Cooperación


La tolerancia es necesaria

Viejos amigos

Amenazas irrazonables

*
*

Wei WuXian pasó un rato jugando con Jin Ling y poniéndose al día con sus hermanos y su cuñado. Sólo diez minutos después de la llegada de Jiang Cheng y Jin ZiXuan, Jiang Cheng se puso en pie e indicó a Wei WuXian que le siguiera. Wei WuXian sabía que tenían que volver con los líderes de la secta y suspiró asintiendo. Depositó un suave picoteo en el pelo de Jin Ling, murmurando una pequeña despedida. Jin Ling estaba, comprensiblemente, un poco inquieto porque su Daijiu ya se había ido, y lloriqueó para que se quedara. Jin ZiXuan hizo un gesto para que los dos se marcharan mientras él y Jiang Yanli utilizaban palabras sencillas y amables para asegurar a su hijo que su DaiJiu volvería a visitarlo.

Mientras paseaban por la Torre Koi, se hizo un silencio entre los dos hermanos. Sin que Wei WuXian se diera cuenta, Jiang Cheng lo miró con suave preocupación y confusión. El hermano que recordaba, el hermano que sabía que estaba en algún lugar del hombre que estaba a su lado, apenas podía quedarse quieto durante cinco minutos, y mucho menos mantener un silencio. Pero Jiang Cheng se había mantenido en comunicación secreta con Wen Qing después del fiasco de la carretera de Qiongqi, enviando suministros de medicinas en caso de necesitarlos y preguntando por su hermano. Wen Qing no le había contado todos los detalles, cosa que a Jiang Cheng le molestaba un poco, pero también lo entendía. Si Wei WuXian se enteraba de esto, probablemente perdería la confianza en contarle a Wen Qing el estado en que se encontraba. Dicho esto, estaba informado de las veces que su hermano había tenido fiebre o se había desmayado durante un par de días por diversas razones. Era otra de las razones por las que había insistido tanto en que el hombre comiera antes de volar hasta aquí.

Wen Qing también le contó el progreso de cómo estaba curando a Wei WuXian tanto mental como físicamente. Hacía tiempo que Jiang Cheng se había dado cuenta de que su hermano arrastraba un trauma tácito desde que recogió a Chenqing y dejó de lado a Suibian, pero la confirmación no había sido menos dolorosa. Había informado a su hermana, Jiang Yanli, de la confirmación y de los cambios que Wen Qing le había comunicado. Wei WuXian había sido extremadamente autodestructivo, horrible en el cuidado de sí mismo. Esto era algo que los dos hermanos Jiang sabían desde hace tiempo y habían intentado arreglar, pero la situación con sus padres siempre había obstaculizado el progreso y tensado las cosas. Por eso, había sabido que la curación había hecho que su hermano se encontrara y se sintiera más honesto y cómodo en su piel, aunque Jiang Cheng nunca se dio cuenta de que el silencio era uno de esos cambios.

Por si acaso, dijo: "¿Qué tal fue pasar el tiempo con A-Ling?".

Una sonrisa floreció y Jiang Cheng vio la chispa encenderse de nuevo en los ojos plateados, la calidez tiró de su corazón, "A-Ling es el mejor, ah... supongo que tendría que ser mi segundo rábano favorito,"

"¿De verdad? ¿Quién es tu primero?" Jiang Cheng levantó una ceja.

Wei WuXian sonrió a Jiang Cheng, pero sus ojos se pusieron en guardia ligeramente, "Te lo diré cuando la situación se presente".

O en otras palabras, "Cuando Wei WuXian pueda andar libremente".

Jiang Cheng asintió y los dos llegaron a las grandes puertas de la Sala de la Fragancia que eran blancas con las líneas doradas de una Peonía en el centro de cada una, junto con más vides doradas que se arremolinaban y curvaban hacia los bordes. Los dos discípulos del lado de la puerta, miraron a Wei WuXian con los ojos entrecerrados, pero una mirada de Jiang Cheng les hizo abrir las puertas. Los hermanos entraron uno al lado del otro, y Jiang Cheng se puso a la altura de su hermano para asegurarse de que el varón estuviera a su lado y no detrás. Esto no sólo mostraba la confianza de Jiang Cheng en el hombre que había desertado políticamente de la Secta Yunmeng, sino que también hacía que Jiang Cheng se sintiera orgulloso. Su hermano mayor no era un sirviente.

