Era un día normal para la Academia de Kou, alumnos en sus respectivas aulas o en clases deportivas. Todo lo contrario a Hyoudou Issei, un miembro del "Trio de Pervertidos", que escapaba como ya era costumbre de todas las chicas que pertenecían al Club De Kendo. Quienes querían golpearlo, todo por descubrir que el junto con sus amigos estaban de nueva cuenta espiándolas cuando ellas estaban en los vestidores cambiándose de ropa.

- ¡Maldición! ¡¿Como es que siempre me convencen de hacer esto?! - Grito Issei a los dos chicos que corrían a su lado.

- ¡Por que eres fácil de convencer! - Dijo su amigo Matsuda.

- ¡Menos charla! ¡Se están acercando! - Grito Motohama asustado.

Dado que varias de las chicas trataban de alcanzarlos, para así poder golpear al trío. Por lo que corrieron por toda la Academia hasta que al fin se lograron librar del Club De Kendo. Esto al haber ido en dirección hacia donde estaba el Club del Ocultismo, donde se pudieron esconder por el momento.

- ¡Rayos! ¡Para la próxima vez no hay que pelearnos! ¡De lo contrario ellas nos descubrirán! - Grito Issei molesto.

Sus palabras causaron un resoplido de molestia por parte de sus amigos, algo que imito por un instante antes de que mirara hacia otro dirección. Pero en el momento que lo hizo, noto a alguien al pie de la ventana del antiguo edificio, y al enfocar su mirara pudo distinguir el cabello Carmesí de una chica que al fin pudo ver claramente.

- ¿Quien es ella? - Preguntó Issei a sus dos amigos que giraron su mirada a la ventana del antiguo edificio.

- ¿Ella? - Dijo Matsuda mientras movía ligeramente sus lentes. - Se llama Rías Gremory, es la chica mas popular de la Academia de Kou, también a sido hasta ahora la única Presidenta del club del ocultismo por tres años.

- Vaya... - Dijo Issei sin dejar de ver a la pelirroja. - Es realmente hermosa.

- Ciertamente lo es - Dijo Motohama al momento de poner una sonrisa que el público femenino odiaba. - Además de ser hermosa, tiene unos pechos que en verdad son hermosos.

Dijo con una sonrisa pervertida lo cual imitaron sus dos amigos, esto por que eran igual de pervertidos. Pero apenas regresaron su mirada a la ventana se percataron de que la pelirroja ya no se encontraba.

-La más popular de la Academia - Dijo Morohama mientras se acomoda con algo de arrogancia los lentes. - No se ustedes, ¿Pero se imaginan que una chica como Rías Gremory este debajo de ustedes gimiendo?.

- Por supuesto - Respondió Matsuda con orgullo. - Ya lo verán, algún día perderé mi Virginidad.

- ¡Hmp! ¡Yo tampoco me quedare atrás! - Dijo Motohama. - ¡Yo tambien la voy a perder algún día!.

- ¡Yo también lo haré! - Grito Issei con la misma esperanza que ellos.

Sus palabras cusaron un silencio en el dúo frente a él, quienes después de que procesarán lo que Issei dijo, se pusieron a reir.

- ¿De que se ríen? - Preguntó Issei aún sin entender el por qué se reian.

- De lo que dijiste Issei - Respondió con gracia Matsuda. - De que tu también te mantienes con la esperanza de perder tu Virginidad, lo cual es en verdad mas que imposible para ti.

- ¡Exacto! - Dijo Motohama dejando al castaño sorprendido.

Quien no sabía el por que sus amigos le decían eso, ya que al ser un pervertido como ellos. Tenía los mismos deseos de perder su Virginidad, así que lo que el duo frente a él le dijo lo confundió.

- ¿Que quieren decir con eso? ¿Por que me es imposible perder mi virginidad? - Pregunto confundido a Issei al duo.

- Issei, como uno de tus mejores amigos te digo esto, entre nosotros tres, tu eres el que menos probabilidades tiene de perder su virginidad - Dijo Motohama con seriedad.

- ¡¿Eg?! ¡Espera! ¡¿Y eso por que?! - Dijo Issei sorprendido así como ofendido.

