17.

Wanda.

-Se ha descompensado. - dije mordiendo una manzana con caramelo.

-Niña, son para después de la cena. - regañó mamá. - le haré una sopa para que pueda reponer fuerzas.

-Okay, pero... ¿Crees que deba subírsela?

-Déjala descansar. Ahora cuéntame, ¿quién es? - mamá preguntó con una sonrisa que sabía a lo que iba.

Giré los ojos.

-Es una amiga.

-¿Una chica tan linda siendo sólo tu amiga? Cariño, conozco tus gustos.

-Claro que no.

En serio no los conoce si cree que Romanoff y yo podríamos llegar a ser algo, pero esto me facilita las tareas.

-Amor, las madres tenemos instinto... - murmuró mientras picaba vegetales para la sopa de Natasha.

Hora de actuar.

-¿Tanto se nota?

-¿Ella te gusta?

-Un poco, pero no sé si deba decírselo. Nos conocemos hace poco y... Nos hicimos buenas amigas, pero... No quiero presionar nada... No sería justo... - murmuré.

Mamá sonrió, me dejó claro con aquello que la idea le agradaba. ¿Es en serio? ¡Es Romanoff! Es linda, pero además de eso, ¿cuál es la parte buena de salir con alguien como ella? Su dinero, y es que a mi no me interesa su dinero, incluso yo he pagado los boletos que ella modificó sin consultarme.

-Mira quién ha llegado. - peter señaló a nuestro hermano pequeño.

Sonreí mientras me acercaba a él para abrazarlo.

-¡Hey, pequeño! ¿Cómo estás?

Lo tomé en brazos, él me dedicó una sonrisa mientras se colgaba de mi cuello.

-Estoy feliz. Papá ha dicho que pronto vendrán muchos niños a casa.

-Algo de eso me han comentado. - murmuré acariciando su cabello.

-Oh, además Peter ha conseguido una medalla, ¿sabes por qué?

Enarqué una ceja.

-¡Deportes, Wands, deportes! He sido el goleador del semestre en los partidos del equipo.

-¡Wow! ¡¿Qué?! - pregunté emocionada. Él asintió, comencé a besar su rostro con emoción mientras Peter reía.

-Mamá, ¿papá podría hacerme un chequeo? - susurró mi otro Peter. Agudicé mi oído. ¿Chequeo? - quiero saber algunas cosas.

-Aún no debes hormonarte, cielo. - murmuró mamá. Peter negó.

-No es por eso, tengo algunas dudas en caso de que desee dejar de hormonarme y eso... Ya sabes, volver o algo...

-¿Volver a qué? - dije yo.

Peter me observó en silencio. Bajó la mirada.

-Wanda, ¿por qué no llevas a Peter a la nieve antes de la cena? - preguntó mamá. Bufé. - Wanda.

-Voy, mamá. Voy. Ven, Peter. Dejemos a estos aburridos.

Oí a mi hermano mayor reír, el pequeño y yo salimos de casa. Será divertido.

-Te extrañaba mucho, Wanda. De verdad.

-Oh, y yo a ti, cachorro. - acaricié su cabello despeinándolo. Él sonrió abrazándose a mi cuerpo. - realmente te extrañaba mucho, no sabía con quién jugar. Piolín no es un gran jugador, siempre revienta los balones.

-Es algo travieso.

-Ya lo creo.

-Esa chica que estaba dormida. ¿Es tu novia?

-¿Cómo sabes de ella?

-Oh, Piolín estaba llorando fuera de la habitación en donde se quedarán, lo dejé entrar y la vi dormida.

-¿Y Piolín?

-Se recostó en tu cama a dormir.

-Okay, de acuerdo. Es mi amiga.

-Ajá, y yo no soy huérfano.

Me reí.

-¡Peter!

-¡Sólo decía!

[•••]

Natasha.

"Te va a gustar" "hey, silencio, bonita. Estás bien, recuestate"

Me moví rápidamente y me senté en la cama espantada. Me encontré con Rachel observándome con una sonrisa.

