yungi - mingi se despierta con la presencia de yunho en su estudio, pero nada ocurre de la manera que él lo hubiera deseado.

⚠️ CLON/DOPPELGÄNGER. SA. ANGUSTIA. INTENTO DE SUICIDIO. ASESINATO. DESMEMBRAMIENTO. FINAL FELIZ(?) ⚠️

Mingi era el peor amigo del mundo. Era egoísta estar feliz después de la ruptura de la persona que más amaba, pero no podía evitarlo. Yunho y su novia (su primera novia) habían salido por cinco meses y habían roto porque no tenían el suficiente tiempo para estar juntos, o eso le había dicho Yunho. Yunho le contaba cada detalle de su relación, Mingi sabía que habían tenido un par de citas, se habían tomado de la mano en la tercera y se habían besado en la cuarta, pero nada escaló más allá de eso y Mingi estaba tan feliz. No es que él creyera que tiene una oportunidad, Yunho es heterosexual, siempre lo ha sido, pero tener toda la atención de Yunho puesta en Mingi era como un placebo.

Ahora sabe que Yunho estará soltero por un tiempo y eso lo deja tranquilo.

―¿Vas a quedarte en el estudio hoy?

La pregunta de Yunho saca a Mingi de sus pensamientos. Están sentados en el suelo en la sala de prácticas después de haber bailado por horas y están agotados. Mingi quería ir a casa con Yunho y pasar tiempo con él, ser un hombro para desahogarse ante la reciente ruptura, pero no puede ser irresponsable. Tenía mucho trabajo que hacer.

―Sí, lo siento. Pero prometo que mañana podremos hacer lo que tú quieras.

Yunho le sonríe amablemente y le da un suave puñetazo en el hombro.

―No tienes que ser tan amable, estoy bien.

―Mm, lo que tú digas.

Más tarde ese día Mingi está sentado en la silla de su estudio trabajando en algunas letras que habían deambulado por su mente los últimos días, no hace más que escribir y garabatear en su cuaderno por horas, se distrae fácilmente con su teléfono por un rato y cuando se da cuenta ya son las dos de la madrugada. Tiene sueño, está agotado por el largo día así que se arrastra hasta su cómodo sillón con el enorme peluche que Jongho le obsequió hace unos meses y se recuesta boca abajo abrazándolo. Mingi se duerme apenas apoya la cabeza en la suavidad del animal.

Escucha la puerta abriéndose y Mingi gira lentamente la cabeza, despertando debido a su sueño ligero, ve unos pies caminar hasta él y sonríe cansado.

―¿No podías dormir, Yunho-ya?

Yunho no responde enseguida. Mingi se recuesta sobre su espalda y sonríe nuevamente al ver a su mejor amigo en su espacio. Yunho lleva la misma ropa que el día anterior y Mingi frunce la nariz ligeramente.

―¿No te has duchado?

Yunho se encoge de hombros y se sienta con él en el sofá.

Mingi no sabe qué decir. Yunho debe estar pasando por un momento difícil y Mingi no es precisamente el mejor para consolarlo teniendo en cuenta de que está perdidamente enamorado de él.

―¿Quieres ver algo?

Yunho no responde. Está fijamente mirando la pared. Mingi mueve la pierna empujando suavemente a su amigo y este finalmente lo mira. Los ojos de Yunho están entrecerrados y respira irregularmente.

―¿Quieres hablar?

Yunho apoya una mano en el sofá y la otra en la pared mientras flota sobre Mingi, Mingi cree que Yunho va a abrazarlo y descansar en su pecho, pero el mayor solo lo mira por un largo tiempo. Quiere decirle algo, preguntar si está bien, sin embargo, no parece que Yunho quiera hablar.

Mingi jadea con sorpresa cuando Yunho se acerca más y su respiración se mezcla con la suya. Puede sentir el aroma natural de Yunho filtrándose en su nariz y la colonia cara que usa.

―Yun-

Su voz se ahoga con los labios ajenos chocando contra los suyos abruptamente. Es cálido, húmedo, sabe a gloria y Mingi gime extasiado. Sus manos se dirigen al pecho de Yunho y lo acerca a él, ahora puede sentir el corazón de Yunho latiendo contra el suyo y es maravilloso. Mingi abre la boca cuando Yunho lame su labio inferior un par de veces, es tan amable y tan dulce que Mingi se derrite en el beso como un tonto enamorado (cual es). Las manos de Yunho lo tocan en todas partes, su cuello, sus pectorales, sus bíceps, su cintura, lo recorre todo como si siempre lo hubiera deseado.