La sala estaba en medio de una pesada conversación que se detuvo cuando su presencia, específicamente la de Wei WuXian, fue notada. El cultivador demoníaco no le dio importancia, y se detuvo junto a Jiang Cheng en el centro de la sala, con el dorado y el negro al lado con idénticas auras de poder. Lan Xichen estaba sentado en un asiento al lado de Nie MingJue y al ver entrar a los hombres más jóvenes, estaba a punto de ponerse de pie para estar al lado de ellos, pero se detuvo cuando Jin Guangshan ordenó: "Líder de Secta Lan, por favor, permanezca allí. Líder de Secta Jiang, debería sentarse también".

Jiang Cheng miró al Cultivador Jefe, sus ojos oscuros eran tan tormentosos como siempre. Miró a Wei WuXian, no quería dejarle ser el centro de atención como una especie de animal exótico. Wei WuXian le dedicó a su hermano menor una pequeña sonrisa y un firme asentimiento: "Ha sido un largo viaje, shidi, siéntate, ¿no?".

Jiang Cheng sonrió un poco ante el uso intencionado de "shidi". Eso, una vez más, reafirmaba su relación. Aunque reacio, se dirigió al asiento vacío junto a Nie Huaisang, justo enfrente de Lan Xichen, y se sentó con elegancia. Wei WuXian era ahora el centro de atención al igual que aquellos años atrás, los mismos ojos sobre él, juzgándolo, observándolo, listos para sacar sus espadas de las vainas y mandarlas a teñir de sangre que sólo podía pertenecerle a él. Sólo pensar en la similitud le hizo soltar una carcajada.

"La forma en que están todos tan aterrorizados", Wei WuXian dio una sonrisa perezosa.

"¿Crees que ser cauteloso con un demonio es divertido?" El líder de la secta Yao siseó.

La sonrisa de Wei WuXian se amplió, los ojos se encogieron en forma de media luna. Miró al hombre de la túnica marrón: "Divertidísimo".

"Joven maestro Wei", Jin Guangyao cambió de tema, su tono suave y gentil hizo que Wei WuXian lo mirara con la debida intención. Él, sinceramente, no tenía mala opinión del tercer joven maestro de la Secta Jin. Sus talentos no eran nada despreciables, a pesar del débil cultivo de Jin Guangyao. Además, de alguien que sabe cómo pueden doler los comentarios sobre tu estatus de nacimiento, sintió algún tipo de comprensión con el hombre, cuya Madre era una prostituta, "Estás aquí para ayudarnos a encontrar a Hanguang Jun,"

"Bueno, encontrarlo es algo que todos ustedes pueden hacer. Yo estoy aquí para acelerar el proceso y salvarlo", corrigió Wei WuXian amablemente.

"¿Cómo piensas salvarlo, exactamente?" Preguntó Nie MingJue.

"Extrayendo el resentimiento", habló Wei WuXian como si fuera algo obvio.

"¿Extrayendo el resentimiento?" Su She levantó una ceja, "¿Cómo funciona eso siquiera?".

Wei WuXian suspiró cansado y miró a Jiang Cheng: "Dame mi espada".

"¿Por qué?" Preguntó Jiang Cheng, pero se levantó y sacó la vieja arma.

"Te mostraré lo que quiero decir", anunció Wei WuXian, cogiendo la espada y desenvainándola.

Le devolvió la vaina a Jiang Cheng y apuntó con la espada hacia delante. La visión era casi sorprendente. Hacía tanto tiempo que nadie había visto a Wei WuXian blandir su espada, una espada que había sido alabada por las infames habilidades como espadachín del antiguo discípulo principal. Pero, por supuesto, Wei WuXian caminó por la senda herética, arrogándose a cada paso y dejando atrás una vida perfecta.

Ajeno a los pensamientos de los demás, Wei WuXian levantó su mano izquierda y sacó algo de energía de resentimiento, las volutas de carbón respondieron a la llamada de su maestro. Wei WuXian vio que la mayoría de los Líderes de Secta se movían para agarrar la empuñadura de sus espadas en señal de alarma y resistió el impulso de resoplar, en su lugar, optó por simplemente sacudir la cabeza divertido. Sus ojos plateados crepitaron, volviéndose de color rojo sangre y Wei WuXian llevó su mano izquierda directamente sobre la espada de Suibian.