-¿Qué... qué haces aquí, psicópata? - pregunté molesta. - fuera o gritaré.

-¿Qué es eso de fingir que no nos conocemos? - murmuró sonriente. - me recuerdas bien...

-Rachel, por favor, vete.

-Cielos, sabes quién soy. ¿Por qué finges?

-¿Eres tonta? Rachel, estás comprometida con el hermano de Wanda y...

-¿Es tu novia? - preguntó y yo asentí. Ella abrió los ojos sorprendida.

Sé que hemos dicho que diríamos que no, pero no quiero tener a Rachel cerca.

-¿Ahora no vas de cama en cama?

-¿Acaso te importa?

-¿De una futbolista destacada? No, era de esperarse. Además, te lo mereces. Todos te aman, le das miles de triunfos a tu país por año. En cada equipo al que has ido, has dejado el nombre por lo alto, yo era feliz siendo una más.

-Ni siquiera recuerdo haberme acostado contigo, Rachel.- confesé. - estaba demasiado ebria para saberlo.

Ella se burló.

-Lo recuerdo, tu hermano acababa de morir, ¿no?

-Estaba... - suspiré. Ni siquiera lo recuerdo bien.

-Bebiste, te di unos dulces y casi no podías tus pies... - acarició mi mentón. Me aparté recordando sus besos sobre mi cuello.

Cerré los ojos y pegué mis rodillas a mi pecho. Me vi en la ducha, llorando, viendo sus marcas por todo mi cuello, por mis senos.... Sus uñas en mis muslos...

Suspiré.

-Fue una noche extraña... - susurré. Ella sonrió.

-No me molestaría repetirla.

-Me gusta mucho, Wanda. No cambiaría lo que tenemos por nada, Rachel. Lo siento.

-Cariño, pero ella no tendría que saberlo... - su mano subió por mi muslo y me quedé congelada.

Sin saber qué cojones hacer con eso.

De pronto el gruñido de Piolín la hizo apartarse. El perro comenzó a ladrar con agresividad enseñando los dientes, subió a la cama y se puso delante mío. Rachel se levantó rápidamente.

-¡Ay! Perro malo, le diré a Wanda que te duerman.

-Y yo le diré que estás molestando a su novia, déjame en paz, Rachel. Respeta tu relación, por favor...

-Sé que volverás a mí, Natasha. Te necesito y tú no soportarás una relación, no eres del material para una...

Besó mi mejilla y se apartó. Dejé ir un suspiro y luego el cachorro se pegó a mí ignorando a la castaña quién salía de la habitación.

-Gracias por defenderme, costal de pulgas.

El cachorro me lamió la cara y cerré los ojos asqueada.

-No tenemos tanta confianza. - me quejé, pero él sólo me observó antes de recostarse en la cama.

Mi mirada se perdió en un punto fijo de la habitación. Mis llantos aún eran un recuerdo latente.

"No estoy sucia, no estoy sucia... No se quita... ¿Qué pasa conmigo?"

"Tuviste una noche de fiesta después del funeral de tu hermano, Natasha. ¿Cómo pudiste?"

Suspiré. Yelena jamás me perdonaría por eso...

"Mientras nuestros padres lloraban , te estabas tirando a una extraña"

No, yo no recuerdo... Yo... No lo sé. Quizá nada ocurrió, tal vez me he caído y ya.

Necesito una ducha.

[•••]

Wanda.

-¿Estás?

Entré en la habitación y la pelirroja no se encontraba allí.

-¿Dónde te metiste? - me quejé.

-Voy. - dijo saliendo del baño envuelta en una toalla. - me daba una ducha. ¿Qué ocurre?

-Ha dicho mamá que vio a Rachel salir del cuarto mientras no estaba, es algo difícil, ¿te ha dicho algo?

Su sonrisa tembló.

-No, nada. Preguntó por Peter.

-Oh, bien. - dije no estando segura. - quiero presentarte a alguien muy importante para mí, ¿bien?

