V. Un cambio de papeles elemental
Se reunió con sus compañeros en el auto de Jii-chan, quién ya se encontraba con las manos en el volante. Y en el asiento del copiloto el pequeño de gafas lo esperaba con los brazos cruzados, al divisarlo frunció el ceño.
-Si que tardaste –le reclamó el menor.
- ¡Calla! Tú no fuiste el que tuvo que coquetear con un ebrio...Jii por favor, vámonos de aquí.
No podían dirigirse a la casa de Kaito, al hacer eso podían levantar sospechas o involucrar a sus compañeros. La casa del detective tampoco era una opción, él no se sentía con la confianza de llevar a aquellos hombres a su hogar. Solamente quedaban dos opciones, una de ellas era donde el Profesor Agasa, pero eran las tres de la madrugada y el hecho de despertar a Haibara no le parecía muy buena idea de Conan. Fue entonces cuando preguntó.
-Jii-san ¿Existe la posibilidad de que vayamos al Blue Parrot y conversemos en una sala desocupada?
-Estaba pensando en algo más privado, con eso me refiero a mi casa- explicó el hombre.
Por el momento no les quedaba más opción, y los tres estuvieron de acuerdo. Les tomó un rato en llegar a la morada de Jii Kōnosuke. No era nada fuera de lo común, él los invitó a tomar asiento en la sala y a penas Kaito pisó el genkan se sacó los tacones tirándolos lejos y soltando un suspiro de alivio.
-No sé cómo las chicas soportan con esto todo el día, aunque admito que es divertido correr con ellos puestos.
Conan ignoró su comentario y le pidió que se sentara junto a él en sofá. El mago obedeció sin antes sacarse el disfraz de mujer dando paso a un nuevo disfraz de chico joven que había usado una vez cuando viajaron en el dirigible más grande del mundo.
-Entonces-comenzó el pequeño- Haciendo un resumen, efectivamente es una organización de la mafia, el líder se apoda "Rosso" que significa "rojo" en italiano.
- ¿Los demás al mando por debajo de él también tendrán nombres de colores?
-Es una posibilidad -asintió Conan- Ahora, es importante lo de tu descuido. El hombre con el que hablaste dijo que había más de ellos vigilando tu casa y si mal no recuerdo, Haibara dijo que era cosa de tiempo que aten cabes y descubran tu identidad de Kaitō Kid.
Por mientras, Jii-san escribía toda la información relevante en su computadora.
- ¿Qué opción nos deja todo esto? -preguntó Kaito desganado.
-Una que no me gusta demasiado. Si queremos atrapar al enemigo tenemos que ser más rápidos que él.
Kaito pareció entender la idea.
-Ya veo, entonces antes de darles la opción de acorralarme, tengo que buscar que lo hagan, y la mejor manera es hacerme notar. Estos tipos actúan como hormigas, no harán nada que no les ordene su reina, en este caso su líder de grupo.
Conan lo miró no muy convencido, pero no les quedaba de otra.
-No quería decir esto, pero...Tendremos que soltar al ladrón de guante blanco.
El hecho de dejar actuar a Kaitō Kid bajo sus propias reglas les daba un montón de ventaja. Solo tenían que anunciar el robo de alguna joya importante y el resto saldría como de costumbre, y la tarea se facilitaba al tener al gran detective del este en su mismo bando.
-Pero, joven amo- Interrumpió Jii- ¿No cree que les traerá problemas a ambos? ¿El joven detective tendrá que hacer su trabajo de capturarlo, y puede que parezca sospechoso si no calculamos bien y lo deja escapar?
- ¿Y qué sugieres Jii-san? ¿Qué me atrape?
-Existe otra opción, es un poco descabellada y va totalmente en contra de mis principios, pero nos hará llamar un poco más la atención que queremos si resulta.
Un silencio incómodo se formó en la sala y los tres ocupantes se miraron nerviosamente.
