Hoseok parpadeaba confundido.

Buscame, ven conmigo.

Jungkook volvió a rogar poder no seguir la orden, pero su cuerpo comenzó a correr en dirección contraria a Hoseok. Hoseok entonces entendió lo que sucedía y corrió tras Jungkook, se lanzó sobre el pelinegro para lograr detener su avance. El pequeño Alfa se quejó al caer contra el suelo y sentir el dolor del golpe de Hoseok.

El pelirrojo sujetó con fuerza los brazos de Jungkook y forcejeó con él mientras Jungkook le gruñia, su lobo enojado pues el mayor no lo dejaba seguir las órdenes.

Lo giró contra el piso con fuerza y llevó ambos brazos a la espalda de Jungkook.

¡Sueltame! ─ Exigió Jungkook, pero gracias a los dispositivos en sus oídos Hoseok no sintió nada por aquella orden.

Terminó esposando al pelinegro y luego suspiró al tenerle atrapado. Jungkook gruñía y se removía. Hoseok mantenía mordido su labio mientras sentía el aroma del pequeño Alfa picar su nariz. Estaba molesto, el lobo de Jungkook estaba muy molesto. Sin embargo sabía que no era el deseo de Jungkook obedecer a ese Alfa.

Ven, Jungkookie...

─ ¡Agh! ─ Se quejó jungkook son su voz llena de dolor. ─ D-Duele...

Sus palabras fueron acompañadas de llanto y Hoseok intentó no observarlo llorar.

─ Lo siento, si te lastimé... ─ Comenzó a decir.

─ N-No... ─ Dijo Jungkook jadeando. ─ Duele someterse... duele mucho...

Hoseok pensó en ello, nunca había sido sometido cómo Jungkook en ese momento. Por eso sacólos dispositivos de sus orejas y los colocó con cuidado en las orejas de lobo de Jungkook. Éstas se movieron intentando alejar la sensación helada que aquello causaba en sus orejas.

El pelirrojo respiró agitado por tanto, había sido un día de mierda.

¿Jungkook? ¡Ven, maldito Alfa! Voy a violarte cuando llegues a mi.

Jungkook abrió sus ojos ante lo escuchado, pero se tranquilizó al ver que no luchaba por obedecer aquella voz.

─ ¿Mejor? ─ Preguntó Hoseok.

─ S-Si... ─ Comentó Jungkook y apoyó su mejilla en el frío suelo, sintiéndose cansado. ─ Mejor... ─ Mencionó.

─ ¡Detective Jung! ─ Hoseok se giró al escuchar la voz de un hombre.

Al ver pudo notar la condición de éste. Sostenía su brazo con la mano contraria, y varios caminos de sangre se deslizaban hacia el suelo por su piel.

Una mordida...

─ ¡Detective! ¡Es Yoongi! ─ Mencionó el Alfa apenas sosteniéndose de pie.

Los ojos de Hoseok se abrieron ante aquello. Observó a Jungkook esposado en el suelo, bajo su cuerpo y luego volvió a ver a aquel Alfa. Se levantó rápidamente y corrió de regreso por donde había venido.

Había varios lobos por el lugar y aroma de Yoongi era fuerte, como a caramelo quemado, podía sentir las feromonas de Omega que Yoongi había utilizado para pedir ayuda. Se acercó y encontró al Omega en el suelo, varios Alfas intentando ayudar a sanar las heridas de las mordidas que había recibido.

─ N-No... ─ Dijo Hoseok al verle inconsciente, cayó de rodillas ante el cuerpo del Omega que le acompañaba en sus investigaciones.

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