―Yunho ―el gemido es más lastimero de lo que Mingi pretende y Yunho sonríe satisfecho.

Con una fuerza increíble, Yunho levanta a Mingi y lo sienta en su regazo, logrando arrebatar otro gemido profundo de su mejor amigo.

Yunho vuelve a atacar sus labios con hambre y desesperación. No es lento, no se toma su tiempo, parece que quiere devorarlo. Mingi se siente abrumado y se retira del beso, pero Yunho lo sujeta de la nuca y lo atrae nuevamente, manteniéndolo fijamente contra él.

―Espe-

Yunho no se detiene. Chupa su cuello y las manos grandes y calientes aprietan su cintura antes de quitarle la camiseta de un tirón. El aire frío hace que Mingi se estremezca y trata de cubrir su cuerpo con los brazos.

Se sentía halagado de que Yunho lo deseara tanto, pero sabe que Yunho solo está enojado por su ruptura y quiere desahogarse, quizás Mingi fue muy transparente y Yunho se dio cuenta de sus sentimientos. Mingi no quiere que esto ocurra de esta manera, lo desea, joder, pero no puede. No puede hacer esto sabiendo que el corazón de Yunho no le pertenece. Es un poco romántico.

―No, Yunho, no podemos...

Yunho se detiene y se aparta para verlo, Mingi encuentra sus ojos y se estremece, no es a causa del frío del ambiente, sino de la mirada en sus ojos.

―¿No? ―suena incrédulo, como si Yunho no creyera que Mingi fuera a negarse.

―Es demasiado rápido hacer esto ahora ―la erección de Yunho estaba atrapada entre las piernas de Mingi y Mingi sentía que era grande―, podemos besarnos si quieres...

―No.

―¿No?

A Yunho le toma dos segundos llevar sus manos al borde del pantalón de Mingi y tirar de él. Mingi se retuerce y trata de bajar de su regazo, pero Yunho es mucho más fuerte y lo mantiene atrapado. Yunho se deshace de toda su ropa rápidamente y lo da vuelta, acostandolo en el sofá nuevamente. Yunho abre sus piernas y lo mira analíticamente por unos segundos mientras Mingi intenta cubrirse.

―Yunho, te dije que no. Esto es raro, detente.

Yunho lo ignora.

―¿Tienes lubricante?

―¿Aquí? Por supuesto que no.

Yunho sonríe. No es la misma sonrisa amable que Yunho siempre le da y que Mingi ama, es otro tipo de sonrisa, una que nadie espera de su mejor amigo o alguien a quien ama. Es aterrador.

―Es una lástima, cariño.

―¿Qué? ―Mingi se ahoga cuando ve a Yunho sacar su erección de sus pantalones―. No, va a doler así, basta.

Yunho jadea cuando Mingi vuelve a retorcerse y toma su mandíbula con fuerza, apretando sus dedos alrededor de su rostro. Mingi no cree lo que está viendo, esto es una pesadilla y despertará en cualquier momento. Mingi cierra los ojos con fuerza reteniendo las lágrimas que se acumulan en sus ojos.

―Sólo tenías que aceptar, princesa.

Mingi escucha un sonido húmedo y segundos después hay algo presionando en su agujero. Mingi vuelve a retorcerse y trata de alejar sus caderas. Yunho lo golpea, el rostro de Mingi arde y quema y ahora no es capaz de retener las lágrimas. Una mano de Yunho lo sujeta con fuerza del bícep y la otra de la cadera mientras se hunde en él, quemando, rompiendo, lastimando.

Mingi se queja con un sollozo y olvida cómo respirar. Yunho gime en su pecho y lo besa antes de comenzar a moverse.

―Quédate quieto, maldita sea.

Pero Mingi quiere alejarse. Así no es como imaginó su primera vez, así no es como imaginó estar con Yunho. Solo puede escuchar el sonido de la piel al chocar y todo duele. Las manos de Yunho están sobre su piel, apretando tan fuerte que le lastima, pero le hiere más porque se supone que es su mejor amigo a quien ha amado por más de cinco años.

Mingi llora angustiado y trata de no escuchar los sonidos obscenos que salen de los labios de Yunho que le dicen lo sucio que es o lo bien que aprieta. Mira detrás de él porque no se atreve a mirar a Yunho y cree que quizás nunca más pueda hacerlo.