- ¡Me niego! ¡No dejaré que arruine mi imagen! Si quiere jugar a los disfraces que se busque a otro. O que se vista de maid y reparta folletos de cafetería en la calle –agitaba los brazos un fastidiado Kaitō Kid.
-Por favor, deja el drama, tu imagen ya está arruinada de todas maneras -reprochó Conan molesto.
-Ni siquiera funcionaría. Mira tu cuerpo y si hago memoria, estoy seguro de que tu amiga fue muy clara y dijo "no más antídotos para ti"
-Eso lo arreglo yo con ella.
- ¿Ah sí? ¿Cómo? ¿Piensas usar tus encantos para ablandar su corazón, de forma interesada y cruel para que te dé el antídoto?
- ¡No soy como tú! ¡Y no tengo por qué darte explicaciones!
-Muchachos por favor, no se alteren –trataba de tranquilizarlos Jii.
-Mira Kaitō Kid, por si no te has dado cuenta estoy tratando de ayudarte, yo también me arriesgo al ceder a esto, y sin mencionar que prometí mantener tu anonimato en secreto y no he intentado averiguar quién eres realmente.
Kaito miraba al suelo con el ceño fruncido al igual que un niño regañado, tomó una gran bocanada de aire y asintió con la cabeza aceptando rendido el plan.
-Gracias -respondió el detective de manera cortante y mirando luego a Jii-san –Ahora necesitas algo que robar.
-No se preocupen, de eso me encargo yo -afirmó Jii- De todas maneras, teníamos un par de cosas en mente desde hace un tiempo.
- ¡No le cuentes nuestros planes al mocoso!
-Kaito, madura de una vez por todas -exigió el pequeño -Por favor, prosiga Jii-san.
El hombre les dio todas las opciones posibles. Hasta que encontraron la que más les llamó la atención. Se trataba de un colgante de murano en forma de corazón compuesto por diferentes y auténticas piedras preciosas de valores millonarios.
- ¡Claro! El arte murano en joyería proviene de Italia.
-Puede que incluso la joyería esté vinculada con este grupo, normalmente se instalan y sustentan así al llegar a otro país -explicó Conan.
-Ahora solo tenemos que enviar el mensaje ¿Dónde se encuentra la joyería?
-En el centro de la ciudad.
- ¿De cuánto tiempo disponemos? Tenemos que planear bien todo esto.
-No creo que necesitemos de tanta preparación en cuanto a cómo efectuar el robo. Tú tomarás mi lugar -explicó Kaito apuntando a al detective –Te explicaré lo básico de cómo llevar a cabo una presentación a la altura. Esta vez quiero que sea...especial -el ladrón lo miró seguro de sí mismo- Llegarás montado arriba de un tigre, eso mantendrá a las personas y policías un poco alejados, obviamente el tigre no será real. Jii-san me comentó que está en negociaciones con su vendedor, y le dijo que iba a facilitarle el animal mecánico, el resto solo serán luces, papeles de colores, magia básica y te abriré el camino, verás lo fácil que es robarle algo a unos estúpidos policías.
Conan lo miró molesto - ¿Estás demente? Parece estúpida la puesta en escena que quieres dar, la más estúpida de hecho.
- ¡No es estúpida! Se trata de llamar la atención, y mientras yo no conozca totalmente tus pasos ni tú los míos no levantaremos sospechas de nada -miró a su otro compañero -Jii, amigo mío, necesito un plano del lugar, cámaras, trampas, alarmas, ductos de ventilación, todo lo que pueda ser útil.
A ninguno de los tres parecía simpatizarles la idea, cualquier error podría dejarlos al descubierto y generar un desastre, pero no les quedaba más en confiar que todo saldría bien.
Cuando terminaron de organizar todo ya era de día. Conan decidió irse a su casa, necesitaba descansar. Kaito se ofreció a acompañar al pequeño, después de todo tenía que entregar el mensaje a la joyería. Se separaron en un punto y cada uno siguió su propio camino.