- Es sencillo Issei, eres el más Princeso entre nosotros tres - Dijo Matsuda con el mismo tono serio.

Algo que causó la sorpresa de Issei, ya que el jamás se había esperado que la razón detrás de sus palabras. Eran por el simple hecho de que lo veían como un princeso, algo que dejo ofendido al castaño en gran manera.

- ¡Esperen! ¡Eso no es cierto! ¡Yo soy tan pervertido como ustedes dos! ¡Así que a mi me dan la misma probabilidad de el perder mi virginidad! - Grito Issei con algo de molestia antes de agregar. - ¡Así que no soy un Princeso!.

Dijo bastante molesto, después de todo jamas pensó que Matsuda y Motohama, quienes eran sus mejores amigos. No lo veían como un igual, sino que para esos dos el solo era un Princeso, alguien que dejaba escapar toda oportunidad, como situaciones donde podría tener sexo si decía y actuaba correctamente.

- Issei, nosotros te lo decimos por que a juzgar por tu actitud y personalidad, la verdad es muy difícil ver que lo logres al ser muy tímido, sin mencionar que tu siempre dudas en las parte importante - Dijo Motohama con calma.

- Concuerdo, por ejemplo, si una chica te dejara tocar sus pechos, tu dudarias en como tocarlos, si solo moverlos o el apretarlos, incluso aplastarlos llegaría rápidamente a tu memoria donde sin notarlo vas a perder la oportunidad - Dijo Matsuda igual de calmado.

Algo que dejo a Issei en silencio, ya que esas palabras eran verdad, el siempre a lo largo de su vida pensaba en cual era el mejor paso. Y en el ejemplo, sabía de forma certera que pensaría cuál sería el mejor movimiento o tacto para tocar los pechos de una chica.

- Además, si en un caso hipotético, ella accediera a tener sexo contigo, tu no lo aprovecharias, sino que dudarías - Dijo Motohama mientras continuaba. - Por donde deberías comenzar o que hacer primero, lo cual traería más dudas, ¿O me equivoco?.

Sus palabras hicieron que Issei bajara la cabeza, no podía discutirlo, todo lo que dijo era verdad. El siempre llegaba a dudar de como debía comenzar y que debía hacer correctamente, por lo que no pudo contradecir ninguna de las palabras de sus amigos.

- ¿Lo ves? Tu eres el que tiene menos probabilidades de poder perder su Virginidad - Dijo Motohama mientras colocaba su mano en el hombre del castaño. - Es por eso que te aconsejo que te rindas.

Sus palabras no tardaron en perderse en el momento que sono la campana, marcando el fin al descanso y dando inicio a las clases. Por lo que el trio de pervertidos regreso a su salón, donde tuvieron sus clases hasta la hora de la salida.

- Oye Issei, iremos a ver los vestidores de chicas, ¿Quieres venir? - Pregunto Motohama con una sonrisa al ver que estaban solos en el aula.

- No gracias, esta vez solo me iré a casa para descansar - Respondió Issei con un claro desánimo.

Todo por lo que sus amigos le dijeron, a los cuales no les pareció importarles el estado de animo de Issei, que sin decir otra cosa se fueron rápidamente hacia los vestidores de las chicas.

Mientras que el castaño simplemente se fue de la escuela, en dirección a su casa para poder descansar. Pero se detuvo al llegar al puente que marcaba que ya se encontraba a la mitad de su camino, lo cual sacó un suspiro en el chico que se recargo sobre el barandal del puente, y sin prisa observo los autos pasar bajo el puente.

- ¿Sera verdad lo que dijeron? ¿Tengo pocas probabilidades de poder perder mi Virginidad? - Se preguntó Issei con pesar mientras levantaba la mirada al cielo, observando el color naranja del atardecer.

Todo esto ignorando que una chica se acercaba a él, la cual sonreia al ver al castaño. Pero antes de que le hablara alguien más se le adelanto, o muchas más se le adelantaron.

- ¡Ahí está! - Grito una chica a lo lejos.

Captando la atención de ambos, que se voltearon a ver en dirección a donde el grito había venido. Solo para ver a un grupo de chicas, las cuales estaban mas que furiosas a simple vista, pero al ver mejor, se podía notar que todas ellas se enfocaban en Issei. Quien no tardo en notarlo, así como no tardo en notar el uniforme característico de su escuela.