Yunho es rápido, es rudo y golpea fuerte. No tiene compasión. Mingi se pregunta si Yunho siempre lo ha odiado o si fue algo que él hizo alguna vez para molestarlo.

―Joder, princesa, eres el agujero más caliente que he probado en mi vida ―el susurro de Yunho estremece a Mingi―. Quiero tenerte para siempre.

Yunho sigue empujando más y más rápido, es descoordinado en algún momento y los gemidos son más altos. Mingi está respirando con mucha dificultad, el aire apenas puede entrar y no es capaz de controlar sus lágrimas. Yunho se corre en su interior luego de un par de minutos, sale y se agacha para morder, chupar y marcar la piel de sus muslos. Mingi todavía no cree que pueda respirar, pero todo está en su cabeza.

Yunho se levanta y lo mira. Luce satisfecho. No hay remordimiento en sus ojos.

―Eres mío de ahora en más, cariño. ―Yunho lo besa una vez más―. No le digas a los demás, o voy a molestarme. Y no quieres saber lo que puedo llegar a hacer.

Con eso dicho, Yunho se aparta de él y Mingi escucha el sonido de la puerta. Hay silencio en el estudio y Mingi cierra los ojos.

(...)

Quizá fue una pesadilla. Eso es lo que Mingi piensa antes de abrir los ojos, pero sigue desnudo y su cuerpo duele. Se viste lentamente y no se atreve a ver las marcas que adornan su cuerpo, solo lo hace. Camina cojeando hasta la salida y va a casa. Durante el camino solo hay una cosa en su mente, esto no pasó.

Cuando llega, son las seis de la mañana y parece que todos están despiertos. Hay algunos miembros en la cocina y otros en la sala, quizá haya alguno en el baño. Mingi ve la espalda de Yunho en el sofá de la sala y tiembla, se queda congelado por un momento.

―¿Mingi? ¿Qué te dije de pasar la noche en el estudio? Tenemos un horario a las siete y media.

La voz de Seonghwa hace que Mingi salte.

Yunho se gira hacia él al escuchar a Seonghwa y Mingi siente náuseas.

―Ducha ―dice Mingi rápidamente antes de huir.

(...)

Yunho retrae su mano cuando Mingi se aparta de él. La mirada de Mingi es un puñal en su corazón. Han pasado días enteros donde pudo notar que su mejor amigo huía de él cada vez que estaban solos, cada vez que intentaba hablarle. Mingi lo miraba fijamente como si calculara cada uno de sus movimientos. Y Yunho no sabe qué hizo o qué pasó, pero Mingi luce aterrorizado.

Mingi siempre ha sido un gatito asustadizo, pero ahora es diferente, cada vez que alguien se le acerca él salta y se aparta, pero es peor si se trata de Yunho.

―¿Alguien sabe qué le pasa a Mingi? ―preguntó Yunho a los dos mayores.

―Está actuando extraño, parece que ni siquiera duerme ―murmura Seonghwa.

―¿Crees que sea su ansiedad? ―Hongjoong pregunta con temor.

―Dios, espero que no. Él toma sus pastillas, ¿verdad?

Yunho asiente porque ha visto al menor tomarlas un par de veces por las noches.

Yunho ve a Mingi por el espejo y cuando sus ojos se encuentran, el menor luce asustado. Quiere acercarse y hacer preguntas, pero en este estado sabe que él sólo se cerrará.

Wooyoung toma a Mingi del brazo para tirar de él y él gime fuerte, adolorido. Wooyoung lo suelta inmediatamente y lo mira extrañado, disculpándose. Todos los ojos están puestos en Mingi ahora.

―Lo siento... ―su voz grave es baja y suena como si estuviera quebrada.

(...)

Mingi ve que la puerta de su habitación se abre y cierra los ojos con fuerza. Segundos después, escucha la respiración de Yunho, y todo su cuerpo se congela.

―No tienes que tener miedo, princesita ―burla.

Yunho no hará esto delante de los demás, no puede. Él piensa. Pero Yunho lo ha hecho en el baño, en su estudio, en la cocina. Yunho ataca cuando no hay nadie aunque Mingi intente huir, siempre lo atrapa.

―Soy bueno contigo... ―susurra riéndose.

25/06/2014

Solo puedo decir lo siento..............

Sin embargo, si leyeron las advertencias, ya saben todo lo que va a pasar 🥺