Lo primero que hizo Conan al llegar a casa fue lanzarse a la cama. Pero el sueño no le duró mucho porque fue interrumpido por una llamada telefónica. Ni se molestó en mirar en la pantalla el nombre de la persona que lo llamaba, tenía la vista demasiado cansada.
- ¿A qué piensas que estás jugando? -le reclamó una voz que conocía a la perfección.
-Haibara, no he dormido en toda la noche, te lo explico más tarde... ¡Ah! Y Kaitō Kid y su acompañante irán conmigo a la casa del profesor en la noche.
No le dio tiempo a la chica de responder y colgó el teléfono.
No supo cuánto durmió, pero despertó cuando los rayos del sol eran casi invisibles al mezclarse con el azulado cielo de la ciudad. Se levantó rápidamente, comió algo y se dirigió a casa del profesor.
Al llegar se encontró con la sorpresa de que sus "invitados" ya se encontraban allí. Kaitō Kid, quien iba vestido igual que en la mañana, se encontraba sentado junto a Haibara en el gran sillón de la sala, y para su sorpresa, en el otro extremo de esta misma, el Profesor Agasa y conversaba animadamente con Jii Kōnosuke causándole la ligera impresión de que ellos ya se conocían.
-Buenas tardes -irrumpió el pequeño.
-¡Shinichi! Qué bueno que llegas –lo saludó amistosamente el profesor.
El niño tomó asiento junto a Haibara y Kaito. No perdieron más el tiempo y le explicaron el plan a la chica.
-Suena arriesgado, y estúpido, pero si hacen todo como corresponde, podría funcionar- Dijo ella.
-Si, aunque no apoyo la idea del tigre –dijo Conan mirando con recelo al mago, sabía que eso lo había hecho para burlarse de él.
- ¿Y cómo piensa el señorito tomar el lugar de un hombre adulto teniendo la forma de un niño?-le preguntó la pequeña de melena.
-Es aquí donde entras tú, Ai-chan y me cedes el prototipo del APTX –la miró como un bobo y ella le devolvió una mirada de pocos amigos por un rato que se hizo eterno.
-Sólo porque es una ocasión especial- explicó Haibara- Y recuerda, Kudō, esto es bajo tu propio consentimiento. Mientras más prototipos consumas, tu cuerpo creará más defensas y anticuerpos. Así como ocurrió cuando derrotaste a la organización de los hombres de negro y encontramos esa parte faltante.
Conan se puso tenso, recordar eso le bajó completamente el ánimo. Kaito notó la incomodidad en ambos niños, pero prefirió no preguntar nada, seguramente tendría tiempo en otra ocasión.
-Ahora solo falta solucionar lo del tigre...-volvió a nombrar de mala gana el pequeño detective.
Kaitō Kid soltó una risita y apuntó con el mentón al otro lado de la sala- Creo que los viejos aquí ya tienen resulto eso.
Y justo cuando terminó de decir eso, el profesor Agasa volvió a la sala con un perfecto felino anaranjado y de rayas negras, de tamaño y apariencia real, lo que hizo que Conan emitiera un grito de asombro.
- ¡¿Profesor de dónde sacó eso?!
-Es mi último proyecto- respondió orgulloso el Profesor Agasa –Pensaba enseñárselo a Ayumi, Genta y Mitsuhiko pero será en otra ocasión.
-Espera un momento, o sea, que el "vendedor" con el que tenías negociaciones ¿Era el Profesor Agasa? -preguntó el niño apuntando a ambos hombres con la mirada.
- ¡Claro Shinichi! Este buen hombre siempre me está comprando mis inventos.
-Profesor ¡¿Estuviste proporcionando herramientas al enemigo todos estos años y no me dijiste nada?!
- ¡Yo no tenía idea! Además, una venta es una venta –explicó el profesor con normalidad.