-¿A tu ex? - se burló.

-Sí. Digo, ¡No! Me refería a su hermana.

Abrió los ojos sorprendida y me dedicó una mirada divertida.

-¿Por qué me presentarás a su hermana? ¿Quieres que todo vuelva a su lugar? Nuestro compromiso aún no comienza y ya quieres botarme, con que así serán las cosas, eh. - dijo fingiendo estar dolida.

Giré los ojos.

-¿Acaso recuerdas algo de lo que te dije antes de venir?

Ella dejó caer su toalla mientras me daba la espalda, mi mirada vagó por su espalda llena de tatuajes, además de una frase escrita por toda su columna.

-No, es decir, sé que Pietro es tu hermano y Clint es su prometido, Peter grande es gracioso, ha hecho una broma sobre sus zapatos y Peter pequeño... Es desconocido para mí.

No contesté, seguí observando su espalda. Ella se giró y me sonrió.

-¿Me quieres ver el culo o por qué tan pendiente de cuando cae mi toalla?

-¿Qué dice? - la corté.

-Gaudeamus igitur iuvenes dum sumus... - murmuró ella.

-Puedo verme muy lista, pero no soy bilingüe.

-Oh, tranquila. También soy lesbiana.

Sonreí.

-Bilingüe de lengua, Natasha. Bisexual es diferente.

-Los dos usan la lengua. - insistió.

-Compórtate. - me quejé.

-Dice "disfrutemos pues, mientras somos jóvenes" creo que no tiene demasiada interpretación más que la que es...

-Carpe diem.

-Aplico ambas... Me gusta vivir el día a día.

-¿No te trae complicaciones? Yo suelo ser mucho más calculadora y...

-¿Disfrutas algo alguna vez?

No supe contestar. Claro que sí, pero... En ocasiones también es terrible tener que planear cada cosa antes de llevarla a cabo.

-¿No tienes miedo de un día simplemente despertar y arrepentirte de algo que hiciste? - pregunté yo.

Ella observó sus manos, y luego se giró para sonreír.

-Me pasa constantemente...

No dije nada.

No puedo juzgarla ni ella a mí, somos demasiado diferentes para congeniar, incluso nuestras formas de caminar son poco parecidas, yo parezco ir apresurada siempre y ella... Parece ir aburrida.

Nuevamente le dediqué una mirada a su espalda antes de acercarme a ayudarla porque parecía no poder enganchar su sujetador.

-Tus tatuajes son lindos, ¿te tatúas mucho?

-No tanto como me gustaría, quiero hacer un brazo completo, tal vez mi cuello se vería lindo con un tatuaje. - murmuró. Cerré su sujetador y me alejé.

-Tal vez, deberías hacerlo. Lena es tatuadora de medio tiempo. - mencioné.

-No quiero sonar grosera, pero... Ella es...

-La esposa de mi mejor amiga.

-¿La veremos?

-Está abajo, tienen un bebé. No te le acerques.

-¡Soy buena con ellos!

Se quejó, pero salí de la habitación. Puede que lo sea, pero no me arriesgaré a que le meta ideas erróneas a Theo. Es algo susceptible.

[•••]

-Sí, bueno... Nos estamos conociendo, ella me interesa, Kara.

-No te creo. ¿De la noche a la mañana?

-Oh, Dios. Kara, ya te he dicho mil veces...

-Wanda, te conozco, además...

-Lena, por favor controla a la controladora que llamas esposa.

Mi otra mejor amiga sonrió y fingió demencia.

-Tu casa, tu problema. Yo sólo me encargo de ella cuando está en mi casa.

-¿Soy un problema, Lena? ¿Estamos todos locos? Ella se consigue una novia en un partido y...

-Baja la voz, rubia. - me quejé. - no es mi novia, es mi amiga, me gusta y ya, quiero que tengas claro que apruebo tu desaprobación, porque sé que no quieres que me dañen y...

-¡Y se ha tirado a la mitad del mundo!

-¡Kara! - Lena cubrió los oídos del pequeño quién levantó la mirada.