La energía del resentimiento voló hacia la espada, hasta que desapareció por completo de la vista, la mano de Wei WuXian se libró de los zarcillos. Los ojos de Wei WuXian volvieron a ser plateados y sostuvo su espada con las dos manos, hablando mientras miraba a su alrededor: "Digamos que... esta espada representa a Lan Zhan. Ahora mismo, hay energía de resentimiento en ella".

"¿Pero es una espada espiritual?" Jin Guangshan protestó, "¿Cómo podría un arma poderosa sucumbir al resentimiento?"

La empuñadura de Wei WuXian se tensó en la empuñadura y en la parte de la hoja que estaba apretando, pero no lo suficiente como para que saliera sangre. Ignoró la pregunta, fingiendo que ni siquiera la había escuchado, sonriendo cálidamente: "¿Quién quiere ayudarme durante unos segundos?".

Las miradas incómodas se repartieron por la sala, nadie estaba dispuesto a acercarse a Wei WuXian. Había notado que Jiang Cheng y Lan Xichen parecían más que dispuestos a ayudar, pero les dirigió a ambos una pequeña mirada para que no se movieran. Tampoco podían mostrar demasiada aflicción con él, ya que todavía podía haber otros que creyeran que Wei WuXian les había maldecido y manipulado. Lo cual era gracioso, porque Wei WuXian ni siquiera sabía si existía tal maldición.

Wei WuXian puso los ojos en blanco y miró hacia Nie Huaisang, que miraba a Wei WuXian con un levantamiento de mano muy pequeño, casi imperceptible. Con una pequeña sonrisa, Wei WuXian asintió al chico, que cerró su abanico y sonrió alegremente a su mejor amigo. "Nie-xiong, sostén la espada para mí, pero lejos de tu cuerpo y con la hoja apuntando hacia mí".

Nie Huaisang se levantó, ignorando la incredulidad y la mirada severa que le dirigía Nie MingJue. Se acercó y tomó la espada, ajustando su agarre en algo cómodo pero firme. Cuando tenían 15 años y antes de que Wei WuXian fuera expulsado de las clases en Gusu, Nie Huaisang había aprendido un poco sobre las formas de la espada y cómo sostener una, ¡enseñado por el propio Wei WuXian! Aunque no funcionaban bien para un sable, Nie Huaisang nunca tuvo un interés particular por un sable, tampoco mucho por una espada. Pero, se había dado cuenta de que las formas de espada eran más fáciles que el peso de un sable para él.

Nie Huaisang tomó la espada y apuntó la hoja hacia Wei WuXian su postura obviamente cómoda y firme. La vista hizo que muchos, incluyendo a Nie MingJue, parpadearan de sorpresa. Jiang Cheng, en cambio, sabía exactamente por qué y sonrió con conocimiento de causa. Wei WuXian soltó una risita divertida antes de dar un paso atrás y enrojecer sus ojos una vez más: "La espada tiene resentimiento. Ya que todos queréis saber cómo puedo ayudar a Lan Zhan, aquí tenéis un ejemplo más pequeño".

Wei WuXian extendió una mano hacia la espada. Entonces inhaló y detectó el resentimiento que había depositado. La espada que Huaisang estaba sosteniendo rápidamente tuvo una pequeña cadena de humo negro de energía de resentimiento y se precipitó hacia la mano de Wei WuXian.

Todos los presentes observaron sorprendidos cómo la energía de resentimiento iba directamente al cuerpo de Wei WuXian, hasta que el rastro de resentimiento terminó. El cultivador demoníaco dejó caer su mano y sus ojos volvieron a ser plateados. Afirmó: "Así. Puedo encontrar el resentimiento y transferirlo fuera de Hanguang Jun y llevarlo a mí".

Volvió a coger la espada y se la entregó a Jiang Cheng, que la envainó de nuevo, colocando a Suibian de nuevo en su túnica. Nie Huaisang le dio una palmadita en la espalda a Wei WuXian, antes de volver a su asiento, obviamente satisfecho de ser útil. Wei WuXian miró a Jin Guangshan: "¿Hay más preguntas?".

"El Sello del Tigre Estigio", sacó a colación Jin Guangshan y el rostro de Wei WuXian, que había sido cálido, se oscureció, la sonrisa se desvaneció rápidamente y el pequeño brillo amistoso que había habido en sus ojos tras la interacción con su sobrino se congeló. "Lo guardaremos mientras estés aquí...".