-Bueno pequeño amigo –dijo Kaito posando una mano sobre el hombro derecho de Conan –Creo que está todo listo.
El detective no tenía mucho más que agregar, cada uno tomó su rumbo. Kaito y Jii se fueron a sus asuntos y Conan volvió a su casa, tenía que prepararse mentalmente para la locura que iba a cometer mañana por la noche. No podía negar que estaba muy nervioso, partiendo con el hecho de que el prototipo podría no hacerle efecto como ya había ocurrido otras veces, y eso los llevaría a tener que cambiar todo el plan.
Parecía que había invocado la situación ya que su amiga se encontraba afuera tocando el timbre. La invitó a pasa y ella fue la primera en hablar.
-Prefiero que lo tomes ahora. Está modificada y no quiero que sufras efectos secundarios justo antes de tu presentación de mañana.
- ¿Efectos secundarios?
-Qué no quiero que te de diarrea mientras montas tu felino corcel –dijo ella sarcásticamente extendiendo la palma de su mano, dejando al descubierto una pastilla un poco más grande que una uña.
-Cada vez las haces más grandes –se quejó el detective mirando la pastilla con recelo.
-La próxima vez será el doble de tamaño y en formato supositorio –dijo Ai-chan.
El muchacho le devolvió una mirada molesta y se metió la píldora en la boca tragando con fuerza.
-¡Kudō espera! ¡La ropa!
Pero ya era tarde, el prototipo del APTX había ingresado al organismo del detective y comenzó a hacer efecto de inmediato. Su corazón comenzó a detenerse al mismo tiempo que sentía sus huesos arder y derretirse. Los espasmos y el sudor se hicieron presentes y un grito de dolor inundó toda la mansión Kudō hasta que luego de unos segundos la tortura terminó.
Obviamente no era Hulk y su ropa no se agrandaba cuando él lo hacía, no se había dado cuenta, debido al dolor, que la ropa quedó hecha jirones y le cubría inútilmente ciertas partes del cuerpo y para su mala suerte no eran las más vergonzosas. Haibara, y cualquiera que estuviese ahí en esos momentos no podría negar que la imagen que presenciaba era bastante sexy. El detective se encontraba recostado sobre el sillón, sudando, con la respiración agitada, el cabello despeinado y el cuerpo desnudo. Él, al percatarse de eso y de que Ai-chan se giraba sonrojada hacia el lado contrario, no dudó en cubrirse como pudo con uno de los cojines soltando un ruido de vergüenza.
No era la primera vez que la chica lo veía desnudo, ya había ocurrido un par de veces cuando experimentó con él los diversos prototipos del antídoto pero, aun así, la situación no dejaba de incomodar a ambos.
Hola!! volví, no puedo creer que ya pasó un mes de que no actualizaba DD: soy horrible 💩💩💩💩
¿Cómo están ustedes con todo esto que está pasando?
Espero de verdad que estén bien y tomen las medidas necesarias para poder cuidar de su salud, recuerden lavar bien sus manitos, las personas que puedan hacer cuarentena y quedarse en su casa, aprovechen, no todos pueden darse el "lujo" de hacerlo, cuidémonos entre todos, es la única forma de frenar un poco los contagios y las futuras muertes.
Nuevamente espero de corazón que todos se encuentren bien.
Con respecto a la actualización, decidí poner los diálogos en negrita, de todas maneras si no les parece y prefieren que los deje igual que el resto, en cursiva o de alguna otra manera, por favor le pido que me lo hagan saber. También con cualquier otra cosa que les moleste, no entiendan o si tienen alguna sugerencia, queja, amenazas de muerte, etc. 🌝
El capítulo en si está largo en comparación con los anteriores y eso que lo corté y dejé partes para el siguiente.
Los quiero, gracias por su apoyo, y espero no ser tan kk de demorarme tanto para la próxima actualización 💖💖
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top