-Yo también tiro mis cosas cuando están viejas. - comentó Theo.

Suspiré.

-Kara, dale una oportunidad. Es buena chica aunque no parezca. No somos nadie para juzgar su vida de soltera, o su vida en sí. Sólo ella puede hacerlo.

-Yo...

-¿Wanda?

Me giré y me encontré con Natasha usando una de mis camisetas de la escuela. De cuando jugaba por la escuela...

Mi boca se secó un poco mientras me quedaba sin palabras para decirle.

-Mierda. - dijo Lena. Me giré a verla y ella también había notado lo linda que es esta mujer.

Claro que es linda, siempre lo he dicho, pero joder. ¿A ella le queda aquella camiseta? Por Dios, es toda suya de ahora en adelante.

-Tu madre me ha entregado esta camiseta, dijo que tiene un jersey de navidad para entregarnos luego, así que...

-Te ves genial... - murmuré mientras trataba de aclarar mi garganta con un carraspeo disimulado. - Ella es Kara...

-Soy Kara. La mejor amiga de Wanda desde hace...

-Me habló muchísimo de ti. También de Lena y... - observó fijamente a Theo. - este pequeñín. Princesa, no me habías dicho que era tan lindo. - dijo ella sonriente. - Hola, Theo... ¿cómo estás?

-Muy bien, señolita. - sonrió. - Soy Leo.

-Theo. - corrigió Lena.

-Leo Lanvels Luthol. - se presentó estirando su mano. Natasha la tomó agachándose a su altura.

-Un placer, Theo Danvers Luthor. - sonrió la pelirroja.

Mi mejor amiga había cambiado su mueca de intensidad por una sonrisa extraña.

-Bien, tiene un punto. - susurró.

Yo rasqué mi sien algo extrañada, pero no dije nada. Natasha seguía charlando con Theo mientras él animadamente le señalaba cosas de la casa.

-¿Acaso alguien más notó que Theo la amó? - susurró Lena.

Natasha tomó la mano del pequeño y se giró para vernos.

-Lamento haber sido tan grosera. Natasha Romanoff Vostokoff. - estiró su mano a Lena quién la estrechó. - Has de ser Lena Luthor, Wanda también ha hablado maravillas de ti. Siempre habla maravillas de ambas y de su linda relación desde adolescentes, si supieran todo lo que las presume.

Me sonrojé y mi mejor amiga me observó enternecida mientras su esposa reía suavemente.

-Quielo il pala jugal. - señaló Theo.

-¿Puedo jugar con él? - preguntó a Kara, quién asintió bastante sorprendida.

Natasha se lo llevó hasta la alfombra en donde Piolín rodaba mordiendo una pelota.

-Theo habla un poco más claro. - murmuré.

-Forma oraciones mejor. Su problema de lenguaje va mejorando... Y es extraño, porque lo veo emocionado por charlar con ella, usualmente le avergüenza hablar con extraños...

-La novia de Wanda tiene encanto. - se burló Lena.

-Que sólo somos amigas.

-Sigo evaluando a tu amiga, no te confíes. De momento... Me agrada.

Kara me guiñó un ojo y se acercó a la alfombra a charlar con ella.

-Le gusta. -dijo Lena. - sólo quiere asegurarse de que no será otra Alex.

Bufé.

Otra Alex... Como Alex no hay dos.

Nota de autor:

Sé que les debo dos one shots de año nuevo, uno será de beyond y otro será de desobediencia (quizá), pero no he tenido demasiado tiempo con el trabajo (mis horarios siguen siendo un desastre, pero desde el martes deberían ordenarse y ya habrá más contenido en tiktok y aquí en wattpad)

Hoy no puedo hacer los os pq sino no me daría tiempo para escribir los capítulos de mañana (ya que mañana trabajo y tampoco puedo escribir así que los dejaré escritos hoy :p)

mucho texto, en fin, nos leemos mañana, ratitas, disfruten su primer día d 2023

-Codito.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top