- ¿Eh? ¿Que les pasa? - Preguntó Issei al grupo de chicas furiosas, las cuales solo se molestaron mas al oír la pregunta de desconcierto del chico.

- ¡¿Que que nos pasa?! ¡Nos pasa que esta ves si se pasaron! - Grito furiosa una de las chicas que se acercaban al castaño. - ¡Puede que toleremos todos sus malditos intentos de espiarnos en los vestidores! ¡¿Pero robarse nuestra ropa interior!?.

Grito la chica mas que furiosa, dejando de lo más sorprendido a Issei, que al fin recordo que el duo que tenía como sus mejores amigos habían ido al vestidor de chicas. Conocía bien a esos dos, así que sabía bien que la probabilidad de que ellos robaran la ropa interior de las chicas era ridículamente alta.

Y no solo eso, al parecer ellos de alguna manera les hicieron pensar a las chicas que el las había tomado, ya que el logro percatarse que una de las chicas que se acercaban. Tenía un lápiz, uno que el a lo largo del ciclo escolar había usado, el cual había prestado a Matsuda antes de que terminara la clase.

Recordando de esa forma, que cuando le dio el lápiz a Matsuda, este sonrió de forma engañosa. Algo que lo confundió en ese momento, pero que ahora sabia la razón detrás de eso, todo esto había sido parte de un plan para que ellos se pudieran robar la ropa interior de las chicas, esto sin que ellas pensaran que habían sido ellos los que las tomaron, sino el.

Habían dejado el Lápiz que todos en su salón sabia que el usaba, ya que este lo había comprado en una tienda, donde le dijeron que era de Edicion Especial de un Anime. Uno que a el le gustaba demasiado, por lo que al haber podido entender el plan de el par de idiotas que tenía como amigos, solo causó que Issei se molestara con ellos.

- ¡E-Esperen! ¡Yo no fui quien tomó sus ropa interior! ¡Los que las tomaron son Matsuda y Motohama! - Grito Issei en el intento de aclarar la situación.

- ¡Ya los interrogamos! ¡Dijieron que tu les pediste que te vieran en este puente a esta hora! ¡Que les ibas a mostrar algo genial! - Grito otra de las chicas que se encontraba igual de furiosa.

Oyendo eso, y al ver que ya estaban a un par de metros de el, Issei solo pudo maldecir a sus amigos. Quienes de una forma clara lo habían sacrificado para poder salir ilesos de la masacre que el grupo de chicas haría.

Sin mas opción, Issei tuvo que correr al notar que las chicas estaban demasiado cerca sosteniendo varios Bokken. Todos para poder golpearlo, por lo que corrió sin si quiera pensarlo dos veces, donde no noto que paso a lado de la chica que al principio estaba ahí por el.

Quien al ver que el chico paso a su lado ignorándola, algo que se repitió cuando el grupo de chicas pasó a su lado. Todas siguiendo a Hyoudou Issei, lo cual dejó claro a la chica que había fallado.

- ¡Tsk! Malditas humanas - Dijo molesta la chica antes de seguir con su camino.

Mientras tanto Issei, iba corriendo con todas sus fuerzas, todo para perder al grupo de chicas que lo seguían. Pero el sabia perfectamente que todas ellas lo iban a seguir sin detenerse, por lo que solo podia correr, así como buscar un lugar donde esconderse.

Pasando por una calle llena de gente, el castaño busco donde esconderse, todos los lugares eran públicos. Por lo que se podría meter en cualquier lugar, pero debía asegurarse de que no lo vieran o no tendría sentido ocultarse ahí.

Fue cuando en su visión una Tienda de Antigüedades apareció, una que acaba de abrir hace un par de meses. Misma tienda que tenia una puerta giratoria, donde varias personas entraban para de igual forma salir.

Sin pensarlo se mezclo entre esa gente para así poder entrar al lugar, algo que pareció funcionar. Ya que las chicas se limitaron a seguir la calle llena de toda esa gente buscandolo, aun cuando ellas pasaron frente a la tienda no lo vieron.