"No", cortó Wei WuXian, sintiendo que la presencia de Bai Chunhua, Ren MingXia y Zeng Minsheng le rodeaban, las manos de Bai Chunhua colocadas suavemente sobre sus hombros, para castigarle y darle un reconfortante apretón, mientras que las otras dos se situaban ligeramente delante de Wei WuXian, mirando a Jin Guangshan y dispuestas a usar sus espadas. Obviamente, no se mostraban a los cultivadores de la sala, sólo Wei WuXian podía verlos y su presencia le hizo poner tierra de por medio para no ponerse demasiado a la defensiva y provocar una mayor discusión. Sus palabras no fueron una pregunta, sino casi la de una orden: "Se queda conmigo".

Jin ZiXun frunció el ceño: "¡Wei WuXian, deberías dar gracias por no haber sido atacado todavía! Te dejaremos ayudar, pero tienes que darnos el sello".

Wei WuXian se rio fríamente: "¿Daros mi Sello del Tigre Estigio? Y dime Jin ZiXun, ¿cómo se supone que voy a confiar en que lo recuperaré si alguna vez acepto?"

El tenso silencio y los ojos clavados en Jin Guangshan sólo dieron a Wei WuXian la respuesta. Sonrió con maldad, con una diversión enfermiza en sus ojos al ver que tenía razón. Su tono era oscuro y contenía una pequeña amenaza: "Se queda conmigo hasta que muera".

Vio los destellos codiciosos de la infelicidad, pero la asquerosa determinación y el odio. Wei WuXian sintió que las manos en su hombro se apretaban más y Bai Chunhua le recordó: "El Segundo Joven Maestro Lan todavía está en peligro, Xiao Wei".

Wei WuXian se calmó y su expresión cambió de la ira a la frialdad, "Si hemos terminado aquí... deberíamos empezar a buscar a Lan Zhan,"

"Joven Maestro Wei", comenzó Su She, "No pienses que sólo porque seas la única persona capaz de tener una oportunidad, significa que de repente tienes libertad de acción y confianza. Todavía vas a estar en estrecha vigilancia,"

"Está bien", Wei WuXian se encogió de hombros, "No confío en nadie en esta sala, excepto en dos o tres personas".

"¿Qué personas?" Preguntó el líder de la secta Ouyang.

El hombre de la túnica negra y roja sonrió misteriosamente: "¿Por qué debería decírtelo?".

"Joven Maestro Wei, harías bien en tener cuidado con las palabras que dices," Otro, un hombre más mayor, dijo con voz áspera, "Sólo se te tolera ya que necesitamos vigilarte y garantizar la seguridad de Hanguang Jun,"

El corazón de Wei WuXian se retorció un poco, esas palabras le dolían por una razón totalmente diferente que no tenía nada que ver con lo que estaba pasando ahora. Sin embargo, su rostro permaneció indiferente.

Lan Xichen se puso en pie casi de inmediato, con voz severa: "A-Ying no es un prisionero aquí. Es un invitado y, aunque esto no sea Gusu, A-Ying fue invitado aquí por el líder de la secta Jiang y por mí. Por lo tanto, es un cómplice de nuestras dos Sectas y debe ser tratado como tal".

Jiang Cheng también se había levantado, con un ceño peligroso y desagradable en su rostro, "Zewu Jun tiene razón. Wei WuXian es familia de la Secta Yunmeng Jiang, hermano mío y de mi hermana. Eso significa que es tan familiar para los Jin como un cuñado como yo y el DaiJiu de A-Ling".

Wei WuXian sonrió, mirando al enrojecido Jin Guangshan. El líder de la secta soltó una larga bocanada de aire, obviamente sopesando sus opciones. Políticamente, debería tener el poder de anular esta decisión, ya que la Torre Koi era su dominio y él era el cultivador principal. Pero al tratar a Wei WuXian de una manera no aprobada por los dos Líderes de Secta, podría causar complicaciones internamente. Especialmente porque su hijo se había casado con Jiang Yanli y había aceptado públicamente a Wei WuXian como familia. Molestar a Jiang Yanli, molestaría tanto a su hijo, que se estaba volviendo más y más audaz, aprendiendo las cuerdas de la secta y obviamente haciendo sus posiciones y usando su lugar en contra de los intereses de Jin Guangshan, en lugar de a favor. Y molestarles a ellos molestaría a su esposa, algo que Jin Guangshan quería evitar por todos los medios. Además, no podía argumentar exactamente que necesitaban un plan mejor, porque incluso él, por sus propios intereses personales, sabía que Wei WuXian era esencial.

Jin Guangshan se sentó más erguido y asintió, llegando a una conclusión: "¡Bien! El joven maestro Wei es un invitado en la Torre Koi y será tratado como tal. Hasta que se resuelva este caso, la reclusión del joven maestro Wei en YiLing puede quedar en suspenso. A-Yao..."

"¿Sí, padre?" Jin Guangyao contestó con presteza y Wei WuXian no pudo evitar fruncir un poco el ceño ante el hecho de que como tercer heredero de la secta estuviera actuando más como un sirviente que como un joven maestro.

"Tengan preparadas las habitaciones. Incluyendo una para el Patriarca Yiling", habló Jin Guangshan con el tono de cortesía más falso que se haya escuchado.

Wei WuXian sonrió sin más que respeto e hizo una suave reverencia: "Muy agradecido, líder de la secta Jin", y luego, para añadir, se volvió hacia Jin Guangyao y le hizo un saludo más apropiado: "Yo también debo agradecer al tercer joven maestro Jin sus esfuerzos en mi alojamiento".

Jin Guanyao comenzó, con los ojos ligeramente abiertos, antes de apresurarse a hacer una reverencia en respuesta. Jin Guangshan resopló ante la evidente falta de respeto hacia él, y el respeto que el demonio le había dado a ese bastardo. Se levantó con una florida túnica dorada, dando por concluida la reunión. Todos los Líderes de Secta se levantaron y se apiñaron en pequeños grupos para conversar y cotillear. Lan Xichen y Jiang Cheng se acercaron a Wei WuXian, con sonrisas de alivio en sus rostros.

"Gracias por defenderme", Wei WuXian miró a los dos, antes de posarse en el rostro de Lan Xichen. Su expresión se transformó en una promesa firme, pero el tono estaba impregnado de sinceridad: "Xichen-Ge, lo encontraré".

Lan Xichen sonrió suavemente y asintió. Nie MingJue caminó hacia el grupo en el centro de la habitación. Había una brecha notable entre este grupo y la otra charla, pero Wei WuXian lo ignoró. Nie MingJue miró fijamente a Wei WuXian con una mirada venenosa: "Si traicionas la confianza, acabaré contigo".

A Wei WuXian le gustaba Chifeng Zun. Realmente le gustaba. Solía admirar al hombre y lo justo que era. Creía que Chifeng Zun era uno de los Líderes de Secta más justos que había. Pero esa percepción se rompió cuando el Líder de la Secta Nie dijo que los Restos Wen debían ser asesinados porque eran Wens.

Entonces, Wei WuXian miró a Nie MingJue con una ceja levantada burlonamente, "Veo que las percepciones de un niño ingenuo son muy engañosas de lo que realmente son los que tienen estatus,"

La mirada de Nie MingJue se oscureció ante el insulto, Jiang Cheng y Lan Xichen miraron entre los dos incómodamente y se prepararon para calmar la situación, "Joven Maestro Wei, tenga cuidado,"

"Como si eso sirviera de algo. Pisaré con confianza sabiendo que no mataría a un niño por su apellido, a diferencia de la mayoría de toda esta sala", replicó Wei WuXian, viendo como Baxia dejaba escapar un suave temblor en la espalda del hombre.

Jiang Cheng hizo una mueca a su lado murmurando algo sobre "sin esperanza" y "ni siquiera ha pasado medio día". Nie MingJue miró fijamente a Wei WuXian con los ojos entrecerrados pero no pudo decir nada excepto: "¿Un niño?"

Hubo una pausa y los tres líderes de la secta vieron múltiples emociones pasar por la cara de Wei WuXian. Sorpresa, incredulidad, rabia, odio y asco.

"Increíble", escupió Wei WuXian, pero sin embargo informó, sin romper su mirada, que estaba llena de asco, "En los Túmulos, hay un niño de cinco años. Tan joven y que debería estar en la escuela, aprendiendo junto a sus compañeros, pero en cambio está atrapado, enjaulado, todo lo que aprende es de los plebeyos y de nuestros compañeros por su propio nombre", Wei WuXian hizo una pausa y luego ladeó la cabeza en un gesto que gritaba arrogancia, "¿Tiene las manos manchadas de sangre? ¿Hay que culpar a los ancianos y a los amenazados por las gilipolleces de un bastardo?"

Los tres Líderes de Secta se dieron cuenta de repente de dónde habían oído una declaración similar recientemente. Lan Xichen miró a Wei WuXian con sorpresa, "Tú... y WangJi..."