Así que sin detenerse siguieron con su camino, dejando bastante claro que no lo vieron entrar a la tienda. Algo que lo alivio, pero al fijarse bien, quedó de un momento a otro sorprendido, al ver el interior de la tienda.

Una que podía llamarse sin problemas Tienda de Antigüedades, el estilo de la Tienda era bastante tradicional, todos los estantes eran de madera, el piso las paredes todo tenía un estilo antiguo. Y al fijarse, noto que además de todos los estantes habían vitrinas repletas de un objeto o libros al igual que los estantes.

- Vaya... Este lugar es impresionante - Dijo Issei mientras caminaba por los alrededores de la tienda con gran curiosidad.

Notando al instante que tenia bastante clientela, una que le mostró que había un segundo piso. Sin pensarlo subió al segundo piso solo para poder matar el tiempo, sabía bien que todas las chicas lo buscarían por un largo tiempo.

Así que ver toda la tienda no era una mala idea, por lo que al subir llegó al segundo piso. Lugar donde vio que el perfecto aspecto una vieja biblioteca, una que estaba llena de gente, tantos que parecía ser el lugar más popular.

Movido por la curiosidad, camino por los alrededores mirando todo lo que se podía leer. Después de todo, aunque el no lo demostrará le gustaba leer, fuera Historia, Novelas o incluso Manga. Las cosas que le gustaban variaban, por lo que empezó a ver todos los libros ahí, reconoció algunos que alguna vez leyó en en pasado o que estaban aún por ser leídos.

Continuo con su recorrido viendo todos los estantes de libros, buscando alguno que le llamara la atención. Pero al final no logro encontrar alguno que fuera lo suficientemente interesante, por lo que solo suspiro en derrota. Leer un libro y entretenerse era lo único que el podia hacer ahora, y ninguno logró captar su atención, por lo que estaba dispuesto a dar una segunda vuelta para ver si un libro se le había pasado.

Pero antes de hacerlo el sonido de una campana lo detuvo, una que venía del enorme reloj del lugar. Que le dijo con sorpresa al castaño, que había estado en esa tienda por al menos tres horas, sin notarlo el tiempo había pasado en verdad volando.

Consciente de que era tarde, Issei se dio vuelta para poder irse del lugar, a estas alturas las chicas ya debían de haberse ido hace un tiempo. Así que ahora por decirlo así era seguro salir, camino con calma a la salida pero al pasar por uno de los pasillos hubo algo que logro en parte captar su atención.

Justo en el fondo, en una esquina algo cerca de la escalera había una pequeña caja llena de libros. Una que parecía no ser del interés de los que estaban cerca de esa caja, algo diferente en el que se acercó a ver, después de todo no sabía si alguno de los libros era interesante, por lo que una vez llegó busco alguno que le fuera interesante, pero no hubo ninguno que llamara su atención una vez más.

O eso pensó, al quitar un libro, se logro percatar que al fondo de la caja había un libro que destacaba entre los demás fácilmente. Notando eso quito todos los libros que estaban para alcanzarlo, un suceso que le tomó unos segundos, una vez sacó el libro de la caja noto que era un libro bastante delgado, uno que se podría decir tenia unas veinticinco o treinta páginas.

Su cubierta era bastante llamativa, esta parecía estar hecha de algun material raro que Issei no pudo identificar. Esto por que parecía ser muy duro, eso sin contar que parecían ser las escamas de algún reptil. Pero al verlas menjor, el castaño logró prectarse de que eran las escamas de una Serpiente.

Algo bastante obvio si veía que justo en la parte superior de la portada, habían dos ojos incrustados, similares al de las serpientes. Mismos ojos que parecían el poder verlo todo, incluso través de uno mismo, y sin poder notarlo Issei quedo hipnotizado al verlos directamente. Ya que entre más los veía, más seguro se encontraba de que estos parecían ser capaces de moverse. Algo que lo dejo sorprendido, así que miro el resto del libro, notando qué en las orillas de la cubierta había una serpiente en cada lado con un diseño que las hacía ver que se movían.

- Que libro mas extraño - Dijo Issei al ver mejor el Libro por lo que al fin se decidió a leer su contenido.