La expresión de Wei WuXian cambió de inmediato, directamente a la confusión ante la repentina pregunta. Arrugó las cejas: "¿Qué?".

"¿Cuándo conociste a WangJi por última vez?" Preguntó Lan Xichen.

¿Qué? ¿Por qué lo pregunta? ¿Lo sabe? ¡No! Lan Xichen está siendo amable conmigo... aunque sea para salvar a Lan Zhan, si realmente lo supiera, ¡ya estaría muerto!'

"Hace dos años", respondió Wei WuXian con firmeza, "me acompañó de vuelta a YiLing desde Lanling después de que el Banquete llegara a su fin. No lo hemos visto hablar desde entonces".

Ren MingXia resopló: "Mentiroso".

"¿Esa fue la última vez que hablaron?" Lan Xichen murmuró confundido.

Wei WuXian asintió lentamente, ocultando todas las emociones de malestar, "¿Por qué es esto chocante?"

"No, nada, sólo pensé..." Lan Xichen se interrumpió.

Wei WuXian enarcó una ceja, pero dejó pasar el asunto. Se negó a hablar de la verdad, las consecuencias podrían ser nefastas. Para él, a Wei WuXian no le importaba demasiado. Apelaría a maldecir a Lan WangJi si eso significaba que la Secta Lan sería misericordiosa y no se atrevería a castigar a su segundo jade. La idea de que Lan WangJi fuera herido hizo que su sangre se enfriara, Wei WuXian se obligó a dejar que el tema cambiara.

Nie MingJue parecía también olvidar la razón por la que vino, compartiendo una mirada con Lan Xichen. Jiang Cheng miraba a Wei WuXian con los ojos ligeramente entrecerrados, obviamente tratando de entender a los mayores. La última vez que habían escuchado algo remotamente similar, las palabras fueron dichas por Lan WangJi, hace dos meses en el Reino Impuro. Wei WuXian miró a Jiang Cheng, confundido, pero también dejó entrever un pequeño malestar. Era algo que había intentado con personas cercanas a él, algo con lo que Wen Qing era estricta. Tenía que ser sincero con sus sentimientos, especialmente los negativos.

Al ver esto, el corazón de Jiang Cheng se ablandó ligeramente, pero también se hinchó de orgullo por el hecho de que su hermano estuviera realmente intentando curarse del daño que Yu ZiYuan y Jiang Fengmian, junto con muchos, muchos otros, le habían infligido. Jiang Cheng sabía que tenía su propia culpa por algunas de esas heridas, y estaba tratando de entender y evaluar el daño y los verdaderos significados bajo la sonrisa de Wei WuXian, su hermana una gran ayuda mientras comenzaban a desentrañar el daño de sus padres. Y estaban mejorando, se estaban curando. Aunque separados, se comunicaban muy a menudo con las pulseras y el collar.

Jiang Cheng puso una mano en el hombro de su hermano, dándole un firme apretón mientras hablaba: "Así que ahora que estás básicamente libre por un tiempo, ¿qué quieres hacer?"

Wei WuXian tarareó: "Solía pensar qué querría hacer, pero ahora que ha sucedido... no lo sé. Ya he estado en el Muelle del Loto, he visto a Shijie y a A-Ling. Lan Zhan ha desaparecido y los Wen están a salvo por ahora. No tengo nada que hacer, excepto preocuparme, trabajar e ignorar a todos estos imbéciles babosos".

Jiang Cheng resopló ante la última frase. Ofreció: "Huaisang quería almorzar conmigo hoy, ¿por qué no te unes a nosotros?".

"¡Sí!" La voz de Nie Huaisang sonó y el chico se mostró por detrás de Nie MingJue, sonriendo ampliamente, "¡Wei-xiong, acompáñanos! Será como las conferencias en Gusu!"

Wei WuXian sonrió al recordarlo: "Ah, dichosa inocencia. Pensar que sería la última juventud de nuestra generación".

Jiang Cheng y Nie Huaisang mostraron expresiones de reflexión. Los dos líderes de la secta mayores compartieron otra mirada, antes de observar a los tres más jóvenes con expresiones complicadas. Wei WuXian cambió de tema, "¡Bien! Vamos!"

Nie Huaisang sonrió y agarró las muñecas de Wei WuXian y Jiang Cheng, sacándolos de la habitación antes de que alguien pudiera detenerlos. Los viejos amigos descendieron por las escaleras y el camino de tierra, entrando en la ciudad de Lanling.

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