Pero antes de que lo pudiera abrir, una vino de su espalda por lo que volteo la mirada. Notanfo a una trabajadora de la tienda, una que tenia una cara que decía estar fastidiada.

- Disculpa, pero la tienda ya esta por cerrar, por lo que tengo que pedirte que se retire - Dijo la Chica con claro fastidio al castaño.

Quien no se tomó la molestia de notar eso, ya que estaba sorprendido, esto al ver que la hora que marcaba el reloj a espaldas de la chica. Daban casi ser las nueve de la noche, un suceso que dejó bastante extrañado al castaño que no creía posible haber visto esa portada por mucho tiempo.

- Esta bien... - Dijo Issei confundido. - disculpe quisiera comprar este libro

Dijo Issei dándole el Libro a la chica, la cual tomó el libro antes de ver parte de la portada antes de abrirlo y leerlo. Un acto que le unos segundos hasta que su mirada se aparto del libro para ver al castaño.

- Vaya, esto no me lo esperaba, ¿Acaso te gustan los poemas? - Preguntó con sorpresa la chica.

Dejando sorprendiendo a Issei, que en su vida leyó puemas, incluso jamas se imagino que el libro trataba sobre eso.

- "La poesía no es mi fuerte, así que no me interesa leerlo" - Pensó Issei que iba a decir que ya no lo compraría, pero se detuvo al oír lo que dijo la chica.

- Poemas para enamorados... - Dijo con una sonrisa la joven dejando bastante sorprendido a Issei. - Así que le vas a dedicar un Poema a una chica ¿No?.

La sorpresa de Issei era evidente, esto por que la joven había leído la portada del libro. Misma que el había visto no tenía ningún nombre, solo los diseños de escamas y los dos ojos de serpiente, sin mencionar lqw serpientes de color plata en las orillas. ¿Acaso era el único que podía ver el diseño del libro?.

- Bueno... Escuche que a las chicas les gusta la poesía, así que decidí ver con mis ojos si eso era verdad - Dijo Issei fingiendo nerviosismo, uno que hizo que la chica frente a el se riera.

- Pues si, a algunas les gusta la poesía, y si sabes sus autores favoritos serán más amables contigo - Dijo la joven que dio la vuelta para bajar por las escaleras.

- Ya veo, lo tendré en cuenta - Dijo Issei con una sonrisa mientras se iba junto a la joven al mostrador.

Donde comenzó a llenar unos papeles, marcando unas casillas rápidamente y sin problemas pasó el libro sobre la luz roja de la caja registradora, para luego meter el libro de Issei en una bolsa.

- Son 200 yenes - Dijo la joven con una sonrisa.

- Bien - Dijo Issei mientras sacaba 200 Yenes de su billetera y se lo daba a la joven, que los recibio mientras le daba la bolsa.

- Por cierto me llamo Elizabeth - Dijo la Joven con una sonrisa mientras Issei se sorprendía antes de tomar la bolsa y al mismo tiempo le respondia con una de sus sonrisas más amables.

- Me llamo Issei, un placer - Dijo Issei al mismo tiempo que guardaba el libro en su mochila.

Y después de hablar un poco mas con la Joven Elizabeth, salio de la tienda para irse, pero en el camino iba pensando lo sucedido.

- "Es extraño... ¿Por que ella no logro ver la Portada de la serpiente y los ojos? Es más, es la primera vez que una chica me habla amablemente" - Pensó Issei con la mayor duda de su vida mientras se iba a su casa tranquilamente.

Sin notar que los ojos del Libro en su mochila brillaron por un segundo, al mismo tiempo que ignoraba que esto fue gracias al Libro,. El que Elizabeth fuera amable con el, pero lo que Issei verdaderamente ignoraba, era que su vida iba a cambiar por completo, solo por haber comprado el Libro con los Ojos de Serpiente.

Continuara...

Hollas aquí BlackRedZX con una nueva historia que se me ocurrió gracias a una amiga que es una pervertida en todo sentido la cual me hablo sobre una Novela que leyó donde mencionaban los Ojos De Serpiente y me explico cual era su poder por lo que me dije por que no usarlo en un Fic de High School DxD? Y bueno si les gusto voten y comenten si quieren que la continúe y bueno sin nada mas que